El regreso al palacio fue caótico, la reina no paraba de gritar, cosas como que a ella le debía la vida como es que su hermana mayor se atrevía a hacer esa clase de actos sin consentimiento de sus padres que además eran los reyes de esa tierra, Alinette se sentía confundida y algo aturdida por estar escuchando a su madre gritar todo el camino solo quería que al llegar fuera toda una broma o algo parecido.

Al llegar al castillo la reina le ordeno irse a su habitación junto con su hermana menor, mientras ella se apresuraba hacia el salón de tronos.

- ¿Tú crees que esto vaya a salir bien? Ya estaba harta de escuchar a mamá odio cuando se pone así- la pequeña princesa replico mientras caminaban hacia sus habitaciones

-No sé, parece algo serio... digo ella sería el gobernante de esta tierra en unos años- contesto Alinette con un tono preocupado- y bueno ya sabes cómo se pone mamá cuando hacemos algo sin su permiso.

Al pasar junto a la habitación donde estaban sus padres, gritos fuertes salían, Alinette decidió parar en seco al escuchar lo que su madre decía.

- ¡ESTO ES LO ULTIMO QUE TE SOPORTO ESTAS FUERA DE ESTA FAMILIA!

Ambas princesas se miraron una a la otra quedándose inmóviles, es cierto que su madre y su hermana mayor siempre discutían, desde que su hermana decidió estudiar para ser curador en vez de enfocarse en los estudios pertinentes para el manejo del reino, sin embargo, su madre siempre se mostraba orgullosa de que su hermana terminara siendo uno de los mejores curadores del reino.

- ¿Bien me vas a echar entonces? Que pretendes hacer entonces cuando mis hermanas crezcan, prácticamente yo las crié mientras tu intentabas jugar a la reina.

Un golpe en seco sonó por el lugar Alinette y la pequeña Teselime sabían lo que había pasado, su hermana mayor recibió una de las famosas cachetadas de su madre, que, aunque no lo hacía con frecuencia algunas veces cada una había recibido una por un comportamiento que a palabras de la reina era indignante.

Un breve silencio se presentó y de forma inmediata su hermana mayor salió detrás de ella su madre que le continuaba gritando para al final salir su padre, ambas se miraron y decidieron irse a sus habitaciones antes de que las vieran.

-Vaya eso fue intenso- comento Alinette al llegar a su habitación.

La princesa empezó a recordar bastantes cosas mientras se sentaba en su cama, cuando todo esto empezó no tenía más de 6 años y su hermana menor 4, vivían a las afueras del reino en una cabaña muy pequeña donde compartía cama con su hermana menor, de esa época solo le llegan recuerdos de las tantas peleas que sus padres protagonizaban, pero un día un mensajero del reino llego de inmediato sus padres salieron dejándolas con su hermana mayor.

Ante esta acción su hermana mayor decidió faltar a sus clases y quedarse a cuidar a sus hermanas, en ese entonces Sashairim tenía un novio comerciante con el cual salía con sus hermanas de vez en cuando y ese día decidió ir con él y llevar a sus hermanas para distraerse.

Alinette dio una sonrisa al recordar todos los regalos que el comerciante les daba, como la vez que se le ocurrió decirle que si le daba uno de sus dulces favoritos le diría con quien duerme su hermana por las noches siendo la respuesta que con ella y Teselime, en fin Alinette no sabe bien que ocurrió aquella vez solo que al regresar sus padres de ese viaje, les comentaron que se irían a vivir a otro lado y sin más llegaron a un enorme palacio donde por primera vez conoció a sus primos del lado de su padre.

Poco después se enteró que su tío era el heredero al trono y poco antes de su nombramiento su tío había muerto por lo que a su padre le tocaba reinar en su lugar, el cambio fue muy grande ya que se tuvo que acostumbrar a los peinados vestidos y zapatillas para verse como todo a una princesa, en ese entonces todo parecía un juego para las 2 hermanas menores, sin embargo, la más afectada era Sashairim ella ya estaba en la academia de curadores por lo que ser una princesa no estaba dentro de sus planes.

-Fue en esa época donde no paraban de pelear- dijo para sí misma Alinette- recuerdo que ella solo quería terminar y ejercer su profesión sin embargo mamá constantemente le decía que tenía que dejarlo y prepararse porque ella sería la siguiente en el trono- Alinette recordaba- y ¿Ahora que va a pasar?

Al decir esto último y levantar la vista vio sus muebles levitar por todo el cuarto esto la alarmo bastante, sus poderes estaban fuera de control ¿Por la pelea que acaba de pasar o fueron los recuerdos?

-Un poco de ambos supongo- dijo en voz alta- mejor relájate, relájate, relájate ahg esto ya tenía tiempo que no pasaba- dijo intentando hacer respiraciones profundas.

Al ver hacia su espejo vio su ojo izquierdo, un tono azul rey se formaba cada vez más intenso en su iris sustituyendo poco a poco al verde en él.

-Maldita sea relájate- dijo esto mientras se sentaba en el suelo en una posición de meditación.

Poco a poco las respiraciones se hicieron más profundas y su mente quedo en blanco solo se escuchaba el sonido del viento en su ventana un sonido de muebles cayendo la despertó del trance, al ver alrededor los muebles ya no flotaban por doquier aun que quedaron todos desordenados.

-Bien supongo que tendré que acomodar todo esto- dijo para sí misma mirando sus manos aun no creía que esta situación le afectara de esa manera.

Paso un tiempo y con sus muebles ordenados decidió salir de la habitación para ir a la cocina ya que no había comido nada y no habían  llamado a cenar y ya era bastante tarde, al bajar paso por varios cuartos donde se escuchaban murmuros era obvio que la discusión de su hermana y su madre no había pasado desapercibida para los oídos del castillo.

Al llegar a la cocina noto que no se encontraba nadie allí, era algo raro ya que siempre había gente cocinando, no le tomo mucha importancia y tomo fruta de un canasto cerca de una esquina y decidió salir al jardín, era un gran jardín donde a lo lejos pasaba un rió bastante pequeño, pero no le quitaba lo hermoso al lugar.

Al estar a punto de morder la fruta escucho un sonido en un balcón en la parte de arriba, si no se equivocaba era la sala de juntas del consejo real, allí siempre se juntaban los representantes de cada provincia a discutir temas importantes para el reino, Alinette decidió esconderse en un punto ciego para el balcón y escuchar lo que estaba pasando.

- ¿Qué pasa si al estar casado con ella quiere reclamar el trono? - una voz gruesa hablo.

-Ella no ha sido nombrada gobernante no debería por que reclamar nada- una voz femenina hablo esta vez.

-La princesa desobedeció las normas impuestas por nosotros- menciono la reina en tono serio- desafío a sus padres y a su reino.

-Yelmit sé que nos desobedeció, pero fue solo a nosotros sus padres- dijo el rey algo molesto.

-Claro que no, soy su madre, pero también la reina así que mi decisión será unánime a partir de hoy Sashairim queda desheredada no quiero que un patán se crea con el derecho de reclamar el trono de este reino- dijo firmemente la reina- y tu Vicem ni se te ocurra darle un centavo a ella- sentencio la reina mirando al rey.

- ¡Desheredada! Solo por casarse- Alinette dijo en voz baja- no puede ser debe de haber algo más de lo que no me esté enterando- con esto último decidió correr hacia su habitación.

¿Qué estaba pasando? ¿Porque de repente su hermana estaba desheredada? Es verdad que no hablaba mucho con ella debido a la escuela, Alinette estaba por concluir la academia básica pensaba ser un gran caballero tanto que se encerró en ese mundo y no prestaba atención a lo que pasaba con sus padres o su hermana, el castillo era muy grande y no todo el tiempo lograba escuchar lo que pasa, pero sabía quién si, sus damas de compañía siempre estaban prestando atención a todo chisme que surgía muchas veces las escuchaba hablar sobre los demás cuando la peinaban.

-Les preguntare mañana si es que vienen, es verdad se supone estamos de vacaciones no tendrían por qué venir ellas tampoco, bueno no lo sé muy bien, mañana investigare- hablo en voz alta la princesa.

Decidió terminar de comer la fruta que tomo de la cocina para después dormir, sí que había sido algo muy caótico, solo se limitaba a pensar que habría pasado para que su hermana hubiera tomado esa decisión y para que su madre estuviera tan enojada.