Las palabras taladraban los oídos de Baekhyun, sus ojos se llenaban de temor al ver que más allá estaba la persona a la que una vez amo y luego le demostró el tipo de monstruo que era, su respiración comenzó a acelerarse, incluso quiso retroceder, pero algo lo detuvo. Sus pensamientos cuerdos se canalizaron en su mente cuando el tacto cálido en su mente le hizo levantar la mirada hacia el hombre alto junto a él, su marido, Park Chanyeol.

―No tengas miedo, yo estoy aquí para ti, ―le sonríe y luego lo atrae hacia sí mismo.

La nube de temor se disipó y sus ojos dejaron de ver a Seunghyun como aquel gigante que podría aplastarlo como una hormiga en cualquier momento, ahora lo veía claro. Incluso, se dio cuenta de que el hombre estaba sumamente lastimado, de hecho, tenía varios vendajes en la cara y los brazos.

―Sí, ―asiente para luego irse a sentar junto al abogado.

Se encontraba sentado con su traje gris, regalo de Chanyeol, mientras miraba con angustia al juez, quería que todo eso terminara; mantenía sus manos sobre sus muslos, a cada rato se secaba el sudor de sus palmas sobre la tela lisa.

Cada abogado expuso su parte, el suyo explicó las acusaciones y por otra parte el abogado de Seunghyun negó los hechos diciendo que ambos se encontraban teniendo una relación extramarital consensuada con él. Baekhyun quiso vomitar al escucharlo.

Escuchó a varias personas del pueblo que habían estado en algunas ocasiones donde su ex lo había perseguido y no podía entender que pasaba por sus cabezas ¿Por qué no lo habían ayudado? Baja la mirado sintiendo como su pecho ardía con enojo, cada palabra era como una bofetada.

―¿Por qué usted piensa que el señor Park Baekhyun también deseaba estar con el sospechoso si en las imágenes anteriormente vistas, el señor Park Baekhyun claramente estaba corriendo? ―pregunta su abogado a la tía de Hyorin, una de las personas que fue llamada a testificar.

―Bueno, habían tenido una relación antes de que se casará y todos en el pueblo decían que se seguían viendo, supuse que simplemente estaban jugando, ―se encoge de hombros con una expresión desentendida.

El corazón de Baekhyun se contrajo, él había llorado y suplicado al cielo porque alguien lo ayude, pero, aunque lo vieron, sacaron sus conclusiones erróneas. Cierra los ojos por unos segundos para poder respirar. Al pasar las siguientes personas, no pudo escuchar cosas muy diferentes, una lágrima bajo por uno de sus ojos al pensar que todos pensaban cosas tan aberrantes de él. Lleva una mano a su abdomen abultado queriendo obtener fuerzas de su bebé.

Después de un largo rato, finalmente el fue llamado al podio; se levantó acomodando su saco y después caminó despacio hasta estar arriba, traga saliva cuando ve los ojos mordaces del abogado de Seunghyun, desvía la mirada pestañeando lentamente para poder retener sus lágrimas. Empuña sus manos mientras aprieta sus labios para no flaquear.

Su abogado, el señor Kim Junmyeon, le dijo que explayará su motivo para estar ahí al juez. Baekhyun se sintió un poco nervioso, pero al ver a Chanyeol entre las personas, verlo sonreírle, pudo controlar su lengua para que no se enrede.

―Por supuesto, el señor Im Seunghyun ha estado acosándome por varios meses, ―traga saliva y sigue hablando sobre todo lo que había sucedido, incluso tuvo que detenerse en partes porque sus lágrimas querían caer al recordar.

Cuando finalmente terminó, su abogado comenzó a hacerle varias preguntas que había repasado con él el día anterior, después fue el turno del abogado de Seunghyun para interrogarlo, Junmyeon ya le había dicho como debía contestar y si no estaba seguro entonces que simplemente dijera que no sabía.

―¿El señor Im Seunghyun y usted señor Park Baekhyun tenían una relación amorosa? ―empieza.

―Antes de casarme, sí, ―responde seco.

Continuaron las preguntas a las que respondió con sinceridad, por momentos el abogado quería meterlo en alguna encrucijada, pero supo desenvolverse bien. Poco a poco el miedo se iba yendo así que contestaba con más seguridad hasta que finalmente terminó el interrogatorio y pudo bajarse del podio.

Volvió a su silla junto al abogado y soltó todo el aire que no sabía que había estado reteniendo. Cuando fue el turno de Seunghyun inventó mentira tras mentira que dejó a Baekhyun sin habla, realmente no entendía porque se había enamorado de aquella persona, no entiende incluso la razón para haberse querido casar con él. Probablemente su vida sería un caos si se hubiera ido con él.

Las horas pasaban lentamente y se sentía un poco ahogado así que por momentos se venteaba con alguna hoja de papel o tomaba agua, aunque quizá era algo más que el calor, quizás era su deseo de salir de ahí y jamás volver a ver a esas personas.

De hecho, Hyorin también estaba siendo demandada como cómplice, aunque ella le había estado mandando miradas de odio puro, Baekhyun solo la ignoraba, no tenía ganas de amargarse más de lo que ya estaba; por un momento tuvo nauseas, pero las supo manejar y afortunadamente había terminado la sesión, se registro otra para el día siguiente.

―Es molesto, estoy cansado, ―dijo llegando a casa.

―Tranquilo, pasará rápido, ―Chanyeol besa su mejilla para luego tomar su mano y llevarlo al jardín donde sus lirios estaban creciendo.

―Es hermoso, ―susurra viendo la puesta de sol al fondo mientras el rojo de sus flores brillaba denotando su vitalidad, ―perdón, ―susurra mientras se sienta en el césped.

―¿Por qué? ―pregunta evidentemente sorprendido.

―Por mi culpa está sucediendo todo esto... Si tan solo le hubiera dado una oportunidad a nuestro matrimonio desde el inicio, ―su voz se rompe y cierra los ojos mientras un par de lágrimas se deslizan. ―Lo siento, ―susurra.

―No te preocupes, ―lo abraza para luego besar su cabeza, ―ahora lo haces y pronto tendremos un bebé que hicimos con amor, ―sopla unas pequeñas flores que habían volado hasta la cabeza de Baekhyun.

―Nuestro bebé, ―sonríe un poco y respira hondo cuando el viento trae a su nariz el aroma a sus flores. ―Ya quiero que acabe todo esto para dedicarnos a nosotros, ―su cabeza es puesta en el pecho de su marido.

―Verás como esto será un mal recuerdo, ―abriga a su esposo con sus brazos grandes y luego ambos se quedan en un silencio cómodo, simplemente observando el entorno.

Paso casi una semana y entre papeles, el juzgado y las náuseas, finalmente había terminado, finalmente los ojos de Baekhyun ya no soltaron lágrimas, solo sintió paz cuando escuchó las palabras del juez.

―Cinco años por acoso sexual, ―fue parte de todo lo que dijo el juez, ―...tres años por complicidad para la señorita Kim Hyorin...

Baekhyun solo pudo escuchar lo más importante y el resto se perdió en la estancia, estaba realmente feliz ya que finalmente todos habían visto a lo largo de esa semana que en realidad él había dicho la verdad, que Seunghyun lo había molestado demasiado, que Baekhyun le había sido fiel a su marido, además que nadie podría negar la paternidad de su bebé. Algunas de las personas que habían abogado por el mayor y la chica ahora se encontraban avergonzados.

La familia Byun y Park dieron un grito de alegría cuando salieron del juzgado. Chanyeol se encontraba abrazando a su esposo mientras bajaban las gradas, algunas personas se disculparon con Baekhyun, pero este solo paso de largo, jamás olvidaría que, aunque esas personas habían visto lo que le sucedió, nadie fue capaz de ayudarlo a excepción de Kyungsoo.

―Me alegra que todo esto haya pasado, ―dice Luhan cuando se apartan del grupo, ―perdón por no haber podido hacer nada, no lo sabía hasta que Sehun me lo dijo, ―susurra apenado mientras toma las manos de su amigo.

―No te preocupes, solo lo sabía Kyungsoo porque un día lo vio, como dijo en el podio, ―le contesta y desordena el cabello de Luhan.

Luego de eso todos se fueron a la hacienda del señor Park donde celebraron una gran fiesta, Baekhyun por su parte estaba sentado comiendo un pedazo de pastel ya que sus pies dolían un poco y estaba cansado, además su barriga crecía un poco más rápido de lo usual, aunque Baekhyun no le prestó demasiada atención, pensaba que al ser Chanyeol tan alto, quizá su bebé también era grande.

―¿No vas a bailar? ―pregunta Kyungsoo mientras se sienta junto a Baekhyun, ―te ves un poco pálido.

―No tengo ganas, ―sacude su cabeza y da otra mordida a su pastel, ―por eso estoy comiendo algo de dulce. ―Luego bebe un poco de jugo de sandía. ―¿Y tu bebé? ―lo mira atentamente.

―Jongin lo tiene, ―señala a la pista de baile donde el alto se encontraba bailando con su bebé, ―no renunció a que lo perdone.

―Dime la verdad ¿Es suyo? ―pregunta curioso mientras lame sus labios llenos de betún.

Kyungsoo se quedo en silencio así que Baekhyun tomo un palillo de dientes para comenzar a pinchar la mejilla del otro doncel, Kyungsoo se aparta rodando los ojos no queriendo responder. De repente vino Luhan a sentarse frente a ellos.

―¿Qué paso? ¿Por qué Soo parece irritado? ―pregunta sonriente mientras agarra un poco de pastel de la torta que estaba en el centro.

―No quiere decir si el bebé es de Jongin o no, ―Baekhyun hace un puchero y lame su cuchara llena de crema.

―Pero si son como dos gotas de agua, ―Luhan se ríe y ambos se miran para luego dirigir sus ojos al hombre alto que seguía con el pequeño quien gorgojeaba feliz. ―¿Verdad que es suyo? ―sonríe de medio lado a Kyungsoo.

―Ustedes tienen la lengua muy larga, ―resopla, ―sí, sí, ¿felices? Es suyo, ―deja caer sus hombros y suspira.

Se escucha un pequeño grito por parte de los donceles y Kyungsoo se tapa los oídos pensando en que debería conseguirse nuevos amigos, aunque prefería no correr riesgos conociendo gente nueva. Su mirada se levanta hacia Jongin y este último le sonríe mientras levanta la pequeña manito del bebé para saludarlo.

―Mira como se ven, son tan lindos, ―Luhan chilla lo que provoca que Kyungsoo se sonroje.

―Awww me recuerdan a las novelas, ―Baekhyun le sigue.

―Cierren sus bocas, ―demanda y se cruza de brazos.

―Ya, ya, no te enojes, ―Baekhyun levanta sus brazos para estrechar a Kyungsoo quien solo se dejo rodando de nuevo sus ojos.

―Nuestros niños se llevarán muy bien, ―Luhan se levanta tocando su abdomen. ―Sehun me dejo encargando de nuevo, ―dice feliz.

―Oh, ¿Cómo cuidas a tantos niños? ―Baekhyun se sorprende, ―yo tengo un poco de miedo de no poder cuidar bien al mío.

―Es porque es el primero, no te preocupes, si no puedes hacer algo solo llama a Kyungsoo o a mí, ―mira al de ojos grandes quien asiente dándole la razón.

Después de eso Sehun vino para llevarse a su doncel a bailar, Kyungsoo se fue porque Jongin comenzó a tener problemas ya que el bebé había empezado a llorar porque tenía hambre. Baekhyun se quedo solo, simplemente comiendo su pastel y bebiendo su jugo de sandía con miel. Fue entonces que Chanyeol vino con un plato grande de chancho asado y Baekhyun se puso más feliz.

🌷🔥

―¡Chan! ―llama mientras se despierta, ―Channie, ―le mueve empujándolo.

―Mgh, ―gruñe dándose la vuelta sin dar un atisbo de despertar.

―Amor, despierta, ―hace un puchero y luego aprieta la nariz de su marido. ―¡Chan!

―¡¿Qué paso?! ―se sienta mientras mira para todos lados y siente como su corazón se acelera, ―¿Ya viene el bebé? ―toma en brazos a Baekhyun revisándolo.

―No, bobo, recién tengo cinco meses, ―rueda los ojos y luego se cruza de brazos. ―Lo que sucede es que... ―baja la mirada y juguetea con sus dedos, ―tu bebé quiere pizza, ―susurra.

―¿Me despertaste... por pizza? ―arquea una ceja mientras lo mira atentamente. ―¿En serio, Baekhyun?

―Sip, ―asiente y luego lo mira con su usual rostro de cachorro.

―Oh, ―respira profundo y luego siente como su corazón se derrite al ver a su pequeño embarazado con sus ojitos brillantes tristes. ―¿Dónde se supone que la consiga? ―levanta sus cejas.

―No sé, ―se encoge de hombros y sonríe travieso.

―Duerme, Baekhyun, ―se acostó y se arropo ignorando los reclamos de su esposo.

―Eres malo, ―lloriquea mientras tapa su rostro con sus manos y luego su llanto se escucha en la habitación. ―Eres malo con nosotros, ―lo golpea con una almohada.

Chanyeol le detuvo la mano para que dejara de hacerlo, cierra los ojos mientras agarra paciencia de alguna manera y se dice a sí mismo que era normal, ya que no era la primera vez que Baekhyun hacía un berrinche así que le pregunto a algunos familiares portadores quienes le dijeron que eso era común en los embarazados.

―¿De dónde voy a sacar una jodida pizza a está hora? ―sujeta las muñecas de Baekhyun quien estaba con ojos llorosos. ―Razona.

―Pero... Pero, ―sus lágrimas gruesas bajaban como cascadas, ―tu bebé quiere.

―Mi amor, por favor duerme, mañana te comprare la pizza que desees, ―suelta delicadamente sus muñecas y lo jala en un abrazo. ―No es bueno que estés despierto a esta hora, ―deja varios besos en su cabeza.

―Es que tengo el antojo ahora, ―reclama, aunque no se suelta del abrazo. ―Tu bebé quiere... ―bosteza y sus ojos se cierran poco a poco, ―pizza, ―dice entresueños.

―Duerme, mi pequeño, ―comenzó a tararear una canción mientras lo mecía suavemente hasta que sintió el peso muerto de su esposo, ―ahora a dormir. ―Dice para sí mismo mientras se recuesta con Baekhyun acostado en su pecho. ―Bebé berrinchudo, ―susurra antes de cerrar sus ojos para descansar.

🌷🔥

—Cuidado, parece que vas a reventar, —se burla Kyungsoo cuando lo ve llegando a su hacienda.

—Muy gracioso, —rueda los ojos mientras toca su muy abultado vientre. —Mañana me harán otra revisión y sabré si es niño o niña, —dice con tono cariñoso.

—Me alegra, —sonríe mientras mueve un cucharón de madera en un olla ya que estaba preparando mantequilla, —cuando venga tu niño a jugar con el mío le daré muchas golosinas, —le da un pan de miel a su amigo.

—Lo mismo con el tuyo, —le guiña un ojo y le da una mordida a su pan.

—Gracias, —coloca unas platos en la mesa con pan, —¿Cómo así por aquí?

—Chan tenía cosas que tratar con Jongin, —se encoge de hombros, —fuimos a la hacienda de él, pero no estaba así que supusimos que estaba aquí.

—Es como una garrapata, —rueda los ojos, —ya ni sirve echarlo, se queda afuera lamentándose.

—Mamá dice que así son los hombres, —toma otro pedazo de pan.

—Supongo, por cierto ¿Qué tal va tu embarazo? —pregunta mientras coloca mermelada recién hecha en la mesa.

—Bien supongo, aunque creo que no es normal que mi barriga esté tan grande, —frunce el ceño mientras embadurna el pan en mucha mermelada. —Además no patea, —se aflige.

—No te preocupes, ya lo hará, además seguro estás muy grande porque es hijo de Chanyeol, —se encoge de hombros.

—Supongo, —hace un puchero, —tengo un poco de miedo por el parto, —sus mejillas se ensucian.

—Deberías, duele mucho, —levanta sus cejas, —por eso mi hijo será el único.

—Chan dijo que quería que le diera muchos niños, —junta las puntas de sus dedos, —yo también quiero muchos bebitos.

—Eso dices porque aún no has parido, —se ríe y luego le da una mordida a su pan.

—Malo, —infla sus mejillas.

Después de comerse casi todo el pan de Kyungsoo y lamer el cuenco de mermelada, Chanyeol llegó junto a Jongin, ambos aguantaron la risa cuando vieron a Baekhyun con las mejillas sucias de comida y llenas de esta, como una ardilla.

—Ven acá, muñequito, —Chanyeol lo jala y limpia su cara con una servilleta. —Tenemos que ir a casa, —lo mira a los ojos.

—Bueno, marido, —traga la comida de sus cachetes y luego se va a despedir de Kyungsoo, también de Jongin.

Ambos fueron de vuelta a casa donde Chanyeol y Baekhyun se mantuvieron acurrucados viendo películas mientras comen pastelitos. Desde el cuarto mes de embarazo, Baekhyun había comenzado a comer demasiado.

—¿Ya hiciste la lista de cosas para la fiesta? Es en dos meses, —susurra Chanyeol mientras muerde un pastelillo.

—Aun no, pero pronto comenzaré a planearlo, —se acurruca en su pecho, —por cierto, tengo que comprar más ropa, ya no me queda la que tengo, —baja la mirada a sus muslos gruesos.

—No te preocupes, mañana luego del obstetra, iremos al centro comercial, —frota su nariz con la del doncel.

—¿Crees que estoy gordo, Channie? —su boquita de fresa se frunce en un mohín.

—No, muñequito, solo estás embarazado, tu cuerpo crecerá un poco más porque cargas a un precioso bebé adentro, —besa sus ojos, —aunque es cierto que últimamente has estado comiendo muchos dulces y comida chatarra. —Ve como su esposo frunce su tierno rostro, —nada de caritas manipuladoras, soy tu marido así que me obedecerás, ya no comerás tanta grasa y azúcar.

Baekhyun brota su labio inferior mientras sus ojos se aprietan en un posible llanto así que Chanyeol rápidamente toma sus labios en un beso profundo que lo dejo mareado. Últimamente él hacía eso cada vez que Baekhyun empezaba a hacer un berrinche.

Al día siguiente ambos fueron al médico dónde le revisaron a fondo, Baekhyun estaba muy ansioso por saber si tendría un hijo o hija, aunque sabía que amaría lo que sea que fuera.

—Veamos como está, —dice el galeno de buen humor. —Oh, —pestañea mientras observa la pantalla.

—¿Pasa algo malo con nuestro hijo? —pregunta Chanyeol preocupado.

—No, es que, —se coloca sus lentes y luego levanta sus cejas. —Hay una pierna extra, —frunce el ceño.

—¿Qué? —Baekhyun se sorprende.

—Haré un vista en 3D, —dice y la imagen cambia mostrando lo que no entendía.

—¿Entonces? —Chanyeol se estaba impacientando.

—Su pequeño no está solo, —sonríe mostrando sus arrugas, —tiene varios hermanitos.

—¿Hermanitos? —la pareja levanta sus cejas sorprendidos.

—Sí, quizá no se veía porque uno de ellos tapaban a los otros.

—¿Otros? —Baekhyun tapa su boca.

—Señores Park, sus bebés tímidos los saludan, son tres en total.

—¿Tres? —Chanyeol deja salir una sonrisa genuina y luego agarra las mejillas gorditas de Baekhyun para besarlo. —Gracias, gracias, te amo, —lo abraza con fuerza.

Baekhyun aún se encontraba sorprendido y solo pudo pensar en el parto, no sabía cómo haría con tres bebés. Siempre había pensado que era uno así que no había estado preparado psicólogicamente para ello, pero no por eso estaba menos feliz, él amaría a todos los bebés que Chanyeol pusiera en su matriz.

—¿Todos son niños o niñas? —pregunta el alto mientras se aleja un poco.

—Son tres preciosos niños, —les da la noticia.

Al llegar a la casa, Chanyeol le dejo comer unas donas rellenas, pero amenazó diciendo que eran las últimas que le dejaba comer. Baekhyun asintió con sus mejillas llenas de azúcar impalpable.

A pesar de la glotonería de Baekhyun, este comenzó a dejar el azúcar para comer más hortalizas y frutas. No quería que sus pequeños se enfermeran por su causa.

Un día estaba en el jardín de lirios regando las flores cuando de repente sintió algo que lo hizo detenerse. Lleva una mano a su barriga mientras una sonrisa se dibuja en su rostro.

—¡Chan! —deja caer la regadera mientras camina lo más rápido que sus pies hinchados le permitían. —¡Channie!

—¿Qué sucede? No corras, podrías caerte, —Chanyeol deja el pequeño saco de maíz a un lado y camina hacia su esposo.

—Channie, Channie, —dice emocionado mientras toma la mano grande de su marido, —siente, —su voz agitada estaba cargada de emoción.

Chanyeol acomoda su sombrero de paja con su mano libre y frunce el ceño en concentración para poder saber de qué hablaba su esposo; pasaron unos segundos y finalmente pudo hacerlo, sintió un ligero golpe así que rápidamente levantó la camisa de Baekhyun para poner su mejilla contra el abdomen.

—Mi bebé, cuál de todos será, —susurra para luego dejar un montón de besos en la piel, —no hagan sufrir mucho a mamá, —sonríe para luego abrazar la cintura muy ancha.

—Se siente muy bonito, —Baekhyun toma las manos de su marido y luego ambos comparten un beso. —Es como que cálido y no sé, —ríe sin poder controlar sus emociones.

—No puedo creer que seré papá de tres niños cuando apenas acabo de cumplir dieciocho, —rie suspirando, pero solo se encoge de hombros y entrelaza sus dedos con los de Baekhyun.

—Y yo diecisiete, —saca la lengua y ambos caminan hacia el gallinero, —voy a pensar en los nombres de ellos.

—Bueno, —acepta y acomoda a su esposo en una banca de madera.

Pasaron la tarde con Baekhyun acompañando a su marido por toda la granja mientras parloteaba sobre cómo iban a jugar sus niños en el lugar, además de que Otto y Lassie los iba a proteger.

Por último, en la noche Baekhyun durmió acurrucados pensando en que su padre había hecho una buena elección, le estaba eternamente agradecido por haberle dado un gran marido.

—Te amo, —susurra Baekhyun intentando acomodar su gran barriga mientras Chanyeol lo abraza por la espalda, —agradezco que papá me haya hecho casar contigo, —susurra sintiendo como Chanyeol colocaba un brazo en su cintura.

—Y yo a ti mi, pequeño, —besa su nuca, —hay que darle un gran regalo a mi suegro.

—¿Qué crees que sea bueno? —pregunta y bosteza.

—Nada puede ser lo suficientemente bueno, él ya me dió lo mejor que tenía, —sonríe mientras cierra sus ojos. —A ti.

Chanyeol comienza a escuchar la respiración pesada de su esposo lo que le confirmaba que ya se había quedado dormido, lo abraza mientras mira por la ventana a la luna.

Aún recuerda su boda, las lágrimas de Baekhyun, sabiendo que eran de tristeza porque no quería casarse con él, pero aún así no se rindió queriendo que Baekhyun no tenga una vida tan mala a su lado. Poco a poco fue conociendo como era, lo que le gustaba, lo que odiaba y como solía hacer pucheros cuando quería conseguir algo.

Lleva una mano al vientre enorme dónde descansaban sus pequeños, pequeños que fueron hechos con amor. Jamás quiso forzar a Baekhyun ya que cada vez que la piel de seda fuera tocada, quería que su doncel lo recordara con cariño.

Sus ojos comienzan a cerrarse cuando piensa en que habían pasado muchas cosas ese año, algunas buenas, otras desagradables como cuando por rumores ajenos casi rompe lo más hermoso que tenía, su matrimonio. Sin embargo, a pesar de todo ahora estaban ahí los dos, durmiendo juntos, a la espera de la llegada de sus bebitos, sus primogénitos.

~Final~

Gracias a todas las personas que me apoyaron con vistas, comentarios y votos.

No se preocupen, habrá un epílogo.

Yo quise que este fic fuera fluff, pero no lo conseguí, lo siento, no soy buena con el romanticismo.