26 de Agosto de 1990

Habían pasado catorce días desde que James, Sirius y Lily habían regresado y la verdad aún seguía siendo raro tenerlos en casa. De Lily no sabíamos nada, lo que James y Sirius agradecían, porque para ellos había sido muy difícil aguantarla nueve años. Aunque que yo sepa nadie los obligo a ello. 

Bueno que podía decir de estos días, supongo que podría empezar por lo bien que se llevaban James y los niños. Era lindo verlos felices junto a él y bueno Harry, Neville y Marie amaban a Sirius, pero modo perro. 

Sobre Sirius y Freya la cosa estaba en pausa, se llevaban bien, pero Freya no iba a caer tan rápido, aunque bueno ya se acostó con él así que no tengo ni idea de lo que hará ella ahora.

Mañana sería el cumpleaños de Marie y cumpliría once años lo que significaba que debía llegarle la carta de Hogwarts. Estaba muy emocionada y todos éramos testigos de eso, era divertido ver la emoción que tenía Marie por recibirla y por ir. Aunque ni James ni yo queríamos que fuera, James porque quería seguir conociéndola y disfrutar de ella y yo bueno solo quería más tiempo con ella.

Así que los dos de alguna manera sufríamos aunque también estábamos emocionados por ella.

—Papá, ¿cuándo llegará mi carta? —nos encontramos los cuatro en el jardín porque Freya y Sirius se habían ido a hacer la compra y apostaba a que no volverían en un buen rato. Remus estaba con su padre porque había enfermado, así que volvería más tarde también.

Las cosas con él iban muy bien y digamos que James y él hicieron de alguna manera las paces, así que me alegraba saber que las cosas estarían bien. Porque no quería problemas y que ellos lo hablaran por privado y lo arreglaran con Sirius presente fue todo un alivio.

—Bueno princesa, suelen llegar por el cumpleaños número once de cada niño —la sentó en sus piernas, ya que estábamos los cuatro sentados en la hierba, Harry y yo leíamos en silencio mientras Marie le preguntaba cualquier cosa a James.

—¿Y si a mí no me llega? —la miro ella con una pequeña triste sonrisa.

—Obvio que te llegara, ¿por qué dices eso? —Marie se encogió de hombros—. Mira princesa, estoy muy seguro de que te llegara la carta, también sé con mucha certeza de que serás la bruja más increíble que hayan conocido. Además de que seguro que serás la bruja más inteligente de todo Hogwarts.

Hace unos días James, Harry, Marie y yo fuimos al Callejón Diagon a comprarle más libros a Marie, porque amaba leer al igual que amaba el Quidditch. Me estaba dando cuenta aunque bueno era evidente, pero hasta ahora no le preste tanta atención que Marie era una mezcla intermedia entre James y yo. Amaba el Quidditch como James y amaba leer como yo, le gustaba ayudar a la gente al igual que lo hacíamos su padre y yo. 

Marie se parecía físicamente demasiado a ambos, tenía un poco de los dos y había heredado mis ojos claros, como solía decirle James estos últimos días.

—Tienes el mismo color de ojos que una persona de la cual siempre estuve y estaré enamorado.

James era un buen padre y eso se notaba bastante, también se veía todo el interés que estaba poniendo para recuperar la confianza de los niños. Era lindo verlo ser feliz con ellos y aunque entre nosotros dos las cosas estuvieron complicadas, era bueno saber que los niños eran felices teniendo a ambos.

Sobre todo el revuelo del regreso de James, Sirius y Lily, bueno era obvio que muchos hablaron de eso y seguían hablando. Si ya era demasiado que Harry Potter hubiera sobrevivido esa noche, que James y Lily también sobrevivieran fue una gran sorpresa para todo el Mundo Mágico. 

En el caso de Sirius fue fácil porque James contó la verdad e incluso pidió que se les diera Veritaserum para que vieran que ninguno de los dos estaban mintiendo. Y bueno ahora, ya que James seguía vivo, pues volvió a trabajar en el Ministerio como Auror, aunque bueno no se la pasaba tanto ahí porque quería pasar estos días con los niños antes de que Marie fuera a Hogwarts. Aunque no estaba segura de que James volviera al Ministerio porque podía apostar que una vez que Marie fuera a Hogwarts, él querría pasar también tiempo con Harry.

Así que dentro de lo que cabe todos éramos demasiado felices, esperaba de verdad que todo siguiera así.

—Vale iré a por unas galletas —les dije mientras me levantaba al igual que lo hacía James.

—Yo te ayudo, no creo que puedas traer la bebida también —asentí con una pequeña sonrisa— No hagáis nada malo niños, volvemos en seguida —los niños asintieron, James y yo entramos en casa y fuimos a la cocina.

—¿Puedes ir a ver el correo? —James asintió con una sonrisa para salir de la cocina y salir de casa.

Pasaron unos minutos, así que decidí ver que todo estuviera bien con el miope, cuando llegue lo vi agarrando una carta y en buzón que teníamos estaba nuestra lechuza. 

—¿James? —él levanto su mirada con una sonrisa hacia mí y me enseño la carta. Era la carta de Marie, James se acerco emocionado hacia mí, entramos y yo cerré la puerta.

—Ya es hora —susurro él.

—Si —murmure con una sonrisa, James me abrazo de los hombros y juntos fuimos al jardín para ver a Harry y Marie jugando con la pelota— ¡Marie! —grité con una gran sonrisa, tanto Harry como ella voltearon a vernos confundidos.

James mostró la carta haciendo que Marie lo viera sorprendida.

—Llego tu carta Marie —dijo él. Marie corrió hacia él con una gran sonrisa, James le dio la carta y ella la miro detenidamente.

—¿Iré a Hogwarts? —ella no se lo podía creer y era normal a mí me paso igual y gracias a eso conocí a gente maravillosa.

—Irás a Hogwarts cariño —susurro James emocionado con lágrimas en los ojos, Harry que también se había acercado mirando a Marie con una sonrisa.

—¡Iré a Hogwarts! —James la tomo en brazos y giro con ella haciendo que ella riera. Yo tomé a Harry en brazos dándole besos por toda la cara haciendo que él riera.

—¡Mi niña ira a Hogwarts! —grito James emocionado.

Después de celebrarlo los cuatro, un rato después llegaron Sirius, Freya y Remus y todos juntos comenzamos a celebrar que la pequeña Marie iría Hogwarts. Sirius no dejo de darle vueltas en el aire haciendo que riera.

Cuando fue el momento de dormir James y yo llevamos juntos a dormir a Marie y Harry. Cuando ya estuvieron acostados en sus camas y listos para dormir, Marie sugirió que James contara un cuento.

—Un cuento, ¿eh? —Harry se había levantado para acostarse al lado de Marie y abrazarla mientras los dos miraban a James con una sonrisa.

—Por favor papá —pidió Marie con un pequeño puchero igualito a los que hacia él.

—Bien, veamos... Había una vez un niño un poco idiota que conoció a una increíble niña en la estación de tren para ir a Hogwarts. Ese niño cuando la vio pensó que había visto a la niña más hermosa del mundo, tenía el cabello castaño, unos ojos hermosos y llevaba en ese momento un vestido floreado. Ellos dos se llevaron bien desde el primer momento y se hicieron inseparables, también conocieron a tres chicos más. Con el paso de los años el pequeño se enamoro de ella, pero él tenía miedo de confesárselo porque ella era tan linda y él tan torpe que sentía que la chica lo rechazaría. Pero un día él se lo confeso al igual que ella y comenzaron a tener una linda relación, pero como el chico era un idiota sin cuidado rompió con ella porque se sentía inseguro y sentía que la chica se merecía algo mejor que él. Con el tiempo el chico se dio cuenta de que lo único que quería en la vida era a la chica, pero ya era demasiado tarde. Así que el chico debió sufrir por su error —mire hacia otro lado con lágrimas en los ojos porque sabía perfectamente que hablaba de nosotros.

—Pero el chico puede luchar por ella papá, ¿la chica lo sigue amando? —lo seguía amando, pero estaba Remus y jamás me perdonaría el hacerle daño porque siempre fue muy lindo conmigo.

—Tal vez, pero estoy seguro de que el chico luchara por ella, cueste lo que cueste —Marie asintió con una sonrisa para abrazar a Harry—. Ahora niños a descansar —los niños asintieron y se acomodaron para dormir.

Tanto James como yo los vimos con una gran sonrisa.

—Te amamos papá —susurro Harry.

—Y yo a vosotros mis niños —sonrió James viéndolos.

NOTA DE LA AUTORA

¿Qué os pareció el capítulo?

Vi los comentarios del capítulo anterior y bueno solo me queda decir que Ivy solo dio su opinión lo menos que quiere es que Remus y Addie rompan. Yo sé que amáis la relación de ellos dos, pero debéis entender que lo que sentían el uno por el otro solo un amor de amistad, porque los dos estuvieron el uno para el otro. Se apoyaron mutuamente, pero incluso Remus lo pensó una vez, pero decidió olvidarlo y pronto veremos un capítulo en pasado donde conversan Freya y Addie. 

Espero que no os moleste mis decisiones, a mí la verdad me encanto el capítulo 21 y bueno simplemente quería que lo supierais, porque siento que no os gusto el cap, pero en mi caso ame todo lo que dijo Ivy.

Sobre hacer sufrir más a James, el pobre yo creo que sufrió bastante, cometió errores como cualquier ser humano, pero debemos separar la relación que tuvo con Addie con ser un buen padre para Harry y Marie. Porque creedme que por ellos haría lo que fuera y sabe perfectamente que lo estropeo, pero yo creo que bastante sufrimiento tuvo y tendrá, pero también debéis poneros en su lugar, no es fácil esta situación.

Espero que no os haya molestado mi opinión.

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