Ꜥꜥֶָ֢🎙ֶָ֢۫݊˒𐙚 capítulo O3
Y si, Jeon JungKook se encontraba ahí, saliendo del baño con una toalla en sus manos y su cabello un poco húmedo, si TaeHyung recordaba estaba más largo que la última vez que lo vio, sus lindos ojos esmeraldas se veían cansados, pero con el brillo que siempre tenía cuando veía a su esposo.
TaeHyung pensó que quizá, solo quizá comenzaría a llorar cuando lo vio, porque él lo había extrañado tanto, había extrañado todo de él, sus besos, sus caricias, había extrañado tanto su aroma y poder ver esos dos lindos iris verdes, hasta las estúpidas peleas en el desayuno por no comer los vegetales. ¿Desde cuándo él era tan cursi?
El menor le sonrió y no dudó en correr hacia su esposo para lanzarse directamente a sus brazos consiguiendo que JungKook lo atrapará a duras penas, porque él había saltado hacia él, impactando algo fuerte contra el más alto haciendo que este retrocediera unos pocos pasos, TaeHyung había terminado como un pequeño koala aferrándose a lo más preciado de su vida, rápidamente JungKook lo tomó por la cintura fundiéndose en un fuerte abrazo y aspirando el rico aroma a talco para bebé que Kim siempre tenía y que había extraño.
Algunas lágrimas ya habían caído de los ojos azules, porque estar en los brazos de JungKook era lo más perfecto qué había podido tener en el mundo, le recordaba a la suave brisa de verano que corría al momento de salir a aquel bonito balcón, el aroma a dulces galletas de vainilla recién salidas del horno, era lo más parecido a un techo, donde se refugiaba de cualquier daño y donde la seguridad y amor reinaba, era un pecho cálido y seguro donde él podía acurrucarse y dormir diez horas seguidas sin importar que, JungKook era lo más parecido a un hogar.
JungKook era su hogar.
Un hogar que no había visto en casi dos meses y ahí mismo, refugiado a su cuello supo que lo había extrañado a horrores, él no sabía si eran las hormonas del embarazo o algo parecido, pero el definitivamente les dio el crédito.
Dio un pequeño beso en la zona y alzó la cabeza para poder dar con él, sus ojos se veían cansados y pudo notar pequeñas bolsas oscuras debajo de ellos y sus labios que ahora estaban con una sonrisa se veían un pocos resecos por lo que quiso hacer algo. Junto sus narices y dio un pequeño beso esquimal para después ir hacia sus labios y juntarlos en un beso.
Un beso que JungKook aceptó gustoso moviendo sus labios en un suave vaivén mientras acariciaba la fina cintura del mayor, un beso dulce que mostraba a flor de piel lo mucho que ambos se habían echado de menos, el vaivén seguía y suaves chasquidos se comenzaron a oír, se separaron por un momento para tomar aire y un segundo beso nació, este tal vez un poco más intenso que el anterior, quizás algo caliente.
Ahora TaeHyung tenía sus manos en las mejillas del ojiverde tratando de profundizar aún más el beso y en su cintura solo descansaba una mano de JungKook, ya que la otra se había deslizado a lo largo de su pierna, pasando por su trasero que tuvo uno que otro apretón para al final dejarla debajo de su muslo y alzarlo un poco más, porque puede que él se haya resbalado un poco, el vaivén se había vuelto rápido y los chasquidos resonaban en toda la habitación, más ruidosos y algo, solo algo obscenos. TaeHyung culpo a las hormonas, otra vez.
Y puede que se haya puesto algo caliente con tan solo un beso de bienvenida, cosa que nunca había sucedió, chupó el labio inferior del contrario, lo mordió y no lo soltó hasta que consiguió sacar un jadeo del rizado, quien después quiso hacer lo mismo y mordió su labio igualmente como el rubio lo había hecho con él, pero lo hizo con más fuerza consiguiendo un pequeño "ouch"
— Oops — Habló JungKook cuando se separaron con un fuerte chasquido y con sus labios rojos y levemente hinchados.
— Hi — Ambos rieron ante esas dos palabras.
— Parecemos estúpidos diciendo esas palabras cada vez que podamos solo porque así nos conocimos — Volvió a hablar TaeHyung tratando de reprimir una sonrisa.
— ¡Hey! — Reprochó JungKook y dio un pellizco en el muslo del rubio — A mí me parece romántico.
— Sí, definitivamente — Rodó sus ojos con una sonrisa y le dio un pequeño pico — Te extrañe, sol.
— Y yo a ti, amor — Sonrió y ahora fue él el que dejó un casto beso, para después caminar hacían la gran cama y dejar a su gran tesoro ahí. Dio vuelta a la cama y se acostó al lado del ojiazul y con una mano en la cintura lo atrajo a él.
Comenzaron a recuperar el tiempo perdido, entre muchos besos y caricias, JungKook hablaba de cómo fue su gira, las diferentes ciudades que visitó y su experiencia con los fans, entre muchas cosas más y TaeHyung habló de cómo había sido su primer tour hasta ahora, claro omitiendo la parte donde está esperando un bebé y parte de su tiempo se reduce a náuseas y asquerosos vómitos, JungKook volvió a hablar pero TaeHyung solo podía pensar en la noticia que le iba a dar, quizás le tomó un poco más de tiempo prepararse mentalmente, hasta que decidió que ya era hora, pero antes de eso, un retorcijón en su estómago y las horribles náuseas volvieron.
Tapó su boca y fue corriendo directo al baño para poder vaciar las ocho donas que se había comido en la tarde. JungKook llegó después y sorprendido se acercó para sostenerlo y acariciar su espalda, el vómito paró y antes de poder decir algo TaeHyung le suplico que esperara afuera, el ojiazul lavo sus dientes y manos, mojó su cara y frente al espejo se dijo palabras de ánimo, arregló su cabello y salió
— JungKook — El nombrado se encontraba sentado en la orilla de la cama — Necesito decirte algo.
El ojiverde intrigado y nervioso ante la seriedad de esposo preguntó: — ¿TaeHyung , estás bien? ¿Pasó algo malo? — El tono preocupante en su voz y sus facciones pusieron nervioso a TaeHyung.
— No, no, no — Suspiró — Bueno sí, pero no malo, bueno para mí no y espero que para ti tampoco.
— Sabes que puedes decirme lo que quieras, no debes tener miedo de mí.
— Está bien, tienes razón — Habló aun nervioso — Antes que nada, decírtelo de esta forma fue idea de SeulGi, si sale mal no es mi culpa — Comenzó a deambular por la habitación tratando de recordar en donde fue que HoSeok había dejado los cupcakes, revisando cajón por cajón hasta que en uno había una caja blanca, la saca sin ver su contenido y se paró al frente de JungKook, sus dedos temblaban.
— Sorpresa — Estiró la caja hacia JungKook — Espero que te guste — Sonrió.
JungKook cogió la caja en sus manos ahora con un rostro de confusión, la dejó en su regazo y la abrió.
Las manos del ojiazul temblaban y su corazón latía muy rápido, su mirada puesta en JungKook en todo momento y cuando los ojos verdes se posaron en él con confusión para luego posarse en la caja y así sucesivamente puede que su pecho haya dolido, solo un poquito, pero pensó que tal vez no había captado la indirecta y se convenció de eso, tenía que ser eso.
— Amor, no entiendo — TaeHyung sintió volver respirar y un suspiro de alivio salió de él.
— Pero puedes pensar un poquito más. Vamos, sé que puedes — Dio ánimos he intento reprimir una sonrisa.
— Está bien — Rasco su nuca algo confuso, viendo los pequeños pastelitos. Se tomó unos segundos para pensar — Entonces tengo dos palabras, felicidades y nuevo, que pueden significar muchas cosas ¿Puedes darm...
— Espera, ¿Dijiste dos palabras? — JungKook asintió y TaeHyung se acercó hacía el, y efectivamente solo dos palabras había en los pastelitos y en donde se suponía que debían estar la última, había un espacio vacío.
TaeHyung quería matar a alguien.
Respiro profundo y mostró una pequeña sonrisa.
— Sol, quédate aquí, iré a matar a HoSeok.
Se dirigió hasta la puerta, porque él no mentía, quería ahorcar a HoSeok por el error, aunque muy, muy en el fondo sabía que tal vez no era su culpa, pero él tenía que desquitarse con alguien.
También porque puede que él se haya ilusionado con la idea de que JungKook se haya enterado través de ridículos cakes, porque el trató de ocultar su emoción cuando SeulGi le dio la idea, pero nadie podía saber eso, porque él no era así y él lo sabía, el embarazo lo tenía muy sentimental y tan solo imaginarlo así, él quería llorar.
Fue jalado del brazo antes de abrir la puerta y vio a JungKook mirándolo con una pequeña sonrisa traviesa y lo sostuvo por detrás, dando un pequeño besito en la mejilla.
— JungKook , suéltame — Trató de liberarse del abrazo — Déjame, que ahora si lo mato.
— Deja de ser tan gruñón, pequeño bebé — Rio y dejó otro besito — Y dime qué es lo que quieres decirme, porque me dejaste muy curioso — Giró el cuerpo de TaeHyung y besó sus labios.
— Bien... Todo bien, ¿sabes? Siempre tengo un plan b.
Él no tenía un plan b, ¡Él no tenía nada!
Su cerebro trató de pensar en tantas maneras de poder improvisar, aunque claro, él sabía que bien podía decirle sin nada de sorpresas o algo, tal y como lo había pensado. Pero había imaginado en que cara pondría JungKook si los estúpidos cakes hubieran servido y ya se había ilusionado.
Tenía que agregar que los besos que estaba recibiendo en el cuello no ayudaba en nada a su capacidad de pensar, pero hizo un esfuerzo, y un foquito se prendió en su cabeza, metafóricamente.
Se separó de JungKook casi bruscamente dejándolo con puchero, corrió hacia su maleta y con un poco de suerte puede que los análisis médicos estuvieran, y ahí estaban, pero él no se tomó el tiempo de abrirlo. Sabía que la idea era un poco floja, pero era lo que tenía.
Giró para volver donde el ojiverde, pero para su sorpresa él ya estaba cerca suyo con su ceño un poco fruncido. Tomo su mano.
— Ahora sí, JungKook, toma — Extendió el pequeño sobre blanco, JungKook lo aceptó con un poco de incertidumbre — Ábrelo, no es nada malo — Sonrió.
JungKook abrió aquel sobre para sacar una hoja doblada y la comenzó a leer, TaeHyung espero una reacción rápida ya que cuando él lo leyó lo entendió casi al segundo, pero al ver que su esposo seguía leyendo su corazón comenzó a acelerarse, el no recordaba tanto texto.
El ojiverde buscó su mirada al terminar de leer con una expresión que no pudo descifrar.
— ¿Y? ¡Di algo!
— Mi vida, no sé qué decirte o qué hacer.
— B-bueno, puedes alegrarte ¿no? — Habló un tanto nervioso y decepcionado, no esperaba esa reacción, definitivamente no.
— Claro que me alegro, Tae, me alegro mucho, pero es todo tu crédito.
— ¿Todo mi crédito? Pero JungKook, es nuestr... — Dijo bajito, casi en un hilo de voz, porque solo la idea que su JungKook no esté aceptado al bebé dolía en su corazón y en su pecho, pero ahora no solo era una idea.
— No, Tae, yo me alegro mucho que estés sano — Comenzó a tartamudear al ver la mirada triste y ojos cristalinos del mayor — Aunque aquí dice que tiene el colesterol un poco alto, siempre te he dicho qué hay que comer todos los vegetales.
TaeHyung lo miro confundido.
— ¿De que mierda hablas, JungKook? ¡Dame eso! — Arrebató la hoja, la miro y ahí se dio cuenta del error, eran los primeros exámenes que se había hecho
Eran los inútiles exámenes que decían nada de su embarazo.
Arrugo la hoja en una bolita y la lanzo con toda su fuerza en la habitación, soltó un chillido y lloró, las lágrimas cayeron al igual que los sollozos que se oyeron, porque él lo había arruinado, dos veces. Tan solo quería que al momento de decir la noticia saliera perfecto. SeulGi le había dicho que este era un momento único y tenía que ser especial, un momento lindo y perfecto para que cuando su hijo o hija preguntara cómo fue, ellos le contarían lo hermoso y especial de ese día.
Pero el ya no tendría ese día especial, porque él lo había arruinado, se sentía tan inútil y sensible, pudo oír como JungKook le decía pequeñas cosas en un tono preocupado, pero no las entendió, él estaba más preocupado en hundirse en su miseria.
— ¡No me toques! — Gritó el mayor cuando JungKook trató de acercarse para abrazarlo.
— Precioso, no llores por fa....
— No, mejor si, abrázame — Se acercó para abrazarlo por el cuello y hundió su cabeza en el, siguió llorando.
JungKook lo abrazo por la cintura dejando pequeños besitos en el cabello rubio, retrocedió hasta dar con el borde de la cama y se sentó, ayudo a TaeHyung a ponerse en su regazo, con sus muslos alrededor de su cintura, todo esto con el ojiazul prendido en su cuello soltando pequeños sollozos y antes que pudiera decir algo, TaeHyung habló.
— Lo lamentó mucho, JungKook — Hipó — No quería que te enteras así — Dijo entre sollozos — P-perdón, no quería arruinarlo.
— TaeHyung , por el amor que te tengo dime que sucede, por favor — Acarició su espalda — Cualquier cosa que sea, lo solucionaremos — Sintió como TaeHyung negó en su cuello.
— No, no se puede — Sollozó — Cuando él pregunte cómo fue, no va a ser especial ni bonito, no quiero eso.
— ¿Pregunte quién? — Dijo un poco exaltado.
—¡Nuestro hijo! — Y esa noticia llegó de la nada al cerebro de JungKook , sus manos pararon y su boca se abrió un poco.
— ¿Tae, q-que te refieres con eso? Tu... — Tartamudeó.
TaeHyung al darse cuenta de lo que había dicho comenzó a sollozar de nuevo y abrazó aún más a JungKook.
— ¡Lo siento tanto, JungKook! S-soy un tonto, no debí decir eso.
— Amor...
— Estoy esperando un bebé — Dijo bajito, en un murmullo que JungKook pudo oír a la perfección, la habitación se sumergió en un silencio donde solo se oía pequeños hipidos del ojiazul, las manos del menor se metieron debajo de la fina camiseta que llevaba puesta TaeHyung, acaricio suavemente toda su espalda dando despacitos toques causando que se tranquilizara.
— TaeHyung, mírame por favor — Pidió amablemente y con las manos en la cintura trató de separarlo, pero el pequeño se aferró más mientras negaba frenéticamente — Amor, mi bonito, por favor mírame — Rogó dando pequeños besitos en el cabello lacio, el mayor inhalo aire y lentamente se separó del cuerpo más grande y quedó completamente sentado en su regazo.
Con sus manos trataba de secar las lágrimas que aún estaban en sus ojitos y cuando lo vio, el azul brillo. Estaban cristalinos y el bonito azul resaltan en sus pupilas, sus mejillas rosadas y húmedas, un poco de sudor hacía que su cabello se pegara a su frente y sus labios estaban en un lindo puchero. JungKook con la yema de sus dedos secó sus ojos y limpió sus mejillas, pasó su mano por la frente quizá peinando un poco su flequillo y beso la pequeña nariz.
Su mente aún estaba procesando la noticia, quizá por cómo fue que la recibió o por qué él no se esperaba esto, podía sentir como su corazón palpitaba rápido y como su estómago era una lluvia de emociones en donde el solo quería atrapar en un abrazo a TaeHyung y nunca soltarlo, ni a él, ni a su futuro hijo, pero primero tenía que asegurarse, él debía hacerlo.
— Precioso, necesito que me digas que esto no es otra broma por favor — Anhelaba y rogaba lo más que podía para que no fuera una broma, sus ojos con un brillo lleno de esperanzas y felicidad esperando a estallar.
— ¿Cómo puedes pensar que es una broma? — TaeHyung habló con su ceño frunció y algo ofendido.
— ¿En serio? Abril, 2018, ¿Te acuerdas?
TaeHyung lo miro algo avergonzado, claro que se acordaba.
Una tarde de abril, le dijo a JungKook que él estaba en espera de gemelos por una estúpida apuesta, JungKook explotó en alegría llenándolo de besos y abrazos. TaeHyung se sintió demasiado mal y ahí mismo le dijo que todo era una broma por la apuesta que él había perdido, JungKook se enojó y no le habló por doo días.
— Te lo juro, JungKook, no es una broma — Habló rápido — Y-yo he estado sintiéndome mal y me hicieron unos exámenes y... Y salió que sí, que, si estoy embarazo, y yo quise decírtelo, pero los estúpidos pasteles no sirvieron y cuando te di el sobre no era el correcto y yo solo quer... — Claramente estaba divagando, pero JungKook lo interrumpió con un fuerte beso, no hubo movimiento ni nada, solo un toque donde él quiso transmitir todo la emoción y alegría que sentía por dentro. Se separó con una enorme sonrisa y rio al ver la carita totalmente roja del mayor, quien no pudo ser más feliz.
— V-vamos a tener un hijo — Susurró al borde de las lágrimas — ¡VAMOS A TENER UN BEBÉ! — Y antes que el ojiazul pueda hablar, él ya lo había alzado y estaba dándole vueltas por todo el cuarto.
Cuando paró, TaeHyung puso sus manos en las mejillas del menor, susurró un pequeño "si" y plantó un beso, algo descoordinado y rápido, porque eso era lo que él quería, que JungKook lo abrazara tan fuerte que podría sentir como su corazón podía salirse de su pecho, quería sentirlo alegre y emocionado, solo eso quería.
— ¿Estas feliz, sol? — Sabía que era una pregunta tonta, pero él quería oírlo, y no hubo necesidad de una respuesta ya que la enorme sonrisa que le regaló JungKook y ver sus lindos ojos llorosos fue suficiente.
— ¡TaeHyung, esto es increíble! Amor, vamos a ser padres — Lágrimas ya caían por su mejilla — Gracias, muchas gracias, cielo. Y-yo simplemente no sé cómo agradecerte, por tanto — Abrazó el pequeño cuerpo y lloró, lloró de felicidad mientras decía un montón de cosas alegres que salía de su corazón y se puso a pensar que muy pronto tendría en sus brazos a un pequeño, una pequeña bolita que sería la mezcla de genes entre él y el amor de su vida quizás salga con lindos ojos azules y su mal carácter, él no lo sabía, pero no podía estar más contento.
TaeHyung también ya había comenzar a llorar de felicidad en tanto seguía aferrado a JungKook , pues se sentía correcto, entre los brazos de su amado se sentía tan bien y seguro, se sentía amado a más no poder y era una sensación muy linda.
— Tenía tanto miedo — Confesó en un susurro y fue el momento en que se separaron, JungKook lo dejo en el suelo a petición de él, pero sin soltar el agarre en su cintura, lo siguió abrazando y TaeHyung se ocultó en el pecho del menor.
— Mi lindo bebé, nunca tienes que sentir miedo de mí, amor — Besó su frente.
— Yo sé, pero nunca hablamos de esto, o lo planeamos, tu estabas de gira y yo sigo en gira, y con nuestros nuevos álbumes, no pude evitar lo peor — Habló algo nervioso aun escondido en su pecho, JungKook lo vio y tomó su mentón para poder verlo a los ojos.
— Mi dulce criatura — Sonrió al decir aquel apodo — No debiste preocuparte por eso, no debiste preocuparte por nada, amor — Acarició su mejilla — Siempre salimos adelante, sea lo que sea. Y ahora, vamos a formar una familia y créeme cuando te digo que no puedo estar más feliz — Las lágrimas ya estaban en sus mejillas mientras sonreía.
— Te amo.
— Y yo te amo a ti, sol.
Se dieron un pequeño beso, TaeHyung tomo la mano de JungKook para llevarla directo a su vientre, ahí el castaño pudo sentir que ya no solo estaba la pequeña pancita que amaba, si no que era aún más, una pancita brotada en todo el estómago de su esposo.
— Y-o puedo... —Dijo nervioso y jugó con el borde de la camisa blanca que traía puesta el mayor.
— Puedes, mi sol, eres su papá — TaeHyung noto el brillo en los ojos verdes y la emociona al oír esas palabras.
Le dio una gran sonrisa y lentamente fue arrodillándose, levantó su camisa dejando expuesto su abdomen y ahora JungKook pudo ver esa pancita que había sentido todo antes. Con sus manos sujetándolo por las caderas, repartió besitos en toda la barriga y dijo:
— Hola, bebé — Sonrió — Soy papá.
Estaba consciente que aún no podía oírlo, pero él tenía que hacerlo, quería hacerlo, porque su pequeño bebé estaba adentro y eso lo hacía el hombre más feliz.
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