La pareja se sorprendió ante la noticia, en especial el azabache. Cuando por fin habían aclarado sus sentimientos, el destino lo arruina como si no quisiera que estuvieran juntos.

-En pocas palabras ¿Piensa venderme? – menciono Naruto – Ahora que se la verdad ¿Crees que me dejare? –

Iruka lanzo un suspiro – No puedes hacer algo contra tu abuela así nada más, ella es más poderosa que tu –

-Lo sé – Naruto pensó por unos minutos – Creo... creo que iré a los Estados Unidos –

Sasuke e Iruka lo miraron sin entender.

-Tengo que averiguar varias cosas –

-¿Y que vas a hacer con el trabajo de tutor? Mañana es lunes y si faltas, el director no dudara en decírselo a tu abuela –

-No pienso faltar, saliendo de la universidad, iré; así que te encargo mi boleto –

Sasuke tomo su mano -¿Iras solo? –

El rubio asintió con la cabeza – Tengo que ir, no quiero que te metas más en problemas por mi culpa –

-¿Ya olvidaste lo que te dije? No tengo miedo –

Naruto alzo una mano y acaricio la mejilla del azabache -Esta vez lo hago por tus padres, pasas más tiempo conmigo que con ellos –

Sasuke lo olvido, hoy era un día en que salían a pasear como familia, ya que su padre descansaba. Naruto tenía razón desde que llego a su vida, ha estado más tiempo con él, de hecho, sus preocupaciones giraban a su alrededor.

-Yo tampoco quiero dejarte solo – dijo el rubio – Tengo miedo de que algo malo te suceda-

- Te preocupas demasiado –

Iruka que los observaba desde una esquina, pregunto -¿Quieres que lo lleve a casa? –

Sasuke lo fulmino con la mirada haciendo sobresaltar al castaño.

-Quiero quedarme, solo por hoy –

El rubio estuvo de acuerdo, ya era muy tarde y salir a estas horas, era muy peligroso.

-Entonces, iré a arreglar la habitación de invitados – dijo Iruka, pero antes de que saliera de la habitación, Sasuke lo detuvo.

-No es necesario ¿Puedo dormir contigo? – se dirigió al rubio.

Naruto se puso nervioso por la propuesta y miro a Iruka en busca de ayuda, este solo alzo el pulgar y salió de ahí.

-Está bien –

Sasuke sonrió y sin soltar su mano, lo llevo hacia la cama.

Naruto aparto las sabanas con cuidado, pulió la almohada y se acostaron. El rubio trato de controlar los latidos de su corazón, pero no podía más que la presencia del azabache se hacia notar.

-¿Estás cómodo? – pregunto Naruto.

-Si lo estoy y ¿Tu? –

-Si...Buenas noches – murmuro, giro su cuerpo y le dio la espalda. Aunque quisiera conciliar el sueño, su corazón no se lo permitía, si seguía así tendría que irse a la otra habitación para que el azabache pudiera descansar.

Sasuke tomo el aire necesario, consciente de que el silencio que se había creado convertía a su corazón en el único sonido real que había en ese cuarto. Después de un rato, giro la cabeza hacia la espalda del rubio y la contemplo mucho más tiempo.

"¿Por qué rayos actuó como una mujer en sus primaveras? Me he acostado con varios tipos, puedo dar el primer paso" pensó el azabache, acerco su mano lentamente hacia su espalda.

Naruto que cerraba los ojos con fuerza dio un respingo, sobresaltado y se incorporó.

-¡¿Qué sucede?! –

Sasuke parpadeo y luego soltó una risita.

-No es necesario que te pongas tan nervioso –

Los labios de Naruto temblaron.

-Lo siento, es la primera vez que estoy así contigo. Kurama tiene más experiencia en este sentido –

-No te compares con él, tu eres tu y no me obligas hacer algo que no quiero –

Naruto sonrió – Si, tienes razón –

Antes de que Sasuke respondiera, algo cálido y húmedo cubrió sus propios labios.

¡Fue besado!

Sasuke se sorprendió, pero felizmente correspondió el beso. Siguiendo el pequeño espacio entre sus labios, el rubio se abrió camino en su bosa, haciendo lo que le pareció bien.

Su boca de volvió floja y entumecida.

-Mmm –

El azabache engancho sus manos alrededor del cuello del Namikaze y su cabeza la inclino para permitir que el rubio invadiera su boca activamente.

-Ahhh –

Todo su cuerpo estallo en un calor que quería en su vida, su respiración era pesada y su parte inferior del cuerpo comenzó a hincharse. Sasuke se movió con impaciencia y se frotaba. Su camisa inconscientemente se deslizaba por su hombro mientras el estaba en ello, exponiendo su piel atractiva de su pecho.

Naruto dejo sus labios, su mirada fue atraída por su pecho expuesto.

Una piel clara con un tinte rosado, todo este tiempo se había perdido de este tesoro por culpa de la responsabilidad, pero ahora que sabia la verdad, podía disfrutar del paraíso sin ninguna culpa.

-¿Te gusta lo que ves? – pregunto el azabache en un tono seductor.

Las pupilas del rubio se oscurecieron, llevando un deseo como si quisiera comerlo entero. Extendió su palma y toco la piel desnuda frente a él.

Sasuke dio un pequeño salto y su cuerpo se animo con placer, la palma apenas lo tocaba, pero se sentía extremadamente débil. La sensibilidad de su cuerpo era demasiado inconcebible.

Su vista se torno borroso, jadeo fuertemente para respirar. Naruto observo los ojos oscuros del azabache, estos estaban llenos de anhelo y deseo, algo que lo complació.

Naruto se inclino felizmente y planto un beso en sus labios.

-Nunca pensé que me desearas tanto, todavía recuerdo lo que me dijiste cuando nos conocimos –

Sasuke se sonrojo violentamente.

-No importa, no pienso dejarte a pesar de que te aburras de mi –

La voz clara y fría tenía una extraña atracción que le hizo pensar que Kurama había tomado el control, pero su toque suave demostró lo contrario y no pudo evitar hacer un ruido bajo, su parte inferior del cuerpo se hinchó aún más, volviéndose insoportable.

-Te necesito – dijo entrecortado – necesito que me toques más –

Naruto mordió sus labios y presiono su cuerpo aún más al azabache. Los dos cayeron, cálidos besos aterrizaron al azar en el cuerpo de Sasuke, los sentimientos que trajeron fueron difíciles de soportar, como suaves cosquillas.

Sasuke gimió suavemente, las comisuras de sus ojos se humedecieron.

-Naruto, se mío –

-Desde que nos conocimos, ya soy tuyo -