Ha pasado un mes desde la aventurilla nocturna del trío de cazadores, en ese tiempo los chicos habían logrado atrapar a todos los invizimals de la lista, y solo se habían quedado con los que ya habían luchado en otras ocasiones. Ahora mismo acaban de salir del colegio y estaban en el parque sentados en un banco y comiéndose un helado tranquilamente charlando de cualquier cosa.

- Oye chicos ahora que hemos acabado la lista ¿qué haremos ahora? – preguntó Tabby mientras le daba un lametón a su helado.

- Pues no lo sé, supongo que Keni nos dará algunas misiones en este tiempo, pero podríamos ir al bosque y entrenar un poco o ampliar el equipo – le contestó Lincoln.

- Sí, no estaría mal buscar algunos invizimals nuevos – añadió Clyde.

Los chicos continuaban hablando relajados cuando Tabby se fijó en dos hombres que pasaban cerca del parque que pudo reconocer.

- Lincoln ¿esos no son los hombres con los que te enfrentaste la última vez?

Lincoln se fijó en los hombres, Tabby tenía razón - ¡Sí son ellos! – metió la mano en su mochila y sacó una de las máscaras de lucha libre de Lynn y se la puso– tengo que seguirlos.

Clyde extrañado preguntó - ¿Por qué llevas eso en la mochila?

- ¿Ya olvidaste quien soy? Imaginé que podríamos volver a encontrárnoslos y no debemos dejar que sepan quienes somos, por eso usaré esto para que no me reconozcan.

- ¿Y nosotros qué hacemos? – preguntó Tabby.

- Buscad algo con lo que cubriros la cara y seguidme de cerca, pero vigilad que no os vean – echó a correr y salió del parque.

Lincoln pudo localizar a los hombres y les siguió de cerca viendo como se dirigían a un callejón, el albino se asomó en la boca del callejón y vio a un tercer hombre, más alto que los otros dos, pelo castaño, ropa elegante y un antifaz que cubría su cara mostrando una mirada fría y molesta.

- ¿Qué hay de los invizimals? – preguntó de forma fría.

- N-no hemos conseguido ninguno señor – dijo uno de ellos muy asustado.

- ¡Incompetentes! – gritó - ¿¡cómo queréis seguir trabajando!?

- N-no se preocupe señor atraparemos a los que quedan tiene nuestra palabra.

- Eso espero porque si no...

- No lo harán – interrumpió el albino saliendo de su escondite.

- ¿Y quién eres tú? – preguntó el enmascarado.

- Soy un miembro de la alianza de cazadores – contestó – ya me las he visto con esos dos antes, se les cayó una lista con los invizimals y debo decirte que todos y cada uno de ellos están bajo custodia de la alianza y en estos momentos seguramente estén ya en sus respectivos hogares.

El hombre asintió – Entiendo.

- Por favor marchaos de aquí, ya no hay nada que os interese en este pueblo.

- Me temo que sí amigo y eso eres tú – dijo el hombre – tienes algo que nos interesa jovencito, y es tu PSP, contiene toda la información de la alianza, y si la conseguimos salvaríamos la falla del contrabando.

Lincoln se puso a la defensiva – No pienso dejaros.

- Muy bien chico ¿por qué no hacemos un pacto entre caballeros? – sugirió el castaño.

- ¿Qué clase de pacto? – preguntó intrigado el albino.

- Libraremos un combate, tú contra mí sin trampa ni cartón solos tú y yo y dos véctors cada uno, si gano te descubro y me quedo con tu PSP, si ganas tú nos iremos del pueblo y te contaré todo lo que quieres saber – le extendió su mano - ¿qué me dices?

Lincoln lo pensó un momento, pero terminó por estrecharle la mano – Está bien.

- Vosotros id a la boca del callejón y aseguraos de que no nos moleste nadie – los esbirros obedecieron – muy bien chico muéstrame lo que sabes.

Lincoln sacó la consola y escogió a Neko para el combate - ¡A por ellos Neko!

- Así que el Neko-suke que perdimos ¿eh? Muy bien te voy a mostrar a mi compañera – de su PSP salió un insecto rojo con dos grandes abdómenes acabados en un aguijón, cuatro brazos, un exoesqueleto blanco, cuatro finas alas y unos pequeños colmillos curvos que le salían de la boca

 – esta es Lúmina, una Stingwing max, lo siento, pero me temo que usando un invizimal pup no tienes posibilidades contra mí.

- Eso no lo sabremos hasta que lo intente.

- Bien chico ¡luchemos!

La pelea empezó y Neko corría en todas direcciones alrededor de Lúmina por todo el callejón lanzando kunais hacia la Stingwing, pero esta los esquivaba grácilmente.

- Neko para de atacar y vuelve aquí – el gato fue a su lado.

- ¿Has acabado?, pues ahora atacamos nosotros ¡Lúmina usa zumbido! – la Stingwing se acercó a Neko, y sus aguijones empezaron a zumbar con tal fuerza que tumbó a Neko contra la pared – lo ves chico la diferencia de poder es demasiado grande.

- ¡Aún no! – Lincoln usó un paquete de vida para devolverme la energía - ¡Véctor terremoto! – usó el véctor para atacar a su oponente - ¡Neko gato sombrío! – Neko uso su ataque y la sombra golpeó de lleno a Lúmina - ¡Bien! ¿quién no podía vencerte? – dijo confiado

- Pues tú – el Stingwing se levantó como si nada – destello eléctrizante – Lúmina empezó a dar vueltas bailando alrededor de Neko y un pequeño vórtice de electricidad empezó a formarse.

Tabby y Clyde buscaban a Lincoln a través del radar siguiendo el rastro de varios invizimals, Tabby con una pañoleta y un bigote falso morada y Clyde con una bolsa de papel.

- Estamos cerca Tabby – le dijo Clyde.

- Eso espero porque como no salgamos pronto de aquí le mataré

- ¿Qué te pasa? – preguntó el afro.

- ¿Que qué me pasa? ¡Que la gente nos mira como si fuéramos idiotas! – Contestó Tabby molesta.

- Olvídalo creo que está ahí.

Los chicos entraron en el callejón y vieron la escena anteriormente descrita, el vórtice le arrojó tremendas descargas al gato y lo dejaban muy debilitado. Asombrados los chicos observaban atónitos el combate sin creerse que Lincoln estuviera recibiendo semejante paliza.

- ¿Lo ves chico? Te dije que no podrías hacer nada, tu pup contra mi max estaba en clara desventaja de nivel, además de que has usado tus dos véctors mientras que yo no he usado ninguno, has peleado bien pero este juego se acaba aquí, este ultimo golpe será el golpe de gracia ¡destello electrizante!

El ataque de Lúmina empezaba a cargarse de nuevo, pero Lincoln se negaba a tirar la toalla así – ¡Vamos Neko puedes hacerlo no podemos rendirnos de esa forma creo en ti levántate! – Neko escuchó la voz de su cazador y se levantó en medio del ataque - ¡Bien, salta cuando yo te lo diga! – esperó un instante mientras la electricidad empezaba a saltar

- ¡Ahora y ataque kunai sin parar! – Neko saltó evitando así el ataque y empezó a lanzar kunais consiguiendo hacer retroceder a su enemigo - ¡Muy bien Neko así me gusta!

Cuando Neko aterrizó, seis símbolos salieron de su cuerpo y lo rodearon en círculo empezando a orbitar a su alrededor, de repente un haz de luz invadió el callejón y cuando cesó, lo que antes era un pequeño gato ahora era un gato grande, con sus extremidades protegidas por piezas de armadura y un pequeño tocado en su frente, ninguno de los que veían el combate se lo podía creer.

- ¿Pero qué ha pasado? – preguntó el albino sorprendido.

- Es una evolución - contestó el hombre castaño – cuando un invizimal adquiere suficiente experiencia evoluciona y además de cambiar su aspecto también aumentan sus capacidades – explicó – chico ahora tienes una oportunidad no la desperdicies y ve a por todas.

Desde ese momento el combate se volvió muy igualado, ninguno daba su brazo a torcer. Poco a poco Neko empezó a ganar terreno y ahora Lúmina estaba contra las cuerdas.

Los chicos miraban sorprendidos como su amigo estaba dándolo todo, en especial Tabby, ver a Lincoln tan concentrado luchando codo con codo le producía una sensación que nunca había experimentado y era el sentirse impresionada por un chico.

Por otro lado, los hombres mafiosos se empezaron a preocupar porque su jefe estaba contra las cuerdas.

- Tenemos que quitarle la consola o sino ganará el chico.

- Sí hagámoslo.

Como Lincoln estaba tan concentrado en el combate no se dio cuenta de que los mafiosos se le acercaban por detrás para quitarle al PSP, pero Tabby y Clyde se dieron cuenta y la rockera sacó a su Beatwidow y usó su tela tóxica a los pies de los mafiosos que retrocedieron antes de abalanzarse sobre Lincoln.

- ¡Bea a por ellos que no se acerquen a mi albino! – gritó Tabby, aunque se sonrojó después de darse cuenta de lo que dijo.

En el lado de Lincoln ahora Neko esquivaba todos los ataques con agilidad felina, valga la redundancia, y en un momento dado se movió detrás de la Stingwing y le dio un zarpazo que la dejó desorientada.

- ¡Gato sombrío ya! – esta vez en lugar de un solo gato esta vez salieron dos gatos que se movieron a gran velocidad y al acertar a su objetivo Lúmina cayó por fin derrotada - ¡Bien!

El enmascarado suspiró – Lo has hecho bien Lúmina – volvió a meterla en la consola – chico, me has impresionado parece que no era de boquilla y como todo caballero cumpliré mi palabra y nos iremos del pueblo, pero te aseguro que volverás a tener noticias mías – el hombre caminó y vio lo que Tabby y Clyde les habían hecho a los mafiosos – tus amigos tienen agallas, te aseguro que nuestro reencuentro será emocionante.

Lincoln reaccionó antes de que se fuera y vio al enmascarado ayudando a levantar a los mafiosos amoratados y desorientados - ¡Espera! ¿y la información que me prometiste?

- Ah sí, a mí puedes llamarme cuervo, y del resto, pregúntale a Keni por Sebastian Campbell – el cuervo cogió a sus esbirros y como si fuera un fantasma desapareció.