-Deberías de ir al hotel y descansar -

Sasuke escucho la voz de Iruka detrás de su espalda, pero no lo miro. Siguió sirviéndose la sexta taza de café, mientras pensaba en Naruto.

La operación había sido un éxito, pudieron extraer la bala y limpiar los residuos. Solo faltaba que Naruto despertara, ya habían pasado tres días y todavía no abría los ojos; Sasuke tuvo miedo, miedo de que su amante cayera en coma que durara años.

-Sasuke, por favor - Iruka se acercó y le arrebato la taza - Ve a dormir, te vas a desmayar si sigues así -

El azabache no respondió, se dio media vuelta y camino hacia el pasillo donde estaba la habitación de Naruto.

Iruka soltó un suspiro y lo siguió, no soportaba ver al Uchiha de esa forma "¿Dónde se encontraba el chico sarcástico? ¿Dónde estaba el tipo que sonreía con burla cada vez que se salía con la suya?" se preguntó el castaño, ahora lo que observaba, era un chico sin vida y que solo respiraba con un propósito.

Sasuke se detuvo e Iruka hizo lo mismo.

-¿Qué sucede? - pregunto el castaño.

-Esa... esa enfermera ¿Es la que cuida a Naruto? - Sasuke apunto hacia una dirección.

Iruka miro hacia donde apuntaba y se dio cuenta que tenia razón. La enfermera miraba por todos lados, como si estuviera buscando a alguien, hasta que su mirada se topo con la de ellos.

Ella se acerco casi corriendo.

El azabache pensó lo peor y corrió hacia la chica. Cuando la tuvo enfrente, el agarro de los hombros a la joven y casi la estrello en la pared.

-¡¿Cómo esta?! ¡Dime por favor! -

La enfermera trato de no perder la calma -No se preocupe joven, el despertó -

Iruka sintió que se iba a desmayar de la emoción, solo las lágrimas se asomaron en sus ojos.

Sasuke por su parte cayo de rodillas al suelo, se sintió tan feliz y lleno de alivio. Era la mejor noticia que había escuchado.

-Ahora mismo el doctor esta con él, creo que después de unos minutos pueden entrar a verlo -

Iruka asintió y tomo de los hombros al azabache -El esta bien, no te tienes que martirizar más -

Sasuke lloro, las gotas caían en el frio piso, no le importaba verse miserable. Su orgullo ya lo había dejado a un lado.

Solo pasaron varios minutos cuando la puerta de la habitación se abrió. El doctor salió con un aspecto bastante tranquilo, leía los papeles en mano con suma atención y después de ver que todo estaba perfecto, miro hacia los visitantes.

-El paciente esta bien, solo tiene que descansar, no lo hagan reír y no lo dejen hacer movimientos bruscos - explico el doctor - si desean pueden pasar -

Sasuke no dudo, se levanto del suelo y corrió hacia adentro.

El doctor sonrió y miro hacia el castaño -Usted también puede entrar -

Iruka negó con la cabeza -No, creo que es mejor que los deje solos -

El doctor comprendió, no era la primera vez que veía una pareja homosexual, después de todo en estados Unidos era legal el matrimonio gay.

Sasuke cerró la puerta detrás de su espalda, no pudo avanzar hacia la camilla porque sus músculos no reaccionaban por la sorpresa.

Naruto lo observaba con una sonrisa, la misma sonrisa que hacia cuando estaba tranquilo, lleno de paz, como si la herida en el pecho no fuera nada.

-¿No te vas a acercar? -

El azabache se sobresalto al escuchar su voz ronca, los latidos de su corazón aumentaron a un ritmo que lo asusto.

Naruto extendió una mano - Acércate, necesito un abrazo tuyo -

Sasuke no dudo más y corrió hacia el rubio, tomo su mano y lo abrazo fuertemente. Naruto se mordió los labios para no lanzar un quejido de dolor y correspondió el abrazo.

-Eres un tonto - dijo Sasuke en un susurro - ¿Por qué lo hiciste? -

-Solo lo hice para soltarme del apellido Namikaze, además confiaba en la mala puntería de Kurama -

El azabache no respondió, en cambio puso un dedo sobre la herida y lo apretó, haciendo que el rubio gritara.

-¡Duele! -

-¡Eres un idiota! ¡¿Qué tal si las cosas hubieran salido mal?! ¡¿Crees que viviría feliz!? - Sasuke se detuvo y apartó su mano - Yo... No hubiera vivido sin ti - choco la cabeza sobre el pecho del rubio.

Naruto no respondió, solo le dio un beso a su cabello y aspiro su aroma. La verdad no había pensado mucho en las consecuencias, solo hizo lo que pensó correcto.

-Lo siento, yo no quería hacerte sufrir-

-Ya lo has hecho, durante estos días no me supe reconocer, no podía creer en el desastre que me convertí al no tenerte a mi lado - dijo el azabache mientras alzaba la cabeza y observaba los ojos azules de su amado - Me di cuenta que formaste parte de mi vida-

-Tu también, eres parte de mi vida. Por eso lo hice, no quería que te sucediera nada malo, se de lo que es capaz mi abuela -

-Ahora estamos lejos de ella - Sasuke alzo una mano y acaricio la mejilla del rubio - Podemos ser libres y hacer lo que queramos -

Naruto asintió, tomo la mano del Uchiha y se acercó a su rostro -Es lo que siempre quise - dijo antes de estrellar sus labios con los de su amante.

Sasuke correspondió, anhelaba mucho sus besos. Abrió los labios, dejando que su lengua se enredara con la suya.

Parecía como si fuera la primera vez.

Un beso que duró poco por la falta de aire, Naruto se le complicaba respirar.

-¿La bala me dio en un pulmón? - pregunto el rubio al sentir como sus costillas se contraía del dolor.

-Cerca, además si te hubiera dado no estarías vivo -

Naruto alzo una ceja -Eres muy vengativo, mi amor -

Sasuke sintió un vapor caliente en el rostro, nunca en su vida lo habían llamado así. Se sintió feliz y avergonzado al mismo tiempo.

El rubio sonrió para sus adentros, le fascinaba ver las emociones que provocaba en el azabache.

Luego recordó algo importante que Sasuke debe de saber.

-Sasuke, tengo que decirte algo - dijo en tono serio, haciendo que el Uchiha le prestara atención.

-Kurama y Menma se han ido -