Capítulo 5
- Vamos- le dije, este paso por la pequeña puerta y la cerré para que nadie lo vea por las dudas.
Se levantó del suelo y limpio la ropa que tenía algo de polvo. Miro alrededor, no había mucho más que paredes con telas de araña y una escalera.
- ¿Qué es este lugar?- pregunto.
- Según investigue en los años que estuve aquí, era una habitación de pánico o por el estilo- dije tranquila.
Comencé a bajar la escalera, me gire y note que el chico no me seguía.
- ¿Me sigues?- pregunté, asintió y fue detrás mío. Caminamos unos segundos y abrí una puerta corrediza.
- Vaya- dijo mirando alrededor.
No era mucho, un pequeño colchón viejo que había logrado reconstruir, le había puesto almohadones y frasadas, alrededor en las paredes había algunas pinturas o dibujos hechos por mi Y libros junto a mapas de la escuela o de la tierra.
- Bienvenido- dije abriendo los brazos- ¿quieres tomar algo? Tengo agua o jugo- mencioné señalando la pequeña heladera.
- No gracias- miró la pequeña biblioteca que poseía- vaya madriguera.
- Es el lugar más oculto que hay en la escuela, nadie puede escuchar lo que sucede y no saben que existe, ni siquiera mi hermano.
- ¿Y me lo muestras?- pregunto con una sonrisa- apenas nos conocemos.
- Es extraño, lo sé- mencioné con una sonrisa- creo que puedo confiar en ti, por eso te lo muestro.
Este miró un poco más alrededor y clavo sus ojos conmigo. Se acercó a paso lento mientras pasaba los dedos por una pequeña estatua.
- Puede ser extraño o no- dijo ladeando la cabeza- tal vez estamos conectados- mencionó tranquilo, se acercó quedando a centímetros.
Tomo un pequeño mechón de mi cabello y lo llevo detrás de mi oreja, estaba demasiado cerca y la respiración de ambos se mezclaba.
- Aunque, acabas de mostrarme un sitio donde puedo matarte y dejarte sin que nadie se entere- susurro divertido.
- No cuenta si dejo que lo hagas- susurre devuelta divertida. Este sonrió y tomo mi mano.
- Tengo algo para ti, sigueme- al decir aquello, apague la luz de allí y salimos. Tome el libro de Alicia haciando que la puerta se cerrará y salimos de la biblioteca.
Cada tanto nos asomamos por los pasillos para que ningún profesor nos vea. A los alumnos no les prestamos atención. Los rumores podían correr si querían, no me importaba.
- Espera, es la zona de las habitaciones de chicos- susurre- hay más adultos- dije cuando paso un grupo de chicos.
- Tranquila, nadie nos verá entrar- respondió.
- Si mi hermano nos ve, te echaré la culpa Colbie- le advertí, este sólo sonrió.
- Como digas Forbes- dijo divertido.
Entramos a aquella zona, andábamos rápido y mirando en todas direcciones para que nadie, absolutamente nadie nos vea.
Llegamos donde estaba la habitación de mi hermano y no caí en la cuenta de que él podía llegar a estar. Este al parecer también se dio cuenta y entró antes. A los segundos salió y me arrastró dentro.
- No es cierto- dije mirando los animales disecados. Era cierto lo dicho por Alex.
- ¿Te gustan?- pregunto cerrando la puerta. Se acercó mientras yo miraba alrededor.
- ¿Tu los disecaste?- pregunté al ver los materiales, pinzas y otros materiales.
- Si- contesto, estaba detrás mío y estiró el brazo a mi lado para tomar uno de los animales. Enseguida lo reconocí- es para ti- susurro.
Tome a la ahora ave de ayer. Estaba colocada en una pequeña rama mirando en un costado.
- Empiezo a sospechar que tu habías lastimado al ave a propósito, para tener una razón y hablar conmigo- gire la cabeza para verlo. Sonrió de lado intercalando su vista de mis ojos a los labios.
- Puede ser- dijo tranquilo.
Escuchamos el sonido de alguien acercándose por lo que miramos a la puerta y sin esperar me metí en el armario del pelinegro.
La puerta del cuarto se abrió. Deje un poco abierto para asomar sólo mi ojo derecho y ver.
- Estas aquí- dijo Alex.
- ¿Me buscabas?- pregunto el pelinegro.
- Sólo- miró alrededor- nada, quería confirmar algo- se acercó a su parte del cuarto, tomo un libro y sólo se fue.
Espere varios minutos, ya había escuchado los pasos alejarse pero no podía correr riesgos.
- Ya se fue- mencionó el pelinegro. Salí del armario y suspire. Tenía el ave en mis manos.
- Debería de irme, antes que alguien me vea- mencioné, el contrario asintió.
- Sería lo mejor antes de...- se calló unos minutos, lo vi con duda.
- ¿Antes de?- este estaba pensativo, me miró y sonrió de lado.
- Haga algo de lo que me arrepienta luego- contesto. Sonreí y mire mis pies y volví a levantar la vista.
- Nos vemos mañana- dije mordiendo mi mejilla por dentro- en la conferencia- mencioné. Este asintió.
Me asomé para ver si había alguien en los pasillos y sólo salí con cautela. Por suerte nadie me vio. Fui directo a mi cuarto donde en el escritorio deje al animal.
Luego de eso simplemente me tiré en la cama suspirando y mirando al techo. Sonreí como tonta y solté unas risitas feliz.
- Nigel Colbie, ¿Qué me hiciste?- pregunté al aire.
Narrador omnisciente
Actualidad.
La mujer salió de la sala de interrogatorios y se fue donde las oficinas se encontraban.
- Este caso es una mierda- dijo tirando los papeles en la mesita del policía.
- ¿Qué quieres decir?- pregunto el contrario.
- Que infravaloras mi inteligencia- contesto la contraria.
- Ese chico es culpable Sally, esta vez créeme- dijo mirándola.
- No puedes defenderte sólo por una corazonada- contesto la rubia.
- Es un puto psicópata, despiadado- contesto.
- Si, claro- hablo con sarcasmo.
- Digo la verdad, no puede ser que a él lo encontremos con el cadáver del chico Colbie y que el mismo día su hermana desapareciera.
- Hablando de eso, ¿Qué pasó, la siguen buscando?
- No encontramos nada, todos los testimonios de ese día terminan con que no la vieron después de las cinco de la tarde- sintió mirándola- no salió del edificio y tampoco volvió a su habitación.
- ¿Quién fue la última persona en verla?- pregunto la mujer cruzandose de brazos.
- Creemos que la bibliotecaria- contesto el hombre.
- ¿Creen?- pregunto irónica- ¿qué pasó, no le preguntaron?
- Encontraron hoy su cadáver en un cuchitril en la biblioteca- contesto.
- Mierda- contesto la psicóloga.
- Si, mierda- asintió el contrario- los forenses dijeron que la asesinaron de apuñalamiento, el asesino estaba enojado y mató lo primero vivo que se cruzó en el camino.
- Ella.
- Si.
- Y crees tambien que fue Alex- dijo mas en afirmacion, el policia solo la miro-Pero aún así nada de eso lleva directamente a que Alex sea el asesino. Por favor, es su hermana- contesto mirandolo- sólo lo juzgaste sin pruebas directas y te metiste en un lío el cual quieres que te ayude a solucionar.
- Podrías tener un ascenso, te coronaron con los grandes y será una buena propaganda te lo garantizo- la mujer sólo rodó los ojos y negó.
- Me voy- sin más que decir se alejó y cerró la puerta de la oficina sin cuidado ignorando al policía.
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