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El día de hoy era el cumpleaños de Lily, estaba emocionada por aquello ya que ella si quería festejarse. Por alguna razón, la persona que detestaba las fiestas mejor que nadie, hoy quiso hacer una excepción y me alegro ya que necesitaba una distracción. Hoy 30 de enero se cumple ahora casi el mes de no saber nada de Regulus. Es mucho mejor aquello, me siento más tranquila y más feliz. Y es que ahora... ahora el nunca está solo.

Por momentos, me había acostumbrado a verlo por los pasillos con Barty o Evan. Y eso estaba bien. Pero mi corazón no ha sabido reaccionar a su nueva gran amiga. Beverly Rosier. Se trataba de la hermana menor de Evan y la había conocido antes, es una chica preciosa. Es muy inteligente y es de la casa de Ravenclaw. Claro que es perfecta para Regulus y justamente yo se que ella gusta de él. ¿Cómo lo se? Bueno, soy su tutora en las tardes. Ella claramente no ocupa para nada clases extras, pero creo que le ayuda para tener un historial académico implacable. Tal como el de Lily por ejemplo. Creo que es buen momento para yo empezar a hacer lo mismo.

- ¿te puedo preguntar algo y no te molestas? - ella me dice a media asesoría.

- supongo que tiene que ver con Regulus. - dije bajando la pluma y dejándola sobre el escritorio mientras la veo. Es en verdad una mujer divina, me aterraba la idea de que en cualquier momento el se enamorara de ella pero no es mi lugar ahora.

- ¿tendrías problemas si lo invito a salir?

Esa pregunta iba a llegar en cualquier momento. Y a decir verdad... supongo que es mejor que se trate de una persona la cual me agrada y considero buena. Como dije, desde que el y yo terminamos, ahora las personas nos buscaban mas para una relación y era simplemente por el morbo. Claro que Beverly siente algo por el, es tan solo la hermana menor de su mejor amigo. Es como... como lo que yo sentía al convivir con James. Entiendo ese enamoramiento y creo que es libre de intentarlo.

- ya no somos pareja. - levanté ambos hombros mostrando desinterés. - no tengo problema con ello. El es libre de salir con quien quiera.

- eso lo sé, pero también tu me agradas mucho y no quiero que nuestra amistad o... tutoría lo que sea que sea esto, se vea afectado. - fingí una sonrisa. - ¿segura?

- te deseo suerte intentando hacer que el acepte una cita. Conmigo fue tan imposible. - dije para cambiar el tema y verme mas amigable pero lo siguiente que escuché fue lo mas doloroso.

- oh, hemos quedado ya de hecho. Dice que tiene una casa. - alcé las cejas sorprendida. - cerca de aquí y que podríamos ir cuando quisiera.

- una casa. - rasqué mi nuca nerviosa y voltee a verla. - eso suena lindo. Y muy comprometedor... ¿no crees? Es como si el ya estuviera enamorado de ti o algo por el estilo. Como para pensar en eso.

- ¿tu crees? - ella me pregunta emocionada y es el momento donde yo intento no lagrimear y fingir estar bien.

- no tengo idea. - para mi suerte, James se había mostrado y me puse de pie para verlo de frente. - hola.

- hola. - este dice incómodamente y es que, no habíamos hablado desde el beso pero solicité verlo, le dije a Sirius que le dijera que quería hablar con el. - ya... ya llegué.

- ¿te molesta si seguimos después con esto? - le pregunté a Beverly y ella se pone de pie para tomar de sus libros. - de igual manera... tu tarea es perfecta, no necesitas mi ayuda.

- el es lindo. - me susurra antes de irse y voltee a ver de lo mas sonrojada a James. - suerte.

- lo siento, um... - calma Katherine, tienes información muy de golpe de lo que pasa en la vida amorosa de Rgulus y no es el momento ahora. - quería pedirte tu ayuda. Para el regalo de Lily.

- ¿lo cual es?

- es... es una fiesta. Yo la estoy organizando. Ella quería festejarse y he querido ayudarle y he pensado que la mejor persona que sabe hacer fiestas eres tu entonces ¿me ayudas?

- claro que te ayudo. - el sonríe y me siento mas tranquila. - me alegro que me hayas hablado, de verdad pensé que no querías volver a saber nada de mi.

- por eso. - me animé a decir y el asiente con la cabeza. - oh, um... eso no importa ahora.

- ¿qué? ¿Por?

- porque cumpleaños Lily. - dije de inmediato. - y ella quiere seguramente que estes en su fiesta entonces... manos a la obra.

...

Se que estaba pésimo de mi parte el tener que negar mis sentimientos por James por miedo a no romper el corazón de Lily. Pero es que no me veo empezando una relación ahora... yo... yo ni siquiera puedo procesar aun el que Regulus ya esté considerando formalizar con otras personas. Se ha cumplido el mes y se me hace tan poco el tiempo. ¿Cómo ya esta intentando conquistarse a Beverly Rosier?

Y no lo culpo, ella es genial... ella es hermosa. Pero ¿cómo llevarla a nuestra casa? Se que yo nunca puse ni un peso para esa casa pero.. era nuestra. El platicaba sobre esa habitación que yo tendría para dibujar y colorear y ahora ¿es su centro de cogerse chicas? Estaba molesta, estaba sentida. Estaba con muchas emociones explotándome dentro y una fiesta la cual organizar. Con James Potter, para aclarar.

Mientras decorábamos el lugar, estaba todo el tiempo volteando a verme y no me decía nada. Para nuestra suerte, Sirius estaba presente junto con Remus y Peter y con ellos estuve platicando un gran rato para no hacer el momento incomodo. Pero James y yo no nos dirigimos la palabra ni una sola vez. Creo que le debo una explicación. ¿O el me la debe a mi? No tengo idea.

Pero llegó el momento, llegó la hora para festejar a Lily y en el momento en el que ella entra al lugar, yo me acerqué a ella misma para darle un gran abrazo y Sirius iba detrás mío con el pastel en manos.

- ¡feliz cumpleaños hermosa! - le dije y ella me abraza con demasiada felicidad. Claro, era hoy un día muy especial para ella. Me separé y ahora es James quien la abraza y bueno, lo obvio. Incómodo. Luego Remus y Peter y al final Sirius. - espero que te la pases de maravilla.

- oh, estoy con mis amigos... con eso me basta. - pasa su cabello por detrás de la oreja y acepta en manos el pastel. - ¿quieren?

- todo tuyo. - dije levantando ambas manos.

- oh, yo si quiero. - dice Marlene emocionada y Dorcas por fin, por fin estaba aquí con ella para poder acompañarla. Eso me hacía pensar en Regulus, pero trataré de no hacerlo. - ¿me ayudas a partirlo?

- con gusto. - Dorcas le contesta y ambas se van a la mesa a lo lejos de lugar junto con Lily para estar existiendo con el pastel y James y yo nos quedamos a solas. Remus estaba muy ocupado platicando con Sirius de quien sabe que y Peter se había ido a acostar sobre el sofá.

- gracias por ayudarme con todo los preparativos. - alcancé a James antes de que se fuera, y de inmediato se detiene enfrente mío. - la fiesta se ve bastante bien.

- lo que sea por Lils. - este rasca su nuca nervioso y ante ello, solo hice una mueca. - me alegro que se la esté pasando muy bien. -dice y ambos volteamos a verla a lo lejos y lo feliz que se veía. - ¿tu cómo estás?

- um... - levanté ambos hombros. - ¿supongo que bien?

- ¿quieres hablarlo? - asentí con la cabeza y este camina hacia la salida de la sala común. Salgo a su lado y ambos empezamos a caminar juntos, bajamos por las escaleras movedizas y esperamos tan solo que en cualquier momento se detuvieran. - Kat, yo te debo una disculpa...

- no James, no.— lo interrumpí y me voltee para verlo de frente. - yo... yo fui muy presente en aquel beso. - dije sonrojada. - claramente de alguna manera lo quería. No, corrijo... deseaba ese beso mas que nada en esta vida.

- ya somos dos. - nos sonreímos incómodos y cuando por fin bajamos, estamos caminando por el largo pasillo abandonado literalmente ya que es demasiado noche y no hay nadie. Ni siquiera deberíamos estar aquí a la hora de dormir pero, supongo que como prefecto, siempre puede darse estos lujos. - pero de igual manera, no suelo ser así. Se cuándo detenerme, se cuando ser decente. - me reí ante eso. - ¡hablo en serio! Se a la perfección que no es una opción pronta el que intente algo contigo cuando claramente aun quieres a Reg y... - me detuve en seco cuando seguimos caminando y veo a Regulus, justamente sentado en una de las escaleras platicando Beverly.

Y es que no había problema con el que estuvieran juntos. No estaban haciendo nada, solo platicando ¿supongo? Pero es que yo no tengo porque ponerme celosa. Yo fui quien lo dejó a el. Y fue porque el fue horrible conmigo. El me utilizó y me mintió. Entonces ¿por qué me siento tan terrible? ¿Por qué verlo con otra mujer me partía el alma? Ver como ella aspiraba a tomar de su mano y no podía porque el la quitó de inmediato cuando me vio no me hizo sentir mejor.

- buenas noches. - dije ya que... me bloquee y no supe que mas decir.

- no son horas para estar en los pasillos. - James dice, supongo que tratando de ayudarme pero era imposible. Estaba congelada y claramente sin saber que decir.

- ¿solo aplica contigo o... porque esta mal si yo estoy aquí? - Regulus le contesta y mientras estos dos discutían, yo tan solo miraba a Beverly y ella a mi. Sonreí nerviosa y tratando de fingir estar bien con ello mientras que ella en serio estaba a gusto. Quiero decir, hace no tanto le dije que no me importaba si le hablaba.

- venimos a checar los pasillos, nada mas. - dice James. - hemos visto que están aquí, supongo que esta es la parte donde hablo con el prefecto de tu casa y...

- oh por favor no. - Beverly asustada de inmediato se pone de pie y le toma de la mano para levantarlo a el. Ver aquello no me hizo sentir nada bien. - vamos Reg.

No le digas Reg, por favor no.

- ¿vienes a checar los pasillos? ¿Qué tiene que hacer Katherine aquí? - al escuchar mi nombre salir de sus labios, voltee a verlo de inmediato. - quizás querían aprovechar y aparte de molestar a estudiantes indefensos, ustedes dos aprovechan las instalaciones.

- eso no es cierto. - dije molesta por su manera de expresarse.

- pero adelante, sean mis huéspedes... esta es su casa. - dice apuntando las escaleras. - son libres de besarse, tocarse... hacer lo que sea que hagan ustedes.

- eres en verdad un idiota.  - dije de mala gana y me voltee para ya irme.

- si crees que voy a ir detrás tuyo, estas muy pero muy incorrecta. - me detuve en seco en cuando escuché aquello detrás mío. - para eso ya tienes a James ¿no?

James claro que quería golpearlo pero le detengo y tomo de su mano. Negué con la cabeza mientras lo veía y podía sentir, de verdad podía sentir como lentamente todo el amor que yo sentía por Regulus desaprecia. Esto... esto fue lo último.

- ¿cómo pudiste salir con ese idiota? - James me dice y empecé a llorar. - oh, lo siento tanto. Creo que es demasiado pronto como para mostrar mi odio hacia el.

- creí que me dolería terriblemente verlo con otra mujer. Y sin embargo, lo peor fue darme cuenta de Regulus es todo menos una buena persona. Que salga con quien quiera, a mi no me importa. Pero que terrible saber que le entregué por completo mi corazón a una persona la cual no lo merece.

- ¿hay algo que pueda hacer para hacerte sentir mejor? - James me pregunta y sonreí ante ello. Acaricié de su mejilla y tan solo le di un beso en la mejilla. Negué con la cabeza y seguí avanzando. Y recordé bien del porqué me había enamorado de James. Y porque no de Regulus.

De aquel momento en el primer día de clases donde yo había tropezado y el tan solo se rió y James me ayudó a ponerme de pie.

De verdad... pensar en eso y pensar en el día de hoy...

Fue mi nuevo abrir de ojos.

No volvería a pensar en Regulus Black.