Como habían planeado hace unos días Jimin y Jungkook, hoy sábado saldrían de pícnic. Mientras que el alfa estaba jugando con Bam, justamente con un juguete que encontró refundido en las cosas de su perro, Jungsoo desde su caminador les animaba a ambos aplaudiendo. Jimin, por otra parte, estaba cerciorándose de que estuviese empacado todo lo necesario pasa su día familiar.

Besando la frente de su hijo, el alfa se dirigió a la cocina en busca de su novio, el cual fue tomado por él con un abrazo desprevenido.

—¡Ay, Jungkook no me espantes!

—¿Ya está todo listo, señor perfeccionista? —mofándose del omega, empezó a dejar distintos besos por su cuello que estaban llegando quizás un poco lejos, puesto que estos estaban siendo mezclados con succiones con el fin de dejar marcas.

Jimin inclinó su cabeza hacia atrás, y llevando su mano al rostro de su novio, le dejó un beso en sus labios, para posteriormente girarse y tenerlo de frente.

—No soy perfeccionista, solo soy precavido.

—¿Te he dicho lo hermoso que día con día te pones más? —preguntó, ignorando lo antes dicho por el omega.

—Sí, casi siempre me lo repites —musitó divertido, para después acercarse a su rostro y dejarle un beso en sus labios—. Toma la canasta, la pañalera y la correa de Bam. —Caminó hacia donde el bebé para tomarlo entre sus brazos. —Creo que por esta vez si deberíamos tomar el ascensor. ¿Qué dices?

Jungkook se lo pensó un tanto, por el hecho de que ciertamente no le agradaba la idea de usarlo cuando cargaba a su cachorro. Pero reflexionado con las palabras que su omega le había dicho; debía confiar y ponerse en las manos de la madre Luna, ya que esta era la única que los podía proteger.

—Bien. Pero aún no tengo muy claro el cómo iremos.

—Sabes que confío mucho en Bam, porque es por lejos el mejor perro. Pero prefiero irme en la parte trasera con Soo-ya, y que ustedes adelante. —Dejó luego un beso en la frente del bebé, quien estaba pegado a su pecho olisqueándole.

—Y luego el sobre-protector soy yo. —Riendo, abrazó al par, para ahora ser él quien les besase.

[ ꗃ lightsbar: masked97 ♡ ]

Jimin se encontraba sentado con Jungsoo en su regazo, bajo la amable sombra de un gran árbol, mientras que a su tiempo ambos veían al alfa jugar con un frisby junto a Bam. Unos minutos después, Jungkook se acercó a donde de ellos.

—Si mal no recuerdo, cerca hay un puesto de helados. ¿Quieres que te traiga uno, amor? —inquirió en cuclillas en dirección a Jimin, pero a la misma vez organizando el pequeño gorrito que traía su hijo.

El omega que minutos antes se había quedado con su mirada perdida en un punto fijo, volvió a la realidad cuando fue tomado del mentón por su pareja.

—¿Amor? ¿Sucede algo? —Jimin se limitó a negar.

—Nada, solo me distrae un poco —mintió, puesto que desde que llegó al parque, había surgido en su pecho una sensación no grata producida por un mal presentimiento.

—Bueno, ¿te traigo de tu sabor favorito? —Teniendo el asentimiento de Jimin, se acercó a dejarle un beso en la frente—. Ya vuelvo. No tardo.

Sin mediar más palabra, el alfa tomó la correa de Bam para ponérsela y llevarlo con él, debido a que no se le hizo justo el dejarlo atado, o el dejárselo de encargo a Jimin, cuando ya estaba con Jungsoo. Volteando una última vez a mirar a su novio que le lanzó un beso, se intentó decir así mismo que si Jimin le había dicho que no ocurría nada, todo se encontraba de maravilla.

Al cabo de unos cuantos minutos (no menos de 5), Jungkook ya tenía en su poder un par de helados tanto para él y su novio, como una gelatina para Soo-ya, y un par de croquetas para Bam. Pero entonces cuando el alfa estaba por irse, escuchó ser llamado por una voz bastante familiar y un viejo apodo.

—¡JK!

—Woowoo —le dijo con sorna al alfa que se acercó casi corriendo hacia él.

—Oh, ¿en serio me estás llamando así? —El alfa contrario hizo mala cara, más, aun así, se acercó a abrazar a Jungkook.

—¿Y de este modo no es como te llaman? —inquirió burlesco, separándose de su viejo amigo.

Volver a ver Eunwoo es algo bastante gratificante para Jungkook, puesto que este fue el único que estuvo cuando sintió que no tenía ni siquiera a sus padres de su lado. Eunwoo fue el que se encargó de hacerle distintos préstamos para poder vivir cuando se salió de su casa con su hijo y también para poder establecerse acá en Seúl.

Y sí, es cierto, habían perdido bastante comunicación en estos últimos meses, pero justo ahora ambos sentían como si el tiempo no hubiese pasado.

—Corrección; el único que me llama y me puede llamar así, es mi Moonbin. —En ese instante se acerca un omega que llevaba la correa de un pequeño Chihuahua.

Este también había sido bastante importante para Jungkook, pues las primeras guías que requería para cuidar a un bebé, las obtuvo de la pareja de su amigo. Moonbin fue el que le enseñó a cambiar un pañal y la temperatura exacta que debía tener un biberón. Le enseñó a sacarle los gases a Jungsoo y el cómo poder cargarlo.

Sencillamente, Jeon sentía que le debía tanto a este par.

—Que bueno es volver a verte Jungkook.

—Lo mismo digo. —El alfa aceptó el abrazo que le ofreció el menor—. Siendo sincero, no creí que seguirías con este perro. —Señaló con su cabeza en dirección a Eunwoo.

—Lo he domesticado, así que no puedo dejarle mi arduo trabajo a otro. —Rieron ambos por el viejo chiste con el que han venido bromeando.

El alfa vibrando sus ojos, se acercó a saludar a Bam, quien a su vez se encontraba ajeno a todo y en su lugar estaba mirando en otra dirección.

—Parece que ya no soy de su agrado, ¿o acaso me ha olvidado? —inquirió en dirección a Jungkook.

—Lo dudo. Bam tiene buena memoria.

—¿Y qué hay de tu vida, Jungkook? ¿Cómo está tu hijo?

—Cierto, ¿en dónde tienes al mini-Kook? Debe estar gigante, ¿no? Y si mi memoria no me falla, creo que ya está por cumplir pronto su primer año. 

—Sí, está bastante grande. —Sonrió genuinamente ante la imagen de su cachorro—. Justo ahora se encuentra con mi omega.

—¿Omega? —No ocultó su cara de asombro, sin embargo, esta fue cambiada por una linda sonrisa—. Que bueno es saber que estás así de feliz. Me alegro mucho por ti, Jungkook —murmuró Moonbin en dirección al alfa.

En ese instante Eunwoo se pone de pie y guarda su celular con algunas fotos que le había sacado a Bam. Dándole una mirada algo extraña a Jungkook, dirigió sus ojos a su novio. 

—¿Amor, me podrías hacer el favor de comprarme una botella de agua? —El omega simplemente asintió, para luego acercarse a una de las tiendas cercanas y traer lo pedido.

Una vez solos, ambos prosiguieron a hablar:

—¿Qué sucede? —cuestionó Jungkook, pues había notado las intenciones del alfa olor menta, de querer hablar a solas con él.

Metiendo sus manos en sus bolsillos, Eunwoo miró una vez más a su amigo.

—Hace como un mes vi a Ji-Eun.

🎀

¿quién es Ji-Eun? Tantantannnn

decubranlo en el capítulo del próximo domingo hdkdjdkd. Les amo, gracias por leer ♡