-Y entonces la maestra le dijo debes de ser más analítico joven Simure y mi amigo solo se quedo todo molesto.

Dekart le contaba a Alinette como habían sido sus clases del día, como de costumbre se encontraban los dos en aquel bosque platicando.

-Y luego- hubo un silencio por parte de Dekart- ¿Estas bien?

-Si- dijo seria mientras una molestia recorría su espalda, fue allí cuando reconoció la sensación- vete.

- ¿Que?

- ¡Vete! - le dijo en tono serio, pero en ese momento sus ojos se cubrieron de un negro total.

- ¿Ali?

¿Qué pasa princesa? ¿Te da miedo que vean lo que eres?

- ¿Ahora si hablaras conmigo?

- ¿Ali? - aquel chico la miraba preocupado.

Devuelve lo que han robado

- ¿A qué te refieres?

¡DEVUELVE LO QUE HAN ROBADO!

Aquella voz grito contundente, Alinette solo pudo taparse los oídos mientras no paraba de repetir que parara.

-Ali, ¡Ali!

-Ah- la chica había regresado en si- ¿Dekart? ¿Por qué no te fuiste? - aquella chica le grito furiosa.

- ¿Qué carajos fue eso? - le respondió de la misma manera- Estas helada.

Al decir eso Dekart se quitó la capa de inmediato y se la coloco a Alinette y procedió a acercarla para abrazarla.

-Muy cerca- replico la chica.

-Estas helada- la separo un poco de su cuerpo para verla a los ojos, por suerte estos ya habían vuelto a la normalidad- me vas a decir ¿Que fue eso?

-Pues...- la chica coloco su mano en el pecho de Dekart para separar el abrazo, sin embargo, el tomo su mano y se el mostro.

La punta de sus dedos se torno de un azul leve y en su palma estaban las venas de sus manos saltadas y coloreadas de un tono gris profundo.

-Con que así se hacen esas marcas- dijo en un susurro.

- ¿Como que con que así? ¡¿Esto ya te había pasado antes?!- pregunto para volverla a abrazar.

-Si... esto suele pasar seguido, nada que el hechizo de curación no pueda arreglar- al decir esto dibujo en su mano el símbolo y pensando en el hechizo una luz dorada apareció para poco a poco ir desapareciendo- Ves listo- la chica le mostro su mano- solo queda esta rara cicatriz que con el paso de los días va desapareciendo.

-Esto ¿Te pasa estando sola?

-Si la mayoría del tiempo...

Ali quedo en silencio al ver la mirada de Dekart, este parecía sumamente preocupado.

-No te debes de preocupar- continuo.

- ¿Que no me preocupe? Carajo, tus ojos se encontraban totalmente negros y parecías hablar con alguien para después solo tener una expresión de dolor y tapar tus oídos ¿Que fue todo eso?

-Bueno, en el mundo... mágico están habiendo cambios- trato de explicar lo mejor que pudo- y a veces me pasa esto, escucho una voz y un frio me inunda.

- ¿Que te dice?

-La mayoría del tiempo no entiendo lo que me dice, algunas veces solo me grita, otras se burla de mi pero...- Ali volteo a ver a Dekart otra vez está allí esa mirada de preocupación- No te debes de preocupar es algo con lo que tengo que lidiar sola...

Antes de decir cualquier otra cosa este la volvió a abrazar.

-No tienes que hacerlo sola, yo estoy aquí, puedes confiar en mí.

Alinette solo se quedó inmóvil no sabia que contestar o que decir ante esas palabras, solo decidió corresponder el abrazo y cerrar un momento los ojos, la calidez de ese abrazo ayudaba bastante con el dolor y el frio que quedaba después de que aquella voz la visitara.

[...]

Alinette se encontraba perdida en sus pensamientos, mientras aquella mañana de sábado había acompañado a sus padres a una de esas juntas de consejo donde se discutían decisiones a tratar, asuntos comerciales, se firmaban a cuerdos entre otras cosas. Aunque la mayoría de las veces su participación no era mucha ella asistía por su voluntad y así comenzar a aprender mas sobre esos temas.

Al terminar la junta se despidió de todos y salió en camino hacia la biblioteca, su mente no dejaba de darle vueltas a la misma idea ¿Qué pasaría si uno de esos ataques le dan en frente de los representantes? O en la escuela como reaccionaria la gente que la viera, ese pensamiento era algo que no la dejaba, pensaba en miles de reacciones, como terminaría encerrada con Mephisto hasta controlar eso, ¿acaso se podía controlar? Y ¿Por qué solo le pasaba cuando estaba sola? Claro excepto de aquella vez con Dekart.

Si la destrucción esta entrando mas y mas al reino eso solo significaba una cosa.

-Los ataques cada vez serán mas fuertes- dijo en voz alta.

Al llegar a la biblioteca no encontró ni a Mephisto ni la sacerdotisa, solo aquel trozo de papel que por días le habían dado vueltas en intentar descifrar un hechizo y poder completarlo en caso de que se tuvieran que enfrentar con aquella destrucción.

-Ella acariciaba su vientre en mi visión- Alinette comenzó a hablar sola- su anhelo era protección puedo sentirlo, pero- hizo una pausa- también era muy triste.

De repente se le ocurrió una pésima idea, intentar hacer aquel hechizo, sabia que era mala ya que Mephisto le había repetido hasta el cansancio que si no se conocía la intensión de alguno de los hechizos que conjuraba no los debía hacer ya que podría ocasionar totalmente lo contrario o incluso podría lastimarse muy gravemente.

-Aunque, si conozco la intensión...proteger- se intentaba de dar ánimos.

Camino hasta el centro del lugar en donde ya habían despejado todas las mesas y sillas para que ella pudiera practicar.

-Por favor Alki guíame en este encantamiento, quiero protegerlos a todos.

Dicho eso susurro aquellas palabras que recordaba del encantamiento y por si solo su cuerpo parecía moverse, con su pie derecho realizo un medio circulo completándolo con el movimiento del pie izquierdo al abrir los ojos noto un brillo en color lila, rodeo el circulo con sus manos para intentar levantar aquella aura sin embargo comenzó a sentir un peso inmenso sobre sus brazos, con todas sus fuerzas intento seguir levantando aquella aura hasta que.

Crack

-¡Ahhh! ¡Carajo!

Su brazo derecho se había roto por el esfuerzo, haciendo que ella callera de rodillas directo al piso sosteniendo su brazo y gritando, fue en ese justo momento que Mephisto y la sacerdotisa aparecieron, ambos se dirigieron hacia donde estaba la princesa, la sacerdotisa rápidamente conjuro el hechizo de curación mientras Mephisto sostenía a la princesa para intentar que se incorporara, por un momento sintió que se desmayaría pero logro mantenerse consiente ya que el dolor pronto empezaba a desaparecer.

- was hast du versucht zu tun? (que estabas intentando hacer)- pregunto Mephisto, más bien grito aquel mago.

-El...el hechizo de Al...

- Alkis Zauber, bist du verrückt? (el hechizo de Alki ¿estas loca?)

-Tenía que intentarlo- dijo en apenas un susurro la princesa- tenía que... versuchen (intentar).

Alinette sabía que tenía que intentar decir lo siguiente en el idioma Tiberian ya que de lo contrario no se entendería bien lo que intentaría decir.

- Zerstörung (destrucción), dringt immer mehr ein (está entrando cada vez más), Sie spüren es nicht? (¿no lo sienten?)

Ambos maestros de magia se miraron entre ellos confundidos, no habían sentido nada desde la ultima vez que aquella destrucción había atacado a la princesa.

-Hier (aquí)- continuo Alinette.

La princesa les mostro la mano que ya hacia con cicatrices de la vez que la ataco con Dekart, eran las más recientes, ambos maestros quedaron atónitos.

- Hier(aquí)- mostro con dificultad su cuello el cual tenia un rastro de esas cicatrices- Auch (tambien)- se levantó un poco el suéter que traía para mostrar su abdomen allí también había rastros de marcas- Ich habe ihnen nichts erzählt, weil ich damit klarkam (no les comenté nada porque podría lidiar con eso) ... Aber (pero) Was würde passieren, wenn er mich vor anderen angreift? (¿qué pasaria si me ataca en frente los demás?).

Ambos maestros se miraban serios ante tal confesión, ¿Que podían hacer? Era obvio que la princesa tenia aquella habilidad se saber cuándo la destrucción se acercaba, pero ¿por qué solo ella? ¿Por qué no lo habían sentido antes?, parecía como si solo la atacara a ella ¿por qué? Aun así, una cosa era segura, deberían comenzar a tomar acciones para poder detener a esa destrucción de entrar mas profundo en el reino.

Todo se encontraba en silencio cuando un terremoto sacudió al castillo, los tres se miraron confundidos, cuando la princesa volvió a sentir ese escalofrío recorrer su cuerpo, solo que esta vez no se quedo con ella, Alinette dirigió su mirada a la ventana, esa dirección daba hacía.

- ¡El pueblo!

Alinette salió corriendo de la biblioteca siendo perseguida por la sacerdotisa, aun le preocupaba su brazo, la princesa rápidamente se dirigió a la arena donde por suerte estaba Ruberios.

- ¡Tienes que mandar, guardias al pueblo cercano de aquí!

-¿Alinette? ¿Esto es relacionado con el temblor que acaba de suceder?

-Si, bueno no lo se solo se que algo está... puede causar daño solo.

-Capitán

La princesa fue interrumpida por dos caballeros, Ruberios salió de la arena con paso veloz para irse con los caballeros, la princesa estaba en lo correcto al parecer una bestia comenzó a atacar la aldea cercana al castillo, la princesa quiso seguirlos sin embargo la sacerdotisa la tomo del hombro.

-Sie können sich darum kümmern (ellos se pueden encargar).

Alinette la vio en silencio, aquella mujer sostuvo su brazo que antes se había lastimado para seguir haciendo unos cuantos masajes en este, pero la princesa no podía evitar querer ir tras esa bestia con los demás, su mente se inundo de ideas, ¿acaso esto era lo que tenia que hacer un rey? Esperar paciente que los caballeros lograran su cometido, claro que confiaban en ellos, pero no podía evitar pensar que ella quería ir, enfrentarse al peligro, esa bestia es traída por la destrucción, magia, y ¿si no lo logran vencer? ¿Que debía de hacer ella?

[...]

-¡Es ist unmöglich für dich zu gehen! (es imposible que tu vayas)

-Estas sobre reaccionando Mephisto.

-No, no sobre reaccionando.

-Mephisto.

Se encontraban discutiendo otra vez, la sacerdotisa había llevado a Alinette a la biblioteca otra vez y cuando se le ocurrió mencionar a la princesa que tal vez debería ir con los caballeros tras la bestia Mephisto comenzó a gritar, a Alinette le parecía a veces divertido escuchar a su maestro enojado hablar entre los dos idiomas y terminaba pronunciando mal algunas cosas.

- ¿Qué pasaría si te lastiman?

-No entiendo ¿por qué te pones así? y si me lastiman me puedo curar.

-¿Y si te matan?

-Si te preocupa el futuro del reino, hay más descendientes que pueden tomar mi lugar...

-No- interrumpió el mago- tu eres la única con la magia de creación ¿Acaso nos quieres condenar? Si tu mueres, quedaríamos a merced de la destrucción ¿Quieres eso?

Alinette no había pensado en eso, este asunto comenzaba a sentirse bastante serio, si ella moría condenaría a todo el reino a sumergirse en la destrucción justo como en tiempos antiguos.

-Tienes razón-hablo finalmente- sin embargo no creo que vayan a poder derrotarlo ellos solos.

Otro temblor se sintió, Alinette miro a Mephisto.

-Tienes que confiar en mi y ayudarme Mephisto, tengo que lograr ese hechizo- hiso una pequeña pausa- por el bien de todos.

Pronto iniciarían sus vacaciones por el periodo escolar en la academia así que Mephisto acepto ayudarla con el hechizo a cambio de intensificar sus lecciones, mientras ambos tenían que intentar explicar a los reyes que era lo que estaba pasando, debían tener mucho cuidado en sus palabras ya que no debían de alarmar, ni mucho menos causar mas miedo a la magia.

Mephisto y Alinette lograron explicarle a los representantes y a sus padres que esas criaturas que por lo que se habían enterado empezaron a surgir por todo el reino eran rastros de magia antigua que se había liberado de las entrañas del reino debido a los temblores que habían estado ocurriendo, la princesa les prometió mejorar su magia para así crear un escudo que protegería de aquellas criaturas, pero, también propuso adiestrar a los caballeros del reino para así saber como atacar y acabar con esas criaturas, cosa que todos los representante aceptaron.

Al terminar su curso Alinette se sentía estresada, frustrada y molesta, no fallo en su curso sin embargo no había sacado las mejores notas y eso la molestaba ya que de seguro tendría una platica con respecto a esas calificaciones con los representantes, también aun que había estado practicando el hechizo noche con noche junto con Mephisto no lograba culminarlo siempre obtenía el mismo resultado un brazo roto, una nariz sangrante o un desmayo al no poder soportar el peso de aquella aura, y pronto se había convocado a todos los capitanes del reino junto con sus mejores caballeros para ir al castillo y aprender algunas técnicas para derrotar a las bestias que estaban apareciendo por todo el reino, así que la princesa tendría que idear de alguna forma como adiestrar a estos caballeros y eso la llenaba de estrés.

-¿Qué voy a hacer?- se preguntaba a solas- puedo hacer una ilusión de la criatura pero no podrán tocarla... no, soy la creación, podría crear una criatura parecida, aun que no se que tan moral sea solo crear una criatura para después usarla para practicar y luego matarla.

La princesa soltó un gran suspiro, la única vez que combatió con una de esas criaturas no lo había hecho sola.

-Aquella vez Dekart logro derrotar a esa criatura atravesándolo con una espada, supongo que podemos practicar en donde atacar, su punto débil- el decir eso quedo en silencio un momento y pensando, no había ido al pueblo en ya un tiempo ¿Cómo estarán todos?