Luna

"Somos fugitivos de la ley. La estupidez es nuestra única opción"
-Dustin Hoffman

Tuve una noche muy larga y complicada, solamente quería dormir y descansar un poco. No quería escuchar reclamos por ningún lado, pero creo que tengo una suerte de perro que eso lo estaba comenzando a notar.

Cuando Cole nos deja al frente de la casa de las chicas, no pasé por alto cuando vi que Hero se acercaba furioso hacia dónde estamos. Lo pude ver en sus ojos, venían con todo.

Rous se adelantó a salir primero del auto y le hace señas a Hero con la mano que para después el regaño y me abre la puerta para ayudarme a bajar del auto.

Me apoyo en su brazo y comienzo a caminar cojeando. Hero, al ver que Rous me está ayudando a caminar, su vista baja primero a mi pie y después su mirada va a los raspones en la rodilla, donde sale corriendo para ayudarme. Me agarra por el otro brazo.

«Ahora si, puedes ser nuestro príncipe azul».

Está muy sarcástica hoy, ¿he?

— ¿Está bien? ¿Qué fue lo que pasó?—me pregunta asustado ayudándome a caminar.

¡Cómo que se olvidó de lo furiosa que estaba!

— ¡Estoy cansada de que todos me pregunten si estoy bien! ... Claro que estoy bien!— le respondo alzando la voz y quitándome de encima de él, con un solo tirón quito mi brazo de su mano, provocando que me cayera. Sé que estoy siendo un poco rústica con él pero es que estoy cansada. — ¡Ay!— dije, cuándo sentí el suelo.

«Eso te pasa por meterte con mi catire.»

Todo el golpe fue en mi trasero y además me duele mucho el tobillo del pie. Me acaricié con cuidado el tobillo para calmar un poco el dolor. Veo que Hero se aproxima a darme la mano para ayudarme a levantarme.

—Solo estoy un poco preocupado, y quiero ayudarte. — dice mirándome a los ojos.

Le doy mi mano y me levanto con cuidado.

—Bueno, hasta mañana, Rous te escribo después, chao Star y Luna espe...— no lo dejo terminar, así que contesto rápido.

— ¡Si vuelve a decir que si estoy bien o que espera que me recupere o algo por el estilo, haré tu vida de un infierno!— le chilló molesta, dándole la espalda. Sigo caminando hasta la puerta de la casa.

— ¡Luna no sea así! todos nos preocupamos por ti, sé que tuviste una noche complicada. —Me regaña Rous haciendo que le pida disculpa a Cole.

<<Claro que tuve una noche complicada, me duele mucho el tobillo del pie y solo quiero descansar, pero aun así no voy a dar mi brazo a torcer. >>

Después de tanto regaño de Rous le pedí perdón a Cole, sí, ja. Al final le pedí disculpa y las gracias por traernos, luego le dije a Hero que me ayudara a subir la escalera, que solo estoy un poco cansada, deje a Star y Rous afuera despidiéndose de Cole.

Hero me ayudó a subir la escalera, al llegar arriba, abre la puerta. Me dejo en la cama de Rous y me dijo que va a bajar rápido a buscar algo y traerme más hielo o un desinflamatorio para el tobillo y que ahorita sube. Después sale de la habitación muy apurado y escucho cuando está bajando la escalera.

Un segundo después estoy sentada en la cama, lo único que puedo pensar que noche tan loca tuve y cómo Hero se ha preocupado por mí es tan lindo, pero...

¡No! debo desechar esa idea de mi mente, escuché perfectamente cuando le gritaba a Rous por celular algo sobre "una cita" y me golpeo en lo más profundo de mi corazón. Siempre que escucho que está saliendo con alguien, me pongo mal, pero tengo que disimularlo.

«Además, no hay que ser tan tonta para adivinar que le arruinamos el polvo de media noche». ¿Quién diablos tiene una cita a media noche? Ni que él fuera el protagonista de la película de Amor a media noche.

Escucho gritos abajo, me imagino que es Hero regañando a las chicas. Estoy cansada de escuchar gritos hoy, suficiente tuve con Star, así que me levanto de la cama, cierro la puerta con cuidado y me voy ayudando con la pared para llegar a la esquina de la habitación. Dejé mi bolso antes de salir en el suelo, al lado de la cama de Star.

Saqué un short corto para cambiarme y ponerme una franelilla. Por lo que después de cambiarme, me lanzó en la cama con cuidado para acostarme, donde no he cerrado bien los ojos cuando de repente entró Rous muy furiosa a la habitación, dirigiéndose al baño y tirando la puerta. Star solo busca su pijama y me sonríe.

— ¡Qué se cree ese bobo, que todo lo puede controlar!— grita Rous desde el baño abriendo la llave de la ducha.

—Déjalo así, él tiene la razón. — dice Star cambiándose y subiéndose a su cama.

De repente, Rous abre la puerta y se asoma, poniendo su cara de: no me fastidie ahora. Mirando a Star.

— ¿Razón? ¿En qué razón va a tener ese bobo?— demanda Rous señalando la puerta furiosa como si él estuviera afuera. — Todo porque le arruinamos la cita con Anna Will, esa plasticona, me lo va a pagar— señala, entrando al baño y cerrando la puerta de un golpe.

Está muy furiosa además, cuando ella se pone furiosa, se va a bañar para planear algo y no es nada bueno. Decido por acostarme y no hablar, primero porque Anna Will es la chica más popular de este pueblo y segundo porque no quiero que me sigan preguntando.

—Buena noche, Lu, que duermas bien. Esperemos que se le pase la furia — me dice Star abrazándome y lanzándose a su cama, apagando la luz.

—Igualmente, Star.

Después de tanta vuelta en cama no tengo sueño, escucho cuando abren la puerta de la habitación y no me muevo porque creo que es Hero y escucho que me llama, así que no le hago caso y en pocos minutos me quedo dormida.

Todo está oscuro a mi alrededor, lo único que emana la luz que se puede ver a lo lejos es la luna, como si fuera lámpara para alumbrar el camino a los extraños. Siempre me mantengo alerta para ver dónde me encontraba y no me lo podía creer: estaba en el ¡bosque!

¿Qué hago yo aquí?

Me encontraba sola en el medio del bosque, podía sentir bajos mis pies la tierra, humedad y recién fresca, como si alguien la hubiera mojado. Miré mis pies para ver si estaba descalza, porque no entiendo cómo podía sentir la tierra.

¿Y si me encontraba descalza en el bosque y era sonámbula? ¿Lo sonámbulo sabe cuándo están dormidos?

Volví a echar otro vistazo a mi alrededor para ver si conocía el lugar. Me encontraba parada en el mismo sitio a lado de la misma piedra, en el mismo punto donde estaba parada antes. Intentó moverme pero no puedo, como si alguien me retuviera en el sitio.

Escuché que alguien me estaba llamando a gritos. Reconocí la voz al instante: era la de Rous.

— ¡Luna!— gritaban más fuerte hasta que llegaban a donde me encontraba parada.

—No grite, Rous, estoy aquí. — le dije acercándome a ella.

¿Ahora sí me podía mover? Pero ella no me ve.

—A lo mejor salió corriendo con nosotros y se desvió por otro camino. — le dice Cole a Rous abrazándola, ella niega con la cabeza diciendo no frenéticamente.

—No, no, y no. Ella no es así, yo la conozco perfectamente, ella no agarraría otro camino. — dice Rous asustada. — ¿Y si le dio una de sus convulsiones? Me va a dar algo si algo le llega a pasar. — dice llorando en el brazo de Cole, ella lo abraza con más fuerza aferrándose a él.

Primero que todo, ¿quéhago aquí? si ya yo estuve aquí.

Segundo. ¿Por qué ellos no ven? Me lo repetía una y otra vez. Podía sentir en mi piel el susurro de la brisa fría, el silencio de la noche cuando quedé sola en aquel sitio.

—Luna— escuché que me llamaban en un susurro que hizo que dejara de ver el lugar por donde se habían ido Rous y Cole, dándome la vuelta al lugar donde había escuchado el llamado.

Pero todo estaba oscuro y lo único que podía más o menos ver era aquella misteriosa piedra. Que me acerqué poco a poco, atraída como cualquier polilla por la luz, mis brazos se estiraron en el aire con intenciones de tocar aquella roca que cada vez más me acercaba una luz que aprendía de ellas y mis dedos estaban a solo centímetros de tocarse cuando...

Abro los ojos desparedos cuando siento que el aire se me corta, haciendo que lleve mis manos a mi pecho, sintiendo aquel oscuro sueño como si me asfixiara y no pudiera moverme. Cuando me tranquilizo y puedo acostumbrarme a la luz, escucho algo.

«¿Eso fue un ruido?»

Busqué mi celular para ver qué hora era, eran las dos y media. Solo habían pasado media hora, pero se sintió que era una eternidad. Llamé a las chicas pero ninguna me respondió. Debe estar súper cansada, así que decido bajar yo misma.

Me apoderé de una sábana porque hace mucho frío a estas horas, bajé para ver qué es lo que estaba pasando. Con cuidado abro la puerta, y bajo cuidadosamente la escalera, apoyándome en ella, aunque ya el tobillo no me duele tanto como antes, pero sí me duele un poco.

Cuando llegué al final de la escalera vi una luz en la sala y escuché risa, pero la risa se me hacía tan conocida que ya sabía quién era.

Cuando entré a la sala cuidosamente, mi vista se dirigió a la tele. Estaban pasando uno de los episodios de The Big Bang Theory. Me apoyo del marco de la pared, viendo cómo Hero sonríe. Su sonrisa es tan hermosa y no hay nadie que ría igual que él, es como si todos los ángeles riaran junto en armonía. Al parecer se da cuenta de mi presencia y se da la vuelta mirándome con esos ojos verdosos.

—Lo siento si te desperté. —informa palmeando el cojín, invitándome a sentarme con él.

—Ya estaba levantada antes de tus ruidos escandalosos—informó pasando por su lado.

Entré a la cocina, me dio antojo de helado de chocolate, abrí la nevera y no vi nada por ningún lado. Qué mal que no se lo recibí a Cole, tuve que mentirle porque no quería nada de él.

—Arriba, en el congelador quedó uno. —indica, entrando a la cocina, viendo que no encontró el helado.

¿Y cómo sabe él que lo buscó?

«Es que no vez que es tu otra mitad.»

No hables pendejadas conciencias.

—Gracias, ya lo vi. — le dije sonriendo, sacando el helado, busqué una cuchara.

Le quité la tapa al pote y agarrado una buena cucharada metiéndomela en la boca, saboreando el helado como si se fuera acabar.

Él solo me mira frunciendo el ceño, riéndose de mi forma de comer helado, así que paso por su lado y casi choco con la silla.

Es mejor que me siento en el sofá.

Después de sentarme, le quito el mando de la tele y me enrollo más en la sabana.

—Oye, yo estaba viendo eso. — se queja quitándome el control de la tele y sentándose a mi lado, arropándose con mi sabana que había agarrado.

—Oye, ten compasión de esta chica moribunda. —Le hago ojitos como si fuera a llorar.

—Está bien, pues. — Me lo da matándome los ojos y entregándome el control de la tele. —¿Qué pasó allá en el bosque?—interrogó mientras que busco un canal bueno.

—Nada. —Miento y sigo cambiando la tele, él me quita el control y me agarra con sus manos suaves por la barbilla, haciendo que lo mire a los ojos.

—Como que nada— no aparta sus manos de mi barbilla, ni su mirada de la mía. — Star me llamó muy preocupada llorando. nuestra mirada se entrelaza, trago saliva sintiendo el tacto de su dedo en mi piel, provocándome una visión cuando veo que el color de sus ojos cambia.

Estamos los dos sentados en el lago de Treverlin agarrado de las manos, él me sonríe diciéndome algo bobo que se le ocurrió en ese momento, mientras que contemplábamos el atardecer. Yo le devolví la sonrisa y de repente me besé.

La visión me hace que me levante de un brinco del sofá, haciéndome tirar el helado en el suelo.

— ¿Qué pasó?— me pregunta agachándose para agarrar el pote del helado antes de que se siga regando en el suelo.

—Nada, me voy acostar, entre unas horas me tengo que levantar. — le dije muy nerviosa, subiendo rápido las escaleras dentro de la habitación y me acosté en la cama.

Todo esto es un mal entendido, no me pone nerviosa él, sino la visión que tuve. Jamás he tenido visiones así, y no quiero que suceda ahora. No puede haber nada entre nosotros dos, no nacimos para estar juntos. Rous jamás me lo va a perdonar si salgo con su hermano.

No debo buscarle las cinco patas al gato, decido dormir un poco para olvidar todo esto. La visión, el bosque, mi tobillo, todo... Quiero dormir y olvida todo lo que pasó hoy.

<<Pero al final las visiones se cumplen, lo quieras o no si uno la deseas. >>

.
.
.
No olviden de votar y comentar si le gusto mucho, me ayudaría en la historia.

Besos y abrazos 😘🤗