Michelle

-Gatito ¿Estas muy decaído? -pregunto Garrett observando detenidamente a su pareja, quien estaba al frente suyo en la cena- ¿Paso algo?

Ryan solo levantó la vista y negó ladeando la cabeza.

-Si es por lo de hoy, lo siento -trato de disculparse- trataré de recompensarte...

El castaño miro de lado y su vista fue llevada hacia el plato donde tenia su comida servida. No podía decir que no se veía apetecible, pero lo que escucho en aquella casa lo derrumbó.

-no te preocupes, te entiendo -solo atino a decirle mientras se levantaba de la mesa, no había probado un bocado que ya pensaba irse-

Garrett lo quedó mirando confundido, hace mucho no lo había visto así, desanimado y decaído. No podía decirle o averiguar nada, Ryan jamás se lo permitiría.

Así que, simplemente el castaño se fue a su habitación, sin antes de pasar por otro cuarto.

Tocó la puerta, y al ver que no había nadie, entro sin permiso.

Recorrió cada parte admirando las fotos retrato que habían en la pared. Dos jóvenes muchachas que habitaban ahí, salvo que una de ellas ya no trabajaba más ahí.

Llegó hasta esa foto y tocó su rostro cerrando los ojos, imaginándose como si fuera real. Llevó su mano a sus labios y suspiró. Algo extraño sentía, mariposas en sus estómago presentía.

Efectivamente, la extrañaba y lo peor de todo es que ya se había acostado con ella en la única oportunidad que tuvo.

No habían pasado muchas horas de haberse visto pero nada podía hacer. Pronto partiría a otro país.

Se dejó caer sobre su cama y miro el cielo raso.

Sintió un poco incómoda la cama, como un bulto debajo del colchón.

Se paró de repente y levantó el colchón, encontrándose con unas cartas. Eran bastantes. Dejó todo como estaba y tomo esas cartas, guardandosela en el interior de su chaqueta.

Hasta que presintió que alguien venía y volteó para ver de quién se trataba

-¿Buscabas algo o a alguien? -escucho decir por detrás suyo-

Al voltear se encontró con la mirada de Michelle con su típica sonrisa coqueta observándolo de arriba abajo.

Ryan no sabía que decirle o que excusa poner, sabía que la muchacha no era ninguna tonta.

Ella camino a paso lento, sensualmente y se detuvo al frente suyo quedando cara a cara frente al castaño.

-dime lo que deseas y veré en qué puedo ayudarte -sonrió ladino mientras su vista viajaba hacia los labios del joven y ella mordió su labio para humectandolo y de paso, seducirlo- pídeme lo que quieras.

Ryan evitó a toda consta mirarla y caer en sus trampas, una parte de él sabía que ella era la sirvienta fiel de su novio Børns y temía que lo engañase para después acusarlo de algo que no provocó.

-veras -no sabía cómo empezar- sólo quería esa foto de ti y tu amiga -señalo a la pared donde había una fotografía de ella junto a su amiga Ángeles, sin importarle el evidente rubor que tenía en su rostro- es que, como fuimos muy amigos, se me hace imposible creer que ya no esta aquí trabajando con nosotros.

-ah, era eso -le resto importancia- 

Michelle suspiró y levantó su hombros, retrocedió unos pasos y se dejó caer sobre la cama.

-tómala, si lo deseas, no lo necesito -sostuvo, mientras intentaba quitarse los zapatos de tacón que traía puesta, luego masajeo la planta de sus pies y elevo la vista para ver al castaño-

Ryan alzó la ceja, no entendía el porque no apreciaba esa foto si se trataba de su mejor amiga.

-pensé que eran amigas -murmuro en voz baja casi audible para la mujer-

Ella hizo una media sonrisa, se paró a cierta distancia de él y recompuso su postura.

-si, lo eramos Ry -comento de los más normal- pero ella ya no trabaja más aquí -camino a pasos lentos cerca de él y añadió- ya sabes cómo es esto. Un día trabajas para el magnífico Lord Børns y al otro día no. No me sorprende, sabes todas las personas que he conocido aquí, ella fue una más del montón.

Ryan pensó en lo equivocada que estaba. Aunque a simple vista Ángeles era una simple sirvienta, eso no apartaba el humilde corazón y bondadoso que tenía. Llevó a conocerla y podía jurar que ni todo el dinero del mundo la cambiaría por nada.

Él negó, tratando de no escuchar las insignificantes palabras de Michelle. Esta última puso una sonrisa arrogante en su rostro y despegó aquella fotografía para entregársela en las manos.

-no te preocupes, no le diré nada a Garrett sobre esto -espeto- guardaré bien tu secreto -le guiño un ojo haciendo poner más incómodo al castaño-

No podía negar que la chica era muy sensual y muy bella a simple vista pero no confiaba en su totalidad, pensó que algo tramaba, de todos los meses que convivió en la mansión siempre lo trato indiferentemente.

-gracias -vaciló un poco-

El castaño se quedó tieso viendo aquella fotografía que ahora le pertenecía. Mientras que la chica aprovecho su distracción para alejarse un poco, se puso de espalda ante él y removió su largo cabello oscuro a su parte delantera, de a poco, cuando vio que el castaño levantaba su vista para verla, ella desabrochó su camisa, la cual traía puesta y se expuso ante su mirada quedando en brasier.

-si deseas algo más, puedes decirme -hablo la chica un poco más tranquila y con un tono sensual- para eso estoy, para servirte joven Ryan

Él trago grueso y tosió un poco, no podía creer que ella le estaba coqueteando.

-por ahora no -dijo evitando mirarla- igualmente gracias -le hizo una pequeña reverencia para poder irse a su cuarto, realmente estaba cansado-

La chica volteó y miro por su hombro a un castaño sonrojado y apenado. Tomo una blusa que tenía cerca y se la colocó. Luego, giro por sobre su talón y se dejó ver su prominente escote ante Ross.

Ella camino hasta el castaño y tocó jugueteando su hombro.

-deberías olvidarte -susurro la muchacha cerca de su oído- yo puedo ser mucho mejor que ella en muchos aspectos -noto como la chica quería seducirlo con todos sus sentidos pero él no sentía nada por ella, solo la tenía como la cómplice de su novio, ella se estaba acercado más de la cuenta, a pocos centímetros de su boca-

Ryan abrió los ojos muy sorprendido, sin más, entre que pensaba, la chica era bastante astuta y corría riesgo de que lo besase sin consentimiento, con cuidado la apartó y solo le sonrió, como para no quedar mal con ella.

-lo siento, Garrett me espera -se excuso para irse-

Luego de eso, salió de la habitación dejando a Michelle con la boca abierta.

Con una sonrisa de oreja a oreja llevó su dedo a sus labios.

-eres un lindo gatito difícil de atrapar -pensó la chica mientras observaba el trasero y las piernas tonificadas del castaño-

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Mientras tanto

Garrett había terminado de cenar solo en la sala del comedor. Ver a Ryan deprimido le quito la poca hambre que tenía.

Bufo rendido y decidió fumar un abano para calmar su ansiedad y enojo.

Trato de relajarse lo más que pudo hasta que decidió ir a la habitación a ver cómo estaba Ryan. Aunque no lo admitiera, le preocupaba.

Camino hasta la habitación donde ambos la compartían como la pareja que eran y noto que el castaño estaba tendido en la cama viendo el cielo raso con la mirada perdida.

Nunca lo había visto así, salvo aquel día en que Garrett mando a matar a su padre, hace un año atrás, obviamente, Ryan nunca lo supo... los médicos solo le habían afirmado que fue a causa de una muerte natural y jamás se investigó. Børns solamente lo hizo para apartarlo de la fortuna que les correspondería si fuese él el futuro esposo del castaño, gracias a la fortuna multimillonaria que heredó de su madre y que aún no sabe.

Se adentró en el cuarto y Ryan lo dejo pasar por desapercibido.

Así que, Garrett no tuvo de otra que acostarse a su lado.

-dime ¿Que pasa gatito? ¿Paso algo hoy que no sepa? -cuestiono llevando su mirada al castaño, con su mano le acarició el rostro y parte de su cabello- no me gusta verte así.

Ryan no dijo nada. ¿Cómo podría decirle de todos los sentimientos confusos que sentía? Solo ladeó la cabeza. De la nada, sintió una de las manos de Garrett recorrer su entre piernas pero el castaño solo se removió. En verdad, estaba exhausto. No había pasado mucho que se había acostado con Brendon y necesitaba descansar.

-hoy no, por favor -hablo en casi voz baja Ross buscando con su mirada la de su pareja- estoy muy cansado.

-eres aburrido -le bromeo Garrett y le aparto su mano, luego lo acomodo cerca suyo, usando su brazo como almohada para él- ¿puedo saber, al menos, que te paso?

-nada, solo tuve un mal día -respondió seco- tuve muchos problemas hoy.

Garrett lo tomo del cuerpo y lo pegó al suyo. Ryan quedó abrazado a la altura de su pecho

-ok entiendo -le susurro el joven multimillonario- sabes que cualquier problema puedes decírmelo.

Este asintió y dejó llevar por las caricias de su novio, que lo relajaba peinandole su cabello hasta quedarse dormido.

.....

Las horas habían pasado y el joven heredero Børns no podía conciliar el sueño. Trato de distraerse viendo algún canal de televisión pero nada, sintió que ese aparato era para gente estúpida sin cerebro. Sin más, corrió a Ryan con sumo cuidado y lo dejo durmiendo en paz. Llegó hasta él y le besó la frente. No podía decir que no lo quería pero le costaba abrirse con el. Ryan era una persona muy sensible y si le fallabas le costaría mucho volver a recuperar su confianza, cosa que hoy en día le estaba costando bastante.

A pasos lentos decidió ir a la cocina por un poco de leche tibia. Se quedó perplejo al ver, que más adelante en el pasillo de la mansión, caminaba Michelle con un pijama de dos piezas. Eran un vestido corto que dejaba ver sus piernas y arriba una pequeña blusa de tirantes. Sus ojos recorrieron cada centímetro de su cuerpo y deleitando como ella movía su cintura y trasero a cada paso que daba.

-mmm, hermosa -siseo sin que ella lo escuchase-

Michelle se levantó a media noche, siendo que a ese horario los empleados de la mansión dormían, para ir en busca de un poco de agua fresca. Pensó el porque Ryan le era muy difícil de conquistarlo, siendo que a ella ningún hombre la había rechazado. Conquistarlo era todo un nuevo reto.

Llevó hasta mesada de la cocina y se sirvió un poco de agua con un vaso desde el grifo.

De repente sintió unas manos tomar su cintura y apegar su trasero a un miembro erecto y prominente.

Por inercia quiso dar la vuelta y se encontró con las manos firmes de su amo sujetándola desde su cintura y haciendo movimientos pélvicos sobre su parte trasera. Todo eso la hacia excitarle.

-mi Lord Garrett -gimió al sentir una de las manos calidad de Børns subir hasta su pecho y masajearla en esa zona- mmm ¿necesita algo?

Garrett no dijo nada, solo estaba concentrado en querer poseerla ahí mismo.

La dio media vuelta para que pudiera verlo a los ojos y su boca viajo a su cuello, largando un gruñido por parte de él y un gemido por parte de ella.

-te quiero follar ahora mismo gatita -murmuro entre dientes y rompió los tirantes de su blusa, dejándola caer al suelo y exponiéndola ante su mirada penetrante-

Las manos de la chica llegaron a la parte íntima de su amo y acaricio su pene por encima del pijama que traía puesto. Garrett la sujeto de su mentón y la beso desenfrenadamente, como si el deseo lo consumiera. 

En un rápido movimiento, tomo a la chica de su cabello y la jalo hasta allí abajo. Apartó rápidamente su pijama y su bóxer dejando expuesto su miembro ante su mirada deseosa de continuar con lo que había empezado, la chica se deleitaba por querer saborearlo, elevo su vista para ver su cara antes de hacerle el sexo oral que tanto ansiaba, mordió su labio inferior expectante.

-tu eres mía -gimió Garrett tomando su cabello por una parte y con la otra mano tomo su pene y se lo introdujo en su boca- es todo tuyo preciosa... Hazme feliz un momento ahhh.

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Por otro lado

No sabía cómo Brendon había conseguido salir de su departamento. Luego de tener una noche de pasión junto a su dulce novio, se excuso de que tenía que recojer a Hayley de esa supuesta fiesta que le había inventado. Debía arreglar ciertos asuntos que no podían dejar para otra ocasión. Salió sigilosamente de su departamento aprovechando que su cuñado Sung no estaba y Eunkhyun por fin conseguía haberse dormido.

Fue a cierto lugar nocturno donde sabia que encontraría a esa persona. No estaba para rodeos así que, ya pasada las 23 horas se adentró en un antro.

Fue hasta la barra y encontró a aquella persona tomando unos tragos con el semblante serio y decaído.

-¿Problemas con tu matrimonio? ehh -pregunto un poco molesto tocando el hombro de esa persona que se dio la vuelta apenas escucho su voz, estaba muy sorprendido-

-¡Brendon! -exclamo-

-él mismo -espeto- idiota.

El sujeto se levantó de su lugar y se reincorporó abruptamente.

-¡oye! espera -se paró y tocó con su dedo índice su pecho- no quiero discutir contigo aquí, hablemos más tranquilo en el baño del lugar -le señalo el lugar a donde lo quería llevar-

Brendon rodó los ojos y se cruzó de brazos añadiendo luego -como sea -dicho de mala gana-

Ambos caminaron en silencio por el antro siendo conducido por los fuertes sonidos de los parlantes del lugar sonando música para bailar.

Se adentraron al pequeño baño y cerraron con cerrojo para que nadie entrase después.

Luego de unos minutos de silencio hablo el moreno muy molesto, casi enfurecido.

-ahora necesito que me expliques ¿A qué mierda fuiste a mi casa? -alzo la voz Urie increpándolo- ¿Estas loco? -frunció su ceño, podía notarse como los ojos se le iban a salir de la cara de la rabia que sentía-

Dallon retrocedió temiendo de la furia por parte del moreno, palideció viéndolo desatado peor que una fiera.

-yo solo -tartamudeaba retrocediendo hasta tocar la pared de lugar, volteó preocupado al ver que no tenía salida-

-¿Tu solo qué? -se acercó y lo agarro del cuello de su camisa, un poco le costó llegar a tomarlo, Weekes era demasiado alto para él, así que se tuvo que poner de puntilla a sabiendas que el maricón de Weekes era incapaz de tocarle un dedo de encima- ¿Querías ponerme en evidencia ante Kyuhyun? - Dallon negó varias veces y con algunas lágrimas en sus ojos intento safarse- ¿Entonces qué mierda quieres de mí? -grito eufórico- ¿Quieres que te folle ahora mismo maldita jirafa santurrona? -lo miro desafiante-

Dallon no podía creer lo que escuchaba, sin lugar a dudas lo amaba y si lo único que los uniría era el buen sexo lo complacería con tal de tenerlo.

-¡Grítalo! ¡maldita sea! -alzo su voz- ¡pídeme a gritos que quieres que te folle!

-¡Cógeme Brendon! -exclamo de lo más fuerte que pudo- ¡Quiero sentirte! ¡quiero tenerte adentro mío frenton!

-Ok, mas te vale no cometer ninguna tontería mas o te azotare como solo tu te lo mereces -espeto Urie sin apartarle la mirada-

Dallon asintió muy sonrojado.

Brendon sonrió ladino y quito su chaqueta tirándola por algún lugar del baño. Se acerco a Dallon y le quito su camisa, rompiendo con los botones, dejando a la vista el físico de Weekes ante su mirada. 

Una sonrisa arrogante pudo notarse en su rostro, se quito la playera quedando en cuero.

-que empiece la acción -siseo el moreno-

-Continuara-

¡Holis lectores! primeramente, justo surgió este capitulo y el nombre del mismo es debido a que una amiga, que lleva su nombre en el titulo, es fan de Ryan y Borns. Este capitulo se lo dedico por su cumpleaños 🌸🌼🌸

Espero que lo hayan disfrutado y gracias por leer ;-)