8. Es Hora de Hacer de esta Torre la Familia Americana Perfecta.

"¡Mi hijo favorito y mi superhéroe menos favorito!" Tony saltó del sofá y sonrió cuando Harry y Steve regresaron a la torre. Steve todavía estaba completamente vestido, luciendo ridículo como siempre, pero Harry tenía un pequeño impulso en sus pasos que hizo que la sonrisa forzada de Tony se sintiera más genuina.

Tony no había estado exactamente de acuerdo con el plan de 'sacar a Harry de la torre y meterlo en un posible circo mediático', pero Bruce dijo que lo último que Harry necesitaba era estar aislado todo el tiempo, así que lo intentó. Y realmente no esperaba que Harry tuviera problemas reales en un concierto benéfico, pero eso tampoco le había impedido mantener los doce canales de noticias transmitiendo simultáneamente mientras intentaba concentrarse en el laboratorio.

Y ahora parecía que le debía un agradecimiento a Bruce por la idea. No se lo diría, pero eso no significaba que no se lo debía.

"¿Come te fue?" Tony les preguntó. No se perdió la forma en que Harry obviamente intentaba llegar a su habitación, pero Tony esperaba seguirle la corriente de todos modos.

Harry se detuvo junto a la puerta y se encogió de hombros, su método favorito de comunicación. "Bien."

Tony suspiró y se volvió hacia Steve cuando Harry inmediatamente entró en su habitación y cerró la puerta detrás de él. Sin embargo, Steve no parecía molesto por la interminable reticencia de Harry, tenía una leve sonrisa en sus labios y un pequeño brillo en sus ojos.

"Puede que todavía no le agrademos, pero claramente no tiene problemas para hacer otros amigos", dijo Steve. Colocó suavemente su escudo contra la pared y se sentó en uno de los sillones reclinables. "Creo que se hizo amigo de toda una camada de perros y de otro niño que trabajaba en el evento".

"¿En realidad?" Tony se animó por su breve decepción por el silencio de Harry. Tony estaba molesto porque no había considerado que Harry se sentiría más cómodo con alguien de su edad, probablemente alguien que no creía que le dejaría malditos moretones o lo lastimaría de otras maneras. "¡Jarvis! Envíame una lista de todos los voluntarios del Queens Animal Shelter".

"Tony..."

"Verificaciones completas de antecedentes, información de contacto, historia familiar, todo, Jarvis", continuó Tony, ignorando por completo la débil protesta de Steve. "Si tienen redes sociales, quiero los enlaces. Si se orinan en el jardín de infancia, quiero los informes".

"Muy bien, señor", dijo Jarvis. "He descargado los archivos a tu teléfono".

Tony le lanzó una sonrisa a Steve mientras se relajaba en su asiento. "Esta es la paternidad del futuro, Cap. Conozca a los amigos de sus hijos incluso antes de que los traigan a casa".

"Bien", suspiró Steve poniendo los ojos en blanco, "invadir la privacidad de un niño porque no quieres simplemente preguntarle a Harry sobre su amigo".

"¿Crees que me lo diría?"

"Ni una maldita posibilidad", resopló Steve.

Tony le señaló con el dedo: "Exactamente".

Se sentaron en silencio durante unos minutos, probablemente ambos pensando en el secretismo de Harry y en todas sus otras pequeñas peculiaridades que probablemente fueron efectos secundarios de algún pervertido que lo preparó durante los últimos cuatro años, hasta que Steve se sentó rápidamente y sacó a Tony de sus pensamientos. .

"Deberías conseguirle un perro", dijo Steve rápidamente con una mirada entusiasta en su rostro. "Los perros son buenos para las personas con traumas en sus vidas, hay un grupo de chicos en el centro de veteranos que los tienen. Harry puede cuidarlo y hacer cosas como caminarlo, sacarlo de la torre todos los días, ¡y sería genial para él! Y te lo digo, Tony, deberías haber visto a Harry, pasó todo el tiempo allí enterrado debajo de los cachorros".

Tony no arrulló, porque Tony Stark no lo hizo, pero definitivamente era un espectáculo dulce de imaginar.

"¡Y no obtuviste ninguna fotografía como prueba!" Tony lloró. "Eso es todo. Estoy instalando una cámara en tu casco. ¡Jarvis! Quiero que me envíen toda la cobertura noticiosa del evento".

"Muy bien señor."

"Traidor", acusó Tony a Steve a medias. "Será mejor que haya una foto en alguna parte del niño en una pila de cachorros. ¿Por qué no hiciste el acto de héroe amado y simplemente le robaste un perro mientras estabas allí?

"Mi error", sonrió Steve. Se puso de pie y agarró su escudo mientras se dirigía hacia las puertas del ascensor. "¿Cena aquí esta noche?"

"Es domingo", dijo Tony a modo de respuesta.

Generalmente siempre cenaban juntos los domingos. Había sido idea de Steve al principio, una cosa de 'unión de equipo', pero Tony tuvo que admitir que era una de sus mejores. Por lo general, pedían alitas, cerveza y miraban un juego o jugaban a las cartas durante unas horas. Tony ciertamente no iba a decírselo, pero cuando llegó el viernes y Tony quiso arrancarse el pelo del trabajo, esperaba con ansias el domingo por la noche.

Imaginó que sería mucho mejor incluir a su propio hijo en su extraño ritual.

Tony despidió a Steve mientras se iba y luego se preguntó qué hacer... podría ir a trabajar en el problema técnico de los StarkCars por el que Mark seguía llamándolo, o podría ir a preguntarle a Harry si quería un perro...

"A los niños les gustan los perros, ¿verdad?" Tony no preguntó a nadie mientras se levantaba de su asiento.

"Estadísticamente hablando, señor, el 42% de los hogares estadounidenses tienen una mascota y al menos un niño".

"Perfecto", sonrió Tony. "Gracias, Jarvis, es hora de hacer de esta torre la familia americana perfecta".

Ya sabes... con el padre genio con un reactor arc en el pecho que lo mantiene con vida, los tíos y tías excéntricos que resultan ser los superhéroes más poderosos de la Tierra, y el adolescente británico con un pasado turbio y un ferviente deseo de huir a Rusia. con un pedófilo.

Un perro en realidad sería la guinda del pastel de mierda de una unidad familiar que representaban.

Tony tocó suavemente la puerta de Harry y esperó hasta que le dio permiso para abrirla. Harry estaba sentado en el borde de su cama, jugando con el teléfono que Tony casi torció su brazo para agarrar.

Harry lo había rechazado, pero Tony insistió.

En primer lugar, el único argumento que Tony usó contra Harry en la historia fue que era un crimen ser un adolescente en un país del primer mundo sin un teléfono celular. Tony estaba bastante seguro de que había leyes que lo prohibían en alguna parte.

En segundo lugar, tenía tecnología de rastreo y Tony no dejaría que su hijo fuera a ningún lado sin al menos una forma de rastrearlo. ¿Paranoico? Tal vez. Según Bruce, severamente. Pero Bruce nunca había sido secuestrado por terroristas, así que amablemente podía irse a la mierda.

Y en tercer lugar, y lo más importante, Harry estaba en contacto constante con un número no listado y Tony estaba seguro de que era Alexander Ramsey.

Si el niño iba a enviarle mensajes de texto a un pedófilo, podías estar absolutamente seguro de que Tony iba a estar observando esa comunicación con atención. Había debatido si bloquear el número, pero entonces Harry podría hablar con él de alguna manera que no pudiera monitorear. Todo lo que habían enviado y enviado hasta ahora eran algunas súplicas de dinero de Harry y una serie de emojis codificados.

Tony iba a intentar descubrir qué significaban un velero y una araña justo antes de arrancarle los brazos a Ramsey de su cuerpo.

"Hey chico." Tony se apoyó contra la pared de la puerta, dejando mucho espacio entre él y su asustadizo hijo. "Escuché que hoy te hiciste amigo de un grupo de animales salvajes".

Harry hizo una mueca y metió su teléfono debajo de su pierna junto con un trozo de papel. "Tú tienes tu equipo de malditos asesinos, yo tengo el mío. Los míos son más lindos, sin duda, pero me gustan nuestras probabilidades contra ustedes, inútiles.

"Oye, quiero que sepas que soy perfectamente adorable y completamente inútil", dijo Tony mientras señalaba a Harry con una sonrisa. "¿Bruce? No tan adorable. Pero se ve mucho mejor cuando está tan corpulento y destrozando cosas".

Harry no se rió, pero parecía que quería hacerlo, así que Tony se dio una palmadita mental en la espalda antes de sacar a relucir todo el asunto de la mascota.

"¿Tienes un perro en Londres?" preguntó, muy casualmente.

El borde de los labios de Harry se curvó en una leve sonrisa. "Mi amigo sí", dijo, extrañando la mueca de dolor de Tony al recordar a su 'amigo'. "Un perro negro grande, parece muy malo, pero en realidad es un imbécil blando".

"¿Sí?" Tony arqueó las cejas y se cruzó de brazos. "Sabes, podrías tener un perro aquí, si quisieras. Ya tenemos un Clint, ¿qué es un perro más? Además, tal vez podamos educarlos en casa al mismo tiempo".

Harry ignoró su broma y la sonrisa que había borrado de su rostro en favor de su habitual ceño sospechoso. "¿Cuánto tiempo más crees que estaré aquí?"

Para siempre.

No es gran cosa.

"Es difícil decirlo", dijo Tony evasivamente. "Las nuevas identidades súper ilegales no se crean en un día, ¿sabes?"

Como si Tony fuera a dejar que su hijo se fuera a Rusia con un pervertido. Y dado que Petunia Dursley cedería sus derechos a primera hora de la mañana, no era como si Harry tuviera muchos lugares adonde ir. Y de todos modos, no era como si Tony quisiera que fuera a ningún otro lugar. Harry podría quedarse allí, con él, convertirse en un adolescente de mal humor normal en lugar de un adolescente de mal humor traumatizado. Tony podría mantenerlo a salvo, enviarlo a la escuela y eventualmente serían como cualquier otro padre e hijo.

Algo así.

Harry miró fijamente a Tony por un momento antes de aceptar sus palabras con un breve asentimiento.

"Parece un desperdicio tener un perro si tuviera que dejarlo atrás", dijo luego con calma.

Tony contuvo una sonrisa ante el breve destello de anhelo en los ojos de Harry incluso cuando rechazó la oferta. "Nuevo plan: volvemos a ese refugio de animales infestado de pulgas, eliges una pequeña bestia peluda y luego te la llevas contigo cuando te vas. Si es para ir a la universidad o a Rusia, o a la universidad en Rusia, que así sea".

Harry parpadeó por un segundo. "Mira, sigues diciendo mierda como si pensaras que me quedaré, pero te digo que no. No dejaré atrás a mi amigo. Él es mi familia".

Tony no se ofendió porque su hijo prefería una familia formada por un pedófilo a él mismo porque ese monstruo repugnante lo había estado preparando durante años, desde que la tía idiota de Harry le permitió quitarle al hijo de Tony, y Harry solo conocía a Tony desde hacía menos. más de una semana. Con el tiempo se ganaría al chico.

Y empezaría con un perro, maldita sea.

"Oye, no estoy diciendo que abandones a nadie", Tony levantó las manos inocentemente. "Sólo digo que creo que lo que esta casa necesita es algo además de Clint para masticar todos mis cables. ¿Qué dices, chico? ¿Quieres comenzar juntos este hermoso viaje de adopción?

Harry abrió la boca, luego sonó su teléfono y Tony perdió la atención por completo. Lo cual habría sido una interacción adolescente maravillosamente normal si Tony no estuviera seguro de que Ramsey le estaba enviando un mensaje de texto a su hijo.

Harry leyó el texto, entrecerró los ojos, luego apagó la pantalla y le dio a Tony una mirada vacilante. "¿Qué pasa jajaja?"

"¿Qué?"

"Una palabra", dijo Harry arrastrando las palabras, actuando con arrogancia como si Tony fuera el que necesitaba que le explicaran algo.

De tal palo tal astilla.

"Si alguien dijo 'no pensé que lo harías' seguido de 'LO-L', ¿qué significa eso?"

"Oh", Tony se rió entre dientes, "significa 'reír a carcajadas', como si algo fuera gracioso".

Las cejas de Harry se juntaron tal como lo hacía Tony cuando estaba pensando en algo. Una prueba más innecesaria de que Harry era su hijo. "¿Seguro? Porque en realidad no era un mensaje divertido".

Tony se encogió de hombros, "Ese es el único 'jajaja' que conozco, chico".

Harry tarareó y parecía contento de mirar fijamente a Tony, probablemente incitándolo a irse.

"Está bien, está bien, me dirijo a mi oficina", dijo. No era como si pasar una sola tarde con perros y el Capitán América de alguna manera hiciera que a Harry le gustara pasar tiempo con él. "Todo el equipo se unirá a nosotros para cenar esta noche, ¿te gustan las alitas?"

"No."

"Entonces te traeré pizza", sonrió Tony. "Es una cena familiar, realmente estúpida, una idea de Steve obviamente. Lo hacemos todas las semanas; comer, hacer mucho ruido, jugar a las cartas, burlarse de Bruce, intentar que salga. Es bastante desagradable, chico, te encantará".

Harry parecía dispuesto a no estar de acuerdo. "Malvado, entonces me quedaré aquí".

"¿O puedes jugar a las cartas?" Tony ofreció alegremente. "La cena familiar también significa hijos adolescentes hoscos".

Harry parpadeó y luego le dio una mirada fulminante. "No pienso quedarme", dijo con dureza otra vez. "Deja de intentarlo".

Nunca.

"Claro", Tony le guiñó un ojo. "Estaré en mi oficina hasta entonces si me necesitas. No te metas en problemas, o al menos sé muy bueno para que no te atrapen".

Harry resopló y Tony se dio una palmadita en la espalda una vez más.

Sus propios padres habían hecho que ser padre pareciera agotador, demasiado agotador incluso para intentarlo, pero era fácil. Simplemente deja que el niño haga lo que quiera, mata a las personas que lo lastimaron y llévalo a buscar un cachorro.

Fácil.

⚜⚜⚜

Tony sacó su propio teléfono de su bolsillo en el momento en que cerró la puerta de Harry. Impacientemente abrió el programa que seguía los mensajes de texto de Harry y se detuvo a mitad de camino ante lo que vio.

Los mensajes recientes eran con un código de área de Queens, no con el pedófilo en absoluto. Y Harry le envió un mensaje de texto primero...

Hola, soy Harry.

Un niño de pocas palabras incluso a través de mensajes de texto. Y luego la persona misteriosa había enviado una única respuesta, el texto que desvió la conversación de Tony con el niño.

¡Ey! Me alegra que me envíes un mensaje de texto, no pensé que lo harías jajaja.

Tony esperó hasta estar en su oficina para investigar más a fondo. "Jarvis, llama a este número: 917 538 9110".

"El número está registrado a nombre de May y Ben Parker de Queens, y lo utiliza su sobrino, Peter Parker", respondió Jarvis después de un breve momento. "Los detalles de Peter ya están en su bandeja de entrada, señor. Es uno de los voluntarios del Queens Animal Shelter".

"¿Qué haría sin ti, amigo?" Tony sonrió mientras abría su bandeja de entrada y filtraba sus solicitudes para encontrar el informe completo sobre este Peter.

Peter Parker, 16 años, fecha de nacimiento: 10 de agosto de 2001. Hijo de Richard y Mary Parker, ambos fallecidos.

Tony leyó el informe del niño y sintió que se le quitaba un peso del pecho.

Este era sólo un niño. El primer amigo neoyorquino de su hijo.

"Así es como empieza todo, Jarvis", dijo Tony alegremente. "Primero hace un amigo, luego matamos a ese pedazo de basura humana, luego consigue un perro, y luego se queda para siempre y será un final feliz para la familia Stark".

"Si usted lo dice, señor".

"Sí", dijo Tony con firmeza. "Vamos a hacerlo feliz y dispuesto a quedarse o morir en el intento. ¡Oh! ¡Hablando de que! Envía a un abogado el miércoles para que pueda actualizar mi testamento y finalizar la documentación sobre los detalles de la custodia de Harry, ¿quieres?

"Muy bien señor. También tengo una llamada para usted del señor Mark Lee".

"Seguro que sabes cómo arruinar un estado de ánimo", suspiró Tony. Se dejó caer con petulancia en su silla detrás del escritorio y puso los ojos en blanco hacia el techo. "Conéctelo, escuchemos cuál es el nuevo problema en el auto hoy".

⚜⚜⚜

Al parecer, el sistema de navegación se incendiaba cada vez que se escribía una dirección en él.

Lo cual, como Tony intentó señalar, en realidad sólo era un problema si no sabías adónde ibas.

⚜⚜⚜

Tony pasó unas horas frente a su computadora, absorto en el programa del StarkCar. Sabía que tenía que haber una manera de reconfigurar el error de navegación para eliminar el sistema. Estaba jugando con el código en su cabeza mientras contaba las cifras en la pantalla cuando Jarvis lo interrumpió.

"¿Señor?"

"¿Qué?" Espetó Tony, su mente todavía repasando el código una y otra vez en su cabeza, buscando la figura fuera de lugar que tenía que estar causando el problema. Si no lo resolvía rápidamente, entonces la liberación sería pospuesta nuevamente y no tendría que lidiar con las constantes quejas de Mark hasta dentro de un mes.

"La señorita Romanov está en casa".

"Genial", murmuró Tony distraídamente. "Si muevo el siete hacia abajo por el primer grupo de dos, ¿eso solucionará el problema?"

"No lo hará, señor, creo que simplemente restablecerá el sistema para configurar automáticamente los sistemas de idioma en francés cada vez que se active la bocina".

Tony suspiró, eso era lo que suponía. Sabía que eso lo arreglaría o lo arruinaría aún más de una manera completamente diferente.

"Y, como me pidió que siguiera al señor Harry, pensé que tal vez quisiera saber que la señorita Romanov está peleando con él en la cocina, señor".

La cabeza de Tony se levantó bruscamente y salió de su oficina en un instante, olvidando por completo el incendio de los autos inteligentes.