VIII: Compras
(N/t: Lo escrito en esta letra es porque están hablando español con ciertos neologismos y expresiones mexicanas)
Los oscuros ojos de Airam miraban con molestia al menor, Daniel estaba serio y apretaba la mandíbula con fuerza.
—¡¿Quién demonios te crees para salir y decirme todas esas cosas?!
—¡Fue tu culpa, estabas dando un espectáculo como si fueras una cualquiera! —replico con el mismo tono que usaba su hermana — ¡Te estabas besando con ese imbécil pelirrojo como si no hubiera mañana! ¡¿Es tu novio o qué demonios?! ¡Se supone que estabas trabajando no comportándote como una zor...!
La fina mano de Airam termino en la mejilla del moreno en un golpe seco dejando una marca roja.
—¡Ni se te ocurra llamarme de esa forma! — la mujer alejo la mano— ¡Me la paso trabajando para darte una buena vida en la que tú no tengas que trabajar, no tienes ningún derecho en decirme eso!
—¡Me golpeaste! —se quejó llevándose la mano a la zona herida — ¡No eres mi madre para golpearme!
—¡Me vale una mierda, Daniel! ¡Me estas llamando zorra, lo que haga o deje de hacer con mi vida no es de tu incumbencia! —la puerta de la habitación principal se abrió—... siempre es lo mismo contigo...no entiendo porque eres así —unas pequeñas lagrimas escaparon de su rostro —...he tratado de hacer todo lo posible por ser una buena hermana mayor y tú siempre me tienes que tratar de esa manera ¡¿Qué más quieres?! ¡Trabajo para darles una buena vida, van a colegios privados, nunca les faltas comida, no entiendo que te hace falta para que dejes de tratarme de esa manera!
—¿Daniel, Airam? — la voz de una mujer mayor se hizo presente llamando la atención — ¿Qué hacen despiertos gritando? Van a despertar a Estela.
Airam suspiro y se acercó rápidamente a su madre.
—Perdón por despertarte, acabo de llegar del trabajo y me topé con Daniel, pero ya vamos a dormir ¿sí?
—¡Airam estaba besándose con un wey que ni sabemos quién es, estaba dando todo un espectáculo! —explico Daniel —, y me golpeo por decirle sus verdades.
—Mamá...
—Daniel, ya vete a dormir, lo que haga tu hermana no es de tu incumbencia —defendió María, Airam sintió un peso menos al saber que su madre no parecía molesta —...anda, a dormir, chamaco.
Daniel bufo, maldiciendo por lo bajo para caminar a la habitación que compartía con Estela.
—Perdón por despertarte ¿Cómo te has sentido?
—La medicina está haciendo efecto —le sonrió dulcemente —, espero ya reponerme, Airam, te he estado dejando toda la carga a ti sola, siento que un día te enfermaras...
—No te preocupes por mi...lo importante es que tú te mejores.
—¿Y quién fue ese chico con el que te vio tu hermano? —una mirada picara adorno el rostro de la mayor— ¿Lo conociste en el hospital? ¿Es doctor? nunca te he conocido un novio...
Airam soltó una pequeña risa al ver lo emocionada que parecía su madre.
—No es mi novio —y no mentía, solo eran "conocidos" —...es bombero...me lo presento More.
No podía decir que lo conoció en su otro trabajo, nadie en su familia sabía que era una bailarina exótica, estaba segura que si se enteraban a su madre le daría un paro cardiaco por eso siempre utilizaba un antifaz para bailar y un sobrenombre, él único que conocía su identidad aparte de los demás empleados era Charlie y tal vez los amigos del pelirrojo, esperaba que nadie la delatara.
—Ay, Airam, me alegro tanto que por fin salgas con alguien ¿Cómo se llama? ¿Cuándo me lo presentaras?
—Mamá...no tengo tiempo para relaciones, tengo que trabajar —beso la frente de la mujer frente a ella —, iré a tomar un baño y dormir unas cuantas horas, tengo otro turno en el hospital a las nueve de la mañana.
—Deberías de pedir un día de descanso, podría prepararte algo de comer.
—Mamá, tengo que comprar más medicinas, ya descansare cuando estés bien.
Se sonrieron por última vez, la Castiello entro a su habitación para dejar su bolso a un lado.
Se quitó toda la ropa para entrar al baño y se detuvo unos segundos a contemplar las marcas rojizas que adornaban su cuello y pecho.
Charlie Weasley sí que sabía follar.
Todas las caricias y gemidos recorrieron su mente, quien diría que un bombero haría magia con sus manos y boca
♤♤♤
El pelirrojo siguió los pasos de la chica frente a él mientras escuchaba la voz del moreno a su lado.
—¿Y sabes cómo funciona uno de esos aparatos muggles? —Valkan comía un helado viendo con curiosidad al Weasley —...no estoy seguro de si traen instructivo.
—He domado a un dragón, usar un pelopono, será cosa fácil...
—Es teléfono —corrigió Simona que llevaba varias bolsas en las manos —, tal vez Razvan sepa usarlo, su mamá es muggle ha de saber algo de eso.
—Es muy probable —el pelón le dio la razón a Mona —...creo que alguna vez menciono algo sobre eso...
—Ya está —Charlie se detuvo frente a la tienda de celulares —, pediré un teléfono y lo intentare usar...
—Sí, suena demasiado fácil.
Hablaron al unísono Mona y Balan viendo como el más alto entraba a la pequeña tienda.
[...]
Charlie, Mona y Valkan estaban sentados en modo indio sobre en el suelo mientras el pequeño aparato se encontraba en medio de ellos.
—¿Por qué no prende? — Valkan lo miraba con curiosidad, no hacía nada.
—Tal vez lo debamos de lanzar —razono la única mujer en el grupo—...quizá sea como esas pelotas de colores que avientas y prendes...
—¿Si le lanzo un hechizo creen que funcione? —Charlie tomo su varita dispuesto a lanzar cualquier conjuro que se le ocurriera — ¿Conocen alguno que encienda aparatos electrónicos?
—¿Qué se supone que hacen? —la puerta de madera se abrió dejando ver que una peli azul había entrado a la cabaña y los miraba con curiosidad — ¿Qué tienen ahí?
—¡Charlie se compró un celular y no sabemos cómo se enciende esa cosa! —explico la castaña atrapando un paquete de dulces que Razvan le lanzo —...gracias, pitufo.
—De nada —Charlie y Valkan se movieron unos centímetros para dejar que el recién llegado se sentara —¿Eso es un Nokia?
—El vendedor dijo que se llamaba Nokia 3310, según es nuevo y resistente —el pelirrojo se encogió de hombros —. Ya lo conectamos, pero no prende.
—A ver —Razvan tomo el aparato, los otros tres veían con curiosidad cada uno de sus movimientos —...le tienes que presionar esta tecla...
Le explico a Charlie para prenderlo frente a él, el Weasley ponía atención a cada una de sus palabras.
—...ahora, después de marcar a ese número la línea tiene que activarse...solo hay que esperar a que llegue un mensaje
Las miradas estaban posadas en el celular, parecían impacientes.
Razvan comparaba a sus amigos con pequeños niños que apenas estaban descubriendo la magia o algo parecido, hasta cierto punto le provocaban ternura.
El celular comenzó a sonar con una alarma extraña.
—¡¿Qué es eso?! — Charlie se puso de pie de forma rápida apuntándolo con la varita — ¡Va a explotar!
Valkan tomo a Simona para alzarla con un simple jalón y ponerla detrás de los dos apuntando al celar con la varita.
—¡Hay que salir de aquí! ¡Vamos a morir!
La preocupación recorría a los tres magos que se alejaban, la peli azul puso los ojos en blanco al ver sus actitudes.
—¡Por Merlín! —Razvan tomo el teléfono para hacer que dejara de sonar —...llego el mensaje que estábamos esperando, los celulares siempre suenan así, trio de troles.
Charlie y Valkan soltaron una sonrisa nerviosa ante su actitud, mientras Mona solo se reía.
—Y... ¿Para qué te compraste un teléfono, Charlie? Que yo recuerde te comunicas con tus padres por medio de cartas...
—Necesitaba uno —musito tratando de evitar decir la verdadera razón.
—Para mensajear con Airam —agregaron con voz cantarina los otros dos.
—Cierto, que ella es muggle.
—Últimamente tienes mucho interés en ella, pensé que solo iba a ser algo de una noche — Simona enarco la ceja viendo a Charlie —...no será... ¿Te gusta Airam?
El Weasley puso los ojos en blanco, pero no lo iba a negar, no era un niño de diez años que evadía sus sentimientos, eso no sería muy maduro de su parte.
—Si —agrego con voz segura dejando a los otros tres sorprendidos por la facilidad con la que lo dijo—...me gusta mucho Airam...
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