Rosetta y Lorenzo reían en unísono; Lorenzo dijo algo tonto sobre un sueño que tuvo la noche anterior que lo hizo parecer algo drogado.

━ Y después de eso, ¿te levantaste? ━ la castaña miró con alegría al ojiazul, esperando su respuesta.

━ No ━ Lorenzo abrió ampliamente los ojos e hizo una mueca que ocasionó que la castaña quisiese reír nuevamente ━ Después de eso, el escenario cambió y entonces me llego un mensaje de tu hermano y cuando miré era una foto de piolín con un texto de "buenas noches" .

Rosetta no pudo evitar reír al imaginar esa conversación.

━ Espera, eso no es lo peor ━ el castaño miró al rededor para asegurarse de que nadie escuchase lo que estaba a punto de decir ━ La peor cosa, era que tenía su contacto guardado como "Pichoncito".

Lorenzo cubrió su cara con ambas manos, avergonzado ante su confesión y la castaña no pudo resistir soltar una fuerte carcajada, pronto, el antes mencionado se le unió, cosa que dio más gracia.

Cuando la risa cesó, ambos se tomaron el tiempo de observarse; se encontraban en una mesa que había en el jardín, era de cristal y sus sillas eran algo incómodas al ser de mimbre, Rosetta usaba un vestido de lino color blanco, tenía sus rodillas pegadas a su pecho y sostenía un cojín en sus brazos, por otro lado, Lorenzo usaba una camisa color azul bebé y bermudas color café claro, tenía su mano derecha apoyada sobre el antebrazo de la silla y su cabeza se recargaba sobre esta.

Estos momentos, únicos. Irrepetibles. Son aquellos que nos llenan el alma. En dónde solo podemos pensar " Wow, solo con esta persona puedo pasármelo tan bien".

Vivimos de momentos, es por eso que es crucial vivir de aquellos cómo estos. Que nos hacen querer quedarnos en este instante para siempre.

Lorenzo se sentía así cada vez que estaba con Rosetta. Y, ella era tan, adictiva. Cómo una droga.

La castaña poseía unos ojos que mataban a cualquiera que se atravesase en su mirada, tenía una forma de sonreír que te hacía imitarla sin pensarlo, su risa era extremadamente contagiosa, era buena escuchando y también aconsejando, era tan instantánea, tan libre, ella era perfecta.

Entonces el castaño dió un corto beso en los labios de ella, cosa que la tomó de sorpresa; algo había aprendido en estos días (cortesía de Rosetta) y era que, cuando deseas hacer algo, debes hacerlo, aunque tengas tus dudas, hazlo. Dicen que cuando más miedo tienes, ahí es cuando debes actuar.

La vida es un instante, no somos nadie.

Entonces hazlo, porque, ¿Qué te asegura que mañana podrás intentarlo?.

La ojiazul parpadeó ante el repentino movimiento pero no mucho después, apareció una sonrisa en su cara e imitó la acción de Enzo y en segundos ambos terminaron repartiéndose besitos cada tres segundos hasta que se transformaron en algo más largo y placentero.

Cuando la falta de aire se hizo notar ambos se separaron y el castaño miró a Rosetta de una forma que la derritió por completo, aquel joven tenía ese poder sobre ella, sus miradas eran como ver el mismísimo cielo.

━ Rosetta ━ la llamó en casi un susurro, posó su mano libre sobre su mejilla y comenzó a acariciarla, después puso un mechón de cabello rebelde bajo su oreja y la miró de nuevo de aquella manera.

━ ¿Mmj? ━ fue lo único que pudo responder pues aquel ojiazul lograba distraerla de cualquier manera.

━ ¿Les diremos sobre esto, verdad? ━ la joven estaba a punto de preguntar sobre a quien se refería, mas pronto entendió que hablaba sobre su hermano y amigos.

━ Lo haremos ━ Enzo entrecerró los ojos, aquella afirmación no era digna de Rosetta ━ A su debido tiempo.

Sip, ahí estaba la Rosetta que él conocía.

━ Rosetta ━ dijo en un modo de regaño, cosa que hizo reír a la ojiazul.

━ ¡Ay vamos! ━ exclamó levantando ambos brazos en el aire ━ ¿No crees que es más divertido así? ¿No te gusta este, amor prohibido? ━ comentó levantando ambas cejas y Lorenzo no pudo evitar reír.

━ ¿Y prohibido, por qué?

━ No creas que no sé que te da miedo mi hermano.

━ No me da miedo tu hermano, es mi mejor amigo ━ levantó los hombros y trató de defenderse mientras volteaba a ver el lugar.

━ ¡Ay claro! ━ la castaña lo tomó suavemente de la quijada y lo hizo mirarla ━ Ahora dímelo a los ojos.

Enzó volteó los ojos, no le gustaba que Rosetta actuara así en aquella situación pero esos labios le estaban rogando que los besara y aquella era la excusa perfecta para evadir aquella situación sobre Alonzo así que eligió la opción más fácil, el beso.

🍋

La noche había anunciado su llegada, el ardiente sol que antes imponía el día había desaparecido y en su lugar habían aparecido pequeñas estrellas y la más hermosa de las lunas.

Rosetta se encontraba en la playa, caminaba sintiendo la arena bajo sus pies y observando la marea que había subido, decidió entonces sentarse y solo mirar hacía el horizonte mientras se sumergía en sus pensamientos.

La castaña recordó entonces que antes su padre le contaba historias sobre las estrellas, un día le habló sobre las estrellas fugaces y desde aquel entonces, cada que ella veía una, le pedía un deseo, para sorpresa de todos, en la mayoría de los casos se le cumplió.

━ ¡Oh por Dios, una vagabunda! ━ Rosetta no se molestó en tratar de descubrir quien la había llamado de esa manera, pues reconocía aquella voz en donde fuese.

Por el rabillo del ojo observó como Lorenzo se sentó a su lado.

━ ¿Hola? ━ el castaño pasó sus manos frente a los ojos de la ojiazul pues esta parecía hipnotizada por el paisaje que tenía en frente ━ Acabo de hacer una broma, deberías reírte.

━ El que parece vagabundo aquí eres tu ━ se defendió volteando su rostro al de él y pasando su mano derecha por su cabello que comenzaba a verse largo ━ Mira tu pelo, solo un vagabundo lo usaría así.

Lorenzo volteó los ojos para luego dejar un corto beso en los labios de Rosetta.

━ Acepta que así te gusto mio amore

Ambos rieron ante las palabras del castaño y la ojiazul aceptó la derrota asintiendo con la cabeza.

La ya mencionada se recostó completamente en la arena sin importarle lo llena que quedaría su ropa de esta y 'Enzo la imitó. Rosetta no tardó mucho en platicar sobre lo que había recordado; aquellas noches en las que ella y su padre se recostaban por horas en el jardín solo para observar las estrellas, todo lo que había aprendido sobre constelaciones y sus posiciones.

Entonces como si sus palabras hubieran sido escuchadas apareció una estrella fugaz.

Rosetta miró a Lorenzo, quien también se percató de aquel destello, entonces ambos pidieron su deseo y su fundieron en un beso que expresa más que el amor.

La castaña recordó en ese momento la letra de una de sus canciones favoritas: "Apocalypse" de Cigarettes After Sex

your lips, my lips
Apocalypse

Así se sentía estar con aquel castaño chico, y cada vez que sus labios rozaban los de ella, era como un Apocalipsis. Único. Inolvidable.

🤍! HOLAA, ¿CÓMO ESTAN CHIQUILLOS?

PLATÍQUENME, ¿CUÁL ES SU CANCIÓN FAV?

LOS LEO.

xoxo, k.