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Tenía toda la intención del mundo en esforzarme por tener las mejores calificaciones este semestre. Quiero decir, ese siempre es el plan y la mayoría del tiempo puedo lograrlo pero lamentablemente, mi récord perfecto se fue a la mierda no hace mucho por culpa de Sirius. Lo amo con todo mi corazón y arriesgaría todo por el, pero... haber sido parte de esa broma simplemente fue la peor decision que pude haber tomado. Bueno, no del todo ya que conviví muy bien con James aquel día.  El punto aquí es que me descubrieron y eso me afectó en los exámenes finales del semestre pasado.

Ahora... ahora me toca mejorar, y ganarle a Regulus porque como este individuo si es de im generación, con el si puedo competir. Porque con Lily Evans no puedo, aunque bueno, si a esas vamos, soy mas inteligente que ella y eso que soy menor por un año. Lo he puesto a prueba las veces que estamos en las practicas del profesor por Slughorn. Se que no debería ser así, se que no debería estar perdiendo la cabeza por una chica que ni siquiera me figura en su vida. Pero es que en serio, es imposible no pensar en ella.

Por ejemplo ahora. En estos momentos como dije, mientras yo estudiaba, Lily Evans hacía exactamente lo mismo solamente que al otro extremo y con sus amigas. A la única que he tratado y definitivamente me llevo muy bien con ella es con Mary McDonald. Es muy amiga de Remus y Sirius y por ello la he visto en varias ocasiones. Pero creo que es mutuo el sentimiento con Lily. A ella no le agrado nada, así que acercarme a ellas, no es una opción. Y no quería, estaba muy a gusto aquí en donde me encontraba estudiando... hasta que vi a  James bajar las escaleras.

Di por hecho que a la persona a la cual se iba a acercar era a Lily, como de costumbre y sin embargo, no fue así.

- ¿qué haces? - me sorprendí tanto en el momento en el que el se sentó en el suelo justo enfrente mio. Lo miré confundida y bajé mi libro para buscar con la mirada a Lily. Ella estaba viendo hacia acá y al igual que yo, no lo puede creer. Se ve molesta, lo suficiente como para poner los ojos en blanco y voltearse por completo para no vernos.

- James ¿qué rayos haces tu?

- estoy... tratando de averiguar que es lo qué haces. Obviamente se que estas estudiando pero estoy esperando a que me contestes que no para que puedas ir conmigo a checar algo en la cancha de quidditch.

- a mi no me engañas. - dije cerrando del nuevo mi libro y me acerqué mas para verlo así de cerca. - tu quieres poner celosa a Lily ¿verdad? Por eso me hablas.

- en mi vida había notado lo precioso que son tus ojos. - dice sin dejar de poder verme y me sonrojo. - Kate eres una preciosura.

- adiós James. - me puse de pie y agarré de mis cosas para irme y salir de la sala común, este me sigue y sale conmigo para ambos detenernos en las escaleras que se mueven. - ¿dónde está Sirius?

- no busques a Sirius... aquí estoy yo.

- que bueno James, pero en estos momentos me estoy preguntando qué pasa y tu no vas a decírmelo entonces, déjame le pregunto a otra persona.

- ¿quieres saber qué pasa? - asentí con la cabeza. - encontré esto. - me enseña una carta la cual yo le había escrito pero hace tanto, fácil podría decir que era del segundo año. No pude evitar reírme y en el momento en el que las escaleras se detuvieron, bajamos y caminamos por los pasillos mientras yo iba leyéndola.

- que vergüenza. - dije sin levantar la mirada aun y enfrentar lo que estaba pasando. - okay pero yo era literalmente una niña cuando escribí esto. - le escribí cosas como llamándolo un "angel hermoso" o cosas como esas.

- no me importa si sigues pensando todas esas cosas o no, Kate. Yo no estoy buscándote con ese objetivo. - dice mientras toma de mis hombros y me sonríe. - estoy feliz solamente de tener una persona como a ti en mi vida.

- James ¿tu y Remus de nuevo estuvieron probando esas galletas curiosas que suelen comprar en fiestas?

- ¿qué? No. No, Kate. - se ríe. - he pasado todo este tiempo buscando a una mujer que lo único que hace es recordarme lo insoportable que soy y que me pide que me aleje. En el momento en el que yo abro los ojos y me doy cuenta de qué hay gente que si me valora, todo ha cambiado para mi. - no pude evitar sonreír ante eso.

- oh, eso... eso es genial James. - estaba toda sonrojada. No podía entenderlo, no sabía que hacer. ¿Qué podría hacer? ¿Besarlo? No, mejor me esperaría a que el lo haga. Porque me está diciendo que por fin después de años sabe que yo soy la persona indicada para el. - no puedo creer esto.

- lo sé.

- no pensé que este día llegara jamás. - me reí. - al menos no ahora. Pero... pero es genial.

- ¡lo se! - me toma ahora de los brazos. - por fin he caído en la conclusión de que es momento de conseguirme a una chica que no sea Lily. - lo miré confundida. - ¿conoces a alguien?

- ¿perdona? - todo lo que tenía en mente, se tuvo que olvidar. - ¿de qué me estás hablando?

- si bueno, yo estoy en busca de una mujer con los mismo sentimientos que... que tu por ejemplo. Pero que este enamorada de mi. Es diferente ¿sabes? - oh no, no le creo para nada que no sabe que me gusta. Todo mundo con ojos lo sabe y lo puede notar. Solo esta decidiendo hacerse el tonto. - deberíamos hacer una fiesta y luego podemos... podemos pasarla con nuestros amigos y amigas y... - me voltee para irme. - espera ¿a donde vas?

- tengo cosas que hacer.

- pero... Kate. - ni siquiera le hice caso y me fui lo mas rápido de ahí. Es que de verdad ¿que mierda? ¿Qué mierda le pasa en la cabeza a James?

Okay, no le gusto. No quiere nada conmigo ¿que más da? Pero entonces para que me dice que que bonitos ojos y que soy preciosa y que lo acompañe a no se donde... no puede ser así de coqueto cuando su plan ahora es el salir con otras chicas y... yo no soy una de las consideradas. Y me rompe el corazón porque claramente sabe que me gusta. Sirius lo sabe, claro que le ha dicho un millón de veces... todo mundo con ojos puede saberlo. Y tan solo es... es muy triste todo esto.

En lo que caminaba por los pasillos en busca de una salida o algo, termino chocando con Regulus Black que llevaba un libro en manos y se lo tiré.

- lo siento. - dije de inmediato y estaba por seguir pasando pero me detiene tomando de mi muñeca.- dije "lo siento" ¿que más quieres?

- que levantes mi libro, pequeña torpe. ¿Qué más? - me dice de mala gana. El estaba más enojado que yo, increíble. Me le quedé viendo, esperando que entendiera que no iba a levantar aquello. - estás llorando.

- pero que inteligente eres. - dije levantando de su libro y dándoselo mientras lo pego en su pecho de golpe y estaba por irme pero me sigue.

- ¿Sirius? ¿El te hizo llorar?

- no exactamente el. - dije mientras me limpiaba la mejilla y me detuve en el momento en el que sentí que me seguía. - vete, realmente no te quiero aquí.

- bueno, el castillo no es de tu propiedad princesa entonces, no puedes decirme que me vaya. - se coloca justo enfrente para impedirme El Paso. - por favor solo dime que te pasa.

- ¿"por favor"? - pregunté confundida. - ¿quien eres?

- ¿sabes qué? Olvídalo. - toma bien entre sus manos de su libro y me mira de la manera más fría. - no me interesa, tienes razón. Has lo que quieras, me imagino que de cualquier manera, te lo mereces por ser una fría...

- dilo.

- perra. - lo miré molesta, no había mucho que pudiera hacer. Pero estaba tan molesta que opté por de nuevo, tirarle el libro. Y me fui de ahí. Tampoco me servía para nada tener que estar peliando con el ahora. Lo que menos quiero ver es a él.

A quien quería ver en estos momentos era a...

- Sirius. - en cuanto lo vi, corrí a sus brazos y este venía con una chica pero no me importaba. Ocupaba ese abrazo. - que bueno es verte. No tenía idea de donde estabas y...

- estaba con Emma. - dice como si yo la conociera. Me separé para poder saludarla bien pero ni siquiera eso quiso ella. - oh, um... una amiga.

- claro. -dije apenada, al darme cuenta que claramente no era solo una amiga. Estaban saliendo o lo que sea. Estaban en una cita, y yo interrumpí el momento. - los dejo, te veo luego en la sala común y...

- no ¿de que hablas? Claro que no te vas a ir sola. - me dice tomando de mi mano. - vamos, te acompaño.

- termina tu cita. - le dije en voz baja pero este me ignora y se agarra bien de su mano.- vamos, no seas grosero con ella. No me hagas caso, yo estoy bien.

- fue un placer Emma, como siempre. - este le guiña un ojo y luego le da un beso en la mejilla. - ¿nos vemos luego? Ya es momento de que regrese.

- supongo. - ella dice viéndome de mala gana y apenada solo sonrío. Y así, así fue como Sirius y yo nos fuimos.

- no tenías que interrumpir tu cita por mi. No tenía idea de que estuvieras ocupado. - ya nos encontrábamos subiendo de las escaleras que se movían solas, tan solo esperando a regresar a la sala común y por alguna razón, mi primer instinto fue voltear hacia abajo y buscar con la mirada a Regulus.

- Kate, sabes perfectamente que prefiero estar contigo que con cualquier otra persona en el mundo. - este me sonríe y yo a él. - ahora dime ¿qué es lo que te tiene tan mal?

- pues, yo... - estaba por hablar cuando James se nos une y no pude evitar poner mis ojos en blanco. Y claramente, Sirius vio eso y entendió. Entendió todo.

- hey ¿por qué te fuiste así por que si? - me dice y no le contesto. - pads, lo qué pasa es que yo estaba contándole a Kate que ya era momento de buscar a otra chica en mi vida. ¿Verdad?

- es verdad, prongs. - Sirius dice pero puedo notar lo disgustado que estaba. Al menos molesto por lo mucho que me afectó. Todo estaba mal en estos momentos. - ¿que hay de Lily?

- puede esperar. Quiero decir, casarme con ella sigue siendo mi prioridad. Solo que ahora es diferente. Quiero que ese que es mi ultimo año, la pasamos increíble. - me abraza de los hombros. - ¿verdad, Kate?

- hagamos una fiesta. - Sirius dice y negué con la cabeza. - del regreso a clases, insisto. Toca decirle a los demás y lo planeamos para que quede esta semana terminando el partido de quidditch.

- me parece una excelente idea y invitamos a todas tus amigas, Kate. - ni siquiera tengo amigas y de tenerlas, no se las presentaría a James. Levanté la mirada para verlo. - insisto, tienes hermosos ojos.

- ¿de qué me perdí? - Sirius pregunta.

- lo único que te perdiste es a James diciéndome que encontró una carta mía de hace tiempo donde yo le decía lo genial que era y lo mucho que valía. Y que esa carta lo ha despertado. Ahora el busca una chica que piense de la misma manera que yo, pero no yo. Esa chica no soy yo y... tampoco Lily claramente.

- oh James. - Sirius se cubre el rostro.

- ¿qué? ¿Qué pasa? - este pregunta sin saber que pasaba y en serio, ahora le creo que no sabe. James como siempre en la luna. Solo. Sin nadie más. Y en todo caso, sería con Sirius o con Lily. Pero yo ya no podía entrar en su mundo. Aún y cuando me considera su mejor amiga, nunca podría ser más que eso.

- voy a descansar. - dije y por fin me fui.