Capítulo 3:

—De que milagro hablan —dijo YoonGi confundido

—Estas atendiendo clientes nuevamente, luego de dos años sin hacerlo —comento Hoseok viendo a su amigo

—¿Tenía dos años sin hacerlo? —pregunto YoonGi sorprendido, no se había dado cuenta que hacía mucho que no le hacía de mesero

—Si jefe —asintió Jenn, sonriendo levemente— Por eso es que todos estamos tan sorprendidos

—Yo no me había percatado —dijo YoonGi algo apenado

—No te preocupes amigo —dijo Jin regalándole una leve sonrisa— Dime que ordenaron para ir a prepararlo

YoonGi le dijo a Jin lo que sus clientes habían pedido y este se retiró junto a Namjoon para preparar el pedido. Ese día YoonGi siguió como mesero hasta el cierre de la cafetería, pues había recordado lo bien que se la pasaba atendiendo el mismo a sus clientes, y se cuestionaba el hecho de haberlo dejado de hacer por tanto tiempo. Volvió a su oficina para ver cómo estaba Lindo Gatito y este seguía recostado donde lo había dejado jugando con uno de sus juguetes, estaba dándole su medicamento cuando a la oficina entro Hoseok y sentándose en uno de los sofás dijo:

—Fue bueno tener fuera de esta oficina hoy hermano —sonrió ampliamente

—Me sentí bien fuera de ella —dijo YoonGi con sinceridad

—¿Te quedas a cenar?, hay partido de Futbol y vamos a quedarnos a verlo aquí —pregunto Hoseok con esperanza de que su amigo aceptara

—¿Quiénes juegan? —pregunto YoonGi, concentrado en lo que hacía con el gatito

—Barcelona vs PSG, tenemos esperanza de que el Barcelona remonte el cinco a cero —respondió Hoseok

—Van a tener que echarle ganas para lograr eso —comento YoonGi sonriendo levemente— Me quedare, no tengo ganas de llegar temprano a casa hoy

—Definitivamente hoy caen vacas de cielo —dijo Hoseok sonriendo ampliamente— Regresare con los demás para cerrar y preparar todo para el partido

—Yo los alcanzo en un rato —comento YoonGi, viendo como su mejor amigo salía de su oficina

YoonGi termino de darle los medicamentos al gatito y con este en sus brazos dejo la oficina para reunirse con sus amigos y compañeros de trabajo, quienes estaban muy emocionados de que por fin su jefe había aceptado que darse con ellos.

Desde ese día todo cambio en la cafetería, esta volvió a recuperar aquella aura alegre que solía tener antes, también la música volvió alegrando y dándole color al ambiente del lugar, incluso YoonGi volvió hacer el mismo que era antes del accidente de su familia, aquel gatito que había encontrado lo había hecho superar aquel trágico suceso que lo había sumergido en la depresión.

Para YoonGi y sus empleados se había vuelto costumbre tener al gatito en la cafetería e incluso para los clientes también pues el animalito mayormente se pasaba recostado en el mostrados junto a donde Hoseok solía cobrarles a los clientes, llevándose constantes caricias y mismo de estos quienes le alegraba la presencia del animalito en el lugar.

Pero extrañamente hoy YoonGi no encontraba a su Lindo Gatito por ningún lado, lo había traído como de costumbre al trabajo, pero este no estaba en ninguna parte, ni siquiera sus empleados lo habían visto y eso tenía triste y desesperado a YoonGi, no quería aceptar que había perdido a aquel animalito que le había devuelto la alegría después de años.

—¿Lindo Gatito no ha regresado? —pregunto a Hoseok, que en este momento estaba haciendo el cierre de caja pues se acercaba la hora de cerrar el lugar

—No ha aparecido hermano —comento Hoseok— Pensando aquí, no he visto a Lindo Gatito, desde que llego contigo esta mañana

—Cuando llegamos lo dejé en la oficina con la puerta abierta como de costumbre para que saliera cuando quisiera, pero cuando volví a esta ya no estaba por ningún lado —comento YoonGi con notable tristeza— Me niego a aceptar que mi Lindo Gatito se perdió, saldré en el auto a buscarlo por las calles de Daegu

—Te acompaño si quieres —se ofreció Hoseok

—No Hobi, tú debes quedarte para cerrar el lugar —se negó YoonGi— Yo puedo solo, cualquier cosa que suceda yo te aviso

—Me tienes informado entonces —dijo Hoseok, aceptando lo que YoonGi le había dicho

—Lo hare —dijo YoonGi para ir por sus cosas a la oficina

Luego de haber tomado sus cosas dejo la cafetería y subió a su auto para conducir sin rumbo alguno por las calles de Daegu en busca de su amiguito peludo. Paso horas conduciendo, pero no vio a su gatito por ningún lado, sin querer darse por vencido decidió volver a la cafetería, quizás Lindo Gatito había regresado a esta y estaba allá esperando a que fueran a buscarlo, esa era su esperanza.

Llego a la cafetería que estaba en total obscuridad y se estaciono donde acostumbraba que era por la parte de atrás de esta. Se bajó del auto y camino hacia la parte delantera de la cafetería en buscas de su gatito y cuando estaba llegando a la entrada de esta puedo notar le presencia de un chico de cabellos blancos y con unas orejas de gato sobre este, sentado frente a la puerta de la cafetería mientras miraba hacia todos lados, cuando pudo ver los ojos del muchacho se sorprendió al ver que esto eran del mismo color que los de su gatito, un lindo e imponente color almendrado.

Con una absurda idea en su cabeza se acercó al muchacho y llamo su atención diciendo el nombre por el cual acostumbraba llamar a su mascota.

—Lindo Gatito —dijo YoonGi y aquel extraño muchacho volteo a verlo

—Viniste a buscarme —dijo aquel muchacho sonriendo ampliamente mientras se levantaba de donde estaba sentado

—No —dijo YoonGi, negando frenéticamente— Tú no puedes ser Lindo Gatito, yo tengo que estar alucinando

—No estas alucinando, soy tu Lindo Gatito —dijo el chico acercándose más a YoonGi, quien por instinto retrocedió— No me crees —dijo dejando de sonreír y colocando una mirada triste en su rostro

—Es que esto es imposible —dijo YoonGi, tratando de comprender lo que sucedida

—No lo es, yo soy Lindo Gatito y te lo voy a demostrar —dijo aquel muchacho y ante la perpleja mirada de YoonGi se transformó en aquel gatito blanco que hacía unos meses había adoptado

Continuara...