Las clases siguieron de manera normal, entre teoría y practica Dekart pasaba sus días en la academia y en el palacio, había logrado hacer buenos amigos, el era algo serio sin embargo era muy cordial siempre, intentaba ser amable con los que eran amables, aunque no sentía que había realizado una conexión enserio con alguno de sus ya nuevos amigos, el suponía que era debido a que solo era el primer año.

Justo su grupo de amigos se propuso ir a el pueblo cercano al castillo, decían que había buen ambiente por las noches debido a un grupo que tocaba en una taberna local, los rumores decían que los dueños del lugar eran Tiberians por lo que seria interesante ir. Para la mala suerte de los compañeros de Dekart les toco guardia ese fin de semana, así que el decidió ir por su cuenta, ya que era seguro que, el siguiente en estar de guardia la otra semana sería el.

Era fácil de identificar el lugar, era verdad lo que decían, el lugar estaba bien iluminado y había algo de música, aun era temprano por lo que solo entro al lugar y busco un sitio para sentarse, en cuestión de minutos una mujer se le acerco a preguntarle que quería tomar, quedo impresionado por la apariencia de esa mujer, también era cierto que el lugar era dirigido por Tiberians lo sabia por que aquella mujer lucia un peinado en color plateado, pensó que sería fácil de identificar quienes eran los portadores de magia solo por observar el color de su cabello.

Todo siguió tranquilo cuando sin aviso alguno la puerta fue abierta de golpe, una joven bastante desarreglada, con el pelo alborotado y raspones entro rápidamente al lugar, aquella joven corrió hacia la barra donde se encontraba la mujer con pelo plateado escondiéndose rápidamente.

- ¿Dónde está?

De inmediato entraron 3 hombres, no parecían nada amables.

- ¿A quién se refieren?

Contesto la mujer de cabello plateado de manera seria.

-No te quieras hacer la lista o este cuchitril se vendrá abajo.

- ¿A que le llamas cuchitril? Imbécil.

De debajo de la barra salió aquella joven, creo que se metió con las personas equivocadas, pensó Dekart, tal vez seria buena idea intentar calmar las cosas, era de todos modos su trabajo ¿No? El era un caballero en preparación y si lograba calmar la situación le traería buena reputación, pero antes de que pudiera hacer algo observo como aquella joven derribo a uno de los tres hombres contra una de las mesas, todos quedaron atónitos ante aquello, rápidamente Dekart decidió tomar parte ya que los demás hombres se le acercaban muy amenazantes.

Dekart logro impedir uno de los golpes hacia la joven, esta rápidamente lo tomo del brazo y lo lanzo hacia aquel hombre, ambos chocaron y cayeron, de inmediato la joven corrió y levanto a Dekart del brazo jalándolo fuera del lugar.

-Perdón Sandra te prometo que arreglo el desastre.

Grito la chica al salir corriendo junto con Dekart, este ultimo apenas estaba procesando lo que paso, cuando se dio cuenta que aquellos hombres ya los estaban persiguiendo. Se había adentrado a lo profundo del bosque, ya estaba oscuro así que Dekart no lograba ver muy bien solo se dejo guiar por aquella joven que para su sorpresa esquivaba bastante bien los obstáculos en su camino.

- ¿Sabes nadar? - la chica pregunto.

- ¿Qué?

Antes de poder responder ya habían saltado por una cascada, cayeron directo al agua helada, Dekart estaba totalmente conmocionado cuando sintió el golpe de agua fría, aun así reacciono rápido y comenzó a nadar a la superficie, una mano lo jalo hacia otra dirección, después de un tiempo ambos jóvenes salieron del agua, de inmediato tomaron una gran bocanada de aire sin embargo a Dekart no le dio tiempo de tomar la siguiente ya que la joven puso su mano en su boca este la miro molesto pero pronto se dio cuenta por que hacia eso, aquellos hombres se encontraban por la cima de la cascada.

Paso un tiempo y se dejaron de escuchar sus voces, por lo que había analizado se encontraban detrás de la cascada el chorro caía justo enfrente de ellos, aquella joven le hizo una señal y se adentraron mas a lo profundo, al parecer había una cueva en ese lugar, poco mas adelante por fin salieron del agua fría.

-Perdón por arrastrarte hasta aquí, pero... no me dejaste opción.

-¿No? ¿No te deje opción? Me aventaste contra uno de esos imbéciles hace rato.

-Lo siento, fue lo único que se me ocurrió- soltó una pequeña carcajada- por cierto, soy Al.

- ¿Al?

-Si así me dicen y tu ¿Tienes nombre?

-Dekart

-Bueno Dekart no entres en pánico.

Antes de que el joven pudiera replicar algo aquella joven con unos movimientos de mano había iluminado la cueva, fue allí cuando la pudo ver más a detalle, la joven vestía ropas desgastadas y rotas de algunos lugares, también tenia varios raspones en sus manos y cara.

-Sabes ya no me sorprende ¿Eres Tiberian?

-Este... 50, 50- contesto.

-¿Una mezcla?

-No me digas así, déjame adivinar- la joven lo miro de abajo hacia arriba- complexión robusta, alto, algo de fuerza ¿Blerian verdad?

-Si lo soy-contesto extrañado.

-Y ¿Eres nuevo por aquí?

- ¿Se nota mucho?

La joven rio un poco, con unos movimientos acerco unas cuantas ramas de madera, las cuales levitaron acomodándose perfectamente y con unos cuantos movimientos mas ya estaba encendida la pequeña fogata improvisada, Dekart se quedó atónito pero aquella joven solo procedió a sentarse junto al fuego.

-Pues no has dicho nada del bosque.

- ¿El bosque?

-Esta embrujado

- ¿Embrujado?

La joven rio.

-No te preocupes solo son cosas que dicen en el pueblo, casi nadie se atreve a entrar aquí es por eso- la joven agarro su cabello y lo empezó a exprimir para quitar el exceso de agua- que no creo que nuestros amigos estén mucho tiempo por aquí.

-Ya veo... ¿Cómo terminaste en... pues esto?

-Ah es una historia graciosa, yo estaba caminado por el pueblo, ayudando al señor Remurios con sus botes de agua, cuando esos imbéciles llegaron quisieron asaltarnos y los golpeé, no lo suficientemente duro para noquearlos así que me empezaron a perseguir, quise esconderme en la taberna, pero creo que si me vieron entrar y pues luego tu te metiste y ahora estoy aquí.

- ¿Asaltantes?

-Van y vienen lo mas seguro es que se vayan después de esto.

- ¿Les pegaste?

-Soy fuerte.

Dekart la miraba con cierta incredulidad, dudaba que alguien como ella pudiera con esos tipos, pero llego a su mente el recuerdo de ella derribando a uno y luego aventándolo contra otro, si era fuerte, pero se veía toda lastimada ¿Ella será una aldeana de por aquí? ¿Qué tiene magia? ¿Por qué su pelo no es blanco como los demás que ha visto?

- ¿Qué tanto me observas?

-Ah yo perdón- se volteo de inmediato.

-Será mejor regresar, ya no creo que estén por aquí y tengo que regresar a arreglar el desastre que hice en la taberna y tu pues si te dejo solo lo mas seguro es que te pierdas así que mejor vámonos.

Ambos jóvenes se levantaron y comenzaron a caminar hacia afuera de la cueva, Dekart seguía a Al mientras iban de regreso, cuando noto como la chica se abrazaba a si misma para evitar el frio, seguían ambos con la ropa mojada supuso que era por eso. Pocos minutos después el pueblo ya se divisaba entre los árboles.

-Bueno yo me voy a ir por haya- señalo hacia la derecha.

-Ah si yo creo que será mejor regresar.

Un silencio incomodo lleno por unos instantes el lugar.

-Bueno adiós- la joven levanto una mano es señal de despedida y prosiguió su camino.

-Si- dijo Dekart en un susurro.