31
No pude decirle nada a James respecto a lo que este me había dicho. No quería hablar con el del tema, no quería que este fuera el problema principal aquella noche. Tenía todavía mucho que hacer con el drama que estaba adentro así que lo dejé ahí sin ninguna respuesta. No lo volví a ver en toda la velada, supongo que se fue, no lo sé. Pero en el momento en el que yo regresé adentro, mi madre ya no estaba ahí. Sirius peleaba con sus padres y Regulus fue el que de inmediato se había acercado a mi.
- tu madre... decidió retirarse. - negué con la cabeza, una vez que este me dijo aquello. - a tu casa. Ella esta ahí ¿quieres que te lleve? Es lo menos que puedo hacer por como Sirius manejó las cosas.
- si quisiera ver como esta... - este me da un beso en la frente y me toma de la mano para irnos. - lo siento, se que tu plan era otro. En serio quiero conocer nuestra casa, es solo que...
- ella te necesita. Obviamente yo lo entiendo. - pasa mi cabello por detrás de la oreja. - tomaré el carro de Narcissa. Supongo que puede entenderlo. - asiento con la cabeza y ambos salimos de la casa. No me quedaba ahí nada mas por lo cual quedarme. Regulus iba manejando y yo a su lado y voltee una ultima vez a ver por la ventana en busca de James pero este ya no estaba mas ahí.
- Reg, en el momento en el que yo me salí de la casa...
- mi plan era ir a ver como estabas. Es solo que mi madre empezó a gritar, le empezó a hablar mal a tu madre y... creí que era mejor calmar las cosas ahí adentro.
- gracias. - le tomé la mano de nuevo, la mano que tenía libre. - no, pero... um... James salió. Salió a verme.
- lo vi. Si.
- me dijo que estaba enamorado de mi. - Regulus estaba de lo mas serio posible. Viendo hacia el frente, aun manejando y deja de acariciar de mi mano. - quería besarme.
- ¿lo hizo?
- no, no lo hizo. Me hice a un lado. - hice una mueca y Regulus seguía sin siquiera voltearme a ver. - no se que pensar, todo esto es muy extraño. No supe que decirle así que me fui mejor adentro de la casa y...
- no es como que haya algo que tengas que decirle, tu no lo quieres a el. - por fin dice algo y hasta me interrumpe para decir aquello con la voz molesta.
- a lo que voy es que... es información muy nueva para mi. Se que tomó demasiado, por aquello se armó de valor para decirme eso. Me dijo que no soportaba vernos juntos y que se arrepentía mucho de no haberme notado antes.
- ¿te hubiera gustado contestarle algo?
- supongo, es solo que ni siquiera aun se que debería decirle. - Regulus detiene el carro, puesto a que ya habíamos llegado a mi casa y por fin voltea a verme. - sea lo que sea, te juro que no es una respuesta positiva. ¿De acuerdo, Reg? - le acaricié la mejilla. - por si no había quedado claro... eres al único que quiero en mi vida.
- de todos maneras, escuchar que al hombre que quisiste toda tu vida por fin se siente de la misma manera que tu debe ser algo... algo que te deje pensando. - no dije nada y tan solo hice una mueca. - de acuerdo niña, hemos llegado.
- ¿no vienes?
- no eres la única que el día de hoy se enteró que sus padres son infieles. - me mira y lo miro confundido. - iré a ver a Sirius, creo que el si me necesita ahora.
- Reg, si es por lo de James... yo tan solo te lo contaba porque, bueno, creo que podemos contarnos todo y... - en aquel momento, recordé que teníamos pendiente la platica. Justamente, sobre la confianza. - esta bien, hablamos mañana si así lo quieres.
No quería pelear ahora, mucho menos cuando veo que el genuinamente si estaba tranquilo con el tema y tratando de darme su mejor sonrisa para que yo no me diera cuenta lo mucho que le molesta este tema. Le di un beso en la mejilla y este me toma de la mano para regresarme y me da un beso en los labios.
- nos vemos pronto ¿si? - asentí con la cabeza y cerré la puerta para por fin dejar el vehículo.
Abrí de la puerta y busqué a mi madre pero no fue tan tardado como hubiera esperado. Ella estaba en la sala de estar justamente, con una copa de vino en manos y tan solo... llorando. Me siento a un lado suyo y tan solo me le quedo viendo.
- puedo prepararte un baño de burbujas en la tina y prendo el televisor para ver cómo encienden el pino de la ciudad. - le dije para hacerla sentir mejor pero no dejaba de lagrimear. - lamento mucho que Sirius hiciera aquello.
- lamento haberte mentido. Se que me preguntaste con anterioridad que pasaba entre nosotros. Y ni siquiera pude decirte del todo lo que pasaba. Pero es cierto cuando dije que no salíamos. En verdad, eso no pasa.
- te creo.
- lo que pasa es que... me comentó lo que estaba por hacer, aceptar ser parte de ese grupo de personas terribles que apoyan a ese mago. - sabía perfectamente de que hablaba mi mamá. - le dije que no podía apoyar ese comportamiento y que el tenía que entender que me alegaría de él por lo mismo. Se molestó, lloré, el un poco y... me besó.
- porque te quiere. - cuando digo aquello, ella se cubre el rostro apenada. - y tu lo quieres a él.
- odio esto.
- yo vi aquel beso que me cuentas. - me voltea a ver de inmediato. - Sirius y yo lo vimos lamentablemente. Yo decidí guardar silencio y el, bueno... todos sabemos cómo reaccionó y lo que decidió hacer. Yo pensé en hablarlo contigo pasando la velada porque quería que fuera una navidad perfecta.
- lo siento tanto, Katherine. Y lamento que ya no pudiera pasarla con Regulus. Sería su primera navidad juntos. ¿No quieres ir a verlo? Yo estoy bien sola.
- no, lo veré después. Descuida.
Solamente que en el momento, yo no sabía que no lo iba a ver hasta que acabaran las vacaciones. Toda esa semana por los mismos temas de nuestra familia, no pude encontrarme con el. No fue hasta que tocaba regresar a clases. Y eso fue... incómodo.
...
Llegué sola a la estación de trenes y por ende, temía demasiado el que yo me encontrara antes a James. Se que en algún momento tendríamos que hablar del tema pero era mejor primero verme con Regulus. Y no, fue con Sirius. Que llegaba al tren de lo más triste, con un ojo morado y el uniforme todo mal puesto.
- ¿qué te pasó? - tomé de su rostro entre mis manos para verlo más de cerca. - Sirius no puede ser.
- debiste ver cómo quedó el otro. - dice de broma. Al menos se que si puede bromear aun, sigue siendo el mismo Sirius después de todo. - lo que sucede es que a partir de ahora, no vamos a volver a pasar una navidad juntos. Al menos no por mis padres ya que... ya no vivo con ellos. Me fui a vivir con James recién pasada la navidad y...
- lo lamento tanto, Sirius. En serio lo lamento. Al final del día... esto es medio mi culpa. Quisiera poder hacer algo por ti.
- escucha, yo no quería ser parte de todo lo malo en mi familia al final del día. Creo que fue lo mejor que pude haber hecho. Así ya no tengo que ser parte de ese grupo en el que ellos están.
- ¿donde esta Regulus?
- dentro del expreso, el ya entró. El esta bien, por cierto. El sigue viviendo con mis padres... claro que el no se atrevió en lo más mínimo a decirles algo.
- pero entonces... si el no se fue contigo y tú estuviste con James todo este tiempo ¿Regulus se quedó ahí con ellos? - este asiente con la cabeza. - nunca fue para hablarme. No desde navidad. Creí que era porque estaba ocupado contigo.
- es Regulus, Kate... siempre es un misterio.
- lo buscaré. - dije asustada por aquello y entré al expreso, solo quería saber cómo estaba... porque no había hablado conmigo en todos estos días. Necesitaba una respuesta. Y lo peor es que, vi primero a James. Chocamos estando ahí dentro y le tumbé las gafas. - lo siento tanto. - las tomé del suelo y se las coloqué. - lo siento, James.
- yo lo siento, de verdad estoy apenado. Um... ¿tienes un momento? Desearía en serio poder hablar contigo. - no, no tenía un momento. Yo quería ver a Regulus. Pero tampoco podía ser una grosera y decirle que no. Asentí con la cabeza y este me toma de la mano para llevarme consigo mismo a un cubículo. - no debí haberte dicho eso.
- James...
- no, bueno. No me refiero a decir eso... eso tú ya lo sabías. - ríe nervioso.- quiero decir el beso. No debí intentar besarte y...
- James, claro que yo no sabía que tú sentías eso por mi. ¿Desde cuando? No hace mucho estabas en citas con Lily. Te enteraste que salía con Regulus y tampoco me dijiste nada. ¿Cómo esperabas que yo lo supiera?
- pero si lo sabias... todo este tiempo lo supiste.
- no. No sabía.
- eso... eso es sorpresa para mi, en ese caso. Mi primera confesión romántica hacia ti fue terrible, yo estaba ebrio. No puedo creerlo. - se cubre el rostro. - ese no es el punto, James. - se dice a sí mismo. - no debí hacerlo.
- ¿cuando fue la primera confesión? - le interrumpí.
- no existió una como tal. Lo que pasa es que... yo tenía toda la intención de decirte en ¿septiembre? No lo sé. - abrí los ojos sorprendida. Eso fue hace demasiado tiempo. - pero cuando estuve por hacerlo, Regulus me dijo que tú ya lo sabias.
- en septiembre Regulus y yo muy apenas éramos amigos. Podría decirse que ni siquiera como tal. - James ante eso solo levanta ambos hombros. - yo no lo sabía James, de haberlo sabido en septiembre yo hubiera sido la mujer más feliz de todas. - el sonríe ante ello. - soñé con este momento por años, deseando que pudieras sentir lo más mínimo por mi. Hoy podría brincar de la emoción pero... no es el caso.
- pude haber sido el hombre mas feliz en todo el mundo por poder tener el amor de la mujer mas fabulosa del mundo. Pero... tu corazón ya es de alguien mas.
- lo es, si. - hice una mueca.
- ahí no hay mucho que pueda hacer. - James baja la mirada y ve de mis cosas, entre ellas... el regalo de navidad de Regulus. El cual no puede darle presencialmente pero esperaba poder darle hoy. - ¿te compraste una libreta nueva de dibujo?
- oh, um... no, esto es para Regulus.
- ¿por? El odia dibujar. - este ríe y la toma entre sus manos. - te creería si me dices que es para ti pero ¿para el? Vamos, yo presencié unas tres veces que se quejaba de sus clases. No le gustaba. A Sirius si.
- Regulus adora dibujar, James. Me consta.
- no, Kate. ¿Qué gano yo mintiéndote? Se que es un hecho, a Regulus se le obligaba tomar esas clases como cualquier otra artística desde que lo conozco por Sirius y se quejaba terriblemente.
- entonces... me estas diciendo que no solamente Regulus fingió que yo ya sabía lo que tú sentías por mi, sino que también fingió que le gusta dibujar.
- yo no se, Kate. No creo que eso me incumba. Um pero... puedes intentar hablar con el. Estoy seguro de que si le pides una explicación el te la daría. Puedo entender que finja que esas cosas le gusten solo para llamar tu atención. Le gustabas desde antes, y pensó que yo sería una amenaza. Por eso hizo eso, y lo de fingir dibujar bueno... supongo que solamente quería una excusa para hablar contigo.
- Regulus me ha mentido. Todo este tiempo. - dije en el momento de realización. - necesito hablar con el.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro