Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

◇Capítulo donde querrás tirar a Ox por un pozo◇

  Ya era el tercer día desde que la peli-verde se quedaba en la casa de Lou, y también era el día de la reunión con Ox y los malandros que la habían metido a aquella máquina del demonio. Los dos móngolos se encontraban en la habitación del rubio. Éste le había dado a la peli-verde uno de sus sacos, ya que era una reunión y lo lógico era vestirse de una manera "formal".

-Vamos, K.C. Ya ponte el saco, no tenemos todo el día- decía el oji-azúl insistente.

-Pero Lou, iremos a Villa Fea. Tú mismo me has dicho que ése lugar es un desorden. ¿Por qué tengo que vestir así?- respondía la de ojos de botón quejumbrosa.

-Éso no importa. Además, pienso que te quedaría bien. No tanto como a mí, pero algo es algo- dijo el prototipo con algo de narcisismo.

-Agh, bien- dijo la muñeca de varias costuras. Tomó el saco y fue a cambiarse al baño. Unos minutos después, ya tenía la prenda puesta y salió. -¿Cómo me veo?- preguntó dudosa.

-Se te ve muy bien. La falda podría ser otra, pero es la única que tenemos- respondió Lou, refiriéndose a la falda que había traído Meghan el otro día.

-Supongo que sí. ¿Ya estamos listos?- volvió a preguntar K.C.

-Claro. Vamos abajo- respondió el rubio para luego salir ambos de la mansión.

  Los dos móngolos caminaban por los límites de Imperfection, rumbo a los toboganes que los llevarían a Villa Fea.

-Parece que no podemos. Oh, bueno. Será para la próxima- dijo el oji-azúl una vez habían llegado. Se estaba dando la vuelta para irse cuando la de ojos de botón le agarró del brazo.

-Ni siquiera lo pienses- dijo volteando a ver al prototipo. -¿Qué pasa, Lou? ¿Hace un momento me estabas apresurando y ahora no quieres ir?- preguntó preocupada.

-Es sólo que...-. Suspiró. -Acabo de recordar que no me siento muy cómodo yendo a Villa Fea. No sabiendo que me podrían hacer algo- respondió mientras miraba a otro lado. La de piel azulada lo miró comprensiva.

-Hagamos esto: te prometo que me quedaré a tu lado en todo momento- sugirió. -¿Te parece bien?- le preguntó colocando su mano en su hombro.

-De acuerdo- respondió Lou más confiado. De la nada, empujó a K.C y comenzó a trepar uno de los toboganes. -¡El último en llegar le debe el almuerzo al ganador!- exclamó a la vez que corría.

-¡Oye, éso es trampa!- respondió la peli-verde y le siguió el paso a su amigo.

Al final, la de ojos de botón ganó la carrera.

-¡Jaja, me debes el almuerzo!- exclamó celebrado mientras el prototipo terminaba de subir.

-Bien, bien. Iremos a comer cuando acabe la reunión- dijo el de tez blanca para luego tomar la mano de su acompañante y caminar por el túnel.

-Vaya, éste lugar es más oscuro que el basurero por las noches- mencionó la muñeca de varias costuras en voz baja.

-¿Qué dijíste, K.C?- preguntó Lou confundido. ¿Acaso su amiga visita basureros con Lucía o qué?

-¿Eh? ¡Oh, no he dicho nada! Deberías revisar tus oídos, Lou. Creo que tienes algo de pelusa adentro- respondió rápida y nerviosamente K.C mientras caminaba hasta el final del túnel.

-¿De acuerdo?- dijo el rubio no muy convencido por la respuesta de la peli-verde. Le siguió el paso hasta que ambos habían llegado al agujero por el que Uglydog casi se queda sin dientes.

  Antes de irse al Gran Mundo, Moxy, junto a sus amigos, había puesto una escalera de cuerdas para que los muñecos no se lastimaran al ir y venir de ambas ciudades.

-¡Yo voy primero!- exclamó la de ojos de botón a la vez que bajaba las sogas. Una vez estuvo en tierra, el oji-azúl le imitó. -Bueno, vayamos a la villa para pedir indicaciones y encontrar la casa de Ox- dijo la de piel azulada tomando la mano de su amigo.

-Yo con gusto puedo llevarte si deseas, muñeca- dijo una voz coqueta detrás de nuestros protagonistas. -¡Vaya, Luis! Nunca creí verte por aquí-. Se trataba de nada más ni nada menos que nuestro querido perro azúl.

-Mi nombre es Louis, perrito- respondió el prototipo algo enojado. - Y no necesitamos tu ayuda... ¡K.C!- gritó al darse cuenta de que la muñeca de varias costuras estaba cargando al peluche y le acariciaba la cabeza.

-¿Quién es un buen perrito? ¿Quién es un buen perrito?- preguntaba la fémina de forma juguetona. -¡Tú lo eres!-. Uglydog sólo se dejaba mimar.

-Podría acostumbrarme a esto- dijo el oji-negro relajado.

-Pues no lo hagas, porque nosotros tenemos una reunión importante y nos estás retrasando- mencionó Lou con fastidio.

-Lou, no seas grosero- reprendió K.C mientras dejaba al perro azúl en el suelo. -Nuestra reunión es en la casa de Ox. ¿Crees que podrías llevarnos, eh...?-. No pudo continuar, ya que no sabía el nombre del oji-negro.

-Mi nombre es Uglydog, pero puedes llamarme Can Galán- dijo poniéndose en dos patas, antes de volver a su posición inicial. -Y claro que los puedo llevar. ¡Síganme!- respondió y empezó a correr.

-¡Oye, espéranos!- gritaron al unísono los dos muñecos para empezar a perseguir al peluche.

Cinco minutos después...

-¿Por qué tuvimos que seguirlo en ves de buscar a alguien menos energético que nos ayudara?- preguntaba un exhausto rubio mientras suspiraba.

-Perdón, es que me emocioné- se disculpó la peli-verde, quien estaba tirada en el suelo por el cansancio. -Pero al menos llegamos a la casa de Ox- mencionó levantándose y yendo a tocar la puerta del hogar del mencionado.

-¡Muy buenos días, chicos!- saludó alegremente el conejo cuando abrió la puerta. -Llegan a tiempo para la reunión. Pasen- dijo haciéndose a un lado.

-Espero que esto sea rápido- susurró el oji-azúl molesto e incómodo. -No creo poder verle la cara al desgraciado pelo de zanahoria- dijo con repudio.

-Vaya, vaya. No creí que tendrías el coraje de venir aquí, Louis- dijo con dejes de superioridad cierto muñeco de ojos verdes.

-Será mejor que cierres la trompa antes de que te saque lágrimas de sapo atropellado- respondió la de ojos de botón a la vez que tomaba el chaleco del muñeco de forma amenazante.

-Mejor suéltame y vete a la cocina- dijo el peli-naranja. Síp, yo hice a éste carajito.

-¡¿Qué dijíste, imbécil?!- exclamaron los dos amigos apunto de soltarle un puñetazo a Alejandro.

-¡YA! Dejen de pelear y vamos a la sala- les regañó el conejo verdo antes de llevarse a todos lejos de la puerta.

  Una vez en la sala, todos tomaron asiento.

-Bien, creo que está demás explicar el porqué los cité a ustedes 3 aquí- comenzó a decir Ox en un tono calmado. -K.C, tú fuiste la principal afectada en ésta situación. ¿Podrías relatar lo que sucedió, desde tu punto  de vista?- preguntó.

-Por supuesto, Ox- respondió la de piel azulada mientras se ponía de pié. -Como ya sabes, Lou y yo nos estábamos encargando de limpiar el auditorio para la fiesta de pasado mañana. Bueno, habíamos acabado de limpiar y le dije a Lou que iría a comprar algo de comer mientras él terminaba de cerrar la puerta con candado. Me fuí y, cuando estaba por llegar al restaurante, me encontré con Alejandro. Me dijo que él y sus amigos necesitaban ayuda con algo, y yo por pendeja le creí. Uno de los chicos me sujetó por detrás y, entre todos, me metieron a la lavadora. Luego, llegaron las espías y trataron de detenerla- terminó de explicar.

-Después, vino Meghan a buscarme y me dijo lo que había sucedido. Llegué al sitio, ví lo que pasó y le dí su merecido a ésta zanahoria- concluyó el prototipo viendo fijamente al de ojos verdosos.

-De acuerdo. Alejandro, ¿hay algo que quieras decir en tu defensa?- preguntó expectante el peluche.

-- respondió el mencionado poniéndose de pié con una mirada preocupada. -Q-quiero pedirte disculpas, K.C. Sé que estuvo muy mal lo que hice. Es sólo que pensé que Lou y tú se juntaban porque también eras una mala persona y querían hacernos daño- se disculpó muy apenado, dejando boquiabiertos a nuestros protagonistas.

-¿Sólo querías protegernos?- preguntó sorprendido el tuerto y el prettydoll asintió. -¡Ow, Alejandro!- exclamó enternecido.

-¡¿Qué?! Ox, no me digas que enserio le crees a éste payaso- dijo la fémina molesta.

-K.C, lo creas o no, todos merecen una segunda oportunidad- respondió el peluche tranquilo. Esto hizo enfurecer a Lou.

-¡¿Es una broma?! ¡¿Él sí merece una segunda oportunidad después de literalmente sacarle un ojo a alguien que ni siquiera conoce?!- gritó en ira, alarmando a K.C. -¿Saben qué? Yo ne largo de aquí- dijo dándose la vuelta y salió corriendo de la casa, siendo seguido por la peli-verde y, posteriormente, por su ex-mejor amigo.

-¡Lou, espera un momento!- exclamó la de ojos de botón mientras corría tras el oji-azúl.

-¡Déjame en paz, K.C!- respondió el prototipo. Cuando llegaron a la que sería la entrada hacia Imperfection, ambos se detuvieron. -Sólo déjame. ¿Ok?- pidió.

-Lou, no me pidas que me aleje- respondió algo herida la muñeca de varias costuras que tenía detrás al conejo verde.

-¡Pues aparentemente es lo que tengo que hacer, porque sólo me meto en problemas cuando estoy contigo!- gritó volteando a ver a la fémina. -Ya no quiero tenerte cerca; eres una mala influencia-. Y sin más, subió las escaleras, dejando K.C con lágrimas cayendo por debajo de su botones.

-K.C, no sabes cómo lo siento. Si hay algo que yo...-. La peli-verde le cortó.

-El mundo humano es igual a éste; en ambos ponen al más estúpido como líder- dijo fríamente sin siquiera ver a Ox y se fue igualmente, luego él hizo lo mismo, pero a su casa.

  Desde un rincón donde nadie lo podía ver, cierto peli-naranja sonreía con malicia. Su plan había salido mejor de los que esperaba. Manipular al cabeza hueca del tuerto no era difícil.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro