Capítulo 4
La música está muy alta y esto me gusta, por lo menos no tengo que escuchar a nadie. No me interesa nadie que está aquí, solo mis hermanas y la cumpleañera. Doniya está muy feliz y eso me hace feliz. Lleva un vestido amarillo con cuadros ceñido a su cuerpo y sostiene un vaso con algún tipo de alcohol dentro. Es raro que beba, pero es su cumpleaños y aquí manda ella ahora. Ya tiene una edad. Me da pena que ahora es un poquito más mayor que antes, me gustaría cuidar de la niña pequeña que era. Simplemente era genial ser pequeños y jugar sin parar cada día.
No para de hablar con la gente que está en esta casa prestada para su cumpleaños. Toda la gente que está aquí son sus amigos. Los chicos no se acercan a mí, solo me ven y siguen por donde iban. Las chicas me ven y sonríen como si les gustase. Yo no hago nada aquí y no pongo caras, simplemente le doy vuelvas al vaso de alcohol que tengo en la mano y veo la bebida, luego veo la fiesta y me siento como el acoplado allí. Sé que es el cumpleaños de mi hermana, pero yo no conozco a nadie.
-¡Zayn! -escucho la voz de mi hermana. Levanto la vista y veo como se acerca a mí con una chica. Espera, la conozco-. Te presento a Olivia -me dice con una sonrisa.
Las miro y la chica mueve la mano derecha mientras su mano izquierda está ocupada con un vaso de alcohol.
-Hola -digo amable y eso es muy raro.
-Hola, señor gruñón -se ríe y veo como mi hermana está confusa.
-Espera, ¿os conocéis? -pregunta mi hermana.
-Claro, es un señor gruñón que conocí hace unos días en una tienda de ropa. No sabía que era tu hermano.
-Pues sí, es mi hermano y es genial.
Doniya me da un dulce beso en la mejilla y me abraza sosteniendo el vaso. Siento que se me ha caído el cigarrillo que tenía en la oreja. No lo veo, pero abrazo a mi hermana mientras se está riendo un poco.
Se aleja y veo a la chica con mi cigarrillo en su mano libre.
-¿Fumas? -me pregunta. Intento quitárselo de las manos, pero ella me esquiva y saca un mechero de su pequeño bolso. Enciende el cigarrillo y se lo lleva a la boca.
Veo como el humo sale de su boca y sonríe de forma pilla. Mi hermana se distrae con otra chica y nos deja solos. Miro a Olivia y sigue fumando mientras me ve. Se coloca a mi lado y descansa la parte baja de su cintura en la barandilla del balcón.
-¿A qué viene esto? -le pregunto confuso.
-Es divertido hacerte rabiar -se ríe un poco y echa el humo en mi cara. Cierro un poco los ojos y la miro.
-Menuda cría.
No recuerdo ni como empecé con esto, pero ya me da igual todo. Es una fiesta, ¿verdad? Da igual si te emborrachas hasta no poder más.
Estoy en una cama que no conozco, supongo que es una de las camas de este apartamento para el cumpleaños de mi hermana. Me encuentro sediento y espero que me acuerde de donde está la cocina.
Me levanto despacio y me mareo un poco. Demasiado alcohol, pero sigo bien, solo estoy muy borracho. Abro la puerta y la casa huele a alcohol. Sí, la casa está hecha un desastre y hay un gran olor a alcohol.
Camino hacia la cocina y abro la nevera. Me quejo porque no hay nada dentro. Supongo que tendré que ir fuera a comprar algo para beber.
Me doy cuenta de que tengo las llaves de este apartamento en el bolsillo de mi pantalón y salgo de allí. Entro en el ascensor y me da la sensación de que baja muy rápido. Me sostengo en una de las paredes de este y sonrío como un borracho. Se abren las puertas y salgo.
Todas las tiendas están cerradas y no hay nadie fuera. Veo un cartel con un 24 grande y sonrío al saber que es una tienda abierta por 24 horas.
Entro y veo a una chica en la caja. No sé qué hora es, pero no tiene rastro de ojeras. Sonrío al verla como si de un saludo se tratase. Me dirijo a las bebidas y para mi sorpresa veo bebidas alcohólicas. Más no, Zayn. Estás muy borracho ya. Asiento para mí mismo y cojo una botella de agua. Pago y vuelvo al apartamento.
Al llegar, cierro la puerta y bebo agua. Sonrío al saber que la sed se ha ido. Me dirijo a la cocina de nuevo como hice antes y me sorprendo. Veo a la chica sentada en la encimera.
-¿Qué haces tú aquí? -le pregunto borde.
-Hola, eh -se ríe un poco y finalmente sonríe-. Sé que te habías ido y me he quedado despierta para asegurarme de que volvías -niego al pensar que eso no tiene sentido.
-Me refiero a qué haces tú aquí todavía -sonríe y mueve sus hombros como si no hubiese respuesta.
-Soy muy amiga de tu hermana, me pidió que me quedase.
-¿Estabas con ella en la cama?
-Sí, pero al escuchar la puerta, me levanté y vine aquí. Ya te lo he dicho, bueno, más o menos.
Asiento y me quedo callado.
-Ven, tienes algo en el pelo.
La miro confuso, pero voy con ella. Dejo la botella de agua a su lado y me coloco delante de ella.
-Apestas a alcohol, tío -dice y se echa a reír.
-¿Crees que por decir tío ya eres igual que yo? -le pregunto con una voz aguda y ella se ríe.
Sonrío y la miro.
-¿Por qué tienes confeti en el pelo? -me pregunta mientras lo toca y veo como cae el confeti de mi cabeza.
-No recuerdo nada -me paso las manos por la cara y sonrío.
-Necesitas ir de nuevo a la cama. Necesitas descansar.
-¿Acaso eres mi madre? -me río muy alto y pone una mano encima de mi boca.
-Vas a despertar a todo el mundo.
-Como si me importase eso.
-Son tus hermanas.
-Ah, bueno, me importan -sonrío y me doy cuenta de que sus manos siguen en mi pelo. Sonríe-. ¿Y ahora qué?
-A dormir.
-Menuda vieja -me río y me mira mal.
-¿Disculpa, señor gruñón? -niego sonriendo.
-Señor borracho.
Nos reímos y a los pocos minutos me doy cuenta de que estoy entre sus piernas, las cuales están abiertas. Lleva el mismo vestido que tenía antes cuando hablamos.
Pongo mis manos en sus piernas y dejo que mi cabeza caiga en su pecho. Escucho su risa dulce y sonrío contra su cuerpo. Noto como me toca el pelo, pero al final me abraza la cabeza acercándome más a ella. Al poco me doy cuenta de que tengo mi rostro justamente en su escote. Saco mi lengua y lamo su piel despacio. Su cuerpo comienza a moverse un poco y me tira del pelo.
-Joder, Zayn -susurra.
Muevo mis manos en sus piernas empujando su vestido hacia arriba. Después de esto, puedo tocar sus bragas y no veo nada, solo sigo contra su pecho, pero noto muchas cosas. Su respiración ha cambiado, es acelerada y me da pequeños tirones de pelo, pero esto no me duele. Me aparto y comienzo a besar su pierna izquierda muy despacio. La miro mientras hago esto, está mordiendo su labio inferior mientras su cara tiene rasgos de placer.
Llego a sus muslos y, usando dos dedos aparto sus bragas hacia a un lado. Ella se sobresalta un poco cuando la toco.
-Ya veo que estás lista -digo con una voz de borracho.
-Cállate y sigue -se queja.
-Demasiadas...
Me calla cogiendo mi rostro y me besa con pasión. Al poco ya está gimiendo y aprieto su muslo cuando hace mucho ruido. Me muevo dentro de ella rápido, pero decido cambiar de sitio. La cojo y la deposito en el suelo donde estábamos antes en la fiesta. Me coloco encima de ella y sigo teniendo sexo con ella mientras le dejo gemir. Realmente no me importa despertar a los vecinos.
Grita mi nombre y su pecho choca con el mío mientras tiene su orgasmo. Me dejo caer encima de ella cuando yo tengo el mío. Estoy reventado, así que me quedo dormido allí fuera con ella.
Tal vez me arrepiento más adelante de lo que he hecho.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro