☆Previamente☆

Julieta tenía 🙇🏻‍♀️
planeado todo con
los nuevos
sobrevivientes.

Marco no estaba 🙅🏼‍♂️
desacuerdo con el
plan, pero aceptó
con la condición de
incluir a Lizette.

Julieta no quería 😣
a Lizette en su
plan, pero después
de una intensa visión,
las cosas cambiaron.🤯

¿Qué pasara con los sobrevivientes? 🧐

Narra Daniel: Sobrevivientes peculiares.

Cuando desperté todo seguía muy oscuro, no había manera de saber si ya debía despertar o no. Me volteé hacía el otro lado y volví a quedarme dormido. En fin, no había nada que hacer en un lugar como este.

—Hey, despierta. —Alguien me estaba agitando—. Soy Lizette, ¡¡¡¡te vas conmigo!!!!

—¿Cómo? —Miré para comprobar y ahí estaba Marco, liberándome.

No dije mucho, solo observaba impaciente hasta que me quitaron las esposas. Eso me hacía feliz y también sentía mucha curiosidad sobre este lugar y las cosas que podía encontrar. Aunque, me daba mucho miedo pensar en las cosas que quizá no encontraría.

Me venía un flashback de la imagen de Mariana fuera de la cápsula mientras me veía con sus ojos llorosos y después mi familia y amigos ¿Ahora estaré solo en este lugar? ¿Qué pasó con mi mamá? Me dio un fuerte dolor de estómago ese último pensamiento, pero decidí dejar de pensar y concentrarme en mí por una vez.

—Listo. —Marcos me miró con una sonrisa y antes de irse dijo—: Ya vendrá Julieta por ustedes y los guiará al edificio de entrenamiento e investigación. Esperen aquí.

—Claro, guapo —Lizette estaba feliz y reía mientras hablaba—. Te extrañaré.

—¿Te gusta? ¿De verdad? —pregunté riendo—. Lástima que él parece no notarlo.

—¡Nunca me rendiré! Seré persistente y me mantendré cerca. Solo espero no ganar una nueva orden de restricción.

—¿Qué? —Su tono era muy sarcástico, pero no le presté mucha atención.

—Aunque, no creo que haya de esas todavía, ¿o sí?

—Síganme chicos. —La que parecía ser Julieta nos dio la orden.

—Ella es Renata, es super pesada —me susurró Lizette al oído. Vi que al lado de Julieta iba otra chica que vestía similar a Marco.

Observé bien el edificio, pude notar que era muy chico. Había un pasillo central y de cada lado podía ver divisiones con cortinas. Conté 14 cuartos y en cada uno había dos personas. Julieta se detenía a veces para seguir recolectando personas.

Ya éramos una fila de 12 personas. A la delantera iba Lizette y en seguida yo. Detrás de mí iba un chico chaparro, de tez muy pálida que hacían detonar sus ojos azules y cabellera negra. Cuando ya estábamos al final del pasillo, frente a una puerta, nos entregaron a todos un traje, el chico detrás de mí lo tomó con dificultad casi temblando, ¿estaba asustado o muy nervioso? Sentí un poco de pena por él.

—Así como están todos formados, tomen la mano de su compañero de al lado, no querrán perderse. —Nos pidió Julieta fríamente.

—Eh... —El chico pequeño junto a mí estiró su mano.

—Sí, claro. —Lo tomé de la mano y confirmé que sí estaba temblando, ¿pero qué podía hacer yo por él?

—Por lo menos háblense entre ustedes, díganse sus nombres, así no se perderán —dijo Julieta con tono sarcástico porque todos estaban muy serios.

—Soy Noah —obedeció al instante.

—Yo Daniel —le contesté.

—¡Yo soy Lizette! ¿Qué tal? —Mi compañera siempre tan espontanea se nos unió—. ¡Ya quiero salir de aquí! Ugh.

Cuando todos tuvimos nuestros trajes puestos y Julieta nos revisó a cada uno para asegurarse que los tuviéramos puestos correctamente, nos dejó avanzar. Frente a nosotros había una puerta metálica que se abrió en cuanto Julieta presionó un botón, la puerta nos dirigió a otro cuarto donde solo había otra puerta frente a nosotros.

El cuarto creaba mucho eco. Pude escuchar claramente las botas de Julieta que hacían ruido desde que entró, luego presionó el botón para cerrar la puerta detrás de nosotros que hizo un ruido muy fuerte y después escuché cada paso hasta que llegó al otro extremo y antes de que presionara el botón para abrir la otra puerta, yo agarré la mano de Lizette. Se notaba que ella estaba muy nerviosa.

Ahí entendí por qué tanto problema para hacer este cuarto, no querían que el gas entrara al cuarto grande. En cuanto abrió la puerta, una gran cantidad de gas negro nos rodeó, muy apenas podíamos ver, solo se veía una pequeña luz y entonces sentí como me jalaba la mano de Lizette.

No supe cuánto caminamos, pero los nervios de no saber en dónde estaba me hizo sentir el tiempo muy lento. El chico detrás de mí no paraba de temblar. Mi corazón latía horriblemente rápido. Me tensé aún más cuando nos detuvimos.

—Dos —alguien dijo en voz baja a mi lado mientras sentía una mano en mi hombro que me hizo dar un brinco y se retomó el camino poco después de eso, escuché después de unos segundos un sonido hueco y poco a poco se aclaraba mi visión.

¿En dónde estábamos?

—Veo que todos tienen caras de desubicados —Julieta hablaba y no podía evitar oírla con tanto eco—. Están en entrenamiento e investigación, ¿por qué? Aquí aprenderán a usar habilidades nuevas para poder sobrevivir y quizá encontrar una manera de solucionar este gran lío. Este edificio es de nivel 1, eso significa que empezarán desde lo básico.

Dicho esto, Julieta se retiró un poco para abrir un baúl y el chico de tez pálida se acercó a ella, y parecía preguntar algo, entonces Julieta se exaltó y respondió para todos.

—Todos ustedes tienen que entrenar, es obligatorio. No me importan sus enfermedades de lo que sea que sean y más los que parecen ser especiales.

—¿Especiales? —dije.

—Sí, ustedes. Sobrevivientes peculiares. Basta de charla, todos quítense los trajes y pónganlos en el baúl. —Me acerqué al baúl mientras me quitaba el traje. Lizette estaba a mi lado. 

—Daniel, estuvieron un año en ese gas y de repente aparecieron aquí. Todos aquí creen que tienen mucho potencial en esto de las habilidades. Cuando aparecieron en la cápsula había muchos destellos en las uñas de todos —dijo Lizette.

—¿Uñas? —No me pudo decir nada más porque Julieta comenzó a darnos más órdenes. Tenía cosas que explicarnos.

Nos sentaron a todos formando un círculo y nos pidieron que nos presentáramos. En ese momento yo estaba curioso y prestaba atención a cada detalle. Entonces me di cuenta de que casi todas las personas estaban en el mismo lugar que yo o cerca cuando apareció la cápsula.

—Me llamo Noah —tartamudeaba el chico de tez pálida—. Yo estaba acompañando a mi hermano a la Uni, cuando escuché un ruido y de pronto ya estaba en el hospital.

No podía dejar de sentir pena por ese chico, sentía que poco a poco nos hacía a todos ver lo indefenso y vulnerable que era. Me preocupaba que otros usaran esto en su contra.

—Soy Lizette, yo no entré a ninguna cápsula y ninguna cápsula me trajo aquí.

—Está bien, no entres en detalles si no quieres —le dijo Julieta, pero no era para que Lizette se sintiera mejor al no contarlo. En realidad, ella ya había asimilado lo que había pasado al 100% o eso noté por la manera en la que lo contó.

—No importa, es mi historia y supongo que así me conocerán todos mejor. Yo estaba en mi casa cuando el gas nos invadió. No tuve suerte como muchos aquí, que por alguna extraña razón ya estaban preparados para todo. Tuve que vagar entre el humo y la oscuridad con mi familia. Ah y un extraño que se nos unió. También debo mencionar que desde el momento que llegó el humo mi papá...

—Te topaste conmigo y yo te llevé al edificio del hospital, es todo —la interrumpió Julieta.

—¿Todo? Olvidas la parte en la que nunca encontré a mi padre entre todo el humo, el momento en el que mi hermana se lanzó a un pozo para no retrasarnos y cuando de la nada mi mamá y el extraño hombre que venía con nosotros no llegaron al refugio, porque según tú, ellos murieron y tuviste que dejarlos atrás. Ahora sí es todo.

¿Por qué la interrumpió? Y si había más en la historia que ella no quería que supieramos o solo no quería que escucháramos lo de su familia, ¿qué pudo ser? Después de todas las presentaciones nos condujeron a un cuarto donde había muchas literas y poco espacio entre ellas. Me acosté en una cama.

—Si levantan el colchón, verán un espacio hueco, ahí hay ropa que pueden usar. No se pongan exigentes, tenemos suerte de tener lo que tenemos. Mírenme a mí —nos dijo sacudiendo su ropa holgada—. ¿Me ven quejándome?

—¿¡Vestidos!? —Lizette se quejaba de lo que le había tocado justo después de que Julieta nos explicara que no había muchos recursos...

—Duerman. Mañana será un día pesado —nos dijo antes de darnos unas últimas instrucciones y se fue.

Me recosté en mi cama, yo estaba en la de abajo. Noah empezó a subir a la de arriba y Lizette estaba junto a mí. Había alguien arriba en la litera de Lizette, pero no alcancé a ver quién era.

Cuando desperté examiné de mejor manera el cuarto donde dormí, aunque honestamente, antes revisé que no hubiera ninguna esposa en ninguno de mis pies. El cuarto era muy pequeño y estaba lleno de literas. Como un salón de clases, los bancos acomodados en filas, solo que aquí eran literas y cada fila estaba muy pegada a la otra.

Mi litera estaba pegada a la pared, a mi derecha estaba Lizette. La miré, no podía dejar de ver las marcas.

Me levanté y caminé con cuidado. Como dije, las literas estaban muy pegadas y me daba miedo pegarle a alguien o tropezar con una de las patas de las literas. Salí del cuarto y entonces me encontraba en un pasillo. A mi derecha había un cuarto por el que ya habíamos pasado y detrás de este cuarto estaba el cuarto que conectaba a la salida de este edificio. A mi izquierda solo había un pasillo corto y al final una puerta. También estaban los cuartos de duchas, baños y comedor, todos estos conectaban con el pasillo.

Caminé lentamente a esta puerta, quería ver que era. Cuando llegué, la vi, era metálica y para entrar necesitabas un código y entonces sentí como alguien me picaba con su dedo en el brazo, miro a mi derecha y ahí estaba Julieta. Detrás de Julieta había un pasillo que no había visto y al final una puerta, supusé que era su cuarto.

—Está prohibido entrar ahí. —Me miraba con mucha autoridad.

—¿Qué hay ahí? —Claro que mi lado curioso no se iba a detener.

—Cosas. Si llegas a ser de alto nivel quizá descubras que hay ahí, pero por ahora, no puedo dejarte entrar.

—¿Cómo sabré que lo soy?

—En la selección, cuando todos despierten lo haremos.

Seguí a Julieta, pasamos por el cuarto de las literas y por lo que vi nadie había despertado, después seguimos caminando hasta el cuarto. Ahora que le prestaba más atención, estaba más grande. Tenía una estructura circular y había sillones como en forma de media luna.

—Siéntate mientras los demás vienen, empezaré a preparar las cosas —me decía mientras se alejaba a uno de los extremos donde había un baúl.

Pero yo quería saber y entender mejor este lugar, por lo que la seguí y le ofrecí mi ayuda. Ella no dijo mucho, tampoco protestó, así que me limité a estar detrás de ella y esperar alguna instrucción. Aunque, yo ya estaba bien con que me dejara ver que hacía.

No había mucha cosa que ver o entender de lo que había dentro del baúl. En su mayoría eran libros y las portadas eran de un solo color. Cada uno de los libros tenía portadas de color verde. Lo único diferente a un libro era una caja metálica, que fue lo que ella tomó de ahí. Cerró el baúl y se sentó en uno de los sillones.

—Bueno, ahora a esperar a los demás.

—¿Y si los despertamos?

—No hay prisa, al menos para nosotros.

—¿Hay más personas?

—Sí. Les dije que aquí es nivel 1.

Todo era raro, se ve tan vacío, pero ella dice que hay más personas.

10/10/2020

🌊🌊🌊

Digamos que la historia ya está tomando forma al fin 😂

Ya están los personajes juntos, listos para el drama 🤭

Opiniones? 🌚🌚🌚

Estaré viendo sus comentarios y muchas gracias a los que apoyan con sus votos ☆

Los leooo!

✌✌✌