Jimin.

Me ofreció de cenar, de beber, pero no me quitaba las manos de encima mientras me besaba.

Yo no quise nada, solo estaba concentrado en la manera en que me besaba, se que se está tomando su tiempo porque no quiere presionarme pero necesito que lo haga.

—Yoon —me miro y lo empuje al sofá —estas muy duro ya —me hinque y Sobe sus muslos —¿puedo intentar?

Asintió y ahora con su mirada felina sobre de mi los nervios comenzaron, baje su cremallera, jalando la cinturilla de su pantalón junto con su ropa interior, su erección salto orgullo de entre sus piernas, es grueso, largo, la punta esta roja y algo hinchada.

—¿Es la primera vez que ves uno minnie? Aparte del tuyo claro esta.

—No es la primera vez, pero si la primera vez que meto uno a mi boca.

—Saca tu lengua y comienza a lamer como una paleta, de ahí lo metes poco a poco.

Pellizco mi labio y yo obedecí, tome la base para lamer despacio un  ligero siseo se escucho, la textura de su piel me hacia desear lamer cada vez más, hasta que llegue a la punta, saboreando lo salado de su líquido pre seminal, mis labios chuparon la punta y lo metí lento hasta que lo sentí cerca de mi campanilla. Pero no entraba todo.

—Así, cuida solo tus dientes y mueve tu cabeza.

Contraje los labios, chupando mientras subía y bajaba, lo que restaba del tronco lo masturbaba con la mano, pasando la lengua de vez en cuando sobre la hendidura de la punta.

—MIERDA.

Eso indica qué lo estoy haciendo bien, metí las manos a mi cabello y tomo un puño, sus caderas se movieron un poco más rápido dentro de mi boca, cada vez entraba más y las arcadas aparecían, la quijada me dolía, pero yo solo pensaba en masturbarme mientras se la mamaba.

Me jalo del cabello haciendo que su miembro saliera de mi boca, un pequeño hilo de mi saliva unía su glande con mis labios.

—¿Te lo tragaras? ¿oh termino afuera?

No conteste solo volví a chupar, tratando de yo solo llevarlo hasta mi garganta lo más profundo qué podía.

La lengua sentía sus venas palpitar, hasta que exploto en mi garganta, el sabor era fuerte pero no me desagradaba la sensación caliente era deliciosa.

Lo saque de mi boca y me miro mientras trataba lento. Su miembro seguía semi duro.

—Ahora debemos de solucionar tu problema, mi lindo Minnie.

Se me acerco y quito mis vaqueros con mi ropa interior dejándome al descubierto. Me sentó en sus piernas acomodando su miembro de nuevo duro entre sus muslos.

—¿Quieres que te pruebe? —tomo mi miembro masturbándolo lento mientras me lengua lamia mi pulso, has qué llego a mi boca —Eres virgen y no se que te gustaría.

—Sigue así.

Se que podría ser más rudo, lo sentí, pero esta tomando en cuenta lo que le dije, su dedo pulgar rodeo la punta de mi miembro presionando hacia abajo, yo me he masturbado antes pero jamás así. Me beso sin dejar de mover la mano, podría sentir como sus miembro palpitaba entre mis muslos.

—¿Puedes hacerme un favor? —jadeo en mi boca y yo asentí —escupe entre tus piernas y apriétalas un poco más.

Mi erección dio un tirón repentino, me incline para dejar caer el hilo de saliva a donde estaba su miembro, empujo hacia arriba y la cabeza salió. Mientras se masturbaba con mis muslos, el me lo hacía con la mano, mi cuello ya tenia moretones por sus mordidas, mis labios ardían por sus besos salvajes, pero yo estaba perdido en el placer. Senti el orgasmo apoderarse de mi, me aferre a sus hombros y sentí su semen entre mis muslos.

Mire su playera y la mía y ambas estaban manchadas.

—Ya ensucie tu regalo.

—Descuida tengo grandes planes para esa camisa, por lo pronto comamos algo, tus lecciones terminan aquí por hoy.

—¿No te gusto? —puso su frente en mi pecho.

—Necesito algunas cosas para tu primera vez, no quiero que sea doloroso, planeo qué tu lo disfrutes…