El teléfono sonó como loco. Naruto se termino de abrochar el pantalón, se agacho y saco su teléfono que estaba en el bolsillo de la chaqueta.

Sasuke estaba jadeando y miro al rubio. Se tenso, pensando que Naruto podría ignorar el teléfono y empezar a acusarlo por lo sucedido.

Naruto silenciosamente chasqueo la lengua y descolgó el teléfono. Camino hacia el Uchiha y desato sus manos para que pudiera arreglarse.

-Gracias -

-Luego hablamos – menciono el rubio antes de salir de la habitación.

Sasuke se puso la ropa interior y rápidamente se puso el pijama. Abrió la puerta y asomo la cabeza para ver al Namikaze, este estaba hablando de algo en su teléfono con una cara relajada, como si lo anterior nunca había sucedido.

Sasuke sabe que el culpable es Kurama, pero aun así le hubiera encantado ver algo de arrepentimiento en su rostro.

Naruto termino la llamada y miro hacia el Uchiha. Sintió que sus orejas se ruborizaban al recordar la escena anterior. Nunca creyó que se iba a despertar en esas circunstancias, había visto la piel desnuda del azabache, escucho sus gemidos y vio su cara sonrojada por el sexo, era muy placentero de ver, pero no era lo correcto.

"Es un estudiante" pensó tratando de alejar esos pensamientos.

-Yo... ¿Lo siento? – hablo Sasuke -No se qué me paso –

Naruto negó con la cabeza -No, yo lo lamento profundamente. Es mejor que renuncies a esto, puedes salir lastimado y eso no es lo que deseo –

Sasuke apretó el pomo de la puerta – Acepté porque se las consecuencias y lo que sucedió hoy fue porque quise –

Naruto se quedó sin habla.

-Buenas noches – el azabache azoto la puerta, terminando la pequeña discusión. 

Quería que todo esto fuera una pesadilla.

Naruto soltó un suspiro y abrió la puerta de su habitación. Esperaba que el día siguiente todo fuera normal, que se olvidaran de lo sucedido y actuaran como normalmente lo hacen.

"Mañana es el último día de clases, pensare que hacer este fin de semana para no depender de de Sasuke" se acostó en la cama y se envolvió con la sabana.

Al día siguiente, Sasuke se despertó con un ligero dolor de cabeza, no pudo dormir por lo de anoche. "Si Naruto no se hubiera despertado, Kurama pudo haber terminado" pensó, ya que después del sexo podía conciliar mejor el sueño.

Enderezo su ropa y abrió la puerta. Sasuke que estaba a punto de salir fue sorprendido por un rubio con una diadema de ratón.

-¡Vamos a Disneyland! –

El azabache abrió la boca, pero no salió palabra alguna.

No solo la diadema resaltaba de su cabeza, sino el pijama de unicornios y arcoíris junto con un tutu que llevaba en la cintura.

-¡Vamos a Disneyland! – dio vueltas alrededor del Uchiha y le cerro la boca con una mano -Te entraran moscas – dijo con una sonrisa – Vamos a Disneyland ¿Si? – se quito la diadema y se lo puso encima de su cabeza.

Sasuke reacciono -¿Naruko? –

-La misma –

-¿Por qué? –

Naruko rodo los ojos – No se que paso, pero Naruto se puso triste y cuando esta triste salgo yo – empezó a dar vueltas – Desde que tu apareciste las emociones de Naruto están descontroladas –

Ese último comentario sorprendió al Uchiha.

-¿Por...-

-¡Ya basta con tus preguntas! ¡Si quieres saber, pregúntaselo a él! –

Sasuke odiaba admitirlo, pero tenia razón.

-Necesito ir a casa – estaba a punto de entrar de nuevo, pero el rubio se lo impidió.

-Vamos a Disneyland y no acepto un no por respuesta –

-¿Disneyland? ¿Por qué quieres ir ahí? –

Naruko chasqueo la lengua -Para divertirnos –

El azabache alzo una ceja -Creí que te caía mal –

-Me caes mal, pero como eres el único aquí, no me queda de otra que llevarte –

-Que halagador – menciono el Uchiha – Pero no tengo dinero, ni se manejar –

Naruko alzo las cejas y se apunto a si misma – Cariño, yo tengo dinero y se manejar. No busques pretextos –

Sasuke maldijo en su mente. El rubio tomo sus hombros y lo empujo hacia su habitación.

-Toma algunas prendas de Naruto, yo me pondré un vestido que combine con mi estado de ánimo –

"¿Qué demonios esta diciendo?" Sasuke soltó un suspiro -No, te tendrás que vestir como Naruto comúnmente lo hace –

Naruko frunció el ceño -¿Y por que te tengo que escuchar? –

-Tengo el número de Iruka, puedo llamarlo ahora mismo y decirle la situación. Tu viaje a Disneyland será cancelada –

El rubio abrió la boca, pero no pudo articular palabra alguna, azoto el pie en el suelo y camino hacia el ropero.

-Está bien –

Saco una camisa blanca, un pantalón negro ajustado y una bufanda gris. Después miro hacia el Uchiha y le señalo la ropa.

-Póntelo, te quedara estupendo –

Sasuke lo agarro - ¿Cómo es que tiene esta clase de pantalón? –

-Yo se lo compre, es que mi Naruto no tiene sentido de la moda –

-¿Tu que llevaras? –

Naruko puso los ojos en blanco y empezó a rebuscar en el ropero. Saco una camisa negra, un pantalón de piel y una gabardina color café.

-¿Contento? –

El azabache asintió con la cabeza. Naruko sonrió cínicamente y salió de la habitación.

A pesar de tener cuerpo de hombre, Naruko actuaba como mujer, no quería que la vieran desnuda ni quería ver el cuerpo desnudo del azabache, ella tenia sus gustos y privacidad.

Tardaron dos horas para cambiarse, todo por culpa del rubio que quería maquillarse y llevar su peluca, pero el azabache se lo impidió y empezó una clase de pelea donde este ultimo fue el ganador.

-No entiendo nada – se quejó Naruko - ¿Por qué me impides ser yo misma? –

-Estas en el cuerpo de alguien que tiene una vida ¿Qué tal si uno de sus conocidos lo ve? Dentro de casa, puedes hacer lo que quieras –

Naruko hizo un puchero y camino hacia la camioneta.

-Que malo eres –

Sasuke no respondió y subió al asiento del copiloto. Cuando la camioneta arranco, se acordó de que su celular lo había dejado en la mesita de noche.

-Espera –

-Ya es tarde – Naruko puso reversa y salió de la villa a toda velocidad.