Capítulo 18:
Capítulo 18:
YoonGi y JImin pasaron el resto del día en casa hablando del futuro que les esperaba ahora que JImin estaba embarazado. En horas de la tarde llegaron Daylin, Dylan, Hoseok, JIn y Nam a su casa, Para cumplir con la promesa que le habían hecho en la cafetería de visitarlos, trayendo consigo comida, dulces y muchas en cosas más para celebrar que YoonGi ya estaba bien y el embarazo de JImin.
La tarde estaba llena de risas y felicidad mientras YoonGi y Jimin se acomodan en la sala, rodeados de sus amigos. Jin y Nam habían preparado una variedad de platos deliciosos, desde sushi hasta platos tradicionales coreanos, mientras que Hoseok se encargó de traer una montaña de dulces, entre los que destacan los pasteles y gomitas que tanto les gustaban.
—¡Felicidades, chicos! —exclamó Jin, levantando un vaso con refresco— No sólo por el embarazo, sino por el hecho de que YoonGi esté aquí con nosotros. ¡Brindemos por ello!
Todos levantaron sus vasos en señal de celebración, con sonrisas y una atmósfera de amor y apoyo que llenaba el espacio. Jimin miró a YoonGi y sintió un profundo agradecimiento por la vida que estaban construyendo juntos.
—Es una nueva etapa para nosotros —dijo Jimin, acariciando su abdomen en un gesto instintivo—. Nunca imaginé que todo esto sucedería tan rápido.
—A veces la vida tiene sus propios planes, ¿verdad? —respondió YoonGi, tomando la mano de Jimin—. Pero no tengo miedo, mientras estemos juntos, sé que podremos enfrentar cualquier cosa.
La conversación fluyó entre anécdotas, risas y sueños del futuro. Hoseok contó chistes que hicieron reír a todos, mientras que Nam hablaba sobre los diferentes nombres que podrían darle al bebé, provocando debates amistosos sobre las mejores opciones.
—Me gusta el nombre 'Jae' si es niño, y 'Soo' si es niña —dijo Nam, con una sonrisa.
—¿Jae? Más bien me suena a un grupo de rock, ¿no? —bromeó Dylan, provocando una carcajada en todos.
La tarde continuó llena de chistes y momentos tiernos, donde cada uno compartía sus esperanzas y deseos para la familia en crecimiento de Jimin y YoonGi. Al caer la noche, la calidez y el apoyo de sus amigos les infundió un nuevo sentido de fuerza ante los desafíos que podrían venir.
Mientras todos terminaban la cena, YoonGi y Jimin intercambiaron miradas llenas de amor, sabiendo que con el apoyo de sus amigos, podían enfrentar cualquier cosa que la vida les enviará. La casa se llenó de alegría y emoción, marcando el inicio de un capítulo lleno de nuevas experiencias y memorias que atesorarían por siempre.
Cuando Taehyung y Jungkook llegaron para unirse a la celebración, la habitación se iluminó aún más con su energía contagiosa. Traían consigo una exquisita bandeja de asado, con el aroma de la carne asada que rápidamente llenó el aire. Mientras todos se reunían alrededor
de la mesa, jóvenes animados y risas, los nuevos padres no podían evitar sentir una oleada de cariño por la familia que habían formado.
—¡Lo siento por llegar tarde! —dijo Jungkook, sonriendo mientras depositaba la bandeja sobre la mesa—. La cita con la obstetra llevó más tiempo del que pensaba.
Jimin los miró con curiosidad.
—¿Y cómo va todo? —preguntó Jimin, ansioso por saber cómo estaba su amigo.
—Todo bien, gracias —respondió Jungkook, con una sonrisa de alivio—. El bebé está sano y, según el médico, todo está saliendo como debería.
Taehyung abrazó a Jungkook por la espalda, haciendo que ambos sonrieran con complicidad mientras se sentaban. Con todos los amigos reunidos, la cena comenzó y el ambiente estaba lleno de risas, anécdotas y la calidez de la compañía.
En medio de las charlas y el sonido de los cubiertos chocando contra los platos, Jin y Nam se miraron, sabiendo que era el momento adecuado para dar el siguiente paso en su relación frente a sus amigos. Jin, con su mirada segura y una sonrisa en los labios, tomó la palabra.
—Chicos, hay algo que queremos compartir con ustedes —dijo Jin, esperando a que todos prestaran atención.
El comedor se llenó de curiosidad cuando Nam continuó:
—Jin y yo hemos estado juntos por un tiempo y creemos que es justo que lo sepan. ya somos pareja —Confesó tomando la mano de Jin
Hubo un breve silencio, seguido de una explosión de risas, aplausos y exclamaciones de felicidad.
—¡Lo sabía! —gritó Dailyn, levantando su vaso—. ¡Eso es increíble!
—Finalmente, ¡ya era hora! —rió Hoseok, mientras le daba una palmada en la espalda a Nam—. ¡Felicidades, chicos!
Jimin y YoonGi se miraron y sonrieron, sintiéndose agradecidos por la apertura de su grupo de amigos. La conexión entre ellos solo se hacía más fuerte a medida que compartían sus vidas y alegrías.
—Ahora somos una familia aún más grande —dijo Jimin, sintiendo una calidez en su corazón—. Estoy tan feliz por ustedes dos.
Las conversaciones fluyeron entre historias de amor, planes para el futuro y sueños que cada uno compartía. Taehyung y Jungkook, emocionados por ser parte del círculo, compartieron sus propias experiencias sobre la relación, hablando de lo que había significado para ellos el apoyo mutuo en este camino hacia la paternidad.
Mientras la cena se alargaba, el aire se llenaba de promesas, risas y sueños compartidos, convirtiendo una simple reunión en una celebración de amor y amistad. En ese momento, todos sintieron, con plenitud, que no importa lo que les depare el futuro, siempre estarían ahí los unos para los otros.
La atmósfera en la sala estaba llena de risas y murmullos mientras todos se acomodaban para pasar la noche. Sacaron cojines, mantas y todo lo que pudieron encontrar para hacer de la pequeña sala un acogedor campamento improvisado. Era un espectáculo divertido y caótico, pero todos estaban dispuestos a disfrutar de la compañía y a pasar tiempo juntos, sin importar lo apretados que pudieran estar.
Una vez que se aseguraron de que todos estaban cómodos, Jimin y YoonGi se retiraron a su habitación, sabiendo que necesitaban un momento a solas después de la agitada celebración. Al entrar, el ambiente se volvió más calmado, permitiéndoles disfrutar de la intimidad de su espacio.
YoonGi se dejó caer suavemente sobre la cama, y Jimin se acercó para ayudarlo. La herida de YoonGi requería atención diaria, y aunque había hecho avances significativos en su recuperación, Jimin siempre se aseguraba de que recibiera el cuidado adecuado.
—¿Te sientes bien? —preguntó Jimin, mientras comenzaba a preparar el material para la cura.
—Sí, estoy bien —respondió YoonGi, esbozando una pequeña sonrisa—. Solo un poco cansado. Pero ver a todos juntos me hizo muy feliz.
Jimin comenzó a limpiar la herida con cuidado, evitando hacerle daño.
—Me alegra escuchar eso —dijo Jimin, concentrándose en su tarea—. Saber que tienes a tu lado a tantas personas que te quieren es lo más importante.
—Lo sé. No podría pedir más —respondió YoonGi, mientras observaba cómo Jimin trabajaba con dedicación. Sus ojos brillaban de amor y gratitud—. A veces, me pregunto cómo llegué a tener una vida tan hermosa, después de la tragedia de haber perdido a toda mi familia en ese accidente .
—La vida puede ser impredecible, pero estoy agradecido de que te tenga a ti a mi lado —dijo Jimin, sonriendo mientras terminaba de curar la herida—. Este bebé que viene es un gran regalo para nosotros.
YoonGi asintió, sintiendo que cada día se hacían más fuertes juntos.
—Quiero que todo lo que hemos construido sea un espacio de amor y felicidad para nuestra familia —dijo YoonGi, tomando la mano de Jimin—. No cambiaría nada de lo que tenemos.
Jimin sintió una oleada de emoción al escuchar esto.
—Vamos a criar a nuestro hijo en un hogar lleno de amor, como este momento —añadió, mirando los ojos de YoonGi con cariño—. Con amigos como ellos, siempre tendremos apoyo.
Después de terminar la cura, Jimin se sentó al borde de la cama y YoonGi lo atrajo hacia él, abrazándolo suavemente.
—Te amo —susurró YoonGi, acariciando el cabello de Jimin—. Gracias por ser mi roca en todo esto.
—Yo también te amo —respondió Jimin, sintiéndose seguro en el abrazo de YoonGi—. Estamos juntos en esto. Nunca estaremos solos.
Los dos se quedaron en silencio, envueltos en una cálida burbuja de amor y conexión. Fuera de su habitación, los ecos de las risas y charlas de sus amigos llenaban el aire, un recordatorio de la comunidad que habían formado y el futuro brillante que les esperaba. Una vez más, sintieron que, sin importar los desafíos que enfrentaran, todo iba a estar bien mientras estuvieran juntos.
Continuará...
Queridos lectores...
Quiero tomar un momento para disculparme sinceramente por la larga pausa en la actualización de estei libro. La verdad es que he estado lidiando con una profunda depresión que me ha dificultado mantenerme al día con mi escritura y conectar como solía hacerlo.
Entiendo que muchos de ustedes han esperado pacientemente, y me duele haberlos decepcionado. Quiero agradecerles por su apoyo continuo y su comprensión en este momento difícil. Estoy trabajando en mi bienestar y, poco a poco, regreso a la escritura, con la esperanza de retomar la historia y compartirla con ustedes.
Gracias por su paciencia y por ser una parte tan valiosa de este viaje. Espero poder brindarles actualizaciones más seguido.
Con cariño, Liliana Jeon...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro