-Seungmin: Felix ¿Seguro que no necesitas nada? 

El chico negó con un leve murmullo. Se encontraba tirado sobre la mesa con sus mejillas coloreadas y mirada bastante perdida

-Seungmin: ¿Por qué has venido a clase si te encontrabas tan mal? ¿Acaso vas a entrar en tu celo? Es raro, tu aroma no ha incrementado 

-Felix: Eso es porque no tiene que ver con mi celo, simplemente agarré un resfriado Minnie, nada importante. Además esta mañana me encontraba mejor, de hecho no tenía fiebre, aunque ahora creo que si 

Un suspiró se escapó de los labios del castaño, no podía moverse del aula porque en unos dos minutos estaría ahí su profesora de matemáticas y tenía que hacer un examen de recuperación, se sentía mal por no poder ayudar al omega que siempre era tan bueno con todos 

La salvación pareció entrar por la puerta en el momento que su Jisung, su hermano, y Hyunjin entraron por la puerta del aula entre risas 

-Seungmin: ¡Jisunnie! Por favor necesito tu ayuda

-Jisung: ¿Qué pasa? 

Preguntó preocupado al ver la expresión de su hermano 

-Seungmin: Tú me ayudarías a lo que sea ¿Cierto? Da igual el qué

-Jisung: Claro que si Seungmin, eres mi familia, haría lo que fuera por ti 

-Seungmin: Me alegra oír eso, porque tienes que llevar a Felix a la enfermería 

Y ese fue el preciso momento en el que el rubio abrió sus ojos con sorpresa al escucharlo, ni siquiera tardo un solo segundo en comenzar a  negar con su cabeza y hacer una cruz con sus brazos. O no, claro que no. Se negaba rotundamente. No pensaba ayudar al chico que le estaba robando el corazón de Minho hyung 

-Seungmin: ¡Acabas de decir que me ayudarías en lo que sea!

-Jisung: ¡Bueno! ¡En lo que sea menos en eso! 

Ambos hermanos se miraban con el ceño fruncido, si te concentrabas a lo mejor conseguías ver los rayos que se disparaban a través de la mirada 

-Hyunjin: No te preocupes Seungmin-ah, claro que lo ayudaremos ¿Qué hay que hacer? 

Jisung rodó sus ojos, ya estaba su amigo el príncipe Hyunjin haciendo de sus encantadores actos de nuevo, ese alfa no tenía una pizca de maldad en su cuerpo ¿o qué? 

-Seungmin: Tenéis que llevarlo a la enfermería, tiene fiebre y necesita descansar. Sus padres no pueden venir a por él porque ambos trabajan por las mañanas 

-Hyunjin: Bien, cuidaremos de él

El azabache sonrió y sin dudarlo se dirigió hacia el rubio omega que cada vez parecía encontrarse peor. Lo ayudó a ponerse en pie y se puso a caminar a su lado por si en algún momento necesitaba más ayuda o se mareaba 

Jisung bastante resignado suspiró y no le quedó otra que ir detrás de aquellos dos, con ganas de desintegrar con la mirada a Lee 

-Hyunjin: ¿Estás cómodo así? ¿Quieres otra almohada? Hay algunas más libres 

-Felix: Esto bien Hyunjin-ah, gracias por ayudarme. Gracias a ti también Jisung 

Sonrió el chico acurrucándose entre las sábanas de la camilla de la enfermería

El beta vio como la mejilla de Felix se aplastaba tiernamente con la almohada y como además poco después estornudó de la forma más adorable que nunca imaginó ¡ni siquiera su hermano Jeongin estornudaba así! 

-Jisung: Yo no he hecho nada... 

Musitó sentándose en una de las sillas que habían allí 

-Hyunjin: Iré a buscar a la enfermera para que te de alguna pastilla, en seguida estoy aquí 

Antes de poder recibir alguna queja de parte de Jisung, su amigo salió de allí dejándolos a solas

-Felix: Jisung, no me gustaría molestarte pero ¿Puedes alcanzarme un poco de agua? 

El chico asintió con su cabeza, tampoco sería tan mala persona para dejar a alguien enfermo con necesidades ¡pero odiaba estar ayudando a ese chico! Y lo que más odiaba aún es que lo odiaba sin razón, porque Lee en realidad no le había hecho nada, muy al contrario era alguien que lo trataba bastante bien y además siempre se preocupaba por él

La puerta de la enfermería se abrió de golpe asustando Jisung que estaba con la botella de agua en la mano

¿Minho? Si, era él 

El alfa examinó con su profunda mirada al beta que lo miraba con sus mejillas sonrojadas. Jisung estuvo a punto de decir algo, pero Minho gruñó pasando por su lado hasta llegar a la camilla del omega 

-Felix: ¡Minho hyung! ¿Cómo sabía que estaba aquí? No tenías que preocuparte 

-Minho: Algunas personas me dijeron que te habían visto de camino a la enfermería y me asusté. No me pidas que no me preocupe, eso es algo imposible Yongbokie 

Ambos rieron y el pecho de Jisung se oprimió 

No sabía en qué momento había comenzado a apretar con sus manos la botella de agua hasta que sus nudillos se habían vuelto blancos. Realmente él no quería estar frente a esos dos mientras parecían dos tórtolos, su corazón dolía 

-Jisung: Felix, aquí tienes tu agua

Susurró acercándose -a pesar de que no quería-, dándole a rubio el agua y recibiendo otra sonrisa más de su parte 

-Felix: Hyung ¿Conoces a Jisung? Es mi compañero de clases 

-Minho: Sé quien es, pero no quiero conocerlo, no me apetece 

El beta arrugó su nariz ¿por qué sería que el alfa le tenía tanto asco? Literalmente cada vez que lo veía recibía desprecio de su parte. Y lo peor era que su corazón no paraba de latir por él y sólo por él 

-Felix: Minho hyung...

Reprochó el menor intentando que el castaño se disculpara

En momentos como estos a Jisung le encantaba no tener lobo, ya que inundaría el lugar con su aroma a tristeza 

-Jisung: Me iré ya Felix, espero que te pongas mejor. Adiós hyung

Intentó tomar sus cosas lo antes posible y salir de allí, bajo la triste mirada del omega y la desinteresada del otro chico 

Cuando cerró la puerta tragó saliva bastante abrumado, agradecía que todos estuvieran dentro de sus clases y los pasillos estuvieran vacíos, porque no le había dado tiempo de llegar al baño antes de empezar a llorar

Pasó su antebrazo con cuidado por sus ojos para borrar sus lágrimas, así logrando chocar con alguien al estar dentro de los aseos 

-Jeongin: ¿Jisunnie? ¿Qué pasa? 

La voz preocupada de su hermano pequeño hizo quitar su brazo de su rostro, se abrazó al menor y lloró como si él se tratase del menor de los dos 

-Jisung: Te quiero mucho Ginnie

El omega no entendía nada, pero le daba igual, sólo quería hacer que su precioso hermano mayor parara de llorar y volviera a mostrar su sonrisa que tanto animaba a todos siempre. Rodeó la cintura del rubio para abrazarlo y acarició los cabellos de este con cariño 

-Jeongin: Yo te quiero más... tranquilo hyung, todo está bien 

Susurraba el omega para tranquilizarlo 

-Jisung: Jo, perdón Ginnie, te estoy manchando de lágrimas y mocos

La dulce risa del pequeño resonó en el baño antes de negar con su cabeza y apartarse con suavidad del cuerpo del mayor 

-Jeongin: Ya estoy hecho un desastre, no te preocupes hyung 

Con su dedo índice colocó sus gafas de forma correcta 

El beta lo miró bastante sorprendido sorbiendo sus nariz, Jeongin llevaba puesto el uniforme de deporte. Su polera blanca estaba bastante sucia, sus rodillas también estaban cubiertas de suciedad y además de algunos rasguños al igual que sus manos 

-Jisung: ¿qué te ha pasado? 

-Jeongin: Me caí haciendo atletismo y vine a limpiarme un poco

De repente otra persona más entró en el baño. El perfecto príncipe venía con la respiración agitada y su cabello hecho un total desastre 

-Hyunjin; ¡por fin! Te estaba buscando por todas partes, no sabes todo lo que he corrido. Cuando no te he viso en la enfermería y vi a Minho allí me temí qu-- ¿Ginnie? ¿Qué te pasó? 

Jisung rió suavemente al ver la cara de confusión de su amigo, su mejor amigo de hecho, el alfa había adquirido aquel papel 

-Jeongin: M-me caí haciendo atletismo 

Confesó una vez más, esta vez más avergonzado que nunca antes ¿Por qué Hyunjin tenía que verlo siempre en sus peores momentos? Cada vez que se lo encontraba estaba mal físicamente, medio dormido con sus ojos hinchados, lleno de suciedad por haberse caído, con una mascarilla y pijama... ¡La vida le odiaba! 

-Hyunjin: Tienes polvo en tu mejilla 

Rió el mayor pasando su pulgar por aquella zona para quitar cualquier rastro de suciedad de su rostro 

El omega frunció sus labios y sin poder evitarlo comenzó a emitir un aroma bastante dulce, su lobo estaba rogando porque aquellas caricias no cesaran 

Hwang lo miró centrándose en los brillantes orbes del pequeño, un escalofrío le recorrió de pies a cabeza y satisfaciendo a su lobo comenzó a olfatear aquel aroma 

-Hyunjin: Huele a -- 

-Jeongin: Te veo en casa Jisung hyung 

Tomó su maleta y salió corriendo de allí bastante avergonzado, los omegas sólo emanaban su aroma de esa forma cuando estaban con la persona que les gustaba o porque estaban realmente a gusto 

-Jeongin: Mal Jeongin, muy mal 

Susurró para si mismo mordisqueando su labio inferior 

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Kisssuuu~