La vida para algunas personas es dura, y la de Neville Longbottom no fue la excepción: sus padres en San Mungo por culpa de Bellatrix, Rodolphus y Rabastan Lestrange en compañía Barty Crouch JR, los torturaron hasta la locura dejando al pequeño niño al cuidado de su abuela, una mujer exigente y con poca paciencia.

Cuando creyó que podría tener un poco de paz y tranquilidad entrando a Hogwarts, el profesor Severus Snape la volvió en una tortura todos los días hasta convertirse en su Boggart, algunas veces los días no eran tan malos como cuando se unió al ejército de Dumbledore, logro hacer amigos como Harry Potter, Luna Lovegood y Ginny Weasley, pero, siempre caía en unas estúpidas bromas, en las estúpidas bromas de los gemelos Weasley. Tal vez el par de pelirrojo no lo hacían por hostigamiento, pero para Longbottom no era así, sin embargo, nunca se quejó por el temor de ser rechazado.

Al terminar la segunda batalla Mágica dio inicio a una relación amorosa con Hannah Abbott, por desgracia eso nunca lo lleno por completo, era hermosa pero no lo que el buscaba, trato de adaptarse a ella, complacerla en todo, pues Hannah era la única que lo amaba aparte de su abuela.

Poco tiempo después inicio a trabajar en el departamento de Aurores, como alguna vez lo fueron sus padres, siendo compañero de Harry Potter, Ronald Weasley y Zibelth Anirak Black, no tenía nada en contra de ella, pero por la azabache volvió a toparse con los gemelos Weasley e incluso con el maldito Draco Malfoy que le hizo bullying durante toda su vida escolar y ahora, en lugar de pagar por eso era alabado por todo mundo por ser un buen sanador, el cual estaba asignado al departamento de seguridad mágica..

¿Por qué tenían que seguir atormentándolo de esa manera?

¡El solo quería una vida tranquila en la que no tuviera que encontrarse con esos payasos e imbéciles!

¿A caso no lo merecía?

Quizá, los pelirrojos no le hicieron bullying como el Malfoy, pero si lo usaron como su muñeco de pruebas.

Dejar el trabajo en el ministerio fue lo mejor que pudo hacer, ya que Pomona Sprout, su profesora favorita y la que lo enseñó a amar las plantas, se retiraría dejando el puesto de profesor de Herbología completamente libre, puesto que le fue propuesto e inmediatamente acepto, incluso lo nombraron jefe de la casa de Gryffindor.

¡Su vida no podía ser mejor!... Si tan solo Hannah no fuera tan molesta.

Estuvo demasiado equivocado al pensar que su vida no mejoraría, cuando menos lo espero ella apareció, como un rayo de cálido sol en medio del frio invierno iluminando todo a su paso con esa hermosa sonrisa y ojos brillantes que tanto la caracterizaban.

Lyssane Delacour.

Era una mujer simplemente hermosa, delicada y sumamente amable, llego de Francia para convertirse en la maestra de Defensa Contra las Artes Oscuras, resalto de manera inmediata, era demasiado inteligente y sus alumnos la adoraban.

Sin poder evitarlo, Neville Longbottom cayo rendido a sus pies, pasaban demasiado tiempo juntos, estaba seguro que ella sentía lo mismo por él, iban a todos lados, ella amaba escuchar sobre las diversas plantas y pasar los ratos libres en los alrededores de Hogwarts o a las orillas del lago negro.

Definitivamente, su destino era estar con la veela, Longbottom estaba dispuesto a dejar todo por ella, dejar a su novia y abuela con tal de irse lejos con su amada Lyssie, tal vez a algún pequeño pueblo a las afueras de Francia, era de su conocimiento que Lys quería una vida tranquila.

¿Y qué mejor lugar que un lindo y colorido pueblo?

Pero, de nuevo todo se iba a la mierda, Hannah siempre lo iba a buscar al trabajo, e incluso se volvió amiga de Lys, si eso no fuera poco uno de esos estúpidos gemelos pelirrojos parecía tener "algo" con Lys, Neville estaba seguro que George solo la dañaría. Decidió esperar el momento en que Lyssane terminara mal por culpa de ese desorejado para consolarla y poco a poco acercarse más a ella y mostrarle que ambos compartían los mismos sentimientos.

Al ver que eso no parecía demasiado cercano, tuvo que recurrir a Katie Yaxley; la ex novia del George Weasley que estaba dispuesta a separar a Lys y George de cualquier forma, se ofreció a ayudarla tanto económicamente o de cualquier forma que ella deseara, pero en lugar de separarlos solo los unía más.

Llego el momento en que Yaxley logro separarlos, pero Lys no corrió a sus brazos si no que fue a los brazos del matrimonio Black-Weasley, lo único que le alegraba era que la azabache que tanto la alejaba de él tenía los días contados, poco a poco todo cobraba su sitio.

¡Hasta que la maldita de Yaxley se descontrolo!

Ataco a Lys, que perdió todos sus recuerdos y la obligaron a volver a Francia, a la mansión Delacour, fue hablar con Pierre, le ofreció todo el dinero de la familia Longbottom con tal de que lo dejara estará al lado de Lyssane, pero el anciano se negó, ya tenía planes para ella y lo corrió de la mansión, amenazándolo con hacer que terminara en Azkaban, Neville no era tan tonto como para desafiarlo así que le hizo caso.

Pero, solo fue por unos meses, encontró una forma mejor de irla alejando de todos sus seres queridos, de hacer que solo estuviera para él, tomar la decisión fue fácil al igual que armar todo un plan, solo la tenía que seguir a todos lados e irse deshaciendo de cada obstáculo, e incluso Yaxley, a pesar de no agradarle mucho la idea de trabajar de nuevo con ella, volvió a su lado, ella lo único que quería era a los mellizos Black-Weasley, al parecer sería la mejor forma de herir a la heredera Black.

Tuvo algunos pequeños inconvenientes a lo largo de esos meses, pero todo valía la pena si Lyssane estaba frente a él, pronto serian felices.

—¿Neville? — los ojos de Lys reflejaban asombro —... ¿Por qué? ¿Todo el tiempo has sido A?

—Mi pequeño sol —le acaricio la mejilla de manera cariñosa sin borrar la sonrisa — ¿No es obvio? Tenía que deshacerme de todos aquellos que nos quisieran separar, pero, parece como si algo siempre los protegiera, tienen tanta suerte que siempre la libran —hizo una pausa dramática —...al menos, al fin estamos juntos, como siempre lo quisimos. No me quedo de otra por tomar la identidad de "A", realmente no fue un seudónimo demasiado interesante, aunque todos sospechaban que mi nombre o apellido iniciaría con la letra A, algo que me sirvió para desviar la atención.

—¡¿Por qué lo hiciste?! —la rubia se movió de manera brusca tratando de zafarse de las cadenas, pero cada que se movían estas se volvían demasiado rígidas — ¡Mataste a Hannah! ¡A tu prometida, hiciste cosas horribles!

—¡Lo hice por ti, Lyssane! ¡¿A caso no lo ves?! ¡Tú y yo estamos destinados! ¡Es nuestro destino estar juntos, yo sé que sientes lo mismo, solo que te has dejado hipnotizar por ese pelirrojo! ¡Todos esos sentimientos por ese inútil han sido momentáneos, siempre me has amado a mí! — la veela podía distinguir la locura en los ojos de Neville, verlo de esa manera le provocaba terror, no quedaba ningún rastro de su fiel amigo —...y sobre Hannah, solo era un impedimento, tuve que deshacerme de ella, siempre tan molesta...

—¡Yo no siento nada por ti! —respondió viéndolo con ira, deseando que algo los sacara de ahí —¡Solo me das asco!

—Lyssie, Lyssie...no sabes lo que dices —murmuro con una torcida sonrisa adornándole la cara—, sé que me amas y que aprecias todo lo que he hecho por ti —la tomo con fuerza de la mandíbula, sin contenerlo más gruesas lagrimas escaparon de los ojos jades —, vamos, pequeño sol, sé que están tan feliz, solo espera unos días más y nos iremos de aquí, para iniciar de cero con nuestra preciosa hija, si la vieras, tiene tu cabello rubio y unos lindos ojos tan brillantes como los tuyos.

—¡Yo no tengo ninguna hija y mucho menos con un maldito psicópata como tú! —se hizo hacia atrás ignorando el dolor para zafarse con fuerza de su agarre —...no me toques con tus asquerosas manos.

—Sin duda, lo maleducada de la Black se te ha pegado —soltó un suspiro simulando tristeza —, no me preocupo, solo es cuestión de días para que entiendas que me amas y no a ese imbécil pelirrojo que solo ha manchado tu pureza.

Lys iba a responder algo más cuando la voz de Katie los interrumpió.

—Es suficiente, Neville —se acercó a Louis—, ya está en el bosque, la veré en el borde del precipicio —tomo la varita para liberar las cadenas de los barrotes de la cama e ir con la rubia mayor —, me llevare a estos dos y a la castaña —informó—, si no, no servirá mi plan.

—Más te vale no poner en riesgo a mi sol —tomo a Lys de la barbilla para obligarla a verlo—, pórtate bien, preciosa.

De manera brusca estrello los labios sobre los de la mujer casada que no correspondió al beso, por el contrario, le mordió el labio con tanta fuerza que lo hizo sangrar.

Neville paso el pulgar sobre su labio inferior para limpiarse la sangre y lamerla sin borrar la sonrisa.

—Me gusta cuando eres tan salvaje.

Lys solo desvió la mirada para ver a la mujer a lado de ella.

—Vamos, y más te vale que te comportes si no quieres que nada le pase a tu bastardo —comento jalando las cadenas mágicas para hacerla caminar junto con Louis.

Neville solo los vio con satisfacción, todo estaba tomando el rumbo que siempre debió de seguir.

[...]

La azabache soltó un suspiro al ver el precipicio frente a ella, algunos recuerdos recorrieron su cabeza, como cuando Fred la salvo de una muerte segura y Perenelle termino muerta en ese lugar, lo único que deseaba era aún no reunirse con ella, quería más tiempo de vida, deseaba ver a sus hijos crecer, estar con su esposo hasta que fueran unos ancianos y morir juntos, pero, se negaba a abandonar a Lys y a su hijo mayor, no dejaría que nada los dañara.

Por lo regular se dice que el miedo hace débil a la gente, pero en caso de Zibelth Anirak Black-Weasley era todo lo contrario, el miedo la volvía más fuerte porque lograba afrontarlo o buscar una solución para aquello que la asustaba y esa vez no sería la excepción.

—Tan puntual como siempre.

Escucho una impostada voz femenina, la azabache se dio la vuelta para encarar a la castaña que sonreía con sorna, recorrió con la mirada lo que tenía frente a ella y el corazón se le estremeció al ver la camisa del rubio llena de sangre, se encontraba demasiado pálido y ojeroso, ni decir de Lys que llevaba puesto un vestido que resultaba demasiado perturbador, parecía ser de piel de algún animal o algo parecido, en el rostro de Mónica se notaba el cansancio y varios hematomas de color verdoso.

—Traje lo que pediste —hablo de forma hostil enseñando la maleta que llevaba colgada en el hombro —, dos millones como deseabas.

—Qué obediente, eso cubre el costo por la vida de Louis, para que veas que soy buena también liberare a la sobrina del ministro —señalo a los dos menores que se encontraban asustados, Lys solo seguía todos los movimientos de las brujas frente a ella, la castaña con un movimiento de varita provoco que las cadenas los sujetaran contra los frondosos árboles —, pero antes, tráeme el dinero Black —señalo al lado izquierdo lejos de ambas —, lanza tu varita hacia allá, no quiero ninguna clase de juego o uno de ellos lo pagaran.

La azabache asintió sacando la varita de manera lenta y lanzándola lejos de ellas, se acercó para extenderle la maleta.

—Quiero verlos mientras lo cuenta.

—Sin juegos, Anir.

—Los mismo digo, Katie... ¿o debería llamarte Ellie?

La miro con el rabillo del ojo para ir con los rehenes, Katie soltó una sonora carcajada y en menos de un segundo su apariencia cambio por completo, tomando su verdadera identidad: una rubia de cabello corto, ojos azules y piel apiñonada.

Zibelth se detuvo frente a ellos y abrazo a Louis con fuerza.

—¿Estas bien? —paso los dedos sobre su playera —...perdiste demasiada sangre.

—Larga historia, mamá, pero no estoy tan mal, me quiero ir de aquí.

—Pronto lo harán, lo prometo—Zib se alejó para ver a Lys —... ¿Estas...?

Dirigió la mirada a su vientre que no parecía estar para nada abultado.

—No lo sé —murmuro de manera apenas audible —...ella lo dice, pero no estoy segura...Zib...Neville es...A

—Me di cuenta demasiado tarde —se sentía demasiado culpable por no darse cuenta de todas las señales o tan siquiera sospechar de él —...saldrás de esto —bajo la voz para susurrar—...Lyssandre, Fred y George no tardaran, conseguiré más tiempo.

—¿Qué?

—Sabes que es una trampa...

—¡Dejen de hablar! —grito con molestia Ellie viéndolas fijamente —... ¿Sabes, Anir? Todo habría sido diferente si hubieras tomado otras decisiones.

La Black se paró de manera recta viéndola con la ceja enarcada.

—Lo dudo mucho, eres una loca psicópata, mis decisiones no tienen nada que ver con tus delirios de villana...

—¡Eres una maldita arrogante! —Ellie era demasiado explosiva y sin controlarse saco la varita — ¡Siempre te crees la mejor, tú eres la única culpable de todo esto! ¡Crucio, crucio!

Estaba desquiciada gritando una y otra vez esa maldición, la luz roja impacto sobre el pecho de Zibelth que soltó un grito para caer al suelo.

—¡Déjala! —pedía Lyssane —... ¡Te ha dado lo que has querido, déjala!

—¡Deja a mi mama! —suplicaba Louis con lágrimas en los ojos por ver a su madre sufrir — ¡Por favor!

El pecho de Zibelth subía y bajaba con fuerza, era como si miles de daga al fuego vivo se enterraran en cada parte de su cuerpo, la cabeza estaba a punto de explotarle y las lágrimas escapaban de sus ojos sin evitarlas.

Quería que parara, que se detuviera, pero se negaba a suplicarle por eso a alguien como Ellie.

—Ni...sí...quiera puedes controlarte —murmuro la pálida mujer tratando de pararse cuando la Ellie detuvo sus maldiciones —...desde que íbamos en el instituto y me atacaste por la espalda...lo he sabido, explotas con facilidad—la sonrisa arrogante que era como su sello personal se hizo presente —, prefieres atacar por la espalda o cuando tu oponente esta desarmado porque eres una maldita cobarde.

—¡Cierra la puta boca! —otro rayo de luz rojo salió de la punta de la varita— ¡Esto es tu culpa, tú me hiciste eso!

El dolor era cada vez más fuerte, los gritos de agonía rezumbaban por todo el bosque, mientras Lys y Louis suplicaban una y otra vez porque Yaxley la soltara, ella solo los ignoraba si borrar la expresión de satisfacción al ver a la mujer en el suelo que sufría.

—Si me suplicas tal vez me detenga —camino alrededor de ella viéndola con superioridad —, nuestros caminos pudieron ser diferentes, yo no habría terminado de esta manera y tú no estarías ahí, retorciéndote de dolor.

La maldición seso, no era la primera vez que a Zibelth la torturaban de esa manera, la propia Bellatrix Lestrange lo hizo en varias ocasiones así que logro recuperarse un poco antes de tiempo, junto fuerzas para darse la vuelta y apoyar las palmas de la mano en el descuidado pasto frente a ella, uso un poco de fuerza para ponerse de pie, pero sus brazos y piernas temblaban.

—La verdad no quería llegar a estos extremos —la voz de Ellie se quebraba ante cada palabra como si realmente sufriera por lo que decía —, lo único que quería era ser amada...ser amada por ti ¿acaso no lo merecía? ¡A la buena de primeras te fuiste con ese payaso! —los ojos grises la veían como si tratara de comprender algo de lo que hablaba —, vamos, Anir, no me mires así...o ¿la estupidez de tu esposo se te ha contagiado?

La azabache chasqueo la lengua.

—No tengo idea de que hablas ¡Yo te quería! —se acercó unos pasos a ella, Lys y Louis la veían aliviados al saber que estaba bien — ¡Eras de mis mejores amigas, te defendí, confié en ti! ¡Tú me traicionaste!

Yaxley solo negó con la cabeza para verla con los ojos llenos de lágrimas.

—¡Te amo, Black, te he amado desde hace años y tú siempre preferiste a alguien más antes que a mí! —las lágrimas recorrían sus mejillas —...decidiste abandonarme, irte con él y desplazarme...pensé...pensé que me querías...que sentías lo mismo, siempre estuve a tu lado, compartíamos todo —soltó un sollozo—... ¡Pero tú te fuiste con él! ¡Sin importarte lo que alguna vez sentí!

La mirada de Zibelth se ablando ante sus palabras al igual que su expresión.

—¿Por qué no me lo dijiste? Ellie —murmuró reflejando culpa y dolor en la mirada —...yo tuve que callar por tanto tiempo...tuve que casarme con alguien a quien no amaba...Sabes que siendo la heredera de la familia Black y Flamel tenía que guardar las apariencias.

Louis, Lys y Mónica, que estaba cobrando el conocimiento de todo lo que pasaba, la veían sin creer lo que salía de la boca de la mujer pelinegra.

—¿Qué estás diciendo?

—Ellie...siempre te defendía, me comporte como tu mejor amiga, porque te amaba —se mordió el labio inferior para llevar la mano al bolsillo derecho de la chaqueta de cuero que llevaba puesta para sacar una fina pulsera de oro —...esto fue lo único que me quedo de ti...cuando creí que estabas muerta, después del ataque de Bellatrix.

—¿La guardaste por todos estos años?

Zibelth se acercó más, ambas estaban a una corta distancia del borde del precipicio, la mirada de Ellie cambio repentinamente, reflejaba un sentimiento extraño, como si fuera una adolescente viendo a su primer amor. Sostuvo la pulsera que la Black le extendía.

—Fue lo único que me quedo de ti, Ellie —volvió a repetir viéndola a los ojos —...yo, nunca quise creer que habías muerto, sé que hice una estupidez al estar con Fred, pero... sabes que no podía hacer otra cosa, lo acepté porque él fue mi cortina para esconder los sentimientos que siempre callé, Ellie, he estado enamorada de ti desde que tenemos doce años.

Los ojos azules de Yaxley buscaron los de la Black para ver que reflejaba, sinceridad pura, ella no estaba mintiendo, conocía cada mirada de su amada, cada expresión, siempre la estuvo analizando, por la sorpresa ni siquiera se dio cuenta en el momento que soltó la varita.

—Pero...pero, te casaste con ese estúpido —masculló aun atónita por lo que acababa de confesar la más alta —...tú...tú...

—Me tuve que casar con él, mi familia nunca aceptaría que te amo a ti, trate de formar una familia con él, pero nunca me ha hecho feliz y estoy cansada de fingirlo —dio un largo paso para detenerse frente a ella —, la única persona que he amado has sido tú, Ellie, siempre has vivido en mi corazón a pesar de todo.

—A...Anir...estás casada con ese imbécil...

La rubia no pudo decir, los cálidos labios de Zibelth Black se posicionaron sobre los de ella para dar inicio a un cálido beso, un beso deseado por años que la sumergía en una cálida llama para sentir los sentimientos a rojo vivo, los labios se movían con sincronía ante la atónita mirada de los tres espectadores.

Después de tanto, Ellie Yaxley tenía a la mujer que tanto amó besándola de una manera tan cariñosa, que se sintió tan amada como nunca en su vida.

—¡Zibelth!

—¡Mamá!

Exclamaron los rehenes al ver como diversas gotas de sangre escurrían hasta golpear el suelo bajo las dos mujeres que se besaban.

(N/t: ¡Hola! ¿Cómo están?

Siempre he creído que Neville es demasiado bueno para ser verdad y que necesita terapia, así que bueeh.

Está semana no estaré actualizando de forma seguida ya que tengo que terminar unas cosillas de la facultad, tal vez vuelva a actualizar hasta el domingo, jeje🥺

Bueno, nos leemos, las amo.❤️)