-Kanon, a donde crees que vas?

Pregunto un niño no muy mayor a los ocho años, tenía el cabello azul, largo y rebelde, dos suaves y lindas orejas felinas sobresalía de su cabeza mientras su suave cola se balanceaba, tenía una mirada de curiosidad mientras observaba a un chico muy parecido a él cuya única diferencia era que el azul de su pelo era más claro.

- Muy lejos de aquí

El otro felino se encontraba sentado en el borde de la ventana de aquel refugio para híbridos, se veía molesto mientras bajaba su maleta por la ventana.

- ah...? No puedes irte...mañana vendrán por ti ...

El menor de los nekos miro a su hermano, jamás entendería porque decían que se parecían...saga era todo lo que él no: Dócil, cariñoso y amable. Además...estaba resignado a la ley de los amos .

- por eso me voy, no voy a tener un amo nunca! No lo necesito!

El menor salto de la ventana y puso sus pies en el suelo, era una ventana de primer piso así que no se lastimó.

Vio a su gemelo asomar la cabeza, sus orejitas azules estaban agachadas y se apegaban a la cabeza en señal de preocupación.

- Hermano..no te vayas...

Se acercó al otro neko y sonrió, uno de sus colmillitos asomo por entre sus labios cerrados, dándole una apariencia tierna.

- Saga, les demostrare a todos que no necesito un amo, y cuando lo haga...

Revolvió los cabellos de su hermano mayor, desordenadolos más de lo que ya estaban.

- Vas a ser libre conmigo!

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- meow....

Un híbrido peli azul abrió los ojos con pereza, aunque algo triste..había recordado a su hermano menor nuevamente.

Estiró su cuerpo de la misma forma en que un gato lo hace y se rasco una de sus orejitas felinas, mirando con pereza la habitación donde estaba y donde vivía hace ya casi diez años desde su adopción.

Era un lugar bonito, pese a ser de dinero no estaba inundado de cosas millonarias, su dueño odiaba hacer resaltar su estatus.

Vio una maleta a medio hacer en el piso, lo cual lo extraño ¿Quién se iba de viaje?

No tuvo tiempo a seguir pensando porque la puerta se abrió, dejando ver a un chico de cortos cabellos castaños, ojos celestes, y una cálida sonrisa.

Sus orejitas se alzaron al verlo y sonrió.

- hm? Oh, buenos días saga!

- buenos días amo!

El chico río y se acercó al híbrido, acariciando sus orejas con cariño y ganándose un ronroneo.

- porque sigues llamandome así? Ya te dije que no me molesta que me llames por mi nombre...

- prr..perdón Aioros..

El castaño río nuevamente y dejó de acariciar las orejas del peli azul, quién miro con curiosidad la maleta.

- Vas a viajar?

- Ah..? Oh, cierto, no te avise, tengo que salir del país unos días...

El neko ladeo la cabeza, curioso.

- a donde vamos?

- iré unos días a España...y...tu no vas saga..no permiten nekos en el hotel...

El peli azul se sorprendió al oír eso y bajo sus orejas, no le gustaba quedarse sólo o estar lejos del castaño demasiado tiempo.

- pero...

- tranquilo, mi madre te cuidara saga...

Okay, eso sólo lo preocupó más.

No odiaba a la señora sagitarius....pero esa mujer daba miedo...

Casi le suplico a Aioros que lo llevará con él, hasta juro esconder sus orejas y cola de ser necesario.

Pero no consiguió nada que una disculpa por parte de su dueño, quién no podía arriesgarse...

- lo siento saga, pero te prometo que será sólo por unos días...

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En otro lado de la ciudad, en los callejones de la parte baja..

- devuelveme ese pescado maldito gato rosa!

Había un grupo de híbridos reunidos, algunos hablaban, otros dormían y algunos observaban como una linda neko rubia perseguía por todo el callejón a otro neko, que llevaba un pescado en la mano.

- quien lo ve se lo queda tetis!

-ven aquí gato de pacotilla!

Justo en eso, eo, el gato pelirosa, chocó con un muchacho en la entrada del callejón y cayó de trasero al piso

- nyaw! Fíjate por dond-...Oh, hola kanon...

Quien estaba parado en la entrada era otro neko, tenían el cabello de un azul marino, además de una mirada burlona y algo intimidante.

- De nuevo peleando por comida? Parecen gatos callejeros...

- en teoría eso som-

- cierra la boca Eo!

Grito la rubia dándole un cosco mientras volvia a tomar su pescado y miraba con una sonrisa amable a Kanon.

- como te fue hoy? Conseguiste algo nuevo?

El peli azul camino hasta el resto de los híbridos y tiro una bolsa llena de comida en medio de todos.

- sirvanse

Ni bien dijo eso ya tenía a todos rebuscando en la bolsa sus comidas favoritas.

Algo que ninguno noto fue al Inu, híbrido canino, de cabello rosa,corto pero ordenado, que se había quedado parado en la entrada del callejón con timidez...bueno, Tetis si lo noto.

- um? Y este?

Pregunto la neko rubia examinandolo de pies a cabeza, lo que lo puso algo nervioso.

- Se llama sorrento, a partir de hoy es parte del grupo.

Otro inu, de cabellos verdes y el cual tenía una cicatriz en el ojo, sonrió y se acercó a él de manera animada, no fue difícil para el de cabellos rosa claro notar que se trataba del más joven del grupo por la forma en que lo saludaba.

El grupo era algo pequeño, sólo siete integrantes: La neko rubia, el neko pelirosa, Kanon, un neko de cabellos castaño claro, el inu peli verde, otro inu medio rapado y un...¿inu? Bastante feo

Miro al peliverde que se le había acercado a saludar.

- un gusto, soy Isaac, Bienvenido al grupo!

Cuando escapó de casa pensó que los híbridos callejeros eran personas toscas, groseras y problemáticas por lo que contaban de ellos...

Tal parecía que se había equivocado.