17 de Abril de 2014

—Eres patético—dice Harvey mientras que su amigo estaba en la peluquería, el chico de ojos grises mira a Andrew quien le aplicaban tintura rubia a su cabellera castaña.

—Nicole dijo que me vería mas atractivo.

Harvey rueda sus ojos.

—Solo tú te teñirías porque una chica le dice que se vería mas atractivo, andan dos meses juntos y esta te tiene en una correa, literalmente.

Andrew decide ignorar a su amigo mientras se mira en el espejo, al lo mejor su nuevo look desentonaba bastante con sus cejas cafés y pobladas, no llegaba al estereotipo de chico rubio salido en una revista. Pero su novia Nicole viene repitiendo lo atractivo que Andrew se vería, y él quería verse atractivo para su novia porque la quería.

Harvey agarra una de las revistas de la peluquería, cerca de ellos había un chico que se hacia un corte, y una señora mayor que tenia unos ruleros en toda su cabeza. El chico de ojos grises sigue hojeando la revista, se detiene a una pagina donde alterna su vista de la revista a la de su amigo, y viceversa, Andrew rueda sus ojos.

—Venga, te mueres por decir algo—dice el chico, Harvey gira la revista para que su amigo vea la pagina. 

—Están haciendo publicidad a un articulo, donde atan a los niños con un arnés y los padres sostienen algo parecido a una correa. Pensaba en regalárselo a Nicole para ti, pero creo que tienes la correa muy corta ya.

Andrew golpea su pierna, el chico de ojos grises bufa dejando la revista.

—Ella no me agrada.

—No te agrada nadie con el que debas compartir el mismo aire, tal vez excepto, yo.

Harvey se cruzo los brazos demasiado disgustado, la peluquera se acerca a Andrew para decirle que era hora de enjuagarse. Al volver, tenía el cabello demasiado rubio, tal vez exagero con la idea del color, se voltea a ver a su amigo. 

—¿Como me veo?

Harvey inflo sus mejillas aun con los brazos cruzados y ladeo su cabeza.

—Como un pollito recién nacido. 

**

—Hola linda—dice Andrew sorprendiendo a su novia, Nicole sonríe cuando él le da un beso en su mejilla y se sienta a su lado en el banco de la plaza donde acordaron encontrarse, la chica tenía el cabello castaño claro hasta la cintura y unos relucientes ojos azules, ella lo mira atentamente antes de reírse. 

—¿Qué es esa pinta que tienes?—dice viendo la gorra en la cabeza de Andrew. Él ríe.

—Oh tengo algo para ti.

—¿Iras así al cine?—dice ella sin sacar la vista de su gorra, Andrew suspira agarrando su rostro para que lo mire, ella lo observa, le ofrece una sonrisa que le devuelve.

—¿Estoy mal?—pregunta viendo su atuendo.

—Bueno, no tan mal, la gorra—dice señalando su cabeza. Andrew lleva una mano a la gorra y se la saca mostrando su nuevo cabello ya rubio claro, Nicole abre la boca grande en forma de "o" mientras observa a su novio. Luego una sonrisa se cuela por sus labios peinando este mismo y besa sus labios.

—Me encanta, te ves tan sexy asi—dice ella acariciando su mejilla y lo mira—Tal vez exageraste un poco con el decolorante, pero nada que no se arregle.

—Bien—sonrie besando sus labios—¿Vamos? Tengo un 2x1.

—¿2X1?¿enserio Andrew? ¿Me invitas a algo de oferta?—dice ella pareciendo ligeramente molesta.

—¿Que tiene de malo?

—¿Que que tiene? Que no quiero que digan por ahí que soy pobre y tengo que buscar ese tipo de ofertas en una cita con mi novio.

El chico no sabía porque su novia se ofendía demasiado por aquello, no lograba comprenderlo, pero ella estaba cruzada de brazos y lo veía fijamente. Parecía un poco mas como si la hubiera insultado. Se saco su billetera del bolsillo para contar el dinero que llevaba encima. 

—Supongo que...puedo regalar el 2x1 a otra persona y compro las entradas normales.

Ella sonríe besando sus labios y se para, Andrew la sigue mientras ella toma su mano entrelazando sus dedos caminando al cine.

**

—Mierda Andrew—dice Harvey por llamada.—No puedo creer que te viste obligado a pagar dos entradas porque ella parece muy fina para el 2x1

—Si...hasta casi se ofende si le pregunte si ella pagaba la comida.

—No es por nada amigo, pero esa relación deberías decirle chau.

—Pero...me hace bien Harvey.

—No Andrew, tu quieres creer que te hace bien, eres lo suficientemente fuerte para no pensar que tu alegría es gracias a una persona.

6 de Octubre de 2015

—Hace mucho que quiero teñir mi cabello de violeta, pero también me encanta el azul.

—Que gran dilema-—ice Suki mientras que la chica de cabello azul hace un pequeño mohín. Aalyiah ríe ante eso. Las cuatro caminan por los pasillos del colegio, estaban yendo al casillero de Aalyiah para que ella intercambie unos libros.

Al llegar a su casillero correspondiente, se coloca frente a este e intenta abrirlo, frunce el ceño cuando siente que la puerta estaba trabada e intenta jalar con más fuerza.

—Ya nos olvidamos de tu color natural—dice Hannah—Y hasta ahora el color que más te ha durado es el azul.

—¿Y cuál es su color natural?—pregunta Aalyiah jalando más de la puerta de su casillero.

—Castaño claro, mi mamá decía que era rubia oscuro, en fin un color aburrido—dice la chica de cabello azul—Eso sí que se ve duro, ¿Qué tanto guardaste?

—Solo mis libros, deje una campera fina por si tenía frio pero no creo que eso la haya atorado—dice Aalyiah y le da un golpe—Ábrete mierda.

—Déjame a mí, también pasaba con la mía—dice Hannah.

Tras unos pequeños golpes y un jalón, la puerta del casillero de la pelinegra termina por abrirse. Suki abre los ojos demasiado grandes, Hannah se queda con la boca abierta, Aalyiah suelta un jadeo ahogado mientras que Heaven frunce el ceño. Y algunos estudiantes que andaban de paso se quedaban sorprendidos con lo que veía.

Bolsitas de preservativo cayeron de esta, demasiadas a decir verdad, algunas de esas bolsas estaban abiertas mostrando el preservativo. Y estaba segura de que una de esas estaba usada. Aalyiah traga saliva mientras veía todas las bolsas de preservativos tiradas en el suelo, había una toalla femenina usada inclusive.

—Ese cerdo sexista va a escucharme—dice Heaven enojada agarrando bolsas de preservativos cerradas, Aalyiah intenta detenerla. La chica de pelo azul daba grandes zancadas mientras caminaba, sus ojos parecían prendidos en llamas y en cualquier momento seguro era capaz de escupir fuego. 

Llega al grupo de amigos de Evan, donde ellos incluido el rubio reían a carcajadas. Heaven se planta frente a su primo, donde el chico la mira con una sonrisa divertida, que automáticamente es borrada cuando ella le tira una bofetada haciendo que su cara se corra de lado. Evan la mira molesto y ella le muestra los preservativos.

—¿¡Tan jodido eres para meterle esto en su casillero!? Que ella no quiere acostarse contigo Evan, deja de insistirle, ¡encima le pusiste uno de esos usados!—comenta tirandoselo en la cara— Me das asco.

—No importa, Heav, mejor vámonos—dijo la pelinegra jalando la mano de la chica de cabello azul, pero Heaven se mantenía tan inmóvil como una estatua. 

—¿Acaso no se lo dijiste?—pregunta Evan volviendo con esa sonrisa socarrona en su rostro.

—¿Decirme que mierda, Evan?—escupe las palabras Heaven.—¿Qué eres un idiota? Porque créeme, nadie necesita decírmelo para que lo sepa.

—¿Se lo dices tu Aalyiah?—dice el chico viendo a la pelinegra quien tenia su vista fija en el rubio y su corazón palpitando a mil por hora.

—¿Decirme que?—repite la chica del pelo azul sin sacarle la vista al rubio. Llamaron la vista de varios de los estudiantes que detenían su paso para saber a que se debía la disputa entre aquellos dos primos que parecían escupirse fuego con la mirada. 

El rubio mira a Aalyiah quien niega, sabía que se vengaba, Evan se sintió avergonzado el lunes, y se estaba vengando de lo que ella había hecho.

—Nunca me acostaría con esta—dice viendo de arriba abajo a Aalyiah.—Con una cualquiera, llena de Sida

Todos de una forma dramática, que podría ser graciosa en otra situación, soltaron un jadeo ahogado. Se llenaron de murmuros, Aalyiah siente sus ojos llenarse de lágrimas, mientras que Suki y Hannah se cruzan miradas entre ellas. Heaven intenta no abandonar su postura firme, levanta la barbilla como desafiante.

—Estas mintiendo—dice ella seria.

—¿Por qué no le preguntas? Después de todo, la perra manchada aquí, no soy yo.

Heaven mira a su amiga, ella no la mira.

—¿Es cierto?—le pregunta en un tono calmo como si todo su fuego interior se hubiera evaporado de golpe. 

Aalyiah aprieta ambas manos formando un puño.

—VIH—susurra lo suficiente alto para ser oída.

—¿Pe...como?—pregunta sin entender.

—¿Enserio prima?—dice Evan—Porque es una puta asquerosa, una niña mala según me entere, ¿no Aalyiah? Yo que ustedes no me acerco, la peste esa nos puede afectar a todos.

Aalyiah no pudo soportarlo más cuando salió de ahí, todos apartándose de ella como si fuera a contagiarlos. Corrió al baño sintiendo impotencia, se odiaba, odiaba a Evan, odiaba a Quentin y al maldito con el que haya tenido relaciones sin su consentimiento. Se sentía mal, se sentía sucia. Abre el grifo del agua donde se echa agua en la cara y se lo frota con tanta fuerza terminándose por hacer daño, se frota las manos lavándolas con jabón como si eso pudiera sacar todo.

De un cubículo sale Sabrina, la chica que hace unos días dijo ser novia de Evan, o algo asi. Alza una ceja mientras se lava la cara.

—Después habrá que desinfectar eso, o mejor toda la escuela—dice Sabrina y Aalyiah decide ignorarla mientras sigue fregándose las manos, otras chicas salen del cubículo y algunas entran al baño. Eran en su mayoría amigas de Sabrina.

—Ahora entiendo porque no te andabas alzando a Evan, es porque eres una maldita con un virus que está matándote por dentro

—Déjame—dice Aalyiah apretando sus dientes.

—Linda, por más que te esfuerces en cambiarte, eso no pasara, seguirá ahí, dentro tuyo—le dice cerca de su oído. Alyiah se voltea dándole un empujon. Que Sabrina exagera—¡Ah me golpeaste!

—¡Ya déjame!—le grita.

Sabrina saca de su bolso un preservativo y se lo tira.

—Ten, como recuerdo de que nadie te querrá de esa forma

El resto de las chicas se rien a carcajadas y le tiran unos cuantos. Aalyiah siente sus ojos llenarse de lagrimas cuando una voz de otra chica suena diciendo que la dejen en paz, pudo reconocer la voz de Suki, sin embargo sale empujando a varias de las chicas. Y se echa a correr aunque sentía que mencionaban su nombre. Muchos le gritaban cosas, veía a Evan reírse a carcajadas y a otro de los estudiantes reír a carcajadas.

Aunque no era hora de irse, ella se dirige corriendo a la salida de la escuela, se tropieza con sus propios pies cayendo por las escaleras, provocando que se lastime la nariz y que esta sangre. Sin importarle demasiado que su nariz sangre, o que sus brazos se hayan ganado raspones, se levanta y echa a correr con las risas de los demás persiguiéndola.

**

Andrew pausa su juego cuando Picasso comienza a ladrar la puerta y a los segundos el timbre de su casa suena. Era su día libre de trabajo, su mamá estaría trabajando, o con su novio, eso no podía importarle menos.

El chico se levanta del sillón caminando a la puerta, cuando la abre, se encuentra con Aalyiah, su ropa estaba arrugada, tenia su nariz sangrando y sus brazos raspados. Sus ojos rojos e hinchados mientras que grandes lagrimas caían de ellos.

La pelinegra se tira a los brazos de Andrew quien la abraza con fuerza acariciando su espalda.

—Tranquila Aly, estoy aquí—susurra acariciando su espalda mientras ella se aferra al cuerpo del chico.

—Hoy fue el día mas horrible de todos—susurra mientras lloraba e hipaba, Andrew suspira acariciándola y besa su mejilla, la separa de su cuerpo agarrando su rostro en sus manos y la observa.

—Te haré un te, te ayudare a limpiarte y me contaras de esto, ¿bien?—dice, y ella asiente abrazandolo de nuevo apoyándose en su pecho mientras que Andrew la rodea besando su frente. 

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¡Hasta el viernes!, pueden pasarse en mis otras novelas si gustan.