She
May be the face I can't forget
A trace of pleasure or regret
May be my treasure or the price I have to pay

Lys sonrió recargando la frente en el varonil hombro, de su ahora esposo: George Weasley, se mecían suavemente al ritmo del vals, su primer vals como marido y mujer.

—No puedo creer que ahora seas mi esposa —murmuro George besándole el cabello—, eres mi felicidad entera, Lyssane.

She may be the song that summer sings
May be the chill that autumn brings
May be a hundred different things
Within the measure of a day

La veela le acaricio el cabello de la nuca disfrutando del aroma a algodón y pólvora mezclado con colonia de hombre que emanaba el pelirrojo, a pesar de haber varia gente viéndolos en ese momento se sentían en una burbuja dónde solo se encontraban ellos dos y la música mezclado con el relajante ruido de las olas de mar cada que chocaban.

—Y tú eres mi felicidad, George —respondió alzando el rostro para verlo a los ojos, ambas miradas reflejaban el amor y adoración que sentían el uno por el otro—...te amo mucho más de lo que crees.

—Te amo, Lyssane, soy tuyo al igual que mi corazón para toda la vida.

She
May be the beauty or the beast
May be the famine or the feast
May turn each day into a heaven or a hell
She may be the mirror of my dreams
A smile reflected in a stream
She may not be what she may seem
Inside he shell

George le dio una última vuelta para terminar el vals y escuchar los múltiples aplausos de sus invitados, Lys no podía eliminar la sonrisa del rostro, realmente se encontraba feliz, esa boda fue tal y como la soñó: sencilla, pero al mismo tiempo sorprendente y única, con sus seres querido presentes que les deseaban la mejor de las vidas.

Se alejaron de la pista de baile para ir con los invitados, George se acercó a los Weasley, mientras Lys camino hacia sus hermanos que conversaban junto de la barra, Louis estaba bebiendo lo que parecía ser jugo de naranja y Lyssandre una copa de vodka.

—¿Ahora te llamamos Señora Weasley?

Inquirió el rubio menor con una pequeña sonrisa, dejando el vaso de lado para abrazar a su hermana y recargar el mentón sobre el fino y rubio cabello gozando del aroma a mandarina que tanto la caracterizaba.

—Exactamente —Lys correspondió al abrazo de su hermano y el olor a miel se hizo presente, Louis siempre tenía un aroma demasiado dulce, que iba muy de acorde a su personalidad —... ¿Y Mónica?

—Mamá la acaba de acompañar al sanitario —se encogio de hombros—, no tardaran en regresar...

—¿Tú y ella son novios? Vinieron juntos, y no se han despegado en ningún momento...

Lys alzaba y bajaba las cejas de forma picara mientras Louis se ponía completamente rojo y avergonzado, para romper el abrazo.

—¿Tú también vas con lo mismo? —se quejó poniendo los ojos en blanco y las mejillas rojas —, todos me lo pregunta... ¡Lyssandre me dio hasta un condón y una plática rara sobre sexo!

Lys soltó una carcajada para ver al mayor que reía burlándose de su hermano.

—¡Me preocupe por ti, eres un niño que no sabe nada de la vida, y el condón para que no la vayas a embarazar o a terminar con una enfermedad o algo venéreo! —Lyssandre se hizo el ofendido llevando la mano al pecho de forma dramática —¡¿Y así me agradeces?!

—¿Eres Lyssandre o la vecina dramática?

Lys solo se carcajeaba escuchando la discusión de esos dos, los amaba demasiado, eran su todo.

—Entonces...ahora eres la señora Weasley —escucho esa voz para girar y sonreír al distinguir a esa rubia frente a ella — ¡Epione!

Exclamo emocionada, para ponerse de pie y abrazarla, Epione Roberts fue su amiga más cercana en Beauxbatons, siempre estaba para ella y la ayudaba cuando lo necesitaba, por desgracia Lys se alejó haciendo que su amistad se tornara demasiado débil debido a su ex relación con Cormac McLaggen, siempre le prohibía hablar con quién no le agradara, y por desgracia la veela fue tan buena como para hacer lo que quería su difunto ex novio.

Epione y Lys se volvieron a reencontrar hace unos meses en Femmes Survivantes, después de una disculpa por parte de la nueva Weasley ambas amigas siguieron en contacto, se enteró que ya estaba casada con Dante Arwin, un conocido mago en Francia que era dueño de una de sus pastelerías favoritas e incluso tenían una hija, una pequeña pelirroja —cabello heredado por Arwin—, llamada Itzar.

—Muchas felicidades, Lyssane —se alejó sin borrar la sonrisa —, me alegro que hayas encontrado un hombre que te amé tanto como se ve que lo hace ese chico, estoy tan feliz por ti.

Se notaba la sinceridad en las palabras de Roberts.

—Gracias por venir y ser mi dama de honor.

Se alegraba que a pesar de todo ella siguiera siendo su amiga.

—Gracias a ti por invitarme, Itzar y Dante no pudieron asistir porque la madre de Dante tuvo algunos problemas por lo que mejor fue que se quedaran, pero te mandan sus felicitaciones.

—Agradéceles de mi parte, espero verlos pronto y que todos los problemas se soluciones.

La chica de ojos castaños asintió con un movimiento de cabeza cuando la veela fue llamada por su esposo, ya que era momento de lanzar el ramo, Lys se despidió del trio de rubios para caminar a la pista que colocaron con ayuda de magia a media playa.

Le lanzo una mirada de advertencia a Lyssandre ya que conocía muy bien, que hace años entre Epione y él paso algo más fuerte que unos simples besos.

—Hola de nuevo, Señora Weasley —saludo el desorejado dándole un suave beso en los labios — ¿Lista para lanzar el ramo?

—Hola de nuevo, Señor Weasley —imito su acción para enseñarle el ramo que llevaba en la mano izquierda, hecho de gardenias rosas y jazmines, acomodados de forma armoniosa y sostenido con un fino listón de seda de color rosa oro —, completamente lista ¿a quién crees que le caiga?

—Estoy entre Tanith, Clerie o una de tus compañeras del ministerio—pareció pensarlo por unos segundos —, no recuerdo su nombre, pero, esa que está coqueteando con Ronald —Lys guio la mirada a donde veía George —, tal vez y Ron salga con futura esposa de aquí —los recién casados soltaron una suave risa —, diría que hiciéramos que le cayera a Zib, pero ya está casada —ahora veían al matrimonio Black-Weasley que se encontraba un poco alejado de los demás invitados, la rubia distinguió los movimientos de ambos y estaba segura que coqueteaban mientras intercambiaban pequeños besos —, creo que Fred se tomó en serio el juego de roles.

—Es Marianne —le recordó el nombre de su compañera a George, que asintió —, ¿Qué juego de roles?

—Era una broma tonta de Fred, dijo que se acercaría a Zib como si fuera la primera vez que se conocían —explico con diversión —, ya sabes, el amorío del padrino del novio y la madrina de la novia, que se conocen en la boda y pasan cosas...sucias.

Agrego con perversión provocando que Lys pusiera los ojos en blanco con un atisbo de burla.

—Nunca cambian —se alejó un poco de él —, bueno, es hora de que lo lance.

George llamó a las invitadas para que formaran un circulo alrededor de Lys, todas las solteras parecían muy emocionadas por eso, mientras los novios o parejas de ellas lucían aterrados, claro que el matrimonio no era cosa que se decidiera solo por un simple ramo...pero, al final de cuentas quizá esa tonta tradición tuvo algo de razón, Lys y George fueron los que atraparon el ramo y liguero en la boda de los Black-Weasley...y fueron los siguientes en casarse.

Lys se acomodó de espaldas frente a ellas para alzar y bajar el ramo de forma repetida ganando los gritos de emoción de las mujeres.

—¡Una...dos...! —Gritaba la rubia cada que repetía el movimiento — ¡Ahí va!

Fue lo último que dijo para soltar el ramo de flores que iba a gran velocidad.

Se reía escuchando como todas trataban de atraparlo, pero cuando se dio la vuelta su rostro se llenó de sorpresa.

Tanith lo había atrapado, estaba completamente roja al igual que el Malfoy al cual todos veían, aunque estaba seguros que solo era cuestión de tiempo para que esos dos se casaran, desde hace meses estaban en una relación y ya vivían juntos, aunque no eran demasiado de hacer muestras de cariño en vía publica se podía notar el amor entre ambos.

Lys choco la palma de la mano con la de George al ver que el más alto tuvo razón en quien caería.

[...]

—¡Ya...ya, nos rendimos!

Exclamo Lys dejando el shot de tequila en la mesa, se sentía demasiado mareada y George ni siquiera lograba levantarse de la silla sin caerse, faltaba poco para que terminara inconsciente.

Zibelth y Fred sonrieron de forma triunfal, Lyssane no lograba explicar su gran resistencia, eran de los únicos que estaban lo suficiente sobrios como para seguir bebiendo como si no hubiera mañana, hasta Lyssandre que era una persona que tomaba demasiado en las fiestas ya estaba vomitando a la orilla de la playa siendo ayudado Sirius y Regulus.

—Débiles —exclamo Fred palmeando el hombro de su hermano —, vamos, hombre, es tu boda, no puede ser que estés tan mal...

—Cogo si pu no hucieras termina de eshta folmag en la tusha...

Balbuceo con la mirada perdida, estaba despeinado y con media camisa abierta dejando ver su torso.

—Te vas a perder de la noche de bodas —le guiño el ojo—, con tanto alcohol, ni siquiera se te va a parar.

Se burló, pero borro la sonrisa al ver como su esposa se alejaba algo preocupada a hablar con Laetitia.

—¿Y Lyssgie?

Pregunto George al ver como su esposa iba con la azabache, Fred lo ayudo a ponerse de pie para ir con ellas.

—Lo buscare por el sur de la playa —informo Zibelth—, no tomo más que dos copas, dudo que este ebrio, tal vez solo se distrajo caminando por la orilla con Mónica...

—Yo iré por el norte —a pesar de sentirse mareada aun podía caminar bien—, Louis no se iría lejos sin avisar.

—Yo iré al hotel a buscarlo a las habitaciones —agrego Laetitia con preocupación marcada en el rostro—, espero que este durmiendo o con Mónica en el lobby...

Las mujeres se separaron, mientras Fred llevaba a George con sus padres para que lo vigilaran y él ir a buscar a su hijo a los médanos que estaban a la orilla izquierda de la playa.

Lyssane caminaba con la varita en mano sintiendo la arena bajo las plantas de los pies, la brisa le golpeaba el rostro y le movía el cabello que ya se encontraba despeinado, se lamentaba un poco por el hermoso vestido de novia, las manchas de arena recorrían una gran cantidad de la parte de abajo y también se encontraba demasiado mojado.

Arrugo la nariz al reconocer el aroma a mar mezclado con sangre así que apuro el paso, deseando que Louis estuviera bien y que lo que olía de esa forma fuera algún animal o cualquier otra cosa.

Se detuvo de golpe al ver a la castaña frente a ella.

—¿Mónica? —se asustó al verla, su vestido tenía grandes de manchas de sangre que incluso le salpicaban el rostro — ¿Qué paso? ¡Baja eso!

Ordeno al ver que llevaba una pequeña daga con sangre en la mano izquierda, la menor no respondió nada, parecía perdida, ni siquiera tenía una expresión en el rostro, estaba en blanco.

El rostro de Shacklebolt giro suavemente y Lys soltó un grito al distinguir al rubio inconsciente en el suelo, con sangre en la camisa.

—¡Louis!

Sin importarle Mónica, se acercó a él para arrodillarse a su lado y moverlo,

—¡Louis, por favor despierta!

Suplicó al borde de las lágrimas.

—Lyssane...

Escucho la voz de una mujer a sus espalda y giro de inmediato para toparse con su prima.

—¡Fleur! ¡Tienes que ayudarme! —suplico con la mirada llena de lágrimas — ¡Louis...Louis...no despierta! Ver por alguien, por Zib y Draco, por favor.

Fleur solo sonrió de manera tétrica para murmurar.

—Feliz día... de tu muerte, primita.

—¿Qu...?

No pudo terminar la oración al sentir un fuerte golpe en la nuca para que todo se volviera completamente negro... 

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