Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

VI

🍃Tu teatrito caerá🍃

《♡》

Mark tenía un sabor amargo en la boca, ciertamente estos cambios en Yuta los había deseado desde hace ya un tiempo —por no decir desde una semana después de que empezó a salir con el nipón— pero había algo que no cuadraba, que no le cerraba del todo, y no era el único, muchos otros estudiantes sabían de los cambios repentinos en el trato del japonés hacia el rubio, pasaba de estar meloso a estar frío y distante, cuestionándose muchas cosas en realidad.

Es decir, Yuta a veces llegaba con chocolates, o tras veces le pedía salir y tener citas, pero en estás se comportaba... Distante. Yuta estaba diferente, pero no tanto. Se podría decir que era una montaña rusa de emociones y de comportamientos.

Y Mark pensaba que era algo normal en las parejas, pero sus compañeros y amigos, sabían que no lo era.

Yuta podía ser famoso y considerado uno de los chicos más hermosos de la universidad y si bien tenía a un grupo considerable comiendo de la palma de su mano, había otro grupo que simplemente no se dejaban cegar por su belleza.

Habían estado algo pendientes de los tratos que el estudiante de Derecho le daba al canadiense y les sorprendía mucho como es que parecía hacer flotar a Mark en las nubes, para segundos después hacerlo caer en un terreno lleno de espinas.

Querían hablar con Mark, advertirle que, si la relación continúa así, quizás en un futuro ambos, sobre todo él, podían salir muy lastimados, y no querían que eso ocurriese. Pero Mark parecía estar cegado, claro, el canadiense había estado enamorado del mayor desde que prácticamente había ingresado a la universidad.

Ciertamente Mark había ganado el corazón de muchos, y esas personas no querían que alguien tan bueno y amable como el canadiense pase por esas situaciones, peor aún con su primera relación amorosa.

El canadiense caminaba por los pasillos de derecho, yendo al encuentro de su nuevo amigo, Lucas, aquel chico al que una vez había llevado su desayuno a petición de su amiga Yuqi. Habían coincidido un par de veces y hablaron un poco, llevándose bien casi al instante. Salían al descanso juntos, claro, cuando Mark no salía con Yuta o con sus amigos.

No la pasaban en el patio, pues a ambos les abrumaba el hecho de que muchos ojos se posaran sobre ellos, por lo que consideraron que la biblioteca era un mejor lugar, además era tranquilo y podían leer algunos libros de fantasía o hablar relajadamente, sin miedo alguno a ser interrumpidos más que por la campana.

Cuando llegó a esos pasillos, pudo ver que su amigo y Yuta tenían una conversación que no parecía ser una amistosa, ambos chicos tenían el ceño fruncido y parecían echar chispas por los ojos.

— ¿Qué te molesta? ¿Qué salga con tu novio? No me jodas Nakamoto, es tu novio, Mark y yo sólo somos amigos.

—No salgas más con Mark, por tu culpa él ya no pasa más tiempo conmigo.

— ¿Te estas escuchando acaso? ¿Me estas prohibiendo salir con un amigo? ¿Pero, quien te crees? ¿El rey de España? No, Nakamoto, escúchame bien, Mark y yo sólo somos amigos. Salimos en el descanso cuando sus amigos tienen cosas que hacer y cuando prácticamente tú lo haces a un lado y no lo tratas como deberías de hacerlo.

— ¿Y según tú, como debería tratarlo?

— ¡Cómo si fueras su novio! ¡Joder! —exclamó el chino muy molesto— Parece como si lo despreciaras ¿Para eso le pediste ser su novio? ¿Para qué siempre las personas lo vean con los ojos cristalizados?

—Tú no sabes nada, Yukhei. —masculló el japonés ya sin ningún argumento con el cual refutar. El moreno sonrío por lo bajo, se acercó más a Yuta, miró directamente a los ojos del pelinegro y susurró:

—Tu teatrito caerá un día de estos, Nakamoto Yuta y ten por seguro que perderás a una de las mejores personas que en tu puta vida conocerás. —se separó del japonés y le miró seriamente, para luego mirar detrás de este y notar la mirada de un curioso canadiense que apenas había llegado— Hola Makku... ¿Irás conmigo a la biblioteca?

—Él irá conmigo a comer. —sentenció Yuta tomando de la muñeca a Mark, lo hizo tan fuerte que el menor hizo una mueca de dolor, alertando tanto a Lucas, como a los que presenciaban la escena.

—Lo estás lastimando, imbécil. —dijo Lucas preocupado por el menor, quien rápidamente trata de ocultar su mueca, pero no puede debido a que la fuerza incrementa.

—Y-yuta... —el menor gime de dolor, alarmando incluso más a Lucas. Algunos estudiantes ya se habían puesto de pie mirando preocupados al menor— Me estás lastimando. —el japonés parece reaccionar y lo va soltando de a pocos.

—Lo siento.

—No te preocupes, yo... Estoy bien. —miente, tratando de no sobarse la muñeca— Lucas, iré a comer con Yuta hyung... ¿Podemos salir mañana juntos? —el moreno asintió no tan convencido— Mañana me muestras eso que me dijiste. —le regaló una dulce sonrisa, haciendo suspirar tanto a quien le dedicó la sonrisa, como a los que estaban allí.

Yuta miró a su al rededor, notando que casi todos miraban a Mark como si se tratara de un idol o un ángel caído desde los cielos. Frunció el entrecejo, era él quien usualmente recibía esas miradas. Pero al parecer en su facultad, la mayoría tenía un flechazo por el rubio a quien, en esos instantes, volvió a tomar su muñeca y lo sacó de allí, sin dejar que se despidiera de su amigo como debía.

|L I M I T E|

Habían pasado algunos días desde aquella pelea con Lucas y ciertamente Mark quería recompensar el enojo de Yuta, preparándole galletas. No le había ido nada mal, al fin y al cabo, la señora Kim le había ayudado con la receta y en la preparación. Caminaba tranquilamente por los pasillos, y se encontró con el chino, quien lo saludó y poco rato después se encontraban teniendo una charla amena.

Por otro lado, Yuta se encontraba pidiéndole un favor a su mejor amigo, quien se negaba rotundamente a ayudarlo con una de sus estupideces.

No tomaría fotos de Mark desnudo, sólo para "provocarle" celos al ex-novio de Yuta.

—No haré eso, Yuta. —habló el pelirrojo.

—TaeYong, por favor.

—No. Y esa es mi última palabra. —cerró su casillero de un golpe y se fue de allí, dejando a Nakamoto totalmente indignado. Estaba bien el ser amigo de Yuta, no había problema con ello, pero tampoco lo acompañaría en sus estúpidas decisiones.

Quizás el abandonarlo hace un tiempo atrás hubiese sido una buena elección, pero se dijo a si mismo que los mejores amigos, siempre estaban en las buenas y en las malas, así que no abandonaría a Yuta, no a sabiendas de que este podría llegar a la locura, sólo por verse abandonado por SiCheng.

—Yuta hyung. —el mencionado cerró los ojos con fuerza, al escuchar esa voz a sus espaldas.

—Hola, Mark.

—Le traje una galle- —y sus palabras quedaron en el aire al escuchar como el tupper con las galletas de chocolate que tanto se esforzó en hacer y que Jeno había pagado los platos rotos, había terminado en el piso.

—Deja de hacer estás estupideces, Mark. Deja de tratar de ser un buen novio, te ves patético ¿Me escuchaste? —Mark se agachó para recoger su tupper y luego se puso de pie nuevamente y miró a los ojos del japonés.

—Te escuché perfectamente, Yuta. —se dio media vuelta y se fue a su salón. Sus ojos picaban y ardían. Si no se calmaba, muy pronto estaría llorando y lo último que quería era eso. No deseaba preocupar a nadie, ni a sus compañeros y amigos, peor aún, a su hermano menor.

|L I M I T E|

Ya era receso y Yuta se moría de hambre. Debía de pasar por el salón de Mark para salir con él, pero no lo encontró y nadie le dio información de dónde podría encontrarse, porque aparentemente nadie sabía.

—Los compañeros de Mark, parecen odiarme. —comentó Yuta a su mejor amigo, quien iba tomando de su jugo— Me miran con cierto desagrado y me hablan secamente, incluso las chicas que antes babeaban por mí... Se veían tan patéticas. —murmuró por lo bajo, haciendo que TaeYong rodara los ojos.

—Porque será que te odiaran. —comentó sarcásticamente. Para nadie era novedad que Mark era muy querido por sus compañeros, no por gusto fue elegido como el mejor amigo del salón, por tres años consecutivos.

—No lo sé, Tae, no lo sé. —a veces Yuta era tan... estúpido, que no parecía captar indirectas demasiado obvias— En fin, tengo que encontrar a Mark.

— ¿Por qué la desesperación por encontrarlo? —preguntó confundido. No tenía nada en contra del lindo canadiense, es más, al igual que la mayoría de estudiantes, también trataba de protegerlo de Yuta— Hace rato estabas diciendo que odiabas su actitud tan linda. —no había dicho que la actitud de Mark era linda, pero tampoco es como si TaeYong pudiera decirla, puesto a que la actitud del rubio era así, linda.

—Tiene galletas y me muero de hambre... —habló distraídamente, mientras buscaba con la mirada al rubio y cuando lo encontró, sonrío triunfante— Allí está, vamos. —halo a TaeYong del brazo, quien suspiró profundamente, pensando en que podría hacer para evitar a toda costa que el rubio no se sintiera mal en los próximos minutos— Hola, Mark.

—Oh, Yuta hyung... Tae hyung ¿Cómo estás?

—Todo bien, pequeño. —respondió el coreano— ¿Qué tienes ahí?

—Oh... Un tupper vacío. —respondió avergonzado, mientras soltaba un par de risillas.

— ¿Y las galletas? —Yuta preguntó mientras fruncía el entrecejo. Mark lo miró, y ahora, él también tenía el entrecejo fruncido.

—Se las di a Xuxi, se quedó maravillado con la primera galleta, y como me dijiste que no querías, se las di al ver que no tenía que comer, y tenía mucha hambre. —respondió sin rodeos. Estaba mirando fijamente a Yuta a los ojos, casi desafiándolo con la mirada.

—Me hubieses guardado unas cuantas. —TaeYong puchereo, tratando de disipar lo incómodo del ambiente. Mark lo miró y una dulce sonrisa, adornó su rostro. Se puso de pie y ordenó sus cosas.

—Tengo que irme, Lucas me espera. —los chicos miraron en dirección a la puerta y ahí estaba el moreno, esperando a Mark con una gran sonrisa— La próxima vez, también haré para usted hyung. —habló Mark— Espero que a usted no le parezca, patético.






Vamos bien, supongo :/

No sé si les estará gustando, pero espero que sí. >.<

En fin, gracias por leer y les amo mucho manguitos💚

Naranjita🐧🌱

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro