Me despierto e intento incorporarme, pero tengo un dolor de cabeza tan horrible que no puedo moverme. Me vuelvo a recostar en la cama y cierro los ojos con fuerza hasta que se me calma el dolor, entonces siento mi cuerpo totalmente entumecido y tengo un frío en el pecho que me hace hacerme bolita y abrazarme las piernas en un intento de entrar en calor.

Debo dejar de estar despierta hasta tarde sin taparme, la computadora hace que me duela la cabe... En ese momento mi madre entra a mi cuarto y enciende la televisión.

"Dos chicas más han muerto, una en el plantel 89 y otra de nuevo en el 53..."

Miro a mi madre y veo que tiene los ojos rojos.

—Mam...

—Solo escucha.

"Los planteles estarán cerrados hoy por investigaciones, el 53 en especial, es el segundo asesinato con solo dos semanas de diferencia... Las chicas son: Abigail guerrero Pardo y Alison Soto Estrada..."

Los recuerdos me golpean de repente y la cabeza me vuelve a doler horrores mientras yo comienzo a marearme. Mi madre me abraza con fuerza, pero yo sigo con la vista fija en la televisión.

"Berenice, no importa lo que pase ve y sal de la escuela...

Corro hacia el otro lado de la puerta.

En teoría tiene candado, pero... Está abierto.

Escucho un grito ahogado y entro.

Ella saca la cabeza del agua y comienza a toser.

Es mi amiga y salto.

No la veo.

Creo que hay alguien más allá.

Siento un dolor agudo en la cabeza... "

Quiero llorar porque ahora sí que tengo miedo, creo que por primera vez desde la primera muerte estoy temblando de verdadero terror. Ha muerto una de mis amigas, y yo estuve ahí cuando pasó.

Estoy tan aterrada que las lágrimas ni siquiera son capaces de salir de mis ojos Pero siguiendo la línea de mis pensamientos agolpados, al menos puedo decir que yo no lo hice, había alguien más ahí...

Alguien que mató a una de mis amigas.

Dejo de temblar y ahora por fin soy capaz de comenzar a llorar, aunque justo ahora solo lo hago de coraje, dentro de mi corazón siento que no me importa lo que cueste, no importa cuánto tiempo tome, voy a averiguar que está pasando y por qué.

Han muerto once chicas hasta el día de hoy, y nadie ha hecho nada, no han revelado ningún dato coherente de las investigaciones, pareciera que ni siquiera lo están intentando...

Sé que la vida no es justa, pero aun así nadie merece morir tan joven.
Y Nadie tiene el derecho de arrebatar una vida.

Quiensea que lo haya hecho merece algo peor que la muerte, pienso con amargura.