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Capítulo 25

La chica que amas

Ryan llegó esa tarde al hogar de Dan Keyes y de ahí, este lo acompañaría al departamento de su amigo Pete Wentz, quien vivía sólo.

En el transcurso del trayecto, donde fueron conduciendo en auto hasta su destino. Dan aprovecho para entablar una conversación con su viejo amigo...

-oye, ¿No me vas a contar que fue lo que pasó? -le cuestionó el rubio posando su mirada en él- es todo muy repentino de tu parte.

Ryan alzó ambos hombros, queriendo saber él mismo lo que había hecho, jamás se lo hubiera imaginado.

-pues no se, desde que me volví a encontrar con Brendon cambio todo para mí -hablo el castaño un poco más tranquilo- he tenido el valor para enfrentar a Garrett y dejarlo.

-lo sé, hubiera hecho cualquier cosa con tal de ver su cara -sonrió muy entusiasmado- Garrett deberá estar molesto que no estás en la mansión.

-no lo creo, a él jamás le importe -contesto muy seguro Ross evitando mirarle- Haga lo que haga, soy un cero a la izquierda...

Dan le hecho un vistazo rápido, estaba sorprendido antes las palabras de su amigo.

-¿Estás seguro? -inquirió el rubio-

Este asintió.

-a Garrett sólo le importa su fortuna y sus mujeres -dijo el castaño carraspeando su garganta para aclarar su voz, luego agrego- Creo que ni a su madre quiere, en todos estos años jamás la he conocido...

Ryan se quedó un poco pensativo pensando si Ángeles estaba bien, hace unos momentos se habían despedido y ya la extrañaba hasta que fue  interrumpido por su amigo.

-¿Y cuál fue el motivo por el cual te fuiste? ¿Que hizo que estallara el vaso? -le cuestiono serio Keyes, esa sonrisa ya o estaba en su rostro-

Ryan se quedó impresionado y la vez sonrojado, ¿Cómo se lo explicaría?.

-ehm, me obligó a tener relaciones sexuales -espeto el castaño-

Dan lo miro con desdén y sonrió. No se lo creía ni el mismo.

-yo estaría complacido si fuese tú jeje -achino los ojos y rió tontamente-

Al ver que el castaño no respondía a su ironía. Dan agregó...

-pero no es tu caso.

Al consiguiente, el castaño lo medito en ese lapso y tenía la respuesta apropiada.

-cuando no amas a esa persona el sexo se puede convertir en una tortura -hablo serio, luego se acordo de lo que tenía que decirle a su amigo, que era prioridad para él en esos momentos- A todo esto ¿No tendrás un móvil que me prestes?

Dan lo miro pícaro pero entendió que era importante para su amigo, estar sin dinero e incomunicado era como vivir en la calle.

-Si, claro... En la cajuela -estiro su brazo y la abrió, dejando ver un móvil antiguo- solamente, tendrías que cargarlo, está sin uso

-Si, este me sirve ... Aunque sea para llamadas...

Ryan abrió el pequeño papel que Angeles le había dado la última vez que la había visto. Recordarla le hizo dar un pequeño sonrojo en sus mejillas que fue captado por el rubio y este lo quedó mirándolo, como estaba en las nubes y todo embobado.

-¿En qué piensas? -le cuestiono el rubio de su amigo-

Esa pregunta hizo que su pequeño sonrojo se convirtiera  en calor, mucho calor en su cuarto.

-en nada -negó varias veces-

-a ver adivinare -se quedo pensativo y con una media sonrisa hablo- ¿En Brendon?

Ryan frunció el ceño y tosió. Sus ojos se abrieron a la par y si cuerpo se tenso.

-no, se termino todo con él -recalco el castaño dejando al rubio más intrigado por esa historia-

-no me haz contado esa historia amigo -le codeo por la cintura- así que tengo todo el viaje hasta el departamento de Wentz.

Ryan suspiro rendido y no tuvo de otra que contarle su mala experiencia con su ex novio. Trato de omitir la parte sexual pero le contó todo lo que le dijo y lo que hacía Urie.

-jajaja ¿En serio? ¿Me estás bromeando? -rió tontamente el rubio no creyéndose que el mismo Brendon el cuál, el conocía también, era un promiscuo sin sentimientos-

Ryan negó y se puso serio.

-a veces quisiera pensar que él no es esa clase de persona, pero la realidad es que si  -miro al paisaje que lo rodeaba, estaba decepcionado del moreno- No lo reconozco...

-pobre de ti amigo -le contesto queriendo aguantar su risa, trato de verse lo mas serio posible-

Ryan sonrió y eso era raro para su amigo, creyó que haberse peleado con Urie ahora estaría triste y deprimente, peor que la última vez, pero no, Ryan parecía estar perdido en las nubes y feliz.

-Hey Ry -llamo su atención- ¿Tomaste alguna clase medicamento?

Esto hizo que el joven Ross lo mire y negó varias veces, aún su rubor estaba en sus mejillas.

-no -sonrió de la tonta pregunta que le acababa de hacer- ¿Porque lo preguntas?

Dan tuvo que detener el auto a causa de un semáforo, sin mirarlo le contesto.

-es raro que te hayas peleado con Urie y además, te fuiste de la mansión y estés contento... ¿Eso se debe a algo? -inquirió nuevamente haciendo una mueca de lado, no quería que su amigo omita nada a su relato-

Ryan se sonrojo aun más y agachó la mirada un poco apenado, creía que contarle sobre su reciente amorío lo pondría en evidencia.

-estos conociendo a una mujer -soltó el castaño, jugaba con sus dedos, no quería ver la reacción de su amigo-

Dan se sorprendió y abrió los ojos como platos.

-¡Wow! -exclamo- ¿En serio? -volteo a verlo-

Ryan asintió en señal de afirmación.

-ella no es nada comparable con Culleen, Urie y Børns -contesto muy seguro de si mismo- Es una persona muy amable, amorosa y compañera. Es una mujer independiente y muy fuerte, es muy cuidadora con respecto a los que ama y siento que me estoy enamorando de ella cada vez que la veo...

Dan se quedó callado ante las palabras de Ryan, como el la describía tenía el presentimiento de que en verdad la amaba y está nueva decisión de dejar a Garrett, se debía a esa mujer. Sin más, le palmeo su hombro y lo miro con una sonrisa plena

-Me alegro tanto que esa chica te haga sentir tan feliz. En verdad, con todo lo malo por lo que pasaste te lo mereces. -se acerco hasta su amigo y le abrazo por el brazo-

-ahora entiendes porque quiero irme de la mansión y buscar un trabajo. Tengo que ser lo suficientemente bueno para estar con ella y hacerla feliz. -contesto Ryan, ambos se soltaron-

Dan estaba feliz con la noticia pero no debía dejar que Ryan olvide lo mas importante.

-para hacer eso debes volver Ryan, aunque no lo quieras ver a Garrett necesitas de tus papeles y documentos.  -le aclaro Keyes-

Ryan alzó la ceja, no quería volver a la mansión y que convenzan de algo que no quería.

-primero déjame descansar y pensar las cosas. -llevo su mano a su rostro y bufo rendido- No estoy listo para volver ahora...

Dan lo miro, y este tenía algunas ojeras producto al poco descanso.

-debes estar muy cansado -suspiro tomado el volante- ¿Cuando fue que te fuiste de la mansión?

-ayer bien temprano -contesto Ryan sin pensarlo-

Dan se quedó pensando un momento.

-¿Y dónde te hospedaste sin dinero?... -le cuestiono lo más obvio-

Ryan lo miro y de nuevo recordó el momento donde durmió al lado de la chica.

-ehm bueno... Yo... -tartamudeo el castaño, no sabía que excusa decirle-

Su rubor fue tan prominente que ya se parecía al color de los tomates y esto fue percibido por su amigo, quién lo miro con una sonrisa pervertida en su rostro.

-¿porque no admites que pasaste la noche con ella? jajaja -se acerco hasta el para darle otro abrazo- ya somos grandes Ry...

Ryan abrió los ojos como platos, no quería que malinterpretara las cosas. Durmió con ella, si. Pero jamás paso nada sexual, ni aunque lo hubieran querido.

-no es lo que tú piensas -se solto de él muy apenado-

-claro claro amigo jaja -rió tontamente el rubio, al notar que el semáforo cambio a verde, tomo el volante y condujo- ¿Y en qué momento se conocieron? Jamás me hablaste de ella...

-la conocí en la mansión -hablo Ross en pocas palabras-

Dan alzó la ceja impresionado.

-¿Y qué pasó? ¿Cómo fue que ustedes... -no termino de decirle que fue interrumpido-

-aun lo recuerdo...

-flashback-

Ryan empezaba hace unos meses a salir de pareja con Garrett Børns. Todos en su mansión lo sabían pero no lo trataban de igual manera que a todos... Los empleados de la mansión mantenían distancia de él y no le conversaban. Muchos lo ignoraban. Pero no le importaba porque estaba concentrado en promocionar su libro.

Ryan entro a la mansión, en un día como cualquier otro, en compañía de Garrett.

Al entrar se quedaron en la gran sala conversando.

Sintió a los lejos unos murmureos y que estaban siendo observados. A su pareja no parecía importarle, estaba acostumbrado a la suma atención.

Levantó la vista y se cruzó con los ojos que no paraban de mirarle. Siguió observando un poco más disimuladamente, y el efectivo, una chica lo miraba.

Se sintió extraño y desnudo al ser el centro de su atención. Su corazón comenzó a palpitar, jamás la había visto en los pasillos.

Cuando quiso ver más, ella ya no estaba más. Suspiro rendido y relajo su cuerpo.

Con el correr de los días y meses, corroboro que era una nueva empleada en la mansión quien se encargaba de ayudar a Michelle, la asistente nro 1 de Garrett.

Juraba que todos en la mansión lo aborrecía, lo ignoraban y hasta se distanciaban de él sin motivo alguno pero ella no era así.

En ocasiones lo ayudaba, lo asistía, lo acompañaba y eso le hacía sentir bien, lo hacía sentir parte de la mansión.

-fin del Flashback-

Su nombre Ángeles, y más que una mujer, era un ángel de salvación para su vida, a la cual la había destinado al fracaso y desilusión.

Ryan no tenía un motivo real para vivir, se sentía vacío, muerto como una planta.

Lo único que lo mantenía entretenido era su labor como escritor.

Había perdido a su padre, a su primer amor Brendon, Keltie lo maltrato psicológicamente, Børns era frío y poco romántico.

Creyó que pasaría viviendo su vida como un zombie, sin destino,sin sentimientos.

Había olvidado el significado del amor. Hasta que ella se lo dio a entender.

Al pasar la noche a su lado, decidió que su destino era estar con ella sin importarle si tenía hijos. Ellos serían su nueva familia, su nuevo apoyo.

-¿Te olvidaste tan pronto de Urie? -pregunto el rubio-

Esa pregunta hizo poner a Ryan pensativo. Parpadeo un par de veces queriendo buscar la respuesta en su corazón.

-tal vez, creí estar enamorado de él -respiro un poco de aire y luego exhalo- Porque a pesar de haberlo encontrado, seguro me quedé con esa relación del pasado que quedó inconclusa -rio tontamente y luego agrego- Brendon tiene a alguien a quien ama y lo acepte, gracias a sus crueles palabras. La vida continúa y no puedo esperar por siempre por él. Si es feliz a su manera, también lo seré -agrego una sonrisa en su rostro-Siempre lo tendré en mi corazón pero no al Brendon de ahora... Al que yo conocí -concluyo-

-ah -dijo Dan sin saber que decirle- ¿Tienes que ser tan profundo con cada respuesta? Eh

Esa pregunta hizo largar una pequeña carcajada por parte de ambos.

Ryan pensó en las dos ocasiones que estuvo con Brendon sexualmente, y una sonrisa de lado se formó en su rostro. Su encuentro con él no lo hizo tan especial como para amarlo. Solo fue sexo y un encuentro casual.

Brendon se había salido con la suya y lo usó.

-¿Cómo fui tan tonto como para creerle? Él jamás hubiera dejado a su pareja -pensó por sus adentros-

Negó varias veces. Ahora entendió que el moreno fue su mala opción.

Sin darse cuenta por estar perdido en sus pensamientos, llegaron a la casa de Wentz.

Ryan fue cortésmente recibido por este y su amigo Dan se quedó platicando con este, mientras el castaño se acomodaba en el departamento.

-tal vez no se quede muchos días -escucho la voz de su amigo hablar de a lo lejos- Lo llevaría a mi casa pero ya sabes cómo es mi esposa...

-no hay problema Dan -contesto Wentz amistosamente- mientras no le moleste mis ronquidos en la noche jeje -escucho sus risas- me hará un poco de compañía

A Ryan no le gustaba escuchar conversaciones ajenas, por lo que decidió entrar y recorrer el departamento.

Luego de un rato se quedó en la sala esperando por el rubio, pero al rato llego hasta él, hablo unas cuantas palabras y le entrego disimuladamente dinero. Ryan no lo iba a necesitar pero Keyes insistió en que lo guardase para cualquier emergencia.

Ross le agradeció y le abrazo antes de despedirse.

El resto de esa tarde se quedó conversando con Wentz como para que ambos se conozcan y establezcan una amistad por lo menos, el tiempo en el que fuese necesario y se quedará en su departamento.

No veía la hora de irse a recostar en la habitación de huéspedes y llamar por teléfono a la única mujer que le daba vida.

Se acomodo en la cama sin antes poder chequear que nadie lo estuviera escuchando. Tomo el móvil que Dan le había prestado y marcó su número con suma paciencia. Apenas marcaba su número y la llamada se redirigirá al buzón de voz.

Lo intento tres veces más con el mismo resultado. Pensó que tal vez su móvil se había quedado sin batería.

Ahora sí, no podía sentirse tranquilo, se impaciento. Se recostó de costado intentando reconciliar el sueño.

Los minutos habían pasado muy rápido y no había conseguido pegar un ojo.

Necesitaba escucharla y que le hablara de cualquier cosa con tal de oír su voz. La extrañaba y no había pasado un día desde la última vez que la vió.

La imagen de él mismo besándola lo reconfortó para poder dormir en paz al menos.

-Continuará-

Hola lectores! Disculpen la demora, he traído un nuevo capítulo y ayer ya empecé a escribir la continuación. 😉

Si tengo suerte, mañana lo subo

Gracias por leer, espero no decepcionarlos 😊

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