N/A: No tenéis una idea de lo mucho que me emociona la existencia de Daou y Offroad en esta historia, es una de mis parejas favoritas y los amo demasiado. Creo que se va a notar mucho próximamente, de hecho xD

Cap dedicado a fabi2713 ♡♡

Hoy os recomiendo 'Sports car' de probablemente mi artista favorita mundial del momento, Tate McRae.

[...]

"Offroad probablemente escuchó la conversación que tuvimos con Jangmin hace un rato." Supuso Mingyu, observando la preocupación en los ojos del azabache, quien, a su vez, estaba siendo atendido por el doctor Kim, cambiándole el vendaje de su herida principal.

Dejando escapar un suspiro, Juria asintió, pues ella misma había sido partícipe de ello. "Aún si el jefe le dijo que sería mejor si se mantenía al margen, no acercándose a ese cazador en absoluto, él os siguió de todos modos. Quise frenarlo en ese momento, pero Sungho se me cruzó de la nada y tuve que ir tras él para impedir que saliera del complejo." Ella se frotó el rostro, visiblemente angustiada. "Debí haber avisado a alguien y así todo esto se podría haber evitado, Dios..."

Leedo frotó su hombro de manera amistosa, mostrándole su apoyo.

"No te culpes por eso, ¿quieres? No tenías ni idea de lo que sucedería."

Ella asintió. "Lo sé, pero..."

"¿Qué es lo que pone en esa carta?" Quiso saber Jungkook, tras unos segundos en silencio, cuestionándose a sí mismo cuándo había descuidado tanto a uno de los miembros más pequeños de la manada, como era el caso de Offroad.

Tras lo ocurrido con Balam, el pobre muchacho no había vuelto a ser el mismo. Tenía pesadillas constantes en las que un grupo de cazadores lo perseguía por el bosque, lo raptaban y luego su cuerpo aparecía en una zanja cualquiera. Exactamente como le había sucedido a Balam, solo que sin nadie acudiendo a rescatarlo. Jungkook era consciente de ello, por lo que trató de ser tan paciente como podía con él; pero una parte de sí mismo sabía que debía haberle prestado más atención, estar a su lado como merecía.

Juria apretó los labios, mirando el papel todavía en sus manos. Lo había leído para sí misma más de cinco veces, sólo de esa forma aumentando su angustia.

"Que siente mucho actuar a tus espaldas e incumplir tus normas, por lo tanto, fallarte. También entiende si después de esto decides sacarlo de la manada, algo que ya... ya ha hecho por sí mismo al marcharse." Titubeó a la hora de decir aquello último, su barbilla temblorosa. "Pero que debe ocuparse de esto por sí mismo, que no puede soportar la culpa y el miedo."

De los labios del líder brotó un suspiro, siseando cuando TaeHyung apretó la venda alrededor de su cintura y frotándose el rostro bruscamente con ambas manos. Jamás podría dejar fuera a nadie de la manada por algo así, incluso si estaba al tanto de que otros líderes solían hacerlo. Él no podía. Ese muchacho era parte de su familia. Estaba asustado, tenía miedo y se sentía responsable de una muerte que jamás hubiese podido evitar.

El sollozo que Juria dejó escapar aumentó la presión que sentía en el pecho, tragando saliva.

"Era demasiada presión para él..." Susurraba ella, con la cabeza gacha.

"Sí, es comprensible que no pueda aguantar más. Yo ya he perdido la cuenta de la cantidad de veces que tuve que acudir a su habitación en plena madrugada porque estaba teniendo otra de esas pesadillas. Siempre se despertaba agitado y llorando... Se abrazaba a mí y luego me pedía perdón."

Asintiendo, Mingyu compartió el relato de Leedo. "Yo también. Todas las veces que tuve que hacer guardia, lo escuchaba gritar."

"Y yo..."

Jungkook no pudo evitar sentirse miserable, el pesar y la angustia reluciendo en sus ojos grandes, brillantes.

"Preparaos para salir en su búsqueda, ¿de acuerdo?" Pidió, viéndolos asentir de inmediato. Por supuesto, nadie se negaría ante algo así. "Decidle a Taesan que mire las cámaras y lance varios de esos drones para limpiar el perímetro."

"Yo me encargo de avisar a Taesan." Leedo dijo, saliendo de allí con rapidez.

Por su parte, Boun vació sus pulmones, sacando el teléfono. "Movilizaré a tantos miembros de la manada como pueda, jefe, así será más fácil... Con un poco de suerte lo encontraremos antes del amanecer."

"De acuerdo."

"No debe haber ido demasiado lejos, ¿verdad?" Pronunciaba el doctor Kim por primera vez. "Está anocheciendo."

Los ojos del azabache viajaron hasta él, luciendo aún más angustiado tras aquellas palabras, como si hubiera olvidado en qué momento del día se encontraban. La preocupación de TaeHyung aumentó, luciendo algo confundido también.

"¿Qué he dicho...?"

"Offroad le teme a la oscuridad desde que era un niño." Juria respondió, sus labios apretados.

Prem, que al igual que TaeHyung, había presenciado aquella reunión emergente en completo silencio, dejó escapar una maldición en voz baja. "Oh, mierda... Pobre chico..."

La muchacha asintió, mientras que Jungkook se ponía en pie repentinamente, sobresaltando a TaeHyung, quien terminaba de cubrir su herida menos reciente.

"¿Dónde vas?"

"Tengo que ocuparme de esto y salir fuera para encontrar a Offroad." Dijo, poniéndose la camiseta de nuevo. El doctor ni siquiera titubeó cuando lo envió de vuelta a su sitio, aprovechando que estaba algo debilitado gracias a la medicación previa. Jungkook le observó. "¿Qué crees que...?"

"Justo eso iba a preguntarte yo a ti ahora mismo, ¿qué crees que haces? Estás herido todavía, Jungkook."

"Doctor..."

Este negó. "No, doctor nada. Tu herida aún no ha sanado, hace menos de veinticuatro horas que recibiste una puñalada y varios golpes." Le recordaba, señalando su rostro. "Piensas ir muy lejos en ese estado, asumo, pero ya te advierto que no lo conseguirás."

Los labios de Jungkook se apretaron en una mueca. Por desgracia, sabía la gravedad de su estado y lo mucho que entorpecería la situación. Por desgracia, también, era el líder de aquella manada y Offroad su responsabilidad.

"El doctor Kim tiene razón, jefe." Boun dijo, saliendo el defensa del susodicho.

Juria también lo hizo, asintiendo. "Sí, debes quedarte aquí y enfocarte en tu recuperación, Jungkook. Deja que los demás nos encarguemos de esto."

"Pero tengo que..."

"Tienes que cuidarte." Volvía a decir el rubio, impidiéndole volver a moverse con una mano en su pecho desnudo. "O de lo contrario, no sólo entorpecerás la búsqueda de ese chico, sino a toda la manada al completo."

Sintiéndose insultado de alguna forma, incluso si claramente no debía, el azabache dejó escapar un bufido.

Y es que Jungkook no llevaba demasiado bien eso de ser racional cuando se trataba de sí mismo. Cuidaba a los demás como si sus vidas dependieran de ello a diario, los ponía por encima de todos y de todo siempre que lo requería (y cuando no, también). No les permitía salir del complejo si estaban enfermos o heridos, obligándoles a recuperarse aún si eso sólo colocaba más peso sobre sus hombros. Como líder de la manada, no había nadie que se le igualara. Sin embargo, si el herido era él, todos se llevaban las manos a la cabeza.

"Si esa herida no sana y los puntos se abren, puedes incluso morir, Jungkook." TaeHyung le dijo con una voz suave, pausada, pues no podía simplemente señalarlo en esa situación.

En el fondo, el propio TaeHyung era quien más lo entendía.

Dejando escapar un suspiro, este accedió al fin, acomodándose sobre la cama para no entorpecer también al doctor en su labor.

"Está bien... Boun, te dejo a cargo de la búsqueda, ¿de acuerdo?"

"Por supuesto, yo me encargo de todo, no te preocupes." Accedía, pasando un brazo por los hombros de Prem. "Aunque primero voy a dejar a esta criatura en su habitación."

Prem no tardó en fulminarle. "Puedo ir yo solito, ¿eh...?"

"Ya, pero me pilla de camino."

Jungkook se frotó el rostro con una mano, demasiado aturdido como para escuchar algo que no estuviera relacionado con Offroad. "Avísame en cuanto sepas algo. Y tan pronto como lo encontréis, enviadme la ubicación. Quiero ir por mí mismo."

"Bien." Asintió de inmediato. "Pues vámonos, polluelo."

Llevándose a Prem consigo -por supuesto, ignorando todas y cada una de sus quejas y protestas-, Boun salió de aquella habitación con el susodicho.

"Yo iré a avisar a Soyeon, jefe. Estoy segura de que nos hará falta su presencia."

El azabache estuvo de acuerdo, viendo a Juria desaparecer también.

Una vez a solas con el doctor, bajó la guardia, sintiéndose tan débil como para desmoronarse y llorar en cualquier momento. Afortunadamente para él, todavía tenía algo de control en sí mismo para no hacerlo, logrando mantener la calma. TaeHyung lució preocupado.

"No deberías ir a ningún lado, podría se..."

Antes de que TaeHyung le impidiera tomar su decisión (la cual ya estaba tomada desde hacía tiempo), él lo interrumpió.

"Tengo que estar a su lado cuando aparezca, doctor. Como líder y como persona que se preocupa por Offroad..." Mirándole a los ojos, dijo. "Necesito que sepa más que nunca cuánto me importa. No puedo quedarme de brazos cruzados mientras él se culpa por todo esto. Antes de Sungho, él era prácticamente uno de los cachorros."

TaeHyung sintió cómo se le aceleraba el corazón ante el tono de voz que el azabache había usado. Su apariencia vulnerable, por primera vez desde que Balam murió en sus manos. Entonces, suspiró, zarandeando la cabeza.

"Bien... Pero yo te acompañaré cuando sea el momento."

Ahí, por supuesto, Jungkook no dudó en negarse. "No, tú no-"

"Voy a hacerlo sí o sí. Tú estás a cargo de mi seguridad y yo de tu salud, así que mientras estés en ese estado no vas a librarte de mí."

"Doctor..."

TaeHyung negó con antelación, haciéndole saber que ninguna crítica le haría cambiar su decisión. "Nada de doctor. Ahora cállate y déjame curarte ese labio, si veo una gota más de sangre en tu cara voy a volverme loco."

Jungkook dejó escapar un bufido.

Definitivamente era él.

"Para de moverte tanto, Jungkook." Cinco minutos después, la voz de un muy irritado TaeHyung le ordenaba, a punto de hincarle el hisopo entre ceja y ceja.

"Es que arde mucho." Se quejaba el azabache, luciendo como un niño de seis años. "Parece que tengo una comunión de avispas en la boca, joder..."

Un bufido volvió a abandonar los labios del rubio.

"Claro, es que, ¿a quién se le ocurre soltar a Jangmin para que te golpee?"

"A mí."

"Pues entonces, ya que ha sido decisión tuya, te jodes y dejas de quejarte. O el siguiente puñetazo te lo doy yo."

Poniendo los ojos en blanco, Jungkook, resignado, se quedó en silencio, esperando a que TaeHyung terminase lo que fuera que estaba haciéndole en la cara. Hasta que un hisopo le rozó el labio superior, rasgado por culpa del anillo que Jangmin llevaba y se estremeció.

"¡Ay!"

"¡Ay!" Chilló el doctor, sobresaltándose en reacción. Jungkook dejó escapar una risita, siendo golpeado al instante.

"¡Oye!"

"¡Gilipollas!"

Jungkook frunció el ceño, fulminándolo. "¡¿Por qué me golpeas?! Soy un hombre herido. Me han apuñalado y apaleado como una piñata de cumpleaños. El imbécil de tu exnovio me ha dado un puñetazo y ahora tú tamb..."

No dándole tiempo a terminar de hablar, TaeHyung volvió a presionar el hisopo contra sus labios.

"¡Ay!"

Por segunda vez, fue fulminado, apartándose y tirando al cubo de basura los materiales que había usado, finalizando con su labor.

"Listo, ya estás... Ahora solo falta que todo cicatrice."

"Espero que lo haga rápido. No sé si sobreviviré a otra curación del doctor Kim. Empiezo a pensar que, en lugar de cirujano, eres carnicero, porque vamos, vaya técnica..."

Dejando escapar una carcajada, TaeHyung negó con la cabeza, ayudándole a colocarse de vuelta la camisa.

"Qué exagerado..."

"No exagero, lo digo completamente en serio."

Él bufó, tomando la sabía decisión de ignorar a Jungkook, pues no iba a perder el tiempo en discutir con alguien que se había provocado a sí mismo aquella herida más reciente. No lo merecía.

Un leve gruñido tras TaeHyung hizo que los ojos de Jungkook se suavizaran con rapidez, tornándose brillantes, al mismo tiempo en que una sonrisa apareciera en sus labios. El doctor no fue consciente de la presencia a sus espaldas hasta que Jungkook habló.

"¿Y esta cosita tan bonita, qué hace aquí?" Hablándole con la misma dulzura con la que lo miraba, este se dirigió al cachorro que, con evidente timidez, se asomaba por la puerta, portando su mantita favorita, hecha por la mismísima Balam durante sus últimos días, en la boca.

Sólo de esa forma también, el doctor se dio la vuelta, viendo a Sungho en su forma animal. De inmediato, le sonrió, mientras Jungkook pasaba junto a él para llegar hasta el cachorro, elevándolo del suelo. Sungho emitió un sonidito, meneando la cola de un lado a otro efusivamente. A TaeHyung se le derritió el corazón, observando como el pequeño animal lamía la cara del azabache.

"¿Cómo estás, precioso? ¿No puedes dormir?"

Miran apareció por la puerta también, con una sonrisa cansada. "Lleva un rato bastante inquieto, creo que sabe que algo va mal, por eso no puede dormir."

Una vez en brazos de su tío favorito, Sungho recuperó su forma humana, siendo inmediatamente cubierto por aquella manta a manos de Jungkook, quien lo acomodó contra su pecho de la manera más cómoda posible. El bebé suspiró, sintiendo la mano de TaeHyung acariciándole la espalda desnuda y cerrando los ojos.

"Pobre bebé... Tiene que estar muy asustado con todo esto, no me imagino lo duro que debe ser para él." Murmuraba, haciendo una mueca.

"Ha estado bastante tranquilo estos días, desde que empezó a dormir contigo y encontramos esa manta que le hizo Balam, pero esta mañana curiosamente no ha parado quieto de un lado a otro."

El ceño de Jungkook se frunció. "¿Y eso?"

"No sabría decirte... Cuando no estaba dando vueltas en la habitación de TaeHyung, lo hacía en la tuya, y muy de vez en cuando intentaba meterse en una de las habitaciones que tenéis cerradas con llave. La del otro lado del pasillo." Explicaba ella, logrando que el corazón del azabache se detuviera por segundos. "Pero no le encuentro explicación, la verdad."

Jungkook tragó saliva antes de hablar. TaeHyung le observó, pensando lo mismo que él.

"¿La del otro lado del pasillo?" Repetía el rubio, mostrando curiosidad. "¿No es ahí donde se encuentra Haon?"

"Así es, sí... Lo trasladamos a su propia habitación hace unas semanas."

El gesto de Miran se torció. "En ese caso, él probablemente esté buscándolo. Debe sentir una conexión inexplicable con Haon, al ser su padre. No poder encontrarlo hace que se sienta intranquilo."

"Pobrecito..."

"¿Cómo se encuentra Haon? ¿Hay mejoría en su estado?"

"Sus constantes han mejorado, pero la dosis que le administraron era demasiado fuerte, así que los efectos secundarios todavía perduran. Necesita estar internado más tiempo, hasta que se eliminen por completo y pase por el proceso de desintoxicación. Es... Es bastante duro."

Y, por cómo lo relataba, Miran podía asumirlo. "Ya veo, ya... Pobre chico..."

El teléfono de Jungkook comenzó a sonar, viéndose obligado a soltar al bebé en brazos de TaeHyung, quién lo agarró de inmediato.

"Un momento, por favor, ese tiene que ser Boun." Dijo, tras reconocer su tono de llamada al instante y tomando el teléfono una vez Sungho abandonó sus brazos. Descolgó la llamada en tiempo récord. "Boun, ¿qué ocurre?"

"Hemos encontrado a Offroad, jefe."

De sus labios brotó un suspiro de alivio. Un alivio que no permaneció demasiado tiempo, por desgracia.

"¿Y qué tal? ¿Está bien?"

"Está... Está bien, sí. Pero hay un pequeño problema, Jungkook."

Los ojos llenos de preocupación del doctor se posaron en él tan pronto como su mueca cambió, sabiendo que no se avecinaban buenas noticias.

Jungkook dejó escapar un suspiro antes de hacer la pregunta definitiva.

"¿Cuál?"

"Lo han atrapado. El sobrino de Liu no quiere dejarlo ir a menos que seas tú quien venga a dar la cara en su nombre." Le hizo saber. El corazón se le detuvo, pensando en la infinidad de posibilidades. "Tienes que venir si quieres sacar a Offroad de aquí, jefe... No hay otra manera."

Compartiendo su angustia con TaeHyung en una mirada cómplice, tragó saliva.

"Voy para allá." Dijo e inmediatamente colgó, buscando aprobación en los ojos de Miran. "Por favor, ¿puedes...?"

Ella estiró los brazos en dirección al bebé, permitiendo que el doctor pudiera marcharse también. No necesitaba demasiada información para saber dónde iría y a quién se encontraría.

"Tened mucho cuidado, por favor."

"Lo tendremos." Aseguraba, pasando un brazo alrededor de lo hombros de TaeHyung, sin dejar de mirar a la mujer. "Sólo espero que tu hijo no tome una mala decisión, Miran. Ahí sabes que no podré cumplir lo que prometí."

Y, lentamente, asintió, una mueca de dolor brillando en sus ojos marrones, sabiendo exactamente de lo que hablaba.