XLIII: Tic Toc
La rubia salió del elevador a paso rápido para recorrer el largo pasillo pasando a lado de varios Aurores que la miraban con curiosidad, incluso alguno trato de pararla para que le dijera a donde iba, pero ella lo ignoro para seguir su camino.
Se detuvo frente a un fino escritorio de caoba donde una chica de cabello oscuro coqueteaba con un pelirrojo que usaba lentes, de inmediato los reconoció, se trataba de Nadia, la secretaria de Zibelth y de Emmett, el jefe del departamento del departamento de Deportes y Juegos Mágicos.
—Buenas tardes —los saludo interrumpiendo la atmosfera romántica entre ambos —, necesito hablar con Zibelth.
La pareja volteo a verla, Nadia le sonrió amablemente al ver de quien se trataba.
—La señora Black-Weasley está en una reunión con algunos aurores, por favor espérela, solo tardara unos minutos.
—Es una emergencia —trato de explicar, necesitaba hablar con ella de inmediato, no sabía cuánto tiempo faltaría para algo le pasara a aquella persona que se encontraba secuestrada —...es de vida o muerte.
—Pero...
La morena no pudo decir más porque la puerta se abrió de forma estrepitosa dejando ver a un azabache de ojos azules.
—¿Lys? —pregunto con la ceja enarcada — ¡Por Merlín! Apenas íbamos a ir a buscarte.
—Necesito hablar con Zib —se acercó a Potter—...él, el acosador me mando una nota y cabello de alguien.
—Pasa rápido.
Harry le hizo la seña para que entrara donde pudo toparse a la Black, Lyssandre y otros aurores que no reconoció, Zibelth estaba sentada en la silla frente al escritorio mientras los demás se encontraban de pie excepto por Lyssandre que estaba en una de las sillas que estaban al otro lado del escritorio.
—Lys —Zibelth alzo el rostro, a pesar de llevar maquillaje se distinguían las grandes ojeras y lo demacrado de su rostro, lucia demasiado cansada —...apenas te mandaría a buscar...es A, él...
—Tiene a alguien ¿no? —llego extendiéndole el sobre y el cabello —...me mando esto.
La azabache asintió y le entrego otra nota parecida a la de ella.
"Había una vez una chica rubia amable y divertida, le gustaba estar con sus familiares y amigos. Al despertar una sonrisa salía de sus labios por lo feliz que era.
No creas que desconoces esta historia, Anirak, a esta rubia la conoces muy bien. No te gustaría arruinar su perfecta vida, ¿no es así?
A veces no todo es perfecto como tú y tu ingenuidad creen, deberías de salvar la vida de esta rubia o la historia podría sufrir unos cambios.
Había una vez una chica rubia triste y olvidada por todos aquellos que amaba.
—A"
—¿Por qué forma el nombre de Hannah? La mía forma el nombre de Neville —Lys recordó la teoría de Zibelth, sobre que los nombres de las cartas serían las victimas —¿Ellos...?
—Cuando llego la carta a Anir, yo fui de inmediato a la casa de los Longbottom, ya que se supone que el parto de Hannah seria pronto, Neville tenía licencia en Hogwarts —explico Lyssandre —, al llegar la casa estaba abierta, encontré a Neville en el suelo, al parecer utilizaron algunos crucios contra el para después dejarlo inconsciente...no había ni rastros de Hannah...
—Tenías razón, las victimas salen en sus cartas.
—He puesto a cada persona que sale en las cartas en vigilancia de los Aurores, el ministerio de magia francesa está buscando a Fleur y Blaise ya que no los encontramos —paso la mano entre su cabello tan oscuro como la noche —...al igual que a todos nuestros familiares, incluso mande por Louis a Hogwarts, Fred, Regulus y otros dos aurores fueron por él, siempre considere que no era nadie peligroso, pero ahora tiene a una embarazada secuestrada, y por lo que dicen sus cartas parece no temer en matarla.
—¿Pero para qué la quiere? — pregunto Lys exasperara los demás aurores analizaban todas las cartas buscando un rastro que los llevara a Abbott—...no entiendo.
—Neville y Hannah eran tus amigos —agrego Harry—, todas las cartas parecen indicar que te quiere a ti.
—Tal vez piense en tratar de cambiar de lugares —Lyssandre miro a su hermana —...la mayoría que te conocemos sabemos que cambiarias de lugar con tal de salvar a quien fuera.
—¿Qué? Bueno, si lo haría, tal vez nos podríamos tratar de comunicarnos con él, y cambiar de la...
—Ni lo pienses —hablo con voz seria la pelinegra—...es un plan muy estúpido, no te voy a poner en riesgo.
—Estoy de acuerdo con Anir —el rubio mayor cruzo los brazos—, me niego a dejar que te pongas en riesgo, Petit solear...nosotros trataremos de solucionarlo, lo mejor es que vayas con George y los aurores para que estés a salvo, Harry se quedara con ustedes.
—¡Me niego! ¡Tiene a alguien secuestrada porque me quiere a mí! —respondió Lys, se sentía demasiado culpable por todo lo que estaba pasando y lo peor era saber que al parecer era alguien que conocía —...si es necesario iré a ponerme en su lugar.
—¡No lo harás! —respondió de forma severa —...no voy a arriesgarte, Lyssane, nunca me perdonaría si algo te pasa —Lyssandre no tenía la sonrisa divertida que tanto lo caracterizaba —, así que vas a ir allá y sin no usare un imperio para obligarte —advirtió sacando la varita —, no me importa tener que usar una maldición para mantenerte a salvo.
—¡Lyssandre no soy una niña! —contrataco Lys—, él me quiere a mí, no voy a dejar que tenga más inocentes como víctimas.
—Es suficiente —la azabache se puso de pie para acercarse a los aurores —, empezaremos con la búsqueda dando prioridad a Hannah Abbott —todos la veían con atención —, es una mujer embarazada, es imposible que la pueda llevar muy lejos porque pronto daría a luz, a lo que sabemos del secuestrador, es un mago de entre veintidós y treinta años, tiene conocimientos de magia avanzada, probablemente fue Auror o tiene conocimiento de magia oscura —los aurores anotaban en una pequeña libreta —, es ágil y probablemente un buen duelista, incluso me atrevería a decir que hasta tiene conocimientos en legeremancia y parece saber muy bien lo que hace, no me interesa que pero quiero que busquen a Abbott hasta debajo de las piedras, es nuestra prioridad.
—Entendido.
Respondieron los aurores para hacer una aparición dejando el lugar completamente vacío.
—Iras con Harry a la casa Black — Lyssandre miraba a su hermana fijamente —, ahí estarás a salvo, Anirak y yo comenzaremos a buscar a la chica en los lugares que frecuentaba.
—Voy con ustedes, soy igual de buena bruja que ustedes dos.
—Lys, el acosador te quiere a ti —repitió Zibelth —, aprovechara cualquier descuido para tratar de tenerte —la Black giro el rostro al escuchar la puerta abrirse y ver a su secretaria entrar —¿Qué pasa, Nadia?
—Llego esto —enseño un sobre para entregárselo a su jefa —, para la señorita Delacour.
—¿Quién lo trajo? —Zib lo observaba con curiosidad extendiéndose a la rubia.
—Lo trajo una lechuza negra —explico Nadia —, solo la dejo sobre el escritorio y se fue.
—Gracias.
La secretaria asintió para salir de ahí, Lys lo abrió de manera rápida, estaba segura que se trataba de "A" así que la leyó en voz alta.
"Lyssie:
Solo te diré que daremos inicio a un juego demasiado divertido para que encuentres a esa gorda estúpida. Espero te gusten los acertijos como a mí, veamos si adivinas esta pista.
Un viaje que acabo en un desastre, donde todo mundo fue espectador. Vergüenza has de sentir al recordar ese día, pero hoy sabrás buscar ahí.
Suerte, mi pequeño sol
—A"
—¿Viaje que termino en un desastre? —pregunto con curiosidad Harry —¿A qué se refiere?
Lys trataba de razonar cada palabra, pero no encontraba nada en esos momentos.
—Espectador—murmuro Lyssandre —, si es para Lys, tiene que ver con ella ¿Cuál fue el último viaje que hiciste?
Las mejillas de Lys se volvieron completamente rojas al darse cuenta a qué lugar se refería.
—El coliseo —murmuro —...la otra pista está en el Coliseo, todo mundo fue espectador cuando sucedió "eso" con George.
—Bien, iremos de inmediato, Lyssandre.
El rubio asintió al escuchar las palabras de Anirak.
—Yo también iré, la pista era para mí.
La azabache y Lyssandre intercambiaron una mirada, Zibelth suspiro para ver a Harry.
—¿Puedes avisarle a George y Fred que tendremos que partir de viaje en busca de Hannah? Lys viene con nosotros, si no recibes alguna noticia de nosotros en menos de cuatro horas ve a buscarnos al Coliseo, te estaré mandando un patronus tras cada pista.
—Con cuidado.
El azabache se despidió para hacer una aparición, dejando a Lyssandre haciendo un traslador con una hoja.
La búsqueda apenas iniciaba.
[..]
Lo único que se escuchaban eran los pasos apurados por los túneles que conectaban con la arena del Coliseo Romano, habían recorrido casi todo, pero no encontraron ninguna otra pista, ahora iban hacia el único lugar donde aún no buscaban.
El sonido de una celda cerrarse inundo los oídos del trio que vieron a todos esos lados.
—¿Quién cerro eso? —Lys señalo la celda que dividía a la mazmorra de la arena y se acercó para tratar de abrirla de forma muggle, pero nada, así que tomo su varita apuntando a ella —¡Alohomora!
Pero el rayo de luz reboto, Lyssandre se agacho cuando casi lo golpea en la cara logrando esquivarlo.
—Un hechizo de protección —agrego Zibelth —, tenemos que volver y buscar otra salida... ¿Por qué hay una cámara de video?
Señalo el pequeño aparto que estaba hasta arriba de la celda
—A ver —Lyssandre se acercó—, probablemente sea algo de seguridad muggle —iba a tomarla cuando distinguió un pequeño papel mal doblado —...o tal vez no.
—¿Es la pista?
Pregunto con curiosidad la rubia.
—No —Lyssandre lo desdoblo para leerlo — «Anir y Jerome, desde hace años han trabajado juntos volviéndose grandes amigos, aunque Jerome siempre ha albergado ciertos sentimiento por nuestra querida azabache ¿Por qué no recuerdan viejos tiempos?...tal vez unos besos tan intensos como los que compartieron en su primera misión juntos —las mejillas de los mencionados se volvieron completamente rojas al escuchar —...logren traer buenos recuerdos y abrir la puerta, por cierto saluden a la cámara, está grabando»
—Ese imbécil —puso los ojos en blanco —...pero ¿Cómo sabe de esa misión? aparte, no voy a engañar a mi esposo solo por abrir una puerta.
—Zib, Sandre —hablo Lyssane viendo hacia atrás —...creo que tenemos compañía.
—¿Qué?
Los mencionados giraron para toparse con un animal con forma de un gato negro demasiado grande, los dos aurores lo reconocieron de inmediato, se trataba de un matagot.
—No parece muy alegre —agrego la azabache cuando el animal gruño viéndolos con ojos feroces —...tenemos que salir de aquí.
Todos sabían que si lo atacaban por cada hechizo se multiplicaría, siendo peor todo.
—Debe de haber otra forma —Lyssandre observaba la celda —...no entiendo que hechizo es.
—No se me ocurre como romperlo.
—¡No se está poniendo más feliz! —Lys solo veía fijamente al animal que gruñía.
—¡Maldita sea! —la Black se acercó al rubio al ver que el matagot parecía a punto de saltar sobre ellos —. Jerome...bésame.
—¿Qué?
—Solo hazlo, el idiota dijo que se abriría la puerta, no quiero ser comida de matagot.
Lyssandre asintió y ambos se colocaron frente a la cámara, mientras Lyssane trataba de distraer al animal lanzando piedras al otro lado, pero el matagot apenas y se volteaba.
El rubio llevo la mano detrás de la cabeza de la azabache, ambos se vieron por unos segundos a los ojos y se unieron en un beso salvaje, los labios se movían con vehemencia e intensidad, al final de cuentas ambos eran demasiado feroces cuando se trataba de besar.
Al escuchar como la reja parecía abrirse se separaron con la respiración agitada, los labios hinchados y rojos al igual que sus rostros, desviaron la mirada algo apenado.
—Vámonos —Zibelth tomo la mano de la rubia para jalarla, una vez que estuvieron del otro lado cerraron la reja dejando al animal encerrado —, tenemos que buscar lo que sea que ese imbécil dejo aquí, y ya hemos perdido demasiado tiempo.
—Vamos.
Lys podía notar como ambos se evitaban mutuamente, parecían nerviosos, pero especialmente Lyssandre, sabía muy bien que él aun sentía algo por la azabache y eso no iba a desaparecer tan fácil.
Desvió esos pensamientos para centrarse en buscar lo que sea que fuera la pista, el tiempo no se detenía y en cualquier momento Hannah podría morir o incluso dar a luz estando con ese loco.
Recorrió cada pilar de la arena en busca de algo, pero nada parecía serlo hasta que distinguió una "A" roja en el suelo, se acercó corriendo a ella para quitar la arena que la cubría.
—¡Zib, Lyssandre!
Los llamo tomando el sobre que estaba bajo la arena tenía el nombre de Anirak.
—¿Lo encontraste? —Lyssandre llego a su lado para ayudarla a ponerse de pie, seguido de la mujer casada —... ¿Qué dice?
Lys abrió el sobre para sacar la pequeña nota y leerla en voz alta.
"Esta pista no es para Lyssane, pero si para la pequeña Blackie:
Érase una vez una misión demasiado peligrosa, nadie se hubiera atrevido a aceptarla, más que una chica con el corazón roto, ella estaba aprendiendo que el amor siempre duele y lo que era ser carnada de una loca como Bellatrix, todo resulto bien, quizá solo la azabache con unas pequeñas heridas, esa misión fue casi suicida nada comparada con la anterior que solo era encontrar estúpido medallón.
Esperemos la inteligencia ayude a la pequeña puta, como la llama Freddie.
—A"
Zibelth apretó la mandíbula al escuchar las últimas líneas.
—¿Misión suicida? —Lyssandre enarco la ceja — ¿Carnada para Bellatrix?
—Hace años, un poco antes de la batalla en Hogwarts, tuvimos que sacar a Harry de Prive Drive, hubo una batalla y yo tenía que distraer a Bellatrix, a eso se refiere con carnada, pero dudo mucho que haya puesto una pista o algo en el cielo de Londres —suspiro—...es estúpido.
—Tal vez haya una lechuza o alguna carta con un hechizo para flotar —Lys estaba igual de desesperada —¿A qué medallón se refiere?
—¿Medallón? —pareció pensarlo.
—¿No te mandaron a alguna misión antes de eso? —Lyssandre y ella solían escribirse de forma seguida en esas épocas y contarse sobre sus misiones —...tal vez alguna misión de Dumbledore...
—¡El guardapelo! —reacciono de inmediato para caminar seguida de ellos —, se refiere al guardapelo de Salazar Slytherin, Regulus y yo lo destruimos, él lo había escondido en el Sahara...
—¿En el maldito desierto? —Lys la veía sin creer —, mide miles de kilómetros...
—Somos tres si nos dividimos podríamos recorrer todo más rápido —propuso el único hombre.
—No sabemos si nos esté siguiendo —salieron de la arena para caminar a la entrada trasera —, si estamos separados nos puede atacar y no sabemos qué tan loco este, bueno, acaba de secuestra a una mujer, así que loco si esta.
—Tendremos que recorrer todo el desierto buscando una nota o lo que sea...
La voz de Lys sonaba cansada, haber usado tacones ese día no fue una gran idea, solo quería que todo fuera como hace unos días, lleno de tranquilidad y alegría a lado de su amado George.
[...]
La arena golpeaba el rostro de los tres adultos que caminaban por el desierto del Sahara, era completamente estúpido, ya habían perdido más de día y medio entre trasladarse y buscar la pista anterior en el coliseo y ahora con esta, estuvieron caminando un gran rato, pero la azabache seguía sin encontrar el viejo lugar donde Regulus Black alguna vez escondió el guardapelo de Salazar Slytherin.
Eran tantos kilómetros que no estaba seguros si en algún momento encontrarían esa pista.
—Siento que hemos caminado en círculos — Lys iba en medio de ambos —, tal vez ni está aquí, y se refiera a otra misión.
—En ninguna otra he destruido un medallón —agrego pensativa la azabache que añoraba con volver a su casa y ver que tanto sus hijos como su esposo se encontraran bien, a veces le hubiera gustado tener un trabajo más tranquilo que le permitiera estar con su amada familia, odiaba saber que tal vez se perdería el primer paso de los impostores —, la única vez fue porque Dumbledore pidió que se destruyeran todos los horrocruxes para terminar con Voldemort.
—¿Qué es eso?
Lyssandre señalo a lo lejos algo parecido a un globo de color rosado.
—No se —Lys tomo la delantera para acercarse, tuvo que quitarse los tacones para no hundirse en la arena — ¿Por qué hay un globo en el desierto?
Los tres se detuvieron frente a un globo que era sostenido por un pequeño cofre de madera, el globo de color rosado tenía escrito: «Felicidades, es una niña»
Lyssandre tomo el cofre dándole el globo a Lys y lo abrió para sacar tres pruebas de embarazo muggle, la azabache las vio y de inmediato las reconoció, eran de ella al igual que ese cofre, se las había hecho hace unos días después de darse cuenta que no le había bajado en más de tres meses.
—¿Por qué puso esto? —saco lo demás, unas fotos de Lys encerradas en un círculo rojo e incluso en alguna salía con alguien, pero ese alguien había sido rayado con tonta roja —¿Qué demonios?
La Black se acercó para sacar la nota de hasta el final, mientras Lys veía todo lo demás.
—¿Qué dice?
Preguntaron con curiosidad los rubios.
—Voy.
La azabache soltó un suspiro para leer tratando que su voz no se rompiera con cada letra.
"Sorprendente, los tres han hecho un largo recorrido.
Me imagino que encontraron algunas divertidas cosas en ese cofre como mis fotos favoritas de Lyssane, pero para desgracia en algunas sale con ese imbécil pelirrojo que siempre está sobre ella como una garrapata.
Por otro lado, Anir, Anir, quien lo diría, me imagino que te gustaría que ese globo fuera especialmente para ti, tres pruebas te hiciste y todas negativas ¿tanto deseas tener otro hijo' O más bien hija ¿no? O ¿Es porque temes que Fred te deje al no poder darle otra hija? ¿Ya sabe que nunca vas a poder tener más hijos? Esperemos no se busque a alguien que se los de.
Después de ver esto, se estarán preguntando porque el globo.
¡Hannah acaba de dar a luz y es una preciosa niña!
Si no se apuran tal vez esa bebé pague las consecuencias.
Esto es demasiado fácil:
Al parecer ese lugar siempre está abierto para cualquiera que les agrade a los dueños, desde un rubio que nunca tuvo un hogar, hasta la novia de un estúpido e incluso un adoptado. Todo es paz y felicidad tras sus paredes, pero al parecer el sótano no es tan seguro como creía, quien diría que los pequeños Black-Weasley ahora estén en peligro.
Tic Toc...el tiempo se acaba.
—A"
—La casa...
Los tres musitaron, Lyssandre rápidamente saco una pluma del bolsillo para volverla en un traslador.
El tiempo se les venía encima, lo único que esperaban era salvar a todos.
[...]
Lys, Lyssandre y Zibelth entraron rápidamente a la casa Black, no había rastro de nadie, lo más probable es que todos estuvieran enfocados en otra casa, sin esperar a más bajaron al sótano sin hacer nada de ruido para no ser descubiertos.
—¿La nota dice que Hannah está aquí? —pregunto Lys observando todo alrededor—...no, no puedes ser, nos habríamos dado cuenta.
La Black veía fijamente una pared y saco la varita.
—¿Anir? —Lyssandre siguió su mirada —¿Qué ocurre?
—Esa pared, no estaba de ese color...
—¿A qué te refieres?
La veela no notaba la diferencia.
—Las demás paredes son azul pastel...pero este azul es más claro, como...
—Si lo acabaran de pintar —a completo Lys recordando la última vez que estuvo ahí —... desde que la compraron no han cambiado el color.
La azabache asintió para tomar la varita y apuntar hacia la pared, sin miramiento lanzo el encantamiento
—: ¡Bombarda máxima!
Los dos rubios retrocedieron ante la explosión, para ver que un túnel estaba escondido detrás de esa pared.
Lyssandre fue el primero en entrar con varita en mano seguido de las dos mujeres, todas las tuberías estaban en perfecto estado, pero un gran túnel por el que un adulto podría caminar conectaba con la casa Black-Weasley, la Black fue la primera en adentrarse.
Zibelth caminaba por el túnel, se sentía demasiado frio por la humedad de las tuberías, escuchaba las voces de Lyssandre y Lys a sus espaldas, su corazón latía con fuerza, tenía un mal presentimiento por todo esto, algo dentro de ella le decía que regresaran, pero nunca se perdonaría si Hannah moría por su culpa.
—¿Hasta dónde termina esto?
Pregunto Lyssandre agachándose para pasar por un pequeño hueco, Lys y Zibelth lo hicieron con facilidad por su estatura.
—No lo sé —la varita de Lys alumbraba hacia el suelo, muchos charcos de agua causaban que sus pies se humedecieran —, siento que ya hemos recorrido demasiado.
—¿A dónde llevara? —se preguntó la azabache —...no puedo creer que esto siempre haya estado bajo mi casa.
—De esa forma entro —explico Lys —, nunca rompió los hechizos anti aparición porque no era necesario, por eso podía moverse a voluntad y dejar cualquier carta.
—Podemos considerar que no es tan experto en hechizos, pero si demasiado listo —Lyssandre detuvo los paso al entrar a un pequeño cuarto —¿Hizo todo esto él solo o serán varios?
Un jadeo escapo de la Black al ver cuatro pequeños aparatos, parecidos a la televisión muggle, estaba encendido, no entendía como pero en esos momentos no le interesaban, en cada uno se podía observar a distintas personas, en el primero salía Fred que estaba en el salón principal de su casa, en otro Regulus John que dormía plácidamente, en el tercero se mostraba al George Sirius lamiéndose el pie en la cuna y en el último estaba Louis-Philippe en su habitación leyendo alguna revista que no reconoció, todo era estaba ocurriendo en esos momentos. Se daba cuenta que "-A" había puesto cámaras en su casa, al parecer por eso conocía pequeños secretos que solo sabían los integrantes de esa familia.
—¿Qué demonios? —Lyssandre observo todo con curiosidad —... ¿Qué mierda significa esto?
—«Solo puedes elegir quien morirá, tus adorados hijos o tu esposo—la voz de Lys llamo la atención, leía la pared frente a ellos, estaba escrito con tinta roja que parecía ser sangre —¿O darías tu vida por la de ellos?»
Lyssandre alzo la mirada para ver la pared y distinguió un pequeño sobre, de inmediato se acercó a tomarlo y sin esperar a nada lo abrió.
—«Anir, Anir, siempre has sido un dolor en el culo, desde el inicio arruinaste todo. Ahora voy yo—leyó con voz audible —...todo lo que vez en esos aparatos muggles esta sucediendo justo ahora, solo tienes una opción ¿Cuál de tus hijos? ¿El adoptado o uno de los que tanto ansiaste? ¿Tal vez tu esposo? o... ¿Tal vez tu misma?, y si tú o uno de ellos dos intentan ir a evitar lo inevitable me encargare que todos mueran, incluido el querido George Weasley...tic tac, el tiempo empieza a correr y solo sesenta segundos han de tener»
—¿Qué? ¡no, no, no! Debe de ser un maldito juego —la chica Delacour parecía demasiado alterada, Zibelth no se movió ni un centímetro al ver lo que estaña arriba de ella, piedras sostenidas por un fino hilo de magia, si estaba en lo correcto, cualquier mal movimiento los llevaría a la muerte.
—Anir...debe de haber otra opción.
—No...no voy a dejar que mi familia muera —los ojos de la azabache estaban llenos de lágrimas viendo las imágenes en las televisiones, se negaba a que algo los dañara de cualquier manera, prefería morir ella antes de permitirlo, cinco fotos aparecieron frente a ella —, ellos son todo lo que amo.
—Zib, por favor, encontraremos otra manera.
—«Se acaba el tiempo — los tres bajaron la mirada al televisor que mostraba a George Sirius y pudieron distinguir a una persona con una máscara, no la reconocían muy bien, pero estaban seguros que era A —...sería una lástima que por tus lentitudes ellos mueran»
La voz no era reconocible, tenía demasiado eco y se cortaba en cada momento, el corazón de la Black se alterón y sin pensarlo jalo la foto en la que ella salía.
Todo paso tan rápido que los ojos de Lys no captaron nada, solo escuchaba unos gritos y como algo golpeaba contra el suelo para llenar todo de polvo provocando que se cubriera los ojos con el antebrazo y retrocediera unos pasos.
Al abrirlos lentamente reconoció a Zibelth inconsciente junto a la pared mientras su nariz sangraba, su mirada recorrió todo el lugar, pero no había rastro de su hermano.
Sentía el corazón latirle con fuerza al darse cuenta de lo que paso, Lyssandre había empujado a la azabache, eso significaba que...
¡No, no, no!
Era lo único que se repetía en la cabeza de la rubia para acercarse de forma rápida a la pila de piedras que estaba en medio.
¡Jerome Lyssandre no podía estar muerto!
(N/t: ¡Hola! ¿Cómo están?
¿Ya saben quién es el acosador?
Capítulo dedicado a Blo0dy_hell1, mlr_weasley, riistraa y pinixi que me ayudaron con varias notas e ideas, las amo jotas✨
Nos leemos, las tqm, bai💕)
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