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¡Mierda!.

El azabache se ponía en pie en plena clase ganándose la atención de todos.

—¿Mi clase le parece una mierda, joven Kim? —cuestionaba el profesor con cara de pocos amigos—. Le recuerdo que usted eligió esta carrera.

Taehyung quería desaparecer, que la tierra lo tragase, volverse invisible o simplemente no haber actuado como un adolescente hormonal.

—Lo siento señor Yunho. Necesito retirarme —exclamaba juntando sus cosas sin pensar claro.

—Espero que alguien tome apuntes por usted —soltaba con tono despreocupado aquel profesor enojado con la vida.

Si, si tenía quien le pasará apuntes, tenía a tres o cuatro comiendo de su mano, así que salía a las apuradas de aquel salón. Ese día había salido con el auto de su padre para llegar rápido a su turno en la librería a la tarde noche. A las corridas se metía en el mismo mientras soltaba la mochila en el asiento trasero.

Con manos temblorosas, re leía nuevamente el mensaje. No decía mucho, a decir verdad, no decía nada más que su nombre. Volvía a revisar el historial de lo que le había mandado entre la madrugada y mañana de ese día.

—¿Taehyung? solo Taehyung...¿Que se supone que diga? —rascaba su cabeza.

Con nerviosismo recordaba las palabras de sus amigos, Minho había confirmado que volvería y Vernon había ordenado que dejará fluir las cosas.

Bueno, estaban fluyendo ¿o no?, con dedos temblorosos tipeaba su respuesta.

Contestaba inhalando y exhalando de forma exagerada.

«¿Por qué soy tan idiota?»

—Ay, mierda...me quiere ver. Me quiere ver, joder —exclamaba gravemente entusiasmado.

No podía dejar de reír y sacudir el teléfono de la emoción.

Taehyung ya se encontraba fantaseando en como sería aquel primer encuentro y rápidamente recibía repuesta.

Taehyung golpeaba su cabeza contra el volante y respondía que si podía hablar, aunque ya se imaginaba sobre que y se sentía un imbécil.

Su teléfono comenzaba a sonar con el nombre de Seok en la pantalla. Con manos temblorosas y aclarando su garganta respondía.

—Seok —estaba nervioso, pero su voz seguía siendo poderosa y masculina.

Era naturalmente grave y una exquisitez escucharlo. Los cabellos en la nuca del castaño al otro lado de la línea se habían erizado al oír su primer nombre.

—Taehyung, espero no molestar —soltaba con voz más dulce que en aquellas llamadas sucias.

Eso había sido un golpe bajo para Taehyung que se mordía la lengua para no llevar la conversación a otro lado.

—No, tranquilo —aclaraba nuevamente su garganta—. ¿Por qué dices que te malinterprete?

—Oh, si —una risita de nervios era soltada por el mayor, la curiosidad de Taehyung crecía cada vez más al notar la dualidad que el tipo se cargaba—. Creo que di a entender como que quería verte y en realidad me refería a... —tragaba el nudo en su garganta—, si tu perfil estará esta noche disponible. No quiero volver a robarte de tu tiempo libre para mis sucios fetiches.

Ah, genial, el tal Seok estaba siendo considerado con su trabajo. Mientras tanto él venía con una obsesión de los mil demonios y quería rogarle ahí mismo de verse, convencerlo, hacer lo necesario para conseguir lo que quería. Al fin y al cabo el tipo si le estaba prestando atención.

Un suspiro sonoro se le escapaba sin querer al azabache.

Al otro lado SeokJin sentía que realmente lo estaba molestando y tenía la necesidad de cortar el llamado, pero ya sería demasiado una tercera vez.

—Lo siento —atinaba a decir—. Creo que no quieres decirlo, pero si estoy molestándote.

Taehyung no sabía si sonreír por lo adorable que el tipo se oía o gritar de la jodida frustración que estaba sintiendo.

—No molestas, Seok y mi perfil si estará disponible esta noche —soltaba con tono de voz claramente decepcionado.

—Oye, yo~...

—No quiero sonar acosador, pero... —Taehyung lo interrumpía. Nuevamente estaba siendo impulsivo—. ¿Cómo puedo convencerte para que me regales unas horas de tu tiempo en persona?.

Ahora el que suspiraba era SeokJin, el azabache tenía el presentimiento de que en cualquier momento volvería a cortarle la llamada.

—Es complicado —soltaba para sorpresa del menor.

Millones de suposiciones pasaron por la cabeza de Taehyung.

—¿Eres casado, con hijos y heterosexual? —decía intentando no sonar melodramático.

Una risa más sonora y adorable se le escapaba al CEO para sorpresa de ambos. Joder, esa conversación estaba siendo totalmente diferente a las otras y sin embargo, les encantaba a ambos.

La voz del otro se había vuelto un vicio, sin necesidad de palabras sucias.

—Es algo más profundo que eso ¿Alguien como tú no tiene novio? —preguntaba curioso.

Si bien él estaba casado, para Jennie ambos eran solteros ¿Este chico sin embargo tenía alguien a quien le importaba y viceversa?.

—No, Seok. Mis amigos dicen que me aburro rápido y soy difícil de conquistar —decía con un tono más divertido.

—¿Entonces para que verme? Quizás y mis dientes chuecos no vayan a gustarte —decía Seokjin divertido.

Extrañamente el dolor de cabeza se había ido y todo gracias a la simple conversación que estaba teniendo con el tal Taehyung.

—Estoy seguro de que no tienes dientes chuecos, solo quieres matar mi interés para que no te insista en vernos —de nuevo la voz apagada del menor.

—¿Estás haciendo puchero? —soltaba SeokJin.

—Si, y nunca sabrás lo tierno que me veo cuando los hago, porque no quieres verme —exclamaba haciendo otro puchero más.

—No me hagas entrar en ese juego, Taehyung —soltaba en un susurro.

—¿Cuál juego, Seok? —la voz de ambos se había vuelto más grave.

Nuevamente estaban coqueteando.

—Hacerme sentir curiosidad en como te ves, como eres —susurraba.

Taehyung no podía verlo, pero sentado en su oficina SeokJin aflojaba su corbata ante el calor que la voz grave del telefonista le estaba haciendo sentir.

—Tú me apodaste niño bonito. Si me permites ser arrogante, lo soy —exclamaba en tono grave.

—No me hagas eso, no puedo permitírmelo

—¿Acaso estás en una cárcel de gays o que? Si me pides una foto te la enviaré, solo para ti —decía de forma ronca y sensual.

—Yo no te enviaría ninguna foto mía. Sería injusto para ti —exclamaba con nerviosismo.

Para ser honestos aquella propuesta le había encantado. Poder ver quién era el dueño de aquella voz le estaba robando el sueño, recibir fotos quizás sería buena idea.

—Hagamos una cosa, llamame esta noche —exclamaba sonriente—. Mi perfil estará disponible para que gastes tu dinero, luego de nuestra charla te enviaré una foto. Si tú quieres o no hacerlo, está bien por mí. Estoy seguro de que no tienes dientes chuecos y estoy seguro de que eres mi tipo.

SeokJin soltaba otra risa que sonaba aún más seductora.

—Por dios, eres terrible —decía atónito ante lo decidido que el tal Taehyung podía llegar a ser.

—No sabes cuánto —y por más que quisiera seguir hablando había decidido hacerse el interesante—. Debo irme Seok, me encantaría seguir esta charla normal, pero tengo cosas que hacer. Esperaré tu llamado y al finalizar este, te enviaré mi puchero por no acceder a una verdadera cita conmigo ¿Puedes recibir fotos sin inconvenientes? —preguntaba.

Un silencio al otro lado de la línea se formaba.

—Si, si puedo —en su oficina SeokJin moría de curiosidad—. Puedes enviarme todas las fotos que desees.

Taehyung sonreía feliz al respecto, no era una cita, pero se encargaría de ser sutil y volverlo loco. No se iría de esta vida sin haber tenido al menos un encuentro con el dueño de aquella sensual y suave voz masculina.

—Hablamos luego, estaré listo para ti. Eres el único que me la pone dura y me hace correrme. Te esperaré con ansias —exclamaba apoyando su nuca en el asiento y a duras penas se despedía—. Adiós, hermoso.

SeokJin miraba su teléfono, el tal Taehyung realmente le había cortado a él, aunque no había sido brusco, pero quería hablar un poquito más de lo que sea. Pero no, el tipo lo había dejado con las ganas.

Reía sorprendido ante el hecho de que aquel desconocido le había cambiado el humor por completo. Pero no debía ceder a la tentación de verlo, era peligroso, sin importar que Taehyung parecía ser del tipo que guardaría el secreto.

O quizás su subconsciente quería convencerlo de aquello para planear una cita y sacarse las ganas.

Pero aun así, Taehyung podría no atraerle físicamente. Aunque Jennie tenía razón, el físico no lo era todo para él, la conexión más allá de la atracción física era importante.

Podían pasar millones de cosas, el tipo si lo ponía duro y lo ayudaba a correrse, pero que tal si al verlo la chispa no fluía, eso podría arruinar el sexo. O que tal si la chispa física sucedía, el tipo ya lo podía con su voz, pero a la hora del sexo simplemente no funcionaba.

No sería la primera vez, en secundaria sentía una increíble atracción física por un chico más grande que él, vivían comiéndose con los ojos, desesperados por concretar luego de sesiones de besos desenfrenadas, pero a la hora del sexo, joder.

SeokJin no siquiera podía tener un orgasmo porque simplemente no podía conectarse al tipo y no lo entendía. Así que había muchas posibilidades de que ese encuentro pudiera fracasar. Como el empresario que era, pensaba en todas las variables.

«O bien simplemente puede funcionar, jodido pesimista»

Descansaba su cabeza en su silla y la encendía para recibir un masaje, pero inmediatamente el sonido de su teléfono lo sacaba de trance.

SeokJin veía la foto con sumo cuidado, era imposible. El tipo no podía ser dueño de esa voz y encima poseer esos labios.

—Ay, joder. Me va a volver loco —murmuraba cerrando sus ojos y abriéndolo para ver nuevamente aquella foto.

Tan inocente, solo la imagen del puchero que Taehyung solía hacer cuando no conseguía lo que quería, cuando estaba triste, desganado o aburrido, solo eso había enviado.

—Tiene un jodido lunar adorable en su nariz —murmuraba viendo la foto en detalle.

El tipo se cargaba unos labios carnosos con los cuales el CEO estaba seguro de que soñaría con probar. Esa cualidad si la buscaba en un hombre, a SeokJin le encantaba morder.

«¿Cómo serían sus besos?»

No, no podía adentrarse a aquella fantasía, solo debía conformarse con los llamados y quizás algunas fotos. Más no, imposible.

«Mierda, SeokJin»

Ambos daban por sentado que estaban jugando con fuego. Taehyung quería quemarse y muy en el fondo, SeokJin también.

2/? 💕

Puede que haya salto en el tiempo, puede que no. No pretendo que EROTOFONOFILIA sea demasiado larga.

Tampoco quiero que se asusten o sientan que está vacía...🙃

¿Que piensan? Va gustando o no?

Con amor niñita Nany 💜