Las cosas definitivamente no volvieron a ser las mismas.  James y yo no hemos hablado en dos semanas enteras en las que el ha decidido pasar sus ratos de mal tercio con Sirius y Remus y yo bueno, yo he vuelto a estar sola. No del todo claro, pero de alguna manera me había acostumbrado a tener a mi prometido a mi lado. Pero si soy honesta, no lo he extrañado como pensaría. Claro que lo sigo amando con todo mi corazón y sigo esperando el día en el que arreglemos las cosas pero también tengo bien en claro que ese día no es hoy, y la verdad, es que dudo que sea pronto. Estaba dolida. Muy dolida.

Se que lo que hizo Regulus en su momento fue una mierda pero al menos sabía que me amaba. James en cambio... no lo sé. Empiezo a dudar si en verdad sentía algo por mi o solo sintió como de repente dejé de prestarle atención una vez que tuve una relación con alguien mas.

Me mataba siquiera pensarlo. Fue por eso, que traté de distraerme lo mas posible todo el tiempo. Y hoy... hoy tocaba ver a Regulus una segunda vez para ver lo de la fiesta, que era mañana. Y no teníamos nada. Así que fui a buscarlo a la biblioteca, donde muy seguramente estaría.

Estaba con Pandora y con Barty, y si era honesta, yo creo que el era el único estudiando. Me senté enfrente suyo y en cuanto el levanta la mirada para ver que era yo, hace una cara de disgusto.

- buenos días. - les dije a los tres, y la única persona que volteo su mirada para verme, fue Pandora. Barty no fue que no quisiera verme o algo por el estilo, sino que su primer instinto fue voltear a ver a Regulus para ver como reaccionaba. Y Regulus, bueno, me ignoró. - ¿qué hacen?

- ¿por qué ya no te he visto con Potter? ¿Han terminado acaso? - Barty no pierde el tiempo y claro que hace la pregunta mas obvia y la que causaba mas dudas en el lugar. - Regulus no me contaría aunque le rogara que lo hiciera. Pero esperaría que tu si me dijeras la verdad.

- dudo mucho que sea el caso. - Pandora dice muy segura porque lo ultimo que ella sabe, es que James y yo estamos comprometidos. Y claro, Regulus también.

- porque están viviendo la mejor etapa de sus vidas. - Regulus habla y voltea a verme con una sonrisa molesta. - ¿quién no sería feliz si esta por casarse con el amor de su vida?

- espera ¿te vas a casar? Que mierdas, yo muy apenas voy a poder terminar este semestre sin reprobar nada y tu ya quieres irte de esposa. - Barty dice riendo pero al ver que yo no lo hago, se detiene. - ¿es en serio?

- ya no llevo conmigo el anillo ¿o si? - dije mostrando mis dedos y jalando mi camisa por el cuello para que Pandora viera que no lo tenía colgando como la vez pasada. Ahora si, desde que llegué, esta es la primera vez que los tres hacen la misma expresión. Los tres con sorpresa y sin poder creer que mi compromiso durara menos de un mes. - es una larga historia.

- soy todo oídos. - Barty hace a un lado sus libros y recarga su rostro en sus manos para empezar a escuchar de la historia. No era mi plan contarles lo que había pasado, por lo cual lo estaba dudando demasiado.

- vamos. - Pandora toma de la mano de su amigo y lo pone de pie de inmediato para llevárselo con ella. - claramente esta conversación no va dirigida a nosotros.

- pueden quedarse si quieren. - dije de inmediato pero ella niega con la cabeza, me sonríe y se va con el chico para que justamente solo Regulus pudiera escuchar lo que tenía que decir.

- ¿si querías hablar conmigo? - era evidente que el no iba a entenderlo. - o buscabas a Pandora...

- Reg, aun tenemos que ver que haremos con la fiesta de mañana. Es en menos de veinticuatro horas y no tenemos nada. Somos los peores alumnos estrella que hay y ahora que Lily y Remus se van, mucho menos vamos a servir.

- no te vas a casar. - el seguía pensando en eso. - espera ¿es acaso por mi culpa? ¿Fue por el día que nos fuimos a Hogsmeade? - pero en vez de estar preocupado por ello, decide reírse. - ¿en serio James Potter no aguantó aquello? Si supiera cómo decidiste hacerme a un lado cuando intenté besarte...

- si fue ese día, sin embargo, no por tu culpa. - me mira con el ceño fruncido. - no quiero hablar de eso ¿de acuerdo? No vine a buscarte con ese propósito.

- tengo todo el derecho de saberlo. - se cruza de brazos indignado.

- ¿cómo por? - me reí cínicamente.

- porque esa pedida de matrimonio fue gracias a mi. - lo miré con el ceño fruncido, confundida y sin poder entender a que se refería. - si James no hubiera visto el hermoso estudio que yo te había preparado, el no hubiera pensado "mmm... esta sería una buena casa para vivir con Katherine."

- James nunca me dice por mi nombre completo. - le interrumpí.

- entonces le encantó mi casa, decidió que quería eso contigo y te pidió matrimonio. ¿O me equivoco? - negué con la cabeza. - por ende, creo que lo menos que puedes hacer por mi es decirme lo que pasa.

- si es que tanto te interesa saberlo... - puse los ojos en blanco. - siento que James tiene aun a dos mujeres en su corazón.

- oh, pero si eso ya todos lo sabíamos. - entrecerré los ojos molesta de su estúpido comentario. - literlamente todos, Katherine. Creo que tu eras la única que no.

- Reg, tu no estabas en mi relación. Si te digo que James es otro, es completamente otro. Este tiempo que llevamos juntos ha sido perfecto, me ha respetado como ningún otro, me demuestra su amor cada día y siempre me dio prioridad. No tenía porque dudar de el.

- ¿y por qué ahora si?

- porque algo cambió y no se que fue. - me lloraron los ojos de tan solo recordarlo. Mierda, en verdad lo extrañaba. - no se que pasó pero en el momento en el que Lily volvió a ser coqueta con el, el lo permitió y lo peor es que seguramente lo disfrutó.

- se supone que esa tipa es tu amiga y se la vive coqueteándole a tu novio. Ella esta peor que James, si a mi me lo preguntas. Y no, no lo estoy defendiendo. Jamás lo haría.

- Lily me explicó sus razones para hacerlo y no son nada relacionadas al amor. Se disculpó y me dijo que no volvería a pasar, que solo fue un momento de desequilibrio emocional. Pero ¿James? En el momento en el que le pregunté, decidió quedarse callado.

- ya veo. - se pone de pie y empieza a guardar de sus libros, como si estuviera por irse. Me pongo de pie por igual para seguirle el paso pues pensé que íbamos a caminar pero se acerca a mi y lo único que hace es darme una palmada en el hombro.

- ¿eso que fue?

- apoyo, supongo. No tengo nada mas que decirte o que hacer pero... regresemos al tema de conversación inicial. - de nuevo lo veo con los ojos entrecerrados. - fiesta, cierto. Um... no creo que sea buena idea el que vayamos a Hogsmeade de nuevo. Por el bien de todos y principalmente el nuestro.

- podríamos hacerla en el lago. Justo donde solíamos ir, enfrente del árbol. Ponemos una tienda enorme y... luces y todo eso. No creo que sea una mala idea y hace calor, podría funcionar. Aparte que, siento que dentro del castillo lo haría de lo mas ordinario.

- muy sorpresivamente pienso igual que tu, deberíamos hacer eso. - sonreí ante ello. - de acuerdo, en el lago será. Puedo confirmar que es un lugar muy bonito.

- de acuerdo, yo me encargo de conseguir la tienda y...

- yo pago pago todo, descuida. - negué con la cabeza varias veces pero me ignora y sigue caminando fuera de la biblioteca. - oh vamos Katherine, sabes perfectamente que el que yo pierda ese dinero no me va a importar en lo absoluto. Sería como quitarle un pelo a un león.

- y creí que el del ego grande era Sirius.

- solo es un hecho. - Regulus estaba de muy buen humor de nuevo. No se si se debía a que ya no era más una mujer comprometida. Quizás no era eso y debía dejar mi ego a un lado pero, por el momento, es en lo único que puedo pensar. - y puesto a que ya es mañana, es mejor que tú seas quien hable con los elfos para que preparen la comida. Ya eres una experta en eso.

- chistoso. - pero es cierto, vaya que me llevo de maravilla con ellos. Y se que se refería a las miles de citas que tuvimos y yo le llevaba comida. - entonces yo los aperitivos, tú el lugar en si y...

- creo que es todo. No tenemos porque dirigirnos la palabra hasta el día de mañana.

- supongo, si.

- tenemos clase de pociones, así que si. Si tienen que hablar y verse de nuevo. - Pandora regresa y nos toma a casa uno del brazo para entrelazarlo con el suyo y nos fuimos los tres literalmente a la clase. ¿Qué no se había ido con Barty hace un rato? - ¿cómo les fue?

- todo de maravilla. - dije, sin realmente querer entrar en detalles y esperando que Regulus n o dijera nada de lo que le había confesado. Por alguna razón a el le tenía confianza pero no quiero que todo mundo se entere que mi novio y yo nos hemos distanciado porque creo que sigue amando a otra mujer. No, para nada.

Llegamos al salón y voltee a ver a Regulus una última vez y el a mi. No nos decimos nada y nos vamos por caminos opuestos para no tener que sentarnos juntos. Yo fui donde Dorcas y el donde Barty.

- ¿estás bien? No te he visto en mucho tiempo. - me empieza a hablar pero yo seguía viendo a Reg a lo lejos. - es más, ni siquiera te he visto con tu prometido. ¿Algo que quieras decirme?

- um... - el profesor llega y empieza a dejar sus cosas sobre la mesa. Aprovecho aquello y empiezo a anotar cosas al azar para que parezca que estaba muy interesada en la clase. - ¿qué crees que veremos hoy en clase?

- ¿tengo cara de que me importa? Obvio yo ni se, le preguntas a la persona incorrecta.- se ríe.

- muy buenos días alumnos, ya saben que vamos a hacer el día de hoy. La posición del amor la cual es... - oh mierda.

- amortentia. - Regulus es quien participa y dice aquello. Dándole puntos a su casa y claro que yo pude contestar eso, pude haber hecho que tuviéramos más puntos. Pero estaba muy angustiada con aquello.

- ¿alguien me puede decir que pasa si alguien la bebe?

- la persona que ingiera de la posición, se sentirá terriblemente atraído por la persona la cual se la ha obsequiado. - dije de inmediato para poder ganarle y tener por fin mis puntos. - sin embargo, dicen que el olor de aquella para cualquiera es de la persona que ama.

- ¡puntos para Gryffindor! - sonreí ante ello y Dorcas emocionada me agita el brazo. - bien, pasa a olerla.

- por supuesto que no. - dije nerviosa y todos, pero juro que todos en el salón voltearon a verme. No fue manera de contestar. Incluso el profesor Slughorn se sintió mal. Por lo cual me puse de pie de inmediato y fui a donde el estaba para oler del frasco que llevaba de prueba.- um... huele delicioso.

- claro, huele a tu amado. - dice Barty y todos se ríen. Voltee a verlo molesta y entrecerré los ojos. - ¿a que huele?

- si ¿a que huele? - el profesor es el segundo en hacer esa pregunta y me sentí incomoda de que todos estuvieran al pendiente de aquello.

- madera. Para ser más exacta, de escoba.

- si, James juega quidditch. - dice Dorcas y voltee a ver la expresión en el rostro de Barty que fue poner los ojos en blanco. Regulus en cambio, estaba muy al pendiente de que más decía.

Si claro, como si fuera a olerlo a el.

- madera, a libro nuevo. - sonreí mientras lo olía. Pero noté como Regulus se enderezaba al oír aquello y oh mierda, el lo sabe. Lo estaba oliendo a el. Estaba oliendo a mi ex novio. No puedo creerlo. El tercer olor era de pasto recién cortado. Definitivamente donde nos sentábamos enfrente del lago. No iba a decirlo en voz alta. No iba a confesar aquello. Por lo cual, me invente los olores para que pareciera de James. - hierbabuena y a dulce.

Regulus deja de verme y se dedica a seguir con sus notas. Pierde el interés de inmediato.

- lindo ¿a poco no es muy interesante esto? - el profesor me pregunta y yo solamente asiendo con la cabeza, sin más que decir. - ¿alguien mas quiere pasar?

Regreso a mo asiento y trato de actuar de lo mas normal pero ahora solo pensaba en Regulus. ¿Por qué mierdas lo he olido a el y no a James?