Cuatro
Yoon.
Freya Sokolov, 23 años, dos hermanos, sin familiares cercanos y actualmente vive con Adriana Pretov y ambas trabajan en uno de los bares del pakhan.
Supongo que por eso ambas estaban en la fiesta, aún con toda la información el trabajo no me había dejado ir por ella, así que he estado de un humor terrible.
—Deberías de irte a duchar, pareces un maldito loco.
Dimitri me lanza una toalla, mientras fumo tranquilamente mi habano, toda la habitación huele a sangre y pólvora.
—Toma —le lanzó la mano que acabo de cortar —se la tienes que enviar al Pakhan, ya le marque para decirle cuanto robó, solo quiere la evidencia para futuras amenazas.
—Que asco, ¿sigue vivo?
Miro la sangre en el piso y alzo una ceja.
—Tus preguntas a veces me estresan —me levanto y limpio un poco mi rostro —necesito relajarme, han sido un par de meses muy agotadores, iré a San Petersburgo.
—¿A que?
—Mi bocadillo vive ahí, me la voy a follar hasta quedar seco de nuevo.
—Tienes putas aquí también, no entiendo la necesidad de ir tan lejos.
Le lance el cuchillo con sangre rosando su hombro, el sabe que no falle.
—Cuidado como le hablas, ella no es un de esas putas, además prefiero masturbarme antes de meter mi polla en alguna de esas.
—Seguro ella se sentirá feliz de que el asesino más temido de la bratva la corteje, puto enfermo.
—No tiene opción.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro