XI
🍃Todo tiene un límite🍃
《♡》
Mark llegó a la universidad con los ojos rojos y algo hinchados, pero una pequeña sonrisa adornando su rostro. Tuvo la oportunidad de despedirse de Yukhei antes de que este viajara a China, así que había llorado un poco por tristeza, pero se alegró cuando este le dijo que no sería por mucho tiempo y que en un abrir y cerrar de ojos, estaría en Corea de nuevo y que apenas llegue, irían juntos a un parque de diversiones o a cualquier lugar al que el canadiense quisiera ir.
Saludó a algunos compañeros que en el proceso se acercaron a preguntarle si se encontraba bien, a lo que el respondía que si. Ingresó a su salón, obteniendo todas las miradas sobre él, haciendo que se sintiera un tanto cohibido, pero al instante trató de actuar normal. Nadie dijo ni hizo nada, por lo que se sintió algo aliviado.
Las clases transcurrieron con normalidad. El profesor dictando su clase, algunos compañeros dibujando en su libreta, otros hablando en susurros, otros por papelitos, algunos miraban por la ventana, estaban recostado sobre las mesas y muy pocos prestaban atención y tomaban apuntes.
Al finalizar las primeras horas, llegó el tan ansiado receso. Mark soltó un suspiro, era ahora o nunca. Se puso de pie, ordenó sus cosas con nerviosismo, pero despacio. Sus palmas sudaban en demasía.
—Mark... —llamó HaeChan mientras se acercaba a su mayor— ¿Te encuentras bien? —preguntó con cautela. El de nacionalidad canadiense lo miró durante unos segundos, para luego asentir distraído— Por favor, Mark, se sincero conmigo. Sabes que no te juzgaré por nada.
—Terminaré con Yuta. —soltó de golpe, los demás quienes fingían no escuchar la conversación, tenían los ojos muy abiertos, el moreno sólo se quedó estático en su lugar, sin poder articular alguna oración en concreto— Ya me cansé de ser su juguete. Muy contrario a lo que todos piensan, si me llegué a enterar de los rumores que, a fin de cuentas, resultaron ser ciertos... Yuta aún no olvida a SiCheng. —dijo cerrando su mochila— Así que hablaré con él y daré por terminada está relación tan extraña que tuvimos.
—Y-yo... No sé qué decirte. —susurró HaeChan. Sabía lo que los demás decían, pero, como Mark, jamás pensó que Yuta sería capaz de hacer este tipo de cosas, es decir ¡Era Yuta! aquel japonés al que había conocido de niño y era un hyung muy amable. No tenía ni la menor idea de lo que había ocurrido para que el mayor actúe de esa manera, pero ya no le daba más importancia, había lastimado a su mejor amigo y no le gustaba. Y por más que Mark quisiera mostrarse fuerte, el coreano pudo diferenciar el dolor oculto en esos lindos y grandes ojos— Si crees que es lo mejor, pues adelante, te apoyaré en todo, Makku.
Mark asintió con una dulce sonrisa a las palabras de su mejor amigo. Minutos después se encontraba camino a la cafetería, para poder hablar con Yuta. Sabía que lo encontraría allí, pero una persona obstruyó su paso.
—SiCheng hyung...
—Makku... Yo, venía a disculparme. —el mayor agachó la cabeza, su voz salió apagada y con temor.
— ¿Disculparse por qué? —preguntó el menor extrañado.
—Ayer Yuta me pidió que nos reuniéramos para hablar y aunque yo me negué, al final logró convencerme. ¡Te juro que yo sólo fui a hablar con él! —dijo rápidamente— Pero en un descuido él... Él...
—No me diga más, hyung. —Mark interrumpió— Yo vi que sucedió, así que no tiene por qué disculparse. No se preocupe. —le sonrío al mayor, quien asintió sonriendo aliviado y algo preocupado.
— ¿Tú...? —no sabía cómo preguntarle al menor sobre qué era lo que iba a hacer y Mark notó aquello.
—Hablaré con Yuta, creo que ya tuve suficiente. —se despidió del mayor y fue hacia su objetivo. Cuando llegó, el grupo de amigos de Yuta lo observaron algunos segundos, para luego saludarlo alegremente, Mark correspondió con el mismo entusiasmo— Yuta, ¿Podemos hablar? —los amigos de Yuta comprendieron que Mark quería hablar a colas con el japonés, por lo que, lentamente fueron yéndose a cualquier lugar.
— ¿Qué deseas dulzura? —preguntó con voz melosa. Mark miró por el rabillo del ojo, y vio que SiCheng y Kun se sentaban juntos en una mesa algo alejada de dónde se encontraban él y Yuta.
—Quiero que lo que sea que tengamos se termine. —la sonrisa en el rostro de Yuta, desapareció poco a poco, para luego dar pase a una expresión completamente enojada.
— ¿Qué mierda dices?
—Lo que acabas de escuchar. —respondió seguro— Yo ya no sé qué hacer, Yuta. Tus actitudes son cambiantes, pensé en ayudarte y que estés estable, pero no pude. Me tratas mal y me ignoras la mayoría del tiempo, sólo actúas de manera cariñosa cuando estamos rodeados de gente o con tus amigos o cuando pasa SiCheng por donde estamos, luego me tratas como si no valiera ni un carajo y está situación me tiene cansado.
—No puedes terminar conmigo.
—Ya lo estoy haciendo. —habló tajantemente para luego darse media vuelta y salir de allí, dejando a Yuta con la palabra en la boca y sin saber con qué palabras refutar todo lo que el canadiense le había dicho.
|L Í M I T E|
Mark llegó a la universidad sudoroso y con la respiración agitada. Los demás estudiantes lo miraron algo preocupados y extrañados, puesto a que el rubio siempre llegaba con Jeno, pero este había llegado minutos antes, con un enojo palpable. Caminó con pasos rápidos hacia el patio y miró a su alrededor, mientras buscaba señales de vida de su hermano, pero no lo encontraba.
Maldita sea la hora en que decidió contarle a Jeno sobre el golpe que le propinó Yuta.
—Yuta, entiende que esto terminó. —había dicho el menor al borde de las lágrimas.
—Tú no me puedes terminar. —su voz salió tan ronca y colérica que Mark sólo tembló por el susto.
—Yuta, suéltame, por favor. —suplicó— Me estás lastimando, Yu- —antes de siquiera terminar su oración, logró sentir un fuerte ardor en su mejilla.
Yuta lo había golpeado.
—Tú vas a seguir conmigo, hasta que yo te di- —Mark actuó sin pensar, lo pateo fuertemente entre las piernas y salió corriendo en dirección a su casa. Afortunadamente para él, esta se encontraba cerca.
Al llegar con los ojos rojos, las mejillas empapadas y el pómulo derecho rojo y algo hinchado, sus padres se preocuparon. Les contó absolutamente todo, la preocupación de sus progenitores era evidente. Jeno estaba demasiado colérico, y trataron de calmarlo.
Luego de unos minutos, el Lee menor se mostró más calmado, pero al llegar el día siguiente, se despertó más temprano que Mark y se fue a la universidad sin esperarlo. El rubio al percatarse de ello, fue tras él, puesto a que afortunadamente, había escuchado la puerta ser cerrada.
Toda esa situación nos lleva a lo que ahora sucede, teniendo como consecuencia a un Mark desesperado por encontrar a su hermano y que este no cometa una tontería. Finalmente, el alboroto que la gente estaba haciendo en una de las mesas de casi al fondo del patio, llamó su atención y fue corriendo hacia aquel lugar.
— ¡ERES UN JODIDO HIJO DE PUTA! —aquel grito, definitivamente era de su hermano. Trató de abrir camino entre las personas que hacían un círculo, para poder detener aquella absurda pelea— Te lo advertí, Nakamoto. Te dije que, si lo lastimabas no ibas a salir ileso. —la voz del Lee menor era tan profunda y grave, que hizo que muchos allí, estremecieran su cuerpo. Podían notar que tan enojado estaba el chico, pero la pregunta era ¿Por qué? ¿Qué había pasado?
Y como si Yuta escuchara las dudas mentales de los demás, habló:
— ¿Acaso tu débil hermano fue a armar escándalo en tu casa? —y todos comprendieron el motivo del enojo de Jeno, incluso algunos se enojaron y estaban listos para interferir si era necesario. Jeno soltó el primer puñetazo, haciendo que el rostro del japonés volteara, pronto sintiendo el sabor metálico en su boca. Estaba a punto de propinar otro golpe, cuando paro en seco al ver a su hermano mayor, delante del cuerpo de Yuta.
—Jeno, basta. —habló con la voz rota— Esto no tiene que solucionarse así. N-no, no hay porque llegar a los golpes, tú también saldrás lastimado. —sus ojos estaban cristalizados— Por favor, Jeno... Hazlo por mí ¿Si?
—Mark. —habló con voz demandante— Te lastimó, te hizo daño y eso no me gusta. De pequeños nos prometimos protegernos entre ambos, y está vez fallé, y no puedo permitir que esto se quede así. Este imbécil acaba de lastimar a alguien de mi familia y golpearlo queda muy poco. —con suma delicadeza, apartó el cuerpo de Mark, para luego volver su atención en Yuta, quien había estado escuchando todo con una cara que gritaba "patético" por todos lados.
—No sabía que Mark tenía tantos admiradores. Al parecer no soy el único que va tras tu trasero, puta. —soltó con burla, obteniendo otro puñetazo, esta vez, por sorprendente que le pareciera a los demás estudiantes, fue Qián Kun, estudiante de último en el área de Medicina.
—Nakamoto, haz caído tan bajo. —habló con enojo. Mark miró a todos allí, SiCheng también estaba presente y rostro gritaba "preocupación", así que una vez más, decidió interferir.
— ¡Basta ya! —gritó— La violencia no trae soluciones... Y-yo debo hablar con Yuta. —miró a su hermano menor con súplica— Hablaré con él, si me hace algo, te prometo que no volveré a interferir. —sus manos se juntaron, Jeno asintió después de unos minutos. Tomó sus cosas y se alejó de allí, indicándole a los demás que hicieran lo mismo, sin embargo, no fue demasiado lejos.
Una vez que sólo estuvieron Yuta y Mark, se sentaron en una de las bancas y luego el japonés habló:
—Lo siento. —su tono de voz era sincero— No sé qué me pasó, quizás la desesperación por llamar la atención de SiCheng... Y-yo realmente fui un verdadero idiota. Creo que las personas tienen razón... Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde. —dijo Yuta agachando la cabeza.
—Mentira. —Mark respondió con voz tajante— Todos sabemos lo que tenemos... —Yuta alzó la cabeza y lo miró con el ceño fruncido— Sólo que nunca esperamos que se vaya de nuestro lado. —Yuta se quedó unos minutos en silencio.
—Yo lo perdí y no supe cómo recuperarlo... Tuve mala suerte. — Mark ya no sabía que creer, Yuta parecía totalmente arrepentido, pero había algo que no le cerraba aún. Se sentía mareado ante tanta confusión. Tratando de no caer en los juegos de Yuta, Mark contestó:
—No es cuestión de mala suerte, Yuta. Es cuestión de decisiones y acciones. Las elecciones que tomaste con la antigua relación con SiCheng, te llevaron a perderlo, y lo alejaste más con lo que hiciste conmigo. —suspiró— Tú sabías que, aunque no paraba mucho tiempo con SiCheng hyung, él me tenía un gran cariño, como yo a él.
—Pero aun así te metiste conmigo.
—Olvidé por completo que eras el novio de hyung, cuando me propusiste ser novios. El amor que te tenía me cegó.
— ¿Tenías? —preguntó incrédulo— Que yo sepa el amor no se acaba así de fácil.
—En esta vida, Yuta, todo tiene un límite... Incluso el amor. —dijo mientras se ponía de pie.
— ¿Cuál es el límite del amor?
—La razón por el cual SiCheng hyung y yo, terminamos contigo. —Yuta lo miró con confusión— Por dignidad. —dicho esto, se alejó del japonés, quien sólo lo observó irse y acercarse a su hermano menor, quien le dio una mirada filosa y de advertencia.
El resto del día continuó normal y Mark se sentía agradecido por ello. Durante las siguientes semanas se enteraron que Yuta había decidido cambiar de universidad, y que se regresó para Osaka. Los días de Mark se volvieron como antes, tranquilos y bonitos, con la diferencia de que, a su grupo de amigos, SiCheng y Kun se unieron.
Dos meses después, su mejor amigo, había regresado de los Estados Unidos, Daniel era su nombre, a quien cuando le contaron la historia completa, casi se le sale el alma del cuerpo y por poco y se compra un boleto a Japón para ir a darle una buena paliza a ese idiota, como él le decía.
Durante todo ese tiempo se comunicó con Yukhei y le había comentado que su 'relación' con Yuta, ya había dado fin y Lucas lo felicitó por eso, incluso hizo una supuesta fiesta —en realidad sólo se tomó un vaso de gaseosa y comió algunas galletas— para celebrar, se había tomado fotos y las había subido a sus historias de Instagram, con escritos como "Celebrando la soltería de mi amigo" "Hoy se celebra, porque aquel idiota se fue de su vida" entre otras cosas más.
Recuerden que les amo mucho manguitos 💚
Pequeños cambios que no pude hacer antes debido a que había ingresado a un concurso al cuál sólo llegué a la primera ronda jsjsjjs
Felicitaciones a lxs ganadores!! <3
Naranjita🐧🌱
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro