Taehyung estaba recostado junto a Jungkook, quien se negaba a soltar al mayor. El omega no quería que su alfa hiciera alguna tontería, ante decirle quien había sido el causante de su golpe en la mejilla, no deseaba que se metiera en problemas por algo así. A pesar de que el mayor seguía molesto, no iba a hacer que su omega se sintiera peor. No quería sentir la tristeza en el menor nunca más, y sabía que si iba en busca de ese alfa dispuesto a pelear, sólo lograría que el corazón de su omega doliera. 

La noche llegó bastante rápido para ambos, aún así Jungkook se negaba a dejar que el mayor se fuera. No quería quedarse solo, después de todo sus padres estaban fuera de la ciudad y solo estaba él en la casa. 

—No quiero —Murmuró el menor, aferrándose aún más al alfa luego de que le dijera que debía irse.

—Kookie, debo irme —Jungkook negó.

—No me quiero quedar solo —Taehyung iba a decir algo más, pero tampoco quería que su omega se quedara solo. Y él no iba a dejarlo.

Taehyung tomó su celular y le marcó a su madre, diciéndole que se quedaría esa noche con Jungkook ya que no se sentía del todo bien. Su madre no se opuso a ello, por lo que Taehyung se quedó con Jungkook. A pesar de ello; ambos debían levantarse para cenar algo. Pero Jungkook siquiera quería hacer eso, Taehyung estaba preocupándose un poco por el omega.

—Kookie, ¿Qué sucede? —El menor negó cerrando sus ojos nuevamente—. Sabes que no puedes ocultarme nada, lo sabré ahora o luego —Jungkook hizo un puchero.

—Es que... —Suspiró—. Mi celo está por llegar —Murmuró.