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VIII

🍃Te quiero, cuídate🍃

《♡》

Mark estaba cansado, tanto física como mentalmente. Física porque hoy había tenido que hacer cinco vueltas a la cancha, y mentalmente el cincuenta por ciento se debía al estrés que tenía por las clases y la otra mitad por los cambios de comportamientos que Yuta tenía con él, a veces le daba "mimos" —si así se podría llamarlo— y lo trataba de manera tan dulce, y de repente, su actitud pasaba a ser arisca, distante y completamente fría. Se supone que a estas alturas ya debería de estar acostumbrado, es decir ya iban cuatro meses de novios, ¡CUATRO MESES! Sin embargo, el canadiense ya se estaba hartando de aquel detalle.

Ni siquiera iban juntos medio año como para decir que quizás Yuta ya no lo quería, y que se había hartado de él.

Sí, aquel pensamiento dolía demasiado, pero bueno, así pensaba el lindo canadiense.

Estaba lavándose la cara, cuando escuchó unos murmullos. No se catalogaba como alguien chismoso, pero esta vez la curiosidad pudo con él, por lo que con sumo cuidado fue a encerrarse en una de las duchas para que nadie sospechara que había alguien más allí.

—Ya te lo dije Kun... No puedo hacer mucho, es cuestión de tiempo que él se dé cuenta.

— ¿Y si lo lastiman?

—Amor, —habló el chino con voz cansada— a veces necesitamos pasar por decepciones amorosas para poder crecer, madurar y aprender como personas. Tu madre, tu padre, tú, yo y muchos otros, tuvieron que pasar por esa parte para poder aprender y abrir los ojos, descubrir que es lo bueno y lo malo en las relaciones, para que así, con la siguiente relación no cometamos el mismo error, ¿Entiendes?

—Entiendo tu punto, SiCheng.

—¿Pero...? —preguntó esperando que su pareja continuara.

—Pero nada, al fin y al cabo, eres tú quien más cercanía tiene con el menor, y si no quieres poner más tu mano al fuego por él, yo no puedo hacer nada más que apoyarte en las decisiones que tomes. —se dieron un pequeño y dulce beso— Anda, ve por tu mochila y vayamos a comer algo, me estoy muriendo de hambre.

—Okey, okey... —el rubio escuchó la puerta ser cerrada y por fin salió de la ducha. Soltó un suspiro mientras empezaba a cuestionarse quién era el chico que SiCheng quería proteger —a su manera— pero, al fin y al cabo, proteger. Por otro lado, se alegró bastante por el hecho de que su hyung tuviera una pareja tan linda y buena como Kun.

Y es que para nadie era novedad que aquel chino era la bondad andante, un joven de cabellos azules, que casi siempre estaba a disposición de ayudar a los demás sin pedir nada a cambio, un chico con un corazón puro. Algo muy difícil de encontrar hoy en día.

Mark salió de las duchas y miró hacia la puerta y sonrió por lo bajo, su hyung había encontrado a su persona especial y parecía estar muy contento con ello, aquel detalle lo aliviaba un poco, es decir, SiCheng ya había superado a Yuta, por lo que ya no corría riesgo de que el chino sea un impedimento en su relación, porque si, el canadiense había estado sintiendo que SiCheng era una pequeña amenaza en cuanto a él y Yuta. Pero ahora que el mayor parecía haber superado al nipón, no había problema, pues una vez que Yuta se diera cuenta de aquello, también comenzaría a rehacer por completo, su vida a su lado.

¿Verdad?

Y nuevamente aquí vamos, Mark era una persona un tanto insegura, si bien la mayoría de personas en la universidad lo querían y mucho, aún se sentía insuficiente para alguien como el japonés. Muchas veces se llegó a comparar con SiCheng en demasiados aspectos y su conclusión siempre era la misma:

Jamás sería igual o superior a SiCheng.

Porque el chino era alguien único y excepcional, además Mark no era "recorrido" esta era su primera experiencia amorosa, ¡Ni siquiera había tenido un verdadero beso! Sólo eran piquitos —pero eso nadie lo debería de saber— así que él era nuevo en eso. En cambio, SiCheng... Él ya era una persona recorrida, incluso el chino había tenido una pareja antes de estar con Nakamoto, —lo sabía porque su propio hyung se lo había confesado alguna vez— por lo que se podría decir que el chino ya tenía una idea de cómo era estar en una relación con alguien.

Mark sentía que para poder estar a la altura de Yuta tenía que ser un poco más aventado, tal cual SiCheng, es decir, el de cabellos castaños era naturalmente más coqueto, dulce y sensual —por así decirlo— Y él, él naturalmente sólo aparentaba ser alguien risueño, algo que notó no le gustaba al japonés, ya que este prefería a personas más tranquilas y calmadas. Y eh aquí la pregunta que Mark se hacía....

Por qué si él era todo lo contrario a lo que el nipón prefería... ¿Le pidió ser su novio?

Y sus respuestas se contradecían con sus pensamientos.

Quizás el nipón se había enamorado de él por ser diferente a lo que el mismo Yuta llamaba su tipo ideal.

Quizás el ser diferente había dejado encantado a Yuta.

Quizás él podía hacer que Yuta cambie a su tipo ideal.

Quizás él...

— ¡Mark Lee! —escuchó que alguien lo llamaba a la distancia, giró a ver quién era y para su sorpresa se trataba de una chica, ya la había visto un par de veces, pero no sabía su nombre— Hola, Makku. —sonrió la muchacha— Soy JiHyo, curso el cuarto ciclo se enfermería. —comentó con una dulce sonrisa— Yo eh... Quería saber si tienes alguna noticia de Daniel. —Mark sonrió al ver las mejillas sonrojadas de la mayor, ya lo recordaba, aquella noona era la chica que estaba enamorada de su mejor amigo, quien se había ido a los Estados Unidos por un intercambio.

—Oh... Yo... Daniel no me ha contactado durante la última semana, pero antes de que dejara de hablarme, me dijo que en toda esta semana tenía exámenes por lo que evitaría en lo más posible todo tipo de distracciones. Quizás vuelva a hablar conmigo cuando ya esté libre... Si deseas puedo darte su número. —los ojos de la chica se iluminaron y eso hizo que Mark volviese a sonreír.

— ¿En serio harías eso? —el menor asintió. El canadiense le dio el número, indicándole que él le avisaría cuando el mayor este desocupado— ¡Muchas gracias, Makku! ¡Eres el mejor! ¡Te amo! —sin evitarlo la chica lo abrazó fuertemente. Mark le correspondió el abrazo con una sonrisa, ambos dando saltitos en el lugar, mientras chillaban emocionados. Era algo raro, pero se sentía bonito, al menos para Mark así se sentía, compartir esa pequeña felicidad le hacía sentirse como Cupido en esos momentos.

Un carraspeo que se escuchaba totalmente falso, obligó a ambos a separarse.

—Oh... Yuta... —habló Mark mientras miraba al nipón y se separaba de la chica— ¿Qué haces aquí? —preguntó totalmente desconcertado.

— ¿Acaso no puedo venir a ver a mi lindo novio? —preguntó devuelta mientras abrazaba cariñosamente al menor, quien sintió si corazón latir a mil por hora. Sus mejillas quemaban, estaba seguro que se había sonrojado. Miró a su alrededor y no notó la presencia de SiCheng, así que se alegró por ello, Yuta no estaba actuando así con la presencia del chino cerca.

Era una buena señal.

—Bueno, me iré... Hablamos luego Makku, por favor, no te vayas a olvidar. —el mayor asintió en dirección hacia la chica con una dulce sonrisa. Se despidieron y esperó a que la mayor desapareciera para poder hablar con Yuta e invitarlo a salir.

Cuando se dio media vuelta en dirección a Yuta, vio a SiCheng. Su ánimo decayó un poco, pero trató de no hacerlo notar, por lo que saludó al chino con entusiasmo, quien le correspondió el saludo, para luego retirarse de ese pasillo.

—Hyung... —llamó tímidamente el menor, mirando a Yuta.

— ¿Qué? —y ahí estaba nuevamente ese cambio drástico de comportamientos que dejaban a Mark totalmente aturdido.

—Nada, sólo que ya se hace tarde para sus clases. Hablamos luego, adiós. —se alejó abruptamente del mayor y caminó hacia su salón donde lo esperaba HaeChan con una dulce sonrisa, seguro tenía algo que contarle.

—Mark. —escuchó a Yuta— Te quiero, cuídate. —el rubio detuvo sus pasos, sintiendo las famosas mariposas en el estómago. Y antes de que pudiera girar a ver al mayor para responderle, sintió unos brazos rodear su cuerpo.

—Mi lindo hermano mayor, el día de hoy es miércoles y como todos estos días de la semana quiero ir a comer mi tarta de limón con el hyung más guapo del mundo mundial. —Mark río mientras negaba, sabía perfectamente que eso era un gran chantaje.

—Bien, hoy iremos por tu tarta de limón, así podré hablar con el admirador secreto.

— ¿Aún no sabes quién es? —el mayor negó— Créeme cuando te digo que pensaba que ustedes dos terminarían siendo novios... Les veo un mejor futuro.

— ¿Qué eres? ¿Un vidente?

—Quizás...

—Niño tonto... Ve a clases, nos encontramos en la salida para ir por tu tarta. —el menor asintió efusivamente— Por cierto, ¿No quieres invitar a tu novio? —sí, Mark había obligado a su menor a que se le confesara al chico que le gustaba. Ya le están cansando ver a Jeno siempre andar tonteando. Para sorpresa de ambos, —más para Jeno que para Mark— aquel lindo peliazul le correspondió dulcemente— Digo, podrían tener una bonita cita.

— ¿Y tú?

—Me dedicaré a enviarme notitas con el admirador secreto. —susurró para que sólo el mejor lo escuche, cuando notó que Yuta estaba cerca— Bueno, ve a clases mocoso, nos vemos luego. —Jeno dejó un beso en la frente del más bajo y se fue— Veo que aún no se va, hyung.

—No me respondiste. —dijo.

— ¿Qué cosa? —hizo memoria— ¡Oh, ya lo recordé! Tú también cuídate, hyung. Nos vemos más tarde. —y con el corazón roto en la mano, le dio la espalda al nipón y corrió hacia los brazos de su mejor amigo, quien lo veía preocupado.

Porque Mark había visto a SiCheng volver a esos pasillos.

Porque Mark había visto la sonrisa satisfactoria en el rostro de Yuta, cuando este notó que SiCheng se tensó y dio media vuelta para retirarse de nuevo.

Porque Mark no podía devolver ese "te quiero".

Porque Mark sintió que ese "te quiero" no fue sincero.






No sé si la historia tenga sentido para ustedes...

O sea, no sé si encuentran la problemática y no sé si sientan que la trama va yendo bien.

Como saben, la mayoría de mis historias son one-shots, two-shot o three-shot y soy mejor en eso que en historias que son más largas.

Estoy algo dudosa con este trabajo porque es mi primera vez escribiendo una historia así de extensa.

Pero igual espero que les esté gustando.

Si tienen alguna recomendación, no duden en decírmelo.

Gracias por leer, les amo manguitos 💚

Naranjita🐧🌱

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