Capítulo 31
Repercusiones
Garrett salió muy enfadado de esa habitación y camino hasta su oficina, golpeando, gruñendo y pateando todo a su alrededor luego de su rompimiento con su pareja de años, Ryan Ross.
Estaba enojado, no con Ryan, sino consigo mismo por las repercusiones que tendría luego.
Estaba frustrado y estresado por toda esa situación y lío en el cual estaba metido. Llego a su oficina y tomo la botella de whisky que tenía en uno de los muebles, el cual conservaba ya que era un regalo de un amigo. No solía beber por hacerlo o por diversión, en ocasiones lo hacía para acompañar la cena pero no eran tragos fuertes. Pero está vez, la situación lo ameritaba y mucho antes de entrar en un colapso nervioso y explote ante todos.
Agarró un vaso de vidrio y se sirvió un poco, agitando su contenido. Se recostó en su sillón y tiró su cabeza hacia atrás para relajarse. Tomo de un sorbo el contenido y al rato sintió su efecto en sus venas. Estaba un poco mareado recordando las palabras de Ross.
"Usas a Michelle a pesar que está locamente enamorada de ti"
Gimoteo al recordarlo y sintió una punzada en su pecho. Sabía muy bien a lo que jugaba pero él nunca pensó que ella en verdad estaba "Locamente Enamorada". Achino los ojos, solo intuyo que le seguía el juego porque quería usarlo un rato y quitarle dinero. Cosa que nunca pasó.
Pero ¿Porque jamás se le confesó?
¿En verdad lo amaba o era una broma de Ryan diciéndole por despecho?
La respuesta no la sabía con exactitud pero si tenía claro que esperaría aquella confesión algún día.
Se recostó poniendo sus brazos como almohada sobre su escritorio. Veía todo borroso y la vista le empezaba a caer. Noto el desorden en aquella habitación pero poco podía hacer, sus fuerzas se habían ido y su cuerpo no respondía gracias a los efectos del alcohol.
"Sé que desde hace años que me engañas y no te importo todo este tiempo"
Las palabras crueles de Ryan aún resonaban en su mente como agujas filosas.
-eso, eso no es así... -hablo entrecortado, y a la nada- Yo... Yo... he aprendido a quererte pero... -hizo una pausa y prosiguió- jamás pude... Enamorarme de ti... -negó con su cabeza, un un hilo de amargura saliendo de sus palabras- Jamás... Pude ser... Ese Brandon del cual tú... Te inspiraste.... En tu libro.... -entrecerró los ojos, aunque no lo admitiese, le dolía en el alma no ser correspondido por nadie- Lo siento Ry...
Børns cerró los ojos y cayó en un profundo sueño, tirando sin querer el vaso vacío el suelo, haciéndolo añicos.
Los vidrios se esparcieron por todo el suelo lastimando su pie con un trozo del vidrio que se le incrusto en su pierna, este no sintió nada. Solo un pequeño dolor pero no le prestó atención. Por su pantorrilla corría un poco de sangre. De la nada, un portazo escucho y la voz de una mujer llamándolo por su nombre cuantas veces sea posible y zamarreándolo con desesperación.
-¡Mi lord! ¿Que ha pasado? ¿Garrett? ¿Está bien? ¡¡¡OOOhhh, está herido!!! Déjeme ayudarle. -escucho decir en reiteradas veces-
Abrió los ojos encontrándose con la presencia de Michelle, solo sonrió y echó hacia atrás.
-déjame así, no te preocupes hermosa...a nadie le importa mi existencia. -hablo con un poco de dificultad gracias al producto del alcohol que había tomado-
Michelle lo miro seria y se puso de brazos cruzados. Sabía que su amo sabía las consecuencias de tomar tanta cantidad de alcohol y las incoherencia que diría después.
-no diga esas cosas, a mi sí me importa. -Garrett abrió los ojos mientras veía que ella caminaba apresuradamente hacia la puerta- enseguida vuelvo con el botiquín de primeros auxilios. Quédese aquí ¿Ok? -espeto la mujer, frunciendo su ceño, ahora era ella quien tomaba el control de las cosas y de la situación, ya que Garrett no estaba en optimas condiciones-
Garrett se limitó a contestar y asintió sintiendo sus mejillas sonrojadas.
Cerró sus ojos y se relajo aún más, sintió el timbre del teléfono sonar y sonar delante de sus narices. Abrio los ojos con mucha pesadez, le empezó a molestar el sonido del aparato así que levantó el tubo y lo dejo arriba del escritorio, apoyo su cara en la mesa.
-hable -siseo en voz baja-
La voz del otro lado contestó.
-¿Garrett que mierda esta pasando? -escucho la voz de Z Berg desde el otro lado de la línea- ¿Porque no me haz llamado? -recrimino-
Børns frunció el ceño y cerró los ojos.
-¿Elizabeth? -cuestionó, estando poco seguro si era ella o era una alucinación-
Ella contestó furiosa a través del teléfono.
-¡Si estúpido! -exalto la mujer, su voz se la notaba ronca, furiosa y alterada- ¿Quién más va a ser? Ehh -ataco la mujer a Garrett-
-ah -le resto importancia-
-¿Que paso? ¿Cómo marcha el plan? ¿Le has propuesto matrimonio a ese cretino? -le ataco con tantas preguntas a la vez que al joven millonario le era difícil de responder todas juntas-
Garrett bufo rendido y cerró los ojos.
-Eli ¿Desde cuándo haz dejado de ser la dulce y tierna Eli que yo me enamoré? -le pregunto descaradamente, aún seguía bajo los efectos del alcohol-
-Ehh -respondió sorprendida, ya que la respuesta del niño millonario no tenía nada que ver con su cuestionamiento- no me cambies el tema imbécil.... -ella hizo una pausa y recordó como era la actitud de este cuando estaba ebrio- Espera un minuto... ¿Estas borracho?
Como respuesta, solo escucho una risilla proveniente de él.
-mi dulce y tierna Eli, ya no eres la misma de antes... -le dijo sin importarle como esta reaccionase, a estas alturas, nada ni nadie le importaba mas que él mismo-
Garrett tomo el tubo con lo poco que tenía de energías.
-¡Oye! te estoy hablando... Contéstame -fue lo único que escucho de su parte, sus quejas y reproches de una mujer sombría, en la cuál empezaba a darse cuenta que no amaba con toda su alma, las personas cambian, y él también-
Børns lo posicionó arriba del teléfono y corto la llamada.
-flashback-
Garrett era apenas un niño de tan solo 11 años y él ya tenía amigos de su mismo estatu social. Uno de ellos era Jared Leto y su otra mejor amiga era Elizabeth Z Berg, ambos chicos herederos de una increíble fortuna gracias a sus padres.
A esa edad, todos se confesaban sus secretos y más Elizabeth, que sin saber que Garrett estaba perdidamente enamorado de ella, le contó que sentía cosas fuertes o una atracción hacia su amigo Leto. Eso le partió el corazón, pero no dejo de competir contra su amigo por el amor de la chica. A Jared no le importaba porque no estaba atraído hacia Elizabeth, a él le gustaban las chicas mas sexis a pesar que la rubia le enviaba incontables de veces cartas de amor delante de su presencia. Al pasar los años la chica se volvió más fría y no tuvo de otra que salir con Garrett, a pesar de no estar enamorada de este, lo haría para que Jared sintiera celos de este y se decida por ella de una vez por todas.
-Fin del flashback-
-maldito Leto, siempre robándome lo que es mío... -fue lo ultimo que pronuncio antes de caer en una pequeña siesta-
Un pequeño dolor en la parte baja de los pies hizo abrirle los ojos encontrándose con la silueta de Michelle quién estaba arrodillada en el suelo y una cubeta de agua a su lado, remojando una tela y pasándola por la herida ocasionada accidentalmente que el mismo provocó.
Vio la tela mancharse con su sangre y siendo escurrida con las delicadas manos de su fiel empleada.
-Mich, no hace falta que lo hagas... -murmuro para si mismo, pero ella al oírlo, solo lo ignoró-
-usted no se preocupe Mi lord Børns, yo me encargaré de este desastre -contesto la chica prosiguiendo con lo suyo-
-.... Yo te había dado el día libre.... -seguía hablando Garrett pero ella negó varias veces con una sonrisa-
-yo no puedo relajarme a sabiendas que usted y la mansión me necesitan... -espeto la chica un poco seria- No puedo dejarlo así como así, no es fácil para mí...
Garrett frunció su ceño al sentir un ardor en la herida, haciendo exaltar un poco.
-esto dolerá un poco.... -hablo la mujer con un poco de emoción en su próxima acción-
-aghhh -gruño el joven millonario-
Luego miró a Michelle cómo ella limpiaba la herida cuidadosamente con un paño seco y alcohol etílico.
Envolvió en su herida una gasa y una tela seca dado por terminado su trabajo de limpiar la herida de su amo.
-Listo... Ya no habrá problema... -termino el labor con una risa en su rostro, feliz por haber echo un buen trabajo-
Ella se acercó al ver que Garrett se levantaba con dificultad y lo ayudo a reincorporarlo, y lo acompaño dejando que este se apoye en ella para que se recostase en el sofá y descansará mejor.
Acomodó una almohada, vio a Garrett abrir sus ojos y mirar el cielo raso, confundido e ido de sus pensamientos.
-mi Lord Garrett -llamo su atención- ¿Que paso con Ryan? ¿Porque no está aquí con usted? -cuestiono la muchacha- Voy a buscarlo... -se giro hacía si misma y ya estaba lista para ir a buscar al castaño y reclamarle todo lo que estaba pasando y él porque no estaba allí-
Él con sus pocas fuerzas sujeto su brazo haciéndola girar de talón y lo mirase aún más confundida.
-no hace falta... -hablo con dificultad- Ryan se fue...
Michelle se sorprendió tanto que se soltó de agarré, furiosa quiso ir a buscarlo y hablar con él.
-¿Que? -exalto- ¿Pero como puede dejarlo así herido e irse? -dijo ofendida por la situación y aun no comprendía el corazón de hielo de Ross en el que ella creía- Ya lo iré a buscar.
Pero la voz de su amo la detuvo.
-¡No! -exclamo en voz alta- Por favor Mich... -bajo un cambio tratando de calmarse- No lo busques.
Ella se quedó impactada por la súplica de Garrett.
-¿Porqué? ¿Que pasó? -pregunto la chica aun sin comprender-
-nada, nos peleamos definitivamente. -agacho la mirada al suelo, Garrett sentía un dolor en el fondo de su corazón-
-por eso mi amo estuvo bebiendo.... -pensó la muchacha y luego hablo- ¿Y no piensa hablar con él y arreglar las cosas? Entiendo que... -hablaba la chica hasta que fue interrumpida-
-deja las cosas así, ya está. -espeto el joven millonario negando con su cabeza- No puedo hacer nada para retenerlo. -entrecerró sus ojos y recordando sus ultimas palabras en las cuales le había dolido, pero no podía negar porque todo lo dicho por Ross era cierto- Él ya eligió su camino.
-mi Lord Børns -murmuro para si misma siendo audible para este-
Camino hasta el y se sentó en el sofá mientras lo veía recostado, sus ojos viajaron y miro hacia atrás donde ella estaba y cruzaron sus miradas, ella no podía contenerse y dejar de mirar sus ojos color café y su perfecto rostro, sus labios deseándolo ser probados y devorados. Trago grueso e hizo la vista gorda hacia otro rincón.
Michelle dejo que su amo apoye su cabeza sobre sus piernas, dejando caer su largo cabello hacia un lado.
De los nervios que sentía en su interior, no tuvo de otra que acariciarle su cabello sin su consentimiento. Este no se negó y se relajo más, dejando así ver una sonrisa en su rostro mientras cerraba sus ojos y descansaba.
-mi Lord Garrett, cuidaré de usted cueste lo que me cueste porque ya no nos une solamente el trabajo, a partir de ahora nos unirá algo más importante y será para toda la vida. -llevo su mano en su abdomen y con una ligera sonrisa- Nuestro bebé será mi tesoro más apreciado que la vida me podía haber dado. Lo amo, no se imagina cuánto. -pensó por sus adentros admirando la silueta perfecta de la persona que amaba dormir plácidamente sobre su regazo-
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Ryan había llegado al departamento de Wentz antes de la media noche. Cansado, deprimido y molesto por todo lo sucedido con Garrett. Terminar con él había sido la experiencia más horrible y además, tuvo que sacrificar lo más valioso que eran los recuerdos de su amada, todo para librarse del demonio de su ex pareja recientemente, que lo tenía atrapado en una relación tóxica sin sentido.
Al abrir la puerta se encontró con la mirada divertida de Pete mientras este estaba sentado en su sofá bebiendo cervezas viendo un partido de béisbol por la televisión.
-llegas tarde amigo -le dijo divertido- pensé que te habían enjaulado de nuevo -rió un poco tomando un poco de la lata de cerveza que aun tenía en su mano-
-casi -respondió con pocas palabras, no tenía muchas ganas de entablar una conversación amigable en esos momentos, se sentía frustrado y devastado-
Pete vio el semblante de Ross muy desanimado. Así que le hizo un ademán con sus manos y lo invito a sentarse a su lado. Su idea era animarlo un poco y conocer un poco mas de él.
-toma, esto te ayudará a relajarte -le ofreció una lista de cerveza bien fría-
Ryan acepto y se sentó a su lado.
-si quieres un oído te puedo escuchar, te hará bien... -le atino confianza Wentz- En serio.
-gracias... -abrió la lata y la tomo un sorbo-
-¿Paso algo malo? -pregunto Pete, viendo el semblante del castaño cambiar, se estiro un poco mirando el techo-
Ryan se echó hacia atrás y bufó rendido.
-lo que pasa es que soy un idiota... Deje ir a una mujer increíble .... -hizo una pausa, entrecerrando sus ojos y luego agrego- Y ahora, no sé por dónde empezar... Estoy tan frustrado.
-¿que paso con ella? ¿Se enojó contigo? -cuestiono Wentz tomando otro sorbo de cervezas-
El castaño negó con su cabeza.
-se fue a vivir muy lejos y no sé a dónde...-tomo otra lata, la abrió y se tomo de un ligero sorbo-
Sintió un calor recorrer su cuerpo y por las venas pasar el alcohol.
Su cuerpo sintió una pesadez y un cosquilleo. Tenía ganas de soltarse y decirle todo lo que reprimía por dentro desde hace mucho tiempo.
-soy un idiota... ¿Sabes porque? -lo miro de reojo por sobre su hombro, Wentz negó sin saber a que se referiría- porque a pesar que ella me confesó sus sentimientos yo no podía en ese tiempo aclarar mis sentimientos por ella. Me gustaba... -hablo con un hilo de nostalgia- Cuando estaba a su lado y sentía sus ojos sobre mi, sus manos tocar mi tacto... hacia latir mi corazón con mucha fuerza... -respiro hondo y sus ojos brillaban- Cuando la bese por primera vez sentí que el mundo se detuvo y no importo más nada... Pensé que me había hecho fuerte pero sin embargo fue ella la que doblegó mi fuerza interior e hizo que una parte de mi cambiará. -el tomo la lata de cerveza y la admiraba pensando en ella, en su chica- La veía tan tierna, tan indefensa y vulnerable que sentía la necesidad en todo momento de protegerla con mis brazos.... -cerro sus ojos y suspiro- Ahora me di cuenta que soy yo quien la necesita en mi vida...
-¿pero estás enamorado de ella? -pregunto sin querer Pete, mirando a Ross-
-comprendí con el paso de los años el enamoramiento lo siente cuando uno es chico... Uno no puede estar siempre enamorado de una misma persona. -a su mente vino los recuerdos absurdos con Brendon- Pero ese amor se va adaptando a diferentes personas. Con ella pude sentir una conexión especial que con otra persona no he tenido. Estaba tan confundido que no sabía que hacer... -entrelazo sus manos entre si- Si volvería atrás, corregiría mis errores y la elegiría de nuevo. Yo sé que ella necesita de mi como yo de ella.
-Flashback-
-te voy a enseñar a preparar unas deliciosas milanesas. -afirmo Ángeles-
Ryan asintió mirándola como hacía gestos y ademanes con sus manos al hablar. El castaño asintió prestando mucha atención a los pasos a seguir. Anotaba en una libreta los ingredientes y los pasos a seguir, causando un poco de alegría en la joven que la miraba atentamente.
Mientras la observaba sintió su rubor se prominente y su nerviosismo al chocar sin querer con el tacto del castaño.
Camino torpemente y casi cayó al suelo, tropezando con algo que había en el suelo. Ryan llegó a alcanzarla y tomarla con sus brazos, ella cerró los ojos y cuando los abrió se quedó helada al ver que tenía su mano sobre el pecho de Ross y su mirada en su rostro. Ahora su sonrojo había pasado a un color más rojo que los tomates.
Se quedaron así unos minutos, mirándose el uno al otro a los ojos, hablando con la mirada diciéndose más de lo que los labios querían decirse. Un ruido proveniente del pasillo los hizo separarse y tomar distancia enfocándose en lo suyo.
....También recordó cuando la acompaño en su última ocasión, a buscar a su hija. Estaban hablando amistosamente debajo de aquel árbol que daba una inmensa sombra. Se habían besado, y no le importaba. El quería seguir haciéndolo aunque el tiempo le dijera ya basta. No podía dejar de hacerlo y quería seguir ahí, debajo de ese árbol junto a ella. En ese lugar, donde daba la brecha a su nuevo romance.
-Fin del flashback-
-la amo... -murmuro en voz baja, cosa que no escucho Wentz-
El otro se había acordado de lo que tenía que avisarle antes de que se quedará dormido en el sofá.
-¡Oye amigo! -le toco el hombro para llamar su atención y que le prestará atención pero no había reacción por parte del castaño- En estos días, cuando estés mejor... Tengo preparada una entrevista con el director de la editorial donde trabajo. Seguro que no tendrás problemas en que te tome de empleado, ya que experiencia en escribir ya tienes.... -achino los ojos y negó con una sonrisa de lo inútil que se veía hablando sólo- Es solo cuestión de hablarlo..
Ryan se había dormido y no había podido escuchar la noticia. Pete sonrió y negó varias veces. Lo cubrió con una manta y apagó la tv llevando su cervezas a la habitación sin antes de apagar las luces.
Ryan se removió y se colocó de costado.
-Ángeles... Yo te encontraré... Solo espérame...
-Continuará-
¡Hola lectores! Gracias por seguir está historia y sé que no los motivará mucho saber que le quedan pocos capítulos, pero no sé preocupen, que este rompecabezas se irá armando de a poco. Que lo disfruten 😍😉
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