written by 𝗆𝗂𝗄𝖺𝗌𝖺𝗆𝗎𝗇
♯🥊 ‧₊⋆ CAPÍTULO VEINTIUNO ❜🗞️ೃ∗
today we present: Capítulo de relleno.

Tal vez por su cabeza no pasaba exactamente una buena imagen de lo que sus luceros se encuentran viendo ahora mismo, mucho menos en el instante en que escuchó esa llamada que tuvo su compañera de trabajo con alguien cercano a ella.

Seguramente que con Jeon Jung Kook, era por aquello que caminaba nerviosa por alrededor de su escritorio, llamando la atención de la recepcionista que yace observándola sin saber bien qué hacer con la futura madre que parecía verse demasiado nerviosa con la desaparición de su colega más cercana del trabajo, tanto que decidió abandonar su puesto para averigüar lo que le está sucediendo a la muchacha. No obstante, mientras se iba acercando se está dando cuenta de que su preocupación sobrepasaba la leyes de amistad que hay entre ellas. La recepcionista se cruza de brazos, posicionándose en el centro del escritorio de su amiga del trabajo, para que su única atención sea ella, pero la mirada que le dedicó decía todo.

-¿Qué?

-Tú qué. ¿Qué te sucede?

-Nada, unnie, deberías volver a tu puesto antes de que el jefe salga.

-Ese cuento a los chicos, a mí no. ¿Por qué estás así?-cuestionó confusa.-No has dejado de mirar la oficina del presidente desde que Sasaki Miharu entró. ¿Está pasando algo más?

-Sí.

-¿Qué cosa?

-Hac-hace un momento escuché que ella le pediría un préstamo al presidente.

-... No me molestes con algo as...

-Te estoy hablando en serio, unnie.

La mayor echó un suspiro, dirigiendo sus ojos a los ventanales del despacho del presidente Bang debido a que no es una buena idea que le pida un préstamo justamente a ese hombre, probablemente, porque ya sucedió algo similar con la anterior asistente que el mayor tenía, ellas sabían muy bien que eso podría salir demasiado mal y la menor que yace dentro de ese despacho de cuatro paredes les preocupaba de cierto modo, ya que era ingenua, creía en las palabras absolutas del jefe, aun cuando, varias veces vio su lado malvado, siempre haciendo lo que él quería, empero, el secreto de la menor es algo que sus compañeras todavía no sabían.

La puerta se abrió y ellas corrieron a Miharu.

Viernes por la mañana.

-De acuerdo.

Se paró del sillón acorde a su anatomía, veo que dio una gran zancada hasta su escritorio elegante para sacar una chequera. Escribió algo y se acercó a mí con mucha seriedad en su cara, cuando el papel blanco lo tuve entre mis dedos pude darme cuenta de que esto era real, que me metí a mi tumba conscientemente y ya era muy tarde para arrepentirme, moví la cabeza en un gesto de agradecimiento por haberme dado la chance de hacer este pequeño intercambio, ya que era demasiado importante para mí que Jung Kook deje de estar metido en esos lados horribles.

Guardé el cheque entre mis manos.

-¿Necesita algo más, presidente?

-Hoy quiero verte en mi casa a las 21:30 p.m, Sasaki.-ordenó brevemente, sentándose otra vez.

-Está bien.

-Vente con un vestido lindo, por favor.

-Sí, presidente.

-Ya vete.

Cabeceé en afirmación, abandonando el despacho de mi jefe de inmediato.

Sin embargo, mientras que iba saliendo de la oficina del presidente Bang me puedo dar cuenta de que la señorita Choi Soo Byeol está con la recepcionista Shin Ga Hye, por lo que puedo percatarme de que ambas tenían una facetas que me asustó por un tiempo, más que nada la segunda asistente del CEO de esta empresa automotriz. Estando lo suficientemente cerca de ellas decido abrir mi boca más que confusa, aún con la hoja blanca en mis dedos nerviosos.

-¿Qué sucede...?

-Me hago la misma pregunta.

-Miharu, desde el primer día que llegaste, te conté muchas cosas sobre el CEO Bang. Ahora me surge una duda, ¿por qué sigues repitiendo el mismo error una y otra vez?-Soo Byeol preguntó, frunciendo el ceño. Parecía realmente molesta conmigo.-Pensé que también éramos tus amigos, puedes confiar en mí.

-Soo, necesitas calmarte.

-No entiendo por qué me estás diciendo todo esto, unnie.

-Porque acabas de comprometer tu vida.

-¿De qué estás habl...?

-Ya basta. Esto se debe discutir más tarde, no ahora, este no es ni el lugar ni el momento.

-Pero yo quier...

-Miharu.

Advirtió la señorita Ga Hye, ocasionando que cierre la boca y me acomode en mi sitio de siempre, por demás de que no quería lograr ningún problema más dentro de la empresa donde me encuentro trabajando ahora. Fingí que todo estaba bien, guardando el cheque que me entregó mi jefe hace unos minutos atrás, le envié un mensaje de texto a mi mejor amigo informándole que ya está solucionado ese problema que él tenía con esos sujetos, obviamente que él no me creyó para nada hasta que comprendió quien fue la persona que me dio una mano con sus problemas.

Transcurridas las siguientes horas me pude dar cuenta de que mi compañera se encontraba muy enojada con mi persona, simplemente que traté de que eso no me afectara en estos segundos debido a que lo que más me importaba era solucionar en el gran problemón que se metió Jeon Jung Kook, no me interesaba nada más que la salud de mi familia y de las personas que me rodean hace bastante tiempo. Fue a las 16:30 de la tarde en que pude notar la silueta de mi mejor amigo frente a mi escritorio, estaba con un semblante que no suelo ver constantemente, y no era por la razón de que ya no me encontraba viviendo con él, sino porque era muy extraño que Jeon se enoje conmigo. Ahora tenía sus manos metidas en su chamarra, el entrecejo fruncido, una mirada aterradora y la mandíbula apretada, tanto que sentía que se quedaría sin dientes.

-¿Por qué me estás mirando así?

-Tal vez porque sabe que estás demente...-susurró Choi Soo Byeol, fingiendo que prestaba atención a los papeles que están en su escritorio. Jung Kook elevó una de sus cejas negras en afirmación.

-JK...

-JK las bolas, Miharu.

De repente, bajó la cabeza, acercándose a mi rostro para demostrar su molestia con la decisión que había tomado en relación al drama con esos individuos. Humedecí mis labios, desviando la mirada al escritorio. En cualquier otra circunstancia, le hubiera respondido de manera tajante, recriminándole que no tenía ningún derecho a hablarme así, ya que él mismo debería ser la persona capaz de resolver sus problemas sin la ayuda de nadie.

Pero en ese momento no podía, ya que todos mis compañeros me observaban, mirándome de una forma que no me agradaba en absoluto. Lo peor de todo era que no podía decirle nada, porque la mayoría lo reconocía como uno de los amigos del jefe y muy pocas personas sabían que él era mi hermano o mi mejor amigo, por lo que no quería tener problemas en la oficina.

Por eso, decidí guardar silencio.

-No es el lugar, Jung Kook.

-¿Le pediste a Bang Chan dinero? ¿Estás loca?

-Amigo, es mejor que hablemos en mi oficina.

El CEO apareció de repente por el pasillo, dándole una leve palmeada en el hombro de mi hermano adoptivo, sacándolo del momento efusivo que tenía conmigo. Jung Kook me echó una mirada más, demostrándome que esta conversación no se iba a quedar aquí, se alejó de mi escritorio a marcharse hasta la oficina de su amigo, entre que el jefe me dedicó una leve mirada de reojo y directamente siguió a uno de sus amigos.

Los gritos se podían escuchar desde el primer piso, empero, lo que más me avergonzaba era tener que oír la voz de esos dos hombres mencionarme cada dos minutos, haciendo que la mayoría de mis compañeros que están en el mismo piso que yo me dediquen unas miradas que solo demostraban que querían saber lo que realmente está sucediendo entre esos hombres y yo, sencillamente que tomé mis cosas y me marché de allí, necesitaba tener un momento de paz conmigo misma, respirar aire antes de que me dé algo. Estando en el estacionamiento de la empresa no podía parar de caminar en círculos, pero lo estaba haciendo tanto que me estoy mareando con más razón.

-¿Haru?

Volteé la cabeza al ver a uno de mis compañeros más cercanos, él se encontraba con sus lentes puestos y con una expresión en su mirada muy graciosa, aunque cuando sus luceros chocaron con los míos me dieron a entender que solo estaba haciendo zoom con sus ojos porque no me reconocía.

-Ji Sung, ¿no deberías de estar trabajando?

-¿Igual que tú?-río acercándose.

-Bueno, me tomé unos minutos.

-Entiendo... Yo también querría escapar de todos los rumores que hay en la oficina.

-Agh.. ¿Tan rápido llegó hasta allí?

-Sí...

Ji Sung hizo una mueca ante aquello, sin embargo, eso es lo único que me dio a entender es que cuando el jefe se entere de aquello se va a enojar demasiado conmigo y era lo menos que quería.

Han me estuvo hablando por un par de minutos más, de alguna manera, me había relajado de todos los problemas que tenía dentro de la cabeza, solamente que se tuvo que ir antes de que lo echen, algo que me ocasionó mucha gracia en el tono que lo ha dicho. Después de un par de minutos con la cabeza relajada, decidí volver a subir al piso en donde ruego porque esos muchachos ya no estén más discutiendo a todo volumen. No obstante, antes de tomar asiento puedo observar a mi jefe abandonar su oficina con mi hermano detrás de él, quién obviamente tenía una expresión de seriedad rotunda en su faceta, mientras que el director general de la empresa estaba más relajado que todos aquí adentro.

El CEO Bang se detiene frente a mí, era muy extraño verlo tan amable conmigo, o con cualquier miembro de su empresa.

-Hoy no vengas, estaré con Jung Kook.

-Enton...

-Yo te llamaré. Te puedes ir.

-De acuerdo.

-Choi, quiero que hagas las entrevistas por mí.

-Sí, presidente.

-Jung Kook, ¿podemos hablar?-di un paso adelante, queriendo conversar con mi mejor amigo.

-No.

-Oye, no seas egoísta...-murmuré molesta.

-Tú no seas grosera.

-¿Grosera? ¿Por querer ayudar?

-Sí, eres demasiado grosera.

-Kook, vámonos. Los chicos nos están esperando.

-Jeon.

Llamé enfurecida, únicamente que él decidió ignorarme para seguir a uno de sus amigos fuera de la empresa. Eso me demostró que básicamente estoy por arruinar mi vida por una persona que no lo valoraba en lo absoluto, le hice caso a mi superior para agarrar mis pertenencias y alejarme de la empresa. Al menos podría tener más tiempo para mí misma en estas horas, por lo que terminé llegando a mi casa con varias bolsas que contenían comida y bebidas, las bebidas eran las que más me importaban.

Y no dudaría en emborracharme.

Sábado por la mañana.

Desplegué mis párpados de a poco, me dolía la cabeza a más no poder y ni siquiera entendía la verdadera razón por la cual estoy en la cama con tanto dolor debido a que lo último que recuerdo fue tomar la sexta botella de soju y más tarde mi cabeza cayó en la mesa de madera del comedor. Unos sonidos extraños a mi izquierda hacen que voltee mi mirada de a poco, mis belfos comienzan a abrirse impactada de lo que me encuentro viendo, asombrada por la figura que está a mi lado sin remera, chupé mi labio inferior más que preocupada por lo que sucedió.

Tapé mi anatomía con muchísima más razón al darme cuenta de que me hallaba desnuda, porque ni siquiera sabía quién era esa persona y mucho menos en qué instante sucedió. Empero, estaba muy segura de que no me quedaría para averiguarlo, como pude, salí de los edredones rojos de lino, tomando mis pertenencias e irme de aquí, entre que más iba inspeccionando el lugar me di cuenta de que no era mi departamento, aun cuando, algunos sitios eran demasiado parecidos. Es por eso que cuando abandoné esa casa me di cuenta de que estoy parada enfrente de mi puerta.

-¡No!

Chillé frustrada al darme cuenta de que tuve sexo con mi vecino de enfrente. De igual modo, no me podía sacar de la cabeza las palabras que me dijo el chico de recepción antes de mudarme, he creído que aquí vivía vecinos muy molestos, hasta pensé que eran personas mayores que por eso odiaban los sonidos fuertes.

-¿Sasaki?

-¿Ah?-giré mi cabeza a la izquierda, dándome cuenta de que se encontraba mi jefe con un pack de cafés y una bolsa marrón. Parecía completamente una persona diferente a la que conocía.

-Presi-presidente...

-¿Qué haces aquí?

-Yo vivo aquí, presidente. Bueno, ahí.-señalé la puerta de enfrente, entre risas nerviosas.

-Obvio que tienes que vivir enfrente, porque hasta donde yo recuerde mi primo no vive con mi asistente.

-¿Su-su primo?

Balbuceé sorprendida por esa información, no pasó muchos minutos en que la puerta que estaba detrás de mí se abre. Nuevamente, giré mi cabeza sobre mis hombros para vislumbrar al sujeto con quien tuve sexo la noche anterior, sin embargo, viéndolo con mucho detenimiento no se encontraba tan mal que digamos, sus luceros chocaron con los míos para demostrarme una sonrisa perversa de costado hasta que se percata del hombre.

-Channie hyung.

-¿Alguien me puede explicar que está sucediendo?

-Cierto, lamento mis malos modales, hyung.

-Yo mejor me vo...

-Te quedas aquí.

-Ella es mi vecina. Midari.

-Miharu.-lo fusile con la mirada.

-Ah, sí. Lo siento muchísimo.-rascó su nuca con leves risas, hasta parecía salido de un maldito anime. Aunque si estas dos personas son familias puedo entender las razones de que sean muy mujeriegos y se les olvide el nombre de la persona con la cual estuvieron el día anterior.-Tengo problemas de retención de memoria.

-No me digas...

-Pero, ¿por qué luces tan enojado? Mejor entremos, todavía tenemos muchas cosas de qué hablar.

-Sí, y una de ellas es una explicación.

-¿Umh?-el sujeto depravado se detuvo a medio girar en el umbral de su puerta.-Pero, Channie, ¿explicación de qué? Si fue una noche de diversión con la nueva vecina, nada más. No es por ofenderte, espero que no hayan rencores.

-Eso me tiene sin cuidado.

-Quiero una explicación del por qué tuviste sexo con mi asistente, Ye Dam.

No obstante, pude ver la expresión de terror en la mirada de mi vecino de enfrente en el momento en que mi superior pronunció esas palabras.

Parecía asustado.

✂️¡! WRITER'S SPACE "

jelous, este es un capítulo que no lo tenía planeado sinceramente, no se estaba encaminando en el sitio en que yo quería, pero lo tenía que hacer por algunos mensajes que me estuvieron llegando en el privado y de igual modo en el tablero, quiero decir que esto lo estoy expresando lo más pasivo que puedo llegar a ser.

Quiero que entiendan que yo escribo porque me gusta, más que nada lo hago por hobby, sin mencionar que gracias a Stray Kids me inspiro con más razón para poder escribir estas historias que hoy en día están leyendo, yo no lo hago porque alguien me esté pagando o por obligación, es más, si escribo por obligación no me van a salir las historias que yo quiero mostrarles, así que con estas palabras yo espero que puedan entender que no me gusta que me metan presión.

No me molesta que me pidan que actualice ciertas historias, no me molesta en lo absoluto leer todos sus comentarios, sin embargo, llega a un punto que es demasiado molesto, porque siento demasiada carga cuando me dicen constantemente que actualice, y lo peor es cuando piden una actualización (ejemplo, de like an animal) pero lo terminan haciendo en otra de mis historias que están en emisión, cuando no tiene ninguna relación con la historia que ustedes piden que actualice.

Yo de verdad amo escribir, pero últimamente estuve teniendo muchos problemas con la actualizaciones de esta historia porque todas mis historias no las baso en mi personalidad o en la de algún conocido, por lo que es muy difícil inspirarme en escribir ciertas situaciones de esta historia, porque obviamente que no soy masoquista en el extremo en que se desarrolla esta historia y es algo que me cuesta describir.

Y en parte les pido disculpas por no expresarles esto antes, pero leí sus comentarios de que quieren un maratón y lo voy a escribir en algún momento, empero, como les dije en el capítulo 20, si escogen el maratón me voy a tardar en escribir (o no) porque no controlo mi imaginación, sé que dije que ayer iba a subir la actualización cada vez que Chan actualice Instagram o Bubble, simplemente que tuve algunos dramas familiares y no me dio tiempo a subirlo, así que perdón por eso.

Ya no tengo nada más que decir con respecto a esto, simplemente espero que puedan comprenderme y que no piensen que estoy enojada por esos comentarios, sencillamente que era algo que tenía que decir para que comprendan las posibles razones por la cual no pueda actualizar muy seguido esta historia (o el resto de mis obras) ya que casi nunca controlo cuando tengo o no tengo imaginación.

Ahora sí, muchas gracias por tomarse el tiempo de seguir todavía por acá, leer, votar y comentar mis historias, en serio que lo agradezco muchísimo. Ojalá que tengan un buen día. ♥️🌙