Dahyun luego de su terrible noche con Jackson, ignoraba todas sus llamadas e incluso el chico la fue a buscar varias veces a su instituto, por suerte lograba escaparse y una que otra vez Chaeyoung la ayudaba. Todavía no le había contado a sus amigas lo sucedido solo a Chaeyoung, no se sentía lista y tenía miedo de como pudieran reaccionar, ya que todas la sobre protegían demasiado.

Lo bueno es que ahora su mente estaba tranquila, ya no sentía esa presión de estar con alguien por querer olvidar a alguien, el fingir que realmente estaba bien era cansado y agotador... se dio cuenta que lo único que tenía que hacer es terminar con su relación que no iba para ningún lado. Lo intento demasiado, no es que Jackson no era un buen chico, al principió si le gusto mucho, de hecho fue muy feliz cuándo se decidió a salir con el, pero ahí mismo fue cuándo vio a Sana. Todo estaba destinado a fracasar, pero nunca vio las señales para dejarlo ir.

Dahyn estaba muy tranquila en su aula terminando de hacer sus tareas, Sehun se había quedado con ella para hacerle compañía pero luego de que vio que no terminaría pronto le dijo que iría un rato a jugar al patio y no tuvo ningún problema en quedarse sola, de hecho eso quería desde el principió.

Cuándo termino todo luego de una hora más, levanto sus cosas y las puso en su mochila. También limpió la mesa en la que estaba para que todo quedará limpió dado que ya habían limpiado su aula sus compañeras. Fue a sus casilleros para dejar algunas cosas para sus clases de mañana, ya que no quería cargar con todos útiles, así que prefirió dejarlos.

Caminaba muy tranquila a su aula favorita de música, cuándo se sentía muy feliz podía escribir melodías tan alegres y hoy era un buen día para eso. La verdad es que al principio se sintió bastante mal, pero ahora era todo lo contrario estaba demasiado feliz consigo misma, no dejaría que nadie volviera a opinar en su vida y haría lo que ella considerara correcto para ella. 

Al entrar dejo su mochila aún lado de una mesa en dónde solía dejarla y ahí se quedo intentando componer algo nuevo, por que para su beca tenía que presentar algo nuevo e innovador para el día de su ingreso.

—Te estaba buscando,  Dubu— Interrumpió Chaeyoung que venía un poco agitada luego de haber corrido para llegar.

—¿Que necesitas pequeña tigre?— Dijo muy amable Dahyun.

—Veo que hoy estas de buen humor, me alegro mucho verte así—Fue para abrazar a su amiga y revolverle el cabello—No debí aconsejarte salir con Jackson, no fui tan buena amiga me deje llevar por que no quería verte sufrir.

—Lo sé, se que solo quieres cuidar de mi. Solo deja que yo sola cometa mis errores y con este he aprendido mucho, sigo siendo una niña— Le sonrió a su amiga— ¿A que has venido?

— Jackson me pidió que te entregará esto— Saco de su mochila una caja con chocolates— Debe estar arrepentido.

—Tíralos, no los necesito—Suspiro— Se que debo hablar con el, pero aún no me siento bien para hacerlo.

—Eres más fuerte de lo que crees—Le hizo una señal de animo— Para querer estar con Sana, debes de ser demasiado fuerte— Se burlo su mejor amiga.

Dahyunr suspiro fuerte, sonrió y miro a la dirección en dónde estaba su amiga. 

—Conocí a una chica de nombre Bae quién es muy rica, ella me dijo que era pretendiente de Sana y le creí—Se rió de lo tonta que fue— Un día la vi con Sana saliendo de un hotel muy elegante, ella pensó que me sucedió algo y me fue a buscar, pero al encontrarme solo le dije cosas muy feas, nada de lo que me dijo esa mujer fue cierto ¿Soy una tonta?

—¿Fue demasiado feo lo que le dijiste?

—Sí, el día del partido me la había encontrado antes y me ignoro. Todo la termina arrastrando a Tzuyu, tal vez ellas deban estar juntas por eso estoy bien—Sonrió.

Chaeyoung se levanto de su asiento, tenía que hacer algo por su amiga y lo haría. 

— Sana te quiere mucho, no creó que pueda cambiarte por nadie más—Dijo muy animada. 

Dahyun continuo haciendo lo que había dejado por platicar con su mejor amiga, aunque esas palabras fueron un buen aliento. Entre los pasillos iba caminando Chaeyoung, no sabía como ayudaría a su amiga. Entre tanto pensar en una solución choco con una chica.

— ¿Dónde esta Dahyun— Hablo Sana sería— Te llevo buscando desde hace media hora...

— ¿Como porque debería decirte en dónde esta mi amiga?—La enfrento Chaeyoung.

— Por que si no me lo dices por las buenas te haré hablar por las malas— Sana se acerco algo intimidarte.

Sana había decidido ir a buscarla, tenía unos lentes oscuros por que aún tenía un poco morado su ojo y su mejilla aún tenía esa bandita que no se podía quitar aún o le quedaría una cicatriz en su bonito rostro. Lo estuvo pensando toda la mañana en si debería ir o no a buscarla, solo quería decirle lo que había visto por que no quería que le vieran la cara.

—¿Podemos hablar?—Pregunto Dahyun asustada— Prometo decirte en dónde esta, pero quiero saber algo primero.

Sana a veces daba miedo, tenía una postura muy intimidante y su apariencia en estos momentos no le ayudaba.

— Mientras no me hagas perder mucho tiempo, de acuerdo...

Fueron a unas bancas de las canchas deportivas y ahí se sentaron debajo de un árbol por si comenzaba a llover.

—Sana ¿tu en verdad quisiste a Dahyun?—Pregunto curiosa Chaeyoung.

— ¿Por que me preguntas estas cosas?—Respondió confundida.

—Solo no quiero que ella sufra, es una persona sensible y creó que ha tenido demasiadas emociones esta semana... así que si solo vienes a alterarla no dejaré que la veas.

—Nunca lastimaría a Dahyun. Yo solo vengo a decirle algo rápido y te prometo que no volveré a buscarla de nuevo. 

Sana estaba por volver a decirle unas cosas a Chaeyoung pero escucho el sonido del piano venir del lado izquierdo, esa melodía solo podía ser de Dahyun. No se despidió ni nada, solo camino siguiendo el sonido y dio con el aula, ahí estaba la persona que estaba buscando. No toco ni nada, entro sin pedir permiso, sentía que no lo necesitaba y ella hacía lo que quisiera.

—¿Se te olvido algo Chaeyoung?—Dijo Dahyun sin voltear a ver.

—No soy Chaeyoung—Respondió Sana.

Dahyun no quería mirar por lo que sus ojos solo veían los teclados del piano que tenía justo enfrente, no es que no la quisiera ver o tuviera miedo, solo no quería hacerlo.

—Solo vine a decirte que debes terminar con Jackson. El no es buen chico para ti, el no es lo que tu crees, no te puedo decir exactamente las cosas pero no debes estar con el— Soltó de golpe sana, sus palabras eran frías sin tener alguna emoción.

Se levanto de su asiento y por fin miro a Sana quién estaba justo en la puerta. No había entrado mucho, las dos se miraban a los ojos aunque no pudiera ver sus ojos al menos la japonesa si los veía.

— San...—Iba a decir su nombre pero la japonesa la interrumpió.

—Es lo único que vine a decirte, es tu problema si no quieres escucharme—Sana al terminar de hablar hizo una reverencia como despedida.

—Perdón, nunca quise decirte todas esas cosas—Por fin hablo Dahyun su voz era tranquila.

—No necesitas disculparte por algo que es cierto—Respondió Sana sin mirarla— Solo dijiste la verdad.

A sana le dolía responderle de esa manera, pero no podían seguir o todo sería más tóxico de lo que se había convertido. El amor de ambas estaba siendo sumergido en el abismo de la soledad y si no lo encontraban a tiempo todo se perdería y todo sería en vano.

Luego de salir del instituto de su ex novia, se subió a su moto y miro su reloj, aún era pronto para volver pero tenía que hacerlo o momo seguramente estaría muriendo de hambre. De camino se bajo en un restaurante para comprarle comida a Momo quién no dejaba de mandarle mensajes de que si estaba por llegar o ya le faltaba poco.

Todos se burlaban de Sana o al menos eso notaba cuándo se quitaba los lentes, no lo hacían enfrente por que sabía que no vivirían para contarlo. Entro a su habitación y ahí estaba su mejor amiga esperando ansiosa toda la comida.

— Pensé que no vendrías pronto ¿A dónde fuiste?—Pregunto Momo.

—A comprar, pero había mucha gente—Mintió— ¿Por que no vas con Nayeon para que comas con ella?

—Esta ocupada con sus exámenes de la universidad— Dijo desanimada— Te imaginas que tuviéramos que lidiar con todo ese problema de la escuela, que horror. Aunque seguramente sería divertido.

—Supongo que debe ser divertido—Respondió Sana— Vamos a comer.

Se sirvieron muy tranquilas, últimamente estaban calmadas, no había mucho trabajo por hacer todo parecía estar calmado. Comieron tranquilas mientras momo platicaba de como le iba su relación con Nayeon ya que estaban saliendo oficialmente.

— ¿Te ves haciendo esto toda tu vida?—Pregunto Sana.

— ¿Tenemos otra opción?—Respondió Momo con otra pregunta.

— Lo dudo.

Sana se recostó en su cama, jugaba con su celular y revisaba algunas cosas. Momo por su contrario se había dormido por que hoy tendría otra salida con Nayeon y quería tener energía para cualquier cosa que llegara a suceder, a veces eran tan obvia con lo que quería decir pero pensaba que no.

No tenía planes para salir, tampoco se quería quedar sola en un día como hoy. El clima no era el mejor pero no iba estar en algún lugar al airé libre, quería tomar un poco mientras fumaba unos cigarrillos y su única opción era Tzuyu. Le mando un mensaje y la taiwanesa no tardo en responderle que estaría bien y que se vieran en la esquina, habían inaugurado nuevo bar por lo que quería ir ahí para ver como era.

Veía como se arreglaba Momo, iba casual como normalmente pero se ponía un exceso de perfume, tal vez exageraba un poco pero Sana no le quería decir nada. 

Apenas se fue su mejor amiga entro a bañarse, tenía un par de moretones que aún parecía no querer quitarse. Lo bueno que su ojo solo se notaba un poco pero su mejilla aún estaba con esa bandita que odiaba tanto. Al salir de bañarse, se vistió, se puso sus botas negras favoritas, unos jeans pegados y un abrigo nuevo que acaba de comprar. 

Lo bueno que Tzuyu la vería ahí por lo que no se tenía que preocupar por ir a buscarla, ya que iría en taxi y no quería estar dando vueltas.Tardo unos 60 minutos en llegar y mientras la taiwanesa se decidía a aparecer saco un cigarrillo para poder fumar un poco, el clima era frió y el cielo estaba nublado. Seguramente llovería más tarde por que se escuchaban los truenos, llovería muy fuerte. Tzuyu parecía que no llegaría, ya que llevaba 2 cigarrillos y la chica no más no tenía el atrevimiento de aparecerse pero estaba acostumbrada, siempre era impuntual pero hoy lo era más. Un carro se paro justo enfrente de la japonesa, ya sabía de quién se trataba. Al bajar los cristales Yoo la quedo mirando con su mirada de siempre y la taiwanesa le sonrió para enseguida bajar.

—Cuándo quieras que venga por ti, me llamas—Dijo Yoo para luego arrancar el vehículo e irse.

Llevaba un bonito conjunto, últimamente Tzuyu había cambiado un poco su manera de vestir, ahora se vestía más casual para sentirse cómoda.

—Perdón por llegar tarde, el bar esta a una dos cuadras—sonrió. 

Mientras caminaban Tzuyu entrelazo sus brazos para caminar un poco más cerca, sana no dijo nada por que realmente no le daba importancia ya que solo eran amigas y eso había quedado claro en varias ocasiones.

Dahyun había salido con sus amigas, Jihyo, Mina y Chaeyoung, fue la más bajita quién le insistió mucho en que debería salir, ya llevaban un buen rato y todos estaban tomando excepto ella que aunque le insistieron demasiado termino diciendo no. Jihyo también estaba ebria y Mina tenía que cuidar a Chaeyoung por eso tampoco quiso beber y era más divertido así. Cantaban, se reían y entre muchas cosas.

—Hoy me he divertido, muchas gracias chicas— Dijo sincera Dahyun.

—No agradezcas, estamos para apoyarte. Aunque la tonta de Nayeon dijera que vendría y no este aquí— Hablo molesta Jihyo.

Se reían por que Nayeon dijo que vendría pero luego dijo que iría más tarde por que les tenía una sorpresa. 

—Ya debo irme, me regresaré sola y no quiero que se haga más tarde—Sonrió Dahyun tomando sus cosas.

—Vamos todas contigo, Nayeon esta por venir y de paso la esperamos afuera— Hablo Chaeyoung levantándose con ayuda de Mina.

Todas caminaron a la salida, el lugar estaba demasiado lleno y eso que aún no era sábado o domingo. Estaba despidiéndose por segunda vez, todo parecía ir bien hasta que escucharon unas voces que las hicieron mirar.

Venían Nayeon y Momo agarrada de las manos y del otro lado estaban Tzuyu y Sana, todo parecía de película, todos se miraron entre todos. Mina miraba a sus dos amigas y los demás no sabían a quién ver, Momo veía a Mina y Sana veía a Dahyun, mientras que Dahyun veía a Sana y Tzuyu veía a Dahyun era una sopa de letras demasiado revuelta.

Dahyun lo primero que observo fue que la taiwanesa tenía entrelazado su brazo con el de Sana, intento ignorarlo pero no podía por alguna razón sus ojos es lo único que miraron y eso que enfrente estaba Nayeon con Momo quién era la persona con la que estaba saliendo realmente.

—Debo irme chicas, nos vemos—Hizo una reverencia y la taiwanesa noto la expresión de Dahyun y la pequeña lagrima que estaba por salir.

Todos asintieron, era atendible el ambiente se estaba tornando muy incomodo. Todos se sonrieron, ya que todos se conocían y eso era aún más incomodo. Sana veía como se iba caminando de manera rápida la menor.

—Deberías ir hablar con ella, seguramente mal entendió— Hablo tzuyu rompiendo el hielo, todos la miraron. Sana la miro confundida, ya que no solía ser así la taiwanesa— No te preocupes por mi, esa noche no paso nada... se que no la has olvidado, es momento de recuperar lo que es tuyo—Le susurro en su oído a Sana.

Sana miraba a todos como si necesitara la aprobación de todos para ir a buscar a Dahyun. 

—Ella te ama, sana—Por fin hablo Chaeyoung— Solo no la vuelvas a lastimar, ve tras ella.

Fue lo único que necesito escuchar y sin voltear atrás corrió para alcanzar a Dahyun. Al llegar a la esquina no vio de que lado doblo por lo que se dejaría guiar por su instinto, a lo lejos la visualizo parecía ir distraída que no estaba fijándose. Corrió lo más rápido que pudo y logro jalar a la menor evitando ser atropellada.

En ese momento a su mente de Dahyun le vino el recuerdo de esa vez en que sana la rescato de esa manera y su corazón latía al estar en los brazos de la japonesa.

—Sana—Susurro— ¿Por que estas aquí?—La voz de Dahyun  sonaba entre quebrada.

Le dolía, todo había sucedido demasiado rápido y el tenerla de nuevo en sus brazos era asombroso.

—Princesa, por favor vuelve a gustar de mi. Esta vez no me iré, te protegeré de todo y nadie te hará daño— Sana la abrazaba fuerte—Se que todo lo que dijiste sobre mi, no es mentira es lo que soy, pero realmente se que es querer a una persona, por que yo te quiero...

—Sana, yo...—Solo eso logro decir Dahyun por que se vio interrumpida de nuevo.

—Yo nunca me he acostado con nadie más, eres la única chica que me interesa. Siempre cuide de ti desde que volví a seul. Solo no quería que pasaras una situación similar, pensé que terminarías odiándome por eso nunca te quise decir la verdad. Por favor perdona a este chica estúpida...—Dijo entre sollozos.

La lluvia parecía caer, las gotas invadían sus cuerpos y no les importaba estarse mojando o pescar un resfriado, los relámpagos adornaban el cielo, junto con las nubes grises. 

—Nunca deje de quererte, pensé que ser novia de Jackson era una buena idea pero todos los días me arrepentía. Termine rindiendome y deje de creer en ti, por que todo indicaba que no deberíamos estar juntas... ¡Me equivoque, Sana!—Susurro Dahyun quién parecía que lloraría pronto— Me deje llevar por los celos que termine hiriéndote, lo siento por eso no era lo que sentía—Abrazó a la japonesa con la misma fuerza— La chica tonta rica, me explico que todo fue mentira y que nunca fueron nada, solo caía en sus provocaciones.

—No necesitas disculparte, princesa...—Susurro, sana miro al cielo y sus lagrimas se mezclaron con las gotas de lluvia.

—No me sueltes—Suplico Dahyun.

—No lo haré más, te prometo que cambiaré y te lo demostraré—Volvió hablar Sana.

—No necesitas cambiar nada, te quiero—Dahyun dijo muy sonriente.

Las dos hicieron un poco de distancia en dónde se miraban fijamente, sus miradas bajaron hasta llegar a los labios de ambas. Sus respiraciones eran aceleradas, no creían que volvieran estar en esa situación, estaban con la persona que tanto querían y extrañaban.

Las mejillas de Dahyun se estaba ruborizando, lentamente se iban acercando no necesitaban permiso para besar aquellos labios de los que tanto anhelaba. Sana acariciaba su mejilla con mucho cuidado como si la fuera a romper o algo por el estilo. Su corazón parecía querer salir de su pecho, martillaba por querer salir de su cuerpo eso solo lo sentía con la japonesa.

Nadie parecía querer dar el siguiente paso hasta que Dahyun cerro los ojos y alzó un poco su rostro ya que era un poco más baja que la japonesa. Suspiro una última vez antes de por fin sentir sus labios, eran suaves, delicados y un poco húmedos por la lluvia, se aferro a su abrigo por los nervios que tenía en ese momento, el beso era lento, Sana  puso su una de sus manos atrás de su cabeza para arrastrarla más a ella. Su cuerpo sentía un cosquilleo inexplicable, Dahyun estaba apunto de sufrir un colapso cerebral y al sentir una lengua dentro de su boca, le daba vergüenza el tener que mover su lengua de manera lenta sin arruinar el beso. 

Sana estaba aferrada al cuello de Dahyun, no la quería soltar tan poco quería parar con el exquisito beso que no se daban en mucho tiempo, un beso de verdad, era el beso en dónde se demostraban cuánto se querían. Este beso era el que siempre recordarían, por que ambas se amaban. Era tan cálido, era la primera vez que sentía un beso tan único, solo lograba que sintiera mariposas en el estomagó como si fuera una niña de 15 años dando por primera vez su primer beso, solo que estaba vez entrego su corazón por completo a la chica que estaba besando.

Dahyun  suspiro y se separo solo un poco de Sana quién la miraba con la respiración demasiado agitada o peor que la de ella. 

El amor que se tenían era tan fuerte que nadie lo rompería, nadie las separaría por que era un amor tan puro, una sin conocer lo encontró y por primera vez amo de verdad. Dahyun siempre busco el amor en libros pero ahora lo estaba viviendo.