En el desayuno al día siguiente, James Potter estaba interrogando a sus ocho futuros nietos en buscar de saber quien era el mocoso malvado que se casó con su hija. 

Era difícil adivinar quién era por los rasgos de los chicos. Entre pelinegros, castaños, pelirrojas y rubios, era complicado saber quién era el padre. 

—No podemos decir nada — dijo Aleksander — Ordenes de las Moiras. 

—Una pista, aunque sea una pista — pidió James. 

— Papá es Géminis, con eso decimos todo — contestó Esmery. 

—¿Quieren ver una foto de mamá? — preguntó Bianca sacando su teléfono celular. 

—¿Qué es eso? — preguntó Euphemia 

—Un teléfono celular, muchos lo usan en nuestra época. Invento muggle — contestó Felicity mordisqueando su tostada — Es un medio esencial. Hogwarts tiene regulado su uso dentro de las instalaciones.

Bianca empezó revisar su galera de fotos hasta que encontró la fotografía del cumpleaños cuarenta y cuatro de su madre. 

— Esta es mamá actualmente — dijo Bianca mostrando la fotografía a su bisabuela Euphemia. 

James, Sirius, Remus y Lily se colaron detrás de la señora Potter para ver la fotografía. En ella mostraba a una encantadora señora de cabello pelirrojo trenzado y sosteniendo un pequeño pastel con dos velas que formaban el número 44. 

—Se ve bien para tener cuarenta y cuatro — señaló Sirius. 

—Rutina de skincare de cuatro pasos y masajes fáciles con piedra de jade— respondió Georgiana. —Ese es el secreto de mamá. 

La señora Euphemia le pasó el teléfono a la señora Aurora. 

—Es hermosa — dijo Aurora devolviendole el teléfono a Bianca. 

El desayuno continuo hasta que Dumbledore preguntó quien quisiera leer. 

—Yo por favor — contestó Esmery. 

Theo se quedó sin habla cuando supo que Cordelia era una hablante parsel.

Era raros y aun en este lado del continente. Era más común verlos en el medio oriente o en Sudamérica, siendo venerados, aquí, eran temidos.

Pero el último hablante parsel en el continente era el señor Oscuro.

—¿Ustedes también son parsel hablante? — preguntó Lord Nott a los hijos de Cordelia. 

—Solo yo pude heredar el don — contestó Hareton 

Algunos susurraron cosas de una dama oscura ante la mención de Quien-no-debe-ser-nombrado. 

Debía escribirle a su abuelo sobre esto. 

"Mocoso chismoso" pensó James molesto. 

—Solo necesita descansar — dijo Madame Pomfrey a Cordelia, ella estaba recostada en una de las camas mirando su muñeca vendada. —Ya puede irse, señor Nott.

—Yo quisiera quedar...— trató de decir Theo pero la puerta siendo abierta lo interrumpió.

—¡Mi dulce sol de verano!— escuchó a Fraser entrar junto a las demás amigas de Cordelia Ella se acercó a la cama de Cordelia y la abrazó frotando su cabeza con la de Cordelia, como un gato. 

James sonrió. 

Con las amigas de su hija presente, ese mocoso no tendría que quedarse con Cordelia. 

—Eowyn— dijo Cordelia algo avergonzada.

—Weasley conocerá mi ira— respondió Fraser apretando su puño. 

—Tía Eowyn enojada es un peligro para la sociedad — dijo Caelum negando con la cabeza 

—¿Que tanto? — preguntó emocionada Bellatrix. 

—No es bueno tenerla como enemiga — contestó Hareton. 

—Ron le tiene miedo a las arañas— comentó Ginevra a lado de Granger.

—Que buena niña— le palmeó la cabeza Fraser a la menor de los Weasley. 

—Quiero saber que hara — susurró emocionado Sirius a James, Remus y Peter. 

—¿Cómo sigues?— preguntó Pansy sentándose al borde la cama.

Theo se sentía fuera del lugar, fue agradable estar unos momentos a solas con Cordelia, pero ahora que estaba rodeado por las amigas de ella se sentía un poco incomodo. 

—Si, que se vaya — dijo James haciendo un movimiento de mano de salida — Shuu, Shuu. 

—Yo me retiro— dijo Theo.

—Gracias Theo, por traerme a la enfermería— le sonrió Cordelia. Theo sintió sus mejillas sentirse cálidas ante la sonrisa de Cordelia.

—No fue nada— dijo Theo con voz neutral, se despidió de las demás. Aunque antes de salir, Fraser señaló sus ojos y luego lo señaló a él.

Vaya que daba miedo Fraser. 

—Es nuestra favorita entre las amigas de Cordelia — dijo Sirius. 

—También es mi tía favorita — sonrió Esmery. 

—Es tu favorita porque tienen casi la misma personalidad — le señaló Ada. 

Esmery no dijo nada, solo sonrió haciendo el signo de paz con su mano derecha.

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Mantendría vigilado a Nott.

Eowyn notó el sonrojo en sus mejillas cuando Delia le sonrió.

No podía permitir que cualquier tonto lastimara a su mejor amiga con personalidad de Golden Retriever.

—¿Golden? — preguntó Aurora. 

—Es una manera de decir que es muy amable, demasiado para su propio bien en ocasiones — dijo Damian — Por ejemplo, Esmery a veces es un gato naranja. 

—¿Gato naranja?— cuestionó Petunia. 

—Un caos andante — contestó Aleksander a su tía abuela. 

 —Todo mundo esta hablando, Cordelia— dijo Daphne— Te vieron hablar parsel.

—Pero acaso es algo malo— preguntó Cordelia sentándose en la cama, Eowyn tomó asiento a su lado.

—Mas o menos— negó con la cabeza Pansy, tenia una mirada muy seria plasmada .

—¿Por qué? — preguntó Hermione, siempre indagando.

—Porque el último hablante parsel fue el señor Oscuro— susurró Ginny. 

Los Potter y los Evans hicieron una mueca. 

Que constantemente estén comparando a Cordelia con Voldemort no era algo bueno. 

El rostro de Cordelia se tornó completamente blanco, ella le apretó la mano a Eowyn , pero Eowyn no se quejó ante el agarre, simplemente le frotó los nudillos. 

—No quiero nada mas de similitud con él— dijo Cordelia con los ojos llenos de lagrimas— Primero el núcleo de mi varita y ahora esto. ¡No es justo!

Dumbledore quedó pensativo. 

Tantas similitudes eran inauditas. 

—Ya, ya , ya — Eowyn frotó la espalda a Cordelia, quien sollozaba. Bueno en parte la entendía, tener varias similitudes con el mago más perverso del ultimo medio siglo debe ser difícil. —No es fin del mundo, tu eres Cordelia, la niña más dulce que he conocido en mi vida. Estas a un paso de causarme diabetes.

—Eowyn— dijo Hermione con la mirada seria— No hagas chiste.

—Se debe relajar el ambiente—la defendió Pansy.  

Sirius le dio la razón a la señorita Pansy. 

—Si, pero no es el momento — señaló Walburga desde su lugar.

Madame Pomfrey le dio una poción para el dolor a Cordelia y luego pidió que que la llevaran a su dormitorio.

Ahora Eowyn debía saber donde encontrar arañas. 

—En el bosque prohibido — dijo Armand. 

Hagrid se puso nervioso ante la mención del Bosque Prohibido. 

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Otro recuerdo.

Todo mundo se puso atentos, los recuerdos de Lady Slytherin eran intrigantes. 

 Cordelia observó a Lady Althaia cargando a una niña, pelirroja de un tono más profundo en sus brazos de no más de cuatro años y a sus faldas un niño de unos siete años aferrado a las pesadas telas.

—Prometeo y Rhea — susurró Lily intrigada. 

A su lado había una bruja, de cabello negro peinado en elegante rizos y ojos azules gélidos que tomaba de la mano a un niña con un fuerte parecido a ella. 

—Esa debe ser Rowena Ravenclaw — señaló una Ravenclaw — Coincide con la descripción del retrato en la sala común. 

Un fantasma, apartado del comedor se puso atenta. 

La dama gris recordó su niñez. 

Ambas habían recibido a un grupo por dos caballeros, un niño pequeño y una mujer en armadura.

El mago de la armadura plata bajó del cabello quitándose el yelmo, Lord Slytherin.

—¡Papá!— chilló la niña con una sonrisa, Lady Althaia bajó a su hija, que corrió hacia Salazar. El mago alzó con facilidad a la niña de cabello rojo.

Cordelia se sintió celosa, muy celosa ante tal demostración de amor de padre e hija. 

James frunció el ceño, compartiendo su sentir como su hija. 

Saber que tendría una hija pero que nunca la pudo llegar a ver crecer.

—Mi Sol y mi luna— sonrió Lord Slytherin mientras besaba la frente de su pequeña— Mi preciosa Rhea.

Lord Slytherin se acercó a su esposa, ella rápidamente lo besó para luego recargar su cabeza sobre el pecho de Lord Slytherin.

—Al parecer eran feliz familia — dijo Lady Walburga. 

—Hasta que la tragedia llegó a sus vidas — se escuchó la voz de la Dama Gris con mucha seriedad. 

—¿Que ha sucedido, Helga?— preguntó la bruja de cabello negro a Salazar interrumpiendo el momento— ¿Y ese niño? — señaló al niño que bajaba del caballo de la mujer con armadura

—Las fortaleza de los Harvoor a caído, Rowena— contestó la mujer de armadura arreglándose el cabello, era de color miel que caían en desordenadas ondas que se zafaron de la trenza larga— Lucien es el único sobreviviente, era uno de los niños a lo que Ariadne Black mantuvo en su fortaleza. 

Los Black se sorprendieron al escuchar que eran nombrados. 

—No nos acordamos de una Ariadne en el Árbol familiar — dijo Orion. 

—Debió haber sido squib para que no este — señaló Cygnus. 

—¿La condesa Harvoor también era una bruja?— el niño con la mirada perdida miro a Lady Hufflepuff. Lucien tenia el cabello castaño muy oscuro ondulado, sus ojos azules era muy profundo.

—Su familia lo era, pero ella no— explicó Helga con delicadeza al niño. Lucien estaba con las rasguños en el rostro y la ropa sucia, totalmente maltratada. 

—Squib— confirmaron los Black. 

—Pero Condesa muggle — agregó Narcissa — Tenía título nobiliario. 

—Mis padres no hacían magia tampoco, pero la condesa nos dio asilo— contestó el niño— Muchos adultos no podían hacer magia, pero los niños si.

—Ariadne cuidaba niños magos — susurró Madame Longbottom. 

—¿Ariadne esta muerta?— dijo Lady Althaia devastada mirando a Lord Slytherin.

—La condesa nos ocultó a todos los niños en las mazmorras cuando nos asediaron— siguió contando Lucien— Se han llevado al Conde. Ellos, ellos entraron a las mazmorras y...— empezó a hiperventilar.

Helga se agachó a la altura del niño y lo abrazó mientras le frotaba la espalda mientras lo arrullaba.

Cordelia comprendió, ese niño vio una matanza. 

Muchos en el gran comedor soltaron un jadeo, unos de indignación y otros de horror. 

—¡Ven! — señaló Walburga Black — Por eso debemos tener una división más amplia con los muggles. 

—¿Qué harán con el niño?— preguntó Lady Slytherin.

—Ahora es mi responsabilidad— contestó el mago de armadura negra y capa roja. En su cadera brillaba una espada de plata con rubíes. Debía ser Godric Gryffindor— A partir de hoy es mi pupilo y futuro heredero. En Samhain hare una adopción de sangre, será mi hijo. 

—Pero Godric Gryffindor murió sin heredero — dijo McGonagall —A menos...

No era necesario pensar que el chico murió antes que Godric. 

—¿Y los Black?— continuo Lady Rowena en sus interrogatorio— ¿Saben lo de Ariadne?

—Marius Black hablado seriamente de quemar algunas fortalezas muggles y sus campos de cultivo— contestó Salazar, Rhea se estaba abrazada a su cuello— Puede que ella haya sido una squib, por él adoraba a su hermana. 

—Muy leve la venganza — dijo Bellatrix con seriedad. 

Lucien caminó hasta Lord Slytherin, su mirada estaba fija sobre Rhea.

—¿Es un hada?— preguntó el niño mirándola fijamente, Rhea nerviosa se ocultó en el cuello de su padre.

—No es un hada— dijo Prometeo separándose de las faldas de Lady Slytherin— Es mi hermana bebé. 

—Hermanos sobreprotectores — dijo Georgiana — Existiendo desde el principio de los tiempos. 

—Solo queremos protegerte — se defendió Aleksander. 

—¡Me siguieron hasta el cine! — les recrimino — ¡Y por su culpa me sacaron a mi y a Will de la sala mientras veíamos Robot Dreams!

Georgiana le pidió a Esmery que continuara leyendo. 

Prometeo extendió su mano hacia Lucien.

—Soy Prometeo Slytherin— se presentó para luego mover su cabeza hacia la niña junto a Lady Ravenclaw— Y ella es Helena, desde hoy eres mi nuevo amigo. 

Muchos se mostraron sorprendidos. 

El heredero de Slytherin amigo del pupilo de Gryffindor. 

Lucien aceptó la mano del Heredero Slytherin.

Cordelia se despertó del sueño, y de su velado tomó los dos diarios que aun estaban en blanco.

Del diario de Rhea ya hizo su primera entrada.

"Madre me ha pedido que use estos diarios para dar vestigio de mi memoria como obsequio por mi cumpleaños quince.

He aquí una confesión.

Me he enamorado de Lucien."

—Fin del capítulo — finalizó Esmery.

—Oh. por.Cher — dijo Lily — Eso debió haber sido un escándalo. 

—Uno de proporciones titánicas — contestó la Dama Gris. 

—¡Yo quiero leer! — pidió Edith — El chisme está bueno.