Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Miedo.

Un abrazo, un beso, eran algunas de las acciones que utilizaban para mostrarse cariño mutuo.

No sabían cómo había acabado así, tampoco le interesaba saberlo, en esos momentos solo eran dos cachorros dejándose llevar por aquel sentimiento cálido que los rodeaba.

Estaban en una banca a mitad del bosque contemplando la belleza del paisaje conformado por flores, arbustos y árboles, algunos de ellos cubiertos de musgo.

Cerca había un estanque donde nadaban peces y familias de patos, el lugar era pacífico y los acompañaba la melodía de la naturaleza, las aves cantando y el viento soplando, sacudiendo a su vez las ramas y el pelaje de los canes.

Mikellino: Mikie, te amo como no tienes idea.

Mike.exe: G-gracias~

Se acurrucó en el pecho de su compañero sintiendo como este le daba mimos, a pesar de no estar seguro de lo que sentía, su corazón latía fuertemente ante las caricias del mayor.

Mike.exe: Esto... Es tan mágico, casi irreal, es como si fuera un sueño.

Mikellino: Entonces no te dejaré despertar.

Mike.exe: ... Creo... Creo que me gusta esto.

Mikellino: ¿Esto?

Mike.exe: Sí, ya sabes, tú y yo mientras el mundo a nuestro alrededor desaparece, y con él, nuestros problemas.

Mikellino: Te amo.

Mike.exe: Yo... Yo también te amo.

Admitió para después besar los labios del más alto, sus latidos se sincronizaban y sus bocas formaban una danza que ambos parecían conocer y que los llevaba al paraíso.

El beso se volvía intenso, la temperatura parecía subir y se podían apreciar otras intenciones en los ojos de cada uno.

Mikellino: Mikie~

En ese momento reccionó.

Mike.exe: E-espera, es... Es muy pronto para hacerlo.

Mikellino: Vamos, nos amamos y es lo único que que importa, solo déjate llevar.

Mike.exe: N-no...

Ante esa simple palabra la fusión tornó su mirada en una sombría, el exe se mostraba aterrado mientras observaba cómo todo se volvía silencioso y el cielo se nublaba.

Mikellino: ¿Qué fue... Lo que dijiste?

Mike.exe: Yo...

A pesar de tener miedo sabía que no sería feliz hasta aprender a enfrentar los desafíos, uno de ellos era darse a entender.

Mike.exe: No quiero hacerlo.

Habló tan firmemente que por un momento dudó si era suya la voz.

Mikellino: ¿Por qué? ¿¡Ya olvidaste a quién le perteneces!? Yo te lo recordaré con mucho gusto~

Le susurró al oído lascivamente para después pasar su lengua de esa zona al cuello.

Mike.exe: B-basta, no me gusta esto ¡Suéltame!

Usó sus patas traseras para tirarlo de la banca, para cuando se percató de lo hecho el de cabellos azabaches se levantaba del suelo limpiando el hilo de sangre que le corría del labio.

Mikellino: Vas a arrepentirte de eso...

Mike.exe: ¿Y tú crees que permitiré que abuses así de mí? Se supone que hacíamos las pases y tener sexo no está en las opciones.

Mikellino: Tendremos que agregarlo~

Mike.exe: Tú no eres así ¿Qué te sucede?

Mikellino: Sucede que cierto cachorrito planea excitarme y dejarme con las ganas, eso no me parece justo, tendré que castigarlo.

Mike.exe: Atrévete a dar un paso más y te mataré.

Mikellino: Inténtalo.

Soltó una risa con sorna, lo cual preocupó al más bajo, que al intentar teletransportarse se dio cuenta del problema.

Mike.exe: ¿C-como... ?

Mikellino: ¿De verdad crees que me reuniría contigo en privado sin algo que garantice mi seguridad?

Mike.exe: Prometí no lastimarte si cambiabas, tú eres el que rompió su promesa.

Mikellino: Debía mantenerte a mi lado, eres demasiado irresistible~

Mike.exe: No... ¡No es verdad! Lo pude ver en tus ojos... Estabas siendo sincero...

Mikellino: Las apariencias engañan.

Mike.exe: No te dejaré tocarme.

Sacó la estrella en un intento de utilizarla, pero esta parecía no hacer nada.

Mike.exe: ¿Por qué no funciona?

Mikellino: Porque es falsa, no confiaría en ti para darte semejante arma.

Mike.exe: ¿Falsa?

Abrió los ojos sorprendido al darse cuenta de un detalle, miró sus garras rasguñandose las palmas de las manos al hacerlas puño.

Mike.exe: Si me violas... Lastimarías al bebé.

Mikellino: Lo dices como si me importara su bienestar.

Mike.exe: Bien, entonces a mí tampoco me importa~

Mikellino: ¿Qué... ?

Vio como se acercaba a paso lento, emitiendo movimientos provocativos y con una mirada coqueta en el rostro.

Mike.exe: ¿No querías jugar~?

Mikellino: El que juega con fuego se acaba quemando.

Mike.exe: Ya curaré tus quemaduras después.

Mikellino: Creí que querías matarme.

Gruñó al sentir como rodeaba su cuello con los brazos y acercaba su cuerpo.

Mike.exe: Siempre se puede cambiar de opinión, es una lástima que mis padres parezcan no hacerlo.

Mikellino: ¿Ya lo descubriste?

Mike.exe: Soy más listo de lo que crees~

Se separaron a una distancia prudente, al lado del de corona se hizo visible una chica, todo alrededor perdió el color, los árboles marchitos y el paisaje convertido en pantano.

Mike.exe: No creí que fueras capaz de esto... Madre.

Ela.exe: Debo admitir que me tomaste desprevenida al cambiar de humor tan rápido, comencé a pensar que tu parásito te afectaba hasta en los sueños.

Mike.exe: No le llames así, es una criatura inocente y un día lo amarás tanto como yo.

Ela.exe: No podría amar al responsable de alejarte de mi lado.

Mike.exe: Un sueño no basta para hacerme cambiar de opinión, pero te daré otra oportunidad, aceptame y todo quedará perdonado.

Ela.exe: No, te quiero mucho para ver como condenas tu existencia.

Mike.exe: Pues esto no servirá, todo volverá a la normalidad cuando despierte.

Ela.exe: Oh, pero esto no es de una sola noche, haré que todas tus pesadillas sean las mismas, hasta que llegue el punto en el que no puedas ver a esa fusión a los ojos.

Mike.exe: No me hagas esto, por favor, no soportaría odiarte.

Ela.exe: Tú te lo hiciste a ti mismo.

Dirigió su mirada a la copia de Mikellino.

Ela.exe: Ya sabes qué hacer, tortúralo hasta que despierte, ilusionalo para después romper su corazón, justo como lo haría el real.

Mikellino: Creo que voy a divertirme mucho~

El cachorro pelimoztaza retrocedió lo más que pudo hasta tropezar con una rama y caer al lodo, este a su vez parecía atraparlo.

Mikellino: ¿Aún quieres jugar, Mikie?

Mike.exe: ¡Vas a pagar por esto! Te haré sentir tan culpable que desearás regresar el tiempo y haber aprovechado la oportunidad que te dí.

Ela.exe: Ya lo veremos.

Mike.exe: ¡Lárgate de aquí! No quiero verte.

Ela.exe: Pero yo a ti si, y no te dejaré otra vez.

Sintió al más alto acariciar su cintura y abrirle las piernas, rápidamente entró en pánico, apenas sentir al intruso despertó de un grito sudando en una cama que conocía muy bien.

Dálmata: ¡Mike.exe! ¿Estás bien? Te oí gritar.

Mike.exe: No... No está...

Comenzó a llorar deseando olvidar todo, quería al de capa verde a su lado, quería abrazarlo y ser consolado con su calor y dulces palabras.

Dálmata: ¿Mike.exe? ¿Estás... Por qué estás así?

Lo recostó en sus piernas para acariciar su cabeza e intentar parar sus lágrimas.

Mike.exe: Mikellino... Lo necesito, quiero... Quiero estar con él...

Dálmata: Aún falta una semana y media, estarás bien, solo desahogate.

Mike.exe: Tengo miedo.

Admitió entre sollozos, esperando sentir aquel calor que lo calmaba, lamentablemente el único que tenía lo que quería se encontraba a dos kilómetros de distancia encerrado en un palacio y no lo vería tan pronto.

¿Cuánto tiempo aguantaría?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro