2003

—Mi vida... Hoseok...—aquella señora mayor se abalanzó sobre su pequeño hijo para darle un abrazo.—Hoseok no volverá...—Y al decir aquellas palabras justo en el oído de aquel pequeño ser, este rompió en llanto.—El... s-se fue..

Yoongi no entendía.

¿Por qué aquel chico que tanto quiere tenía que irse? ¿A donde fue? ¿Fue al extranjero? El podia ir al extranjero a buscarlo, trabajaría más en su puesto y compraría un boleto de avión para ir con Hoseok; no le importaría el no comprarse su dinosaurio, Hoseok era mejor.

Minutos atrás

—¿Un lugar mejor? ¿Está en europa? Por que si es así,  y-yo podré vender mis juguetes, tomar mis ahorros para mi dinosaurio y comprar un boleto para ir a verlo.—con algunas lágrimas, trató de sonar alegre, el pensar que estaría con Hoseok en otro país le ponía muy feliz.—¡Vamos con sus mamás! Podemos preguntarle a donde ha ido.—para la madre de Yoongi esto se le hacía muy triste y pesado para ella, no tiene las palabras para aclararle a su hijo el por qué Hoseok se fue y por qué nunca volverá. Nunca pensó que sería muy difícil, lo está siendo y no sabe si mentir o decir la verdad de una maldita vez.

—Yoongi, no lo hagas más difícil para mí. Tu sabes muy bien lo que pasó, sólo no quieres aceptar la realidad.—sollozó.—H-Hoseok murió.

Ese día en el que Hoseok y Yoongi salieron a jugar con su bicicleta y Hoseok cayó, a los días comenzó a tener un dolor de cabeza muy insoportable acompañado de nauseas. Cuando una de sus mamás lo llevó al médico, se dieron cuenta de que Hoseok tenía un tumor cerebral y debido a que el pequeño era adoptado no pudieron dar con los padres de este; por lo tanto no había donador de sangre para una cirugía.
A Hoseok sólo le tocó esperar y lo hizo, fue feliz viendo a su hyung por la ventana, fue feliz bebiendo las limonadas de su hyung, fue mucho más feliz recibiendo aquel besito por parte de su hyung, realmente lo fue cada que su hyung lo visitaba. Vivió feliz hasta los últimos días y todo gracias a su hyung.

Y si Yoongi nunca hubiese puesto aquel carrito de limonadas, tal vez Hoseok no hubiese sido felíz.

Tiempo actual.

Los sollozos del menor se escuchaban por toda su habitación, tirado en su cama ocultando su rostro en las almohadas que ya estaba completamente empapadas. Su madre ya le había explicado todo y eso hizo que se destrosará  más.

☄

La señora Jung tras leer cada carta que su pequeño hijo tenía en aquella cajita color rojo, lloró aún más fuerte, su hijo nunca se las dió y el ahora no está aqui para que el mismo vaya y las entregue.

Eso le destrozó el corazón.

Volvió a guardar todas las cartas en la pequeña caja y salió de su casa para ir a la del pequeño Yoongi. Tocó a la puerta y en seguida habrió la madre. No le dió tiempo ni de saludar ya que apresuró su paso hasta llegar a la habitacion de Yoongi haciendo que este se sobresaltara por la repentina aparición.

—E-esto es para ti... Mi hijo..—sollozó—Te dejó esto....—dejó la caja en la cama del niño y salió de allí.

Yoongi no entendía, se sentó alado de la caja y la abrió. Vio varias cartas y fue tomando una por una.

Año 2002

La escuela estuvo igual sólo  que hoy estabas acompañado del niño nuevo, iba con mi bandeja a sentarme contigo pero el niño nuevo llegó antes y se sentó a comer contigo. Que lastima:(

Pero el niño nueno no pudo impedir que hoy fuera por una limonada.... Mmm, bueno, hoy tampoco fui ya que Taehyung  llegó a mi casa a jugar un rato.

Fue bueno  jugar con Taehyung ya que nos pasaste el balón que accidentalmente te cayó en la cabeza.

¡Lo siento hyung!

Con amor, tu mocoso. (Así  fue cómo  me dijiste hoy).

Más  lágrimas cayeron por las mejillas del menor, recordó ese día cómo si hubiese sido ayer. Nunca olvidará la forma en la que mostró sus lindo hoyuelos al escuchar aquel insulto que le habia dicho.

Año 2002

¡¡Omg!! ¡Tengo tanto que contar!

Cuando llegué tu madre fue igual de linda cómo  siempre, me gustaria que fueses así. Tambien tu madre te obligó a que jugaras conmigo en tu habitación.

Tu habitación  es diferente a la mía,  las paredes son blancas y sin ninun otro color. ¡¿Acaso te gusta el blanco?! Mi color favorito es el morado pero por ti lo puedo cambiar a blanco o a colores frios ¡negro podría  ser!

En fin, jugamos un rato a cosas sin sentido. Yo era un superhéroe  y tu eras un villano, también  jugamos a piedra  papel o tijeras aunque... Te molestaste porque te haya ganado y me golpeaste el hombro... No pude contener las lagrimas, pegas duro, ¿lo sabes?

Bueno, de ahí  tu madre nos trajo un poco de frutillas, yo tomé las huvas y tu las fresas. Tu me dijiste que si te podía  dar una uva y te la di. Me acuerdo que mi mano temblaba pero logré meter la uva a tu boca y tú  hiciste lo mismo con una fresa. Tu dedo rosó un poco mi labio inferior que casi casi me sentía  dentro de un drama.

Fue una linda tarde ¡gracias por eso hyung!

Con amor, tu chillón. (Si, así  me dijiste hoy con una risita en tus labios).

No pudo evitar una sonrisa, recordaba ese día, le gustó pasar tiempo con aquel niñito y eso le ponía más triste porque ya no estaría más con él.

Fue leyendo una por una las cartas, no en orden ya que no tenían fecha. Nunca se hubiese imaginado los sentimientos de Hoseok hacia él, pero, Yoongi también sentía algo por Hoseok. Le gustaba pasar tiempo con el, odiaba verlo con otro niño que no fuese el-en especial Taehyung-Pero eran pequeños y ninguno de los dos comprendía al 100% los sentimientos. Lo malo de terner una edad muy corta es el dolor, cuando un niño se encariña con algo o alguien  llega a ser muy doloroso cuando pierde a esa persona u objeto.

Había una carta que todavía no leía, esta se destacaba de las demás puesto a que era de color negro. La habrió y la fecha estaba escrita y era justamente el día de hoy. 24/02/2003.

¿Cómo era esto posible?

Era larga, más que las otras y era la misma letra, era Hoseok quien la había hecho, no pudo haber sido alguien más.

Le era difícil leerla con lagrimas en sus ojos. Sin embargo lo hizó y aunque algunas partes le hacia sonreir nunca paró de llorar y de culparse por que si no hubiera salido con Hoseok esa tarde, el castaño seguiría a su lado.
Y todo lo que soñó una noche se cumpliría, el ir juntos al instituto y entre los dos escoger la misma carrera e ir juntos, rentar un departamento los dos y vivir felices con algún perrito que adoptaría.

Terminó de leer aquella carta muy especial, pegó su espalda a la acolchonada cama que tenía y cerró sus ojos mientras sostenía entre sus brazos todos los papeles. Trató de imaginar a Hoseok, quería volver a verlo una vez más.

El recuerdo de aquella vez en la que se sentaron ambos a desayunar le llegó de sorpresa, ver a Hoseok comer muy poco debido a los nervios que tenía, volvió a ver aquella sonrisa que tanto le gustaba junto a esos lindos hoyuelos. Y fue ahí donde recordó el beso, ese pequeño rocé de sus labios que el mayor dió para tratar de calmar el dolor del menor. Al parecer funcionó pero no de la manera que esperaba.

Y sólo le queda vivir con el hermoso recuerdo de ese niño, los recuerdos nunca se irán y aunque sea duro tratará de ser fuerte por él. Porque si Hoseok pudo parentar estar bien cuando su salud no lo estaba, él podrá engañar a los demás y decirle a todos que nada malo pasaba.

Las ganas de volver a abrazar ese pequeño cuerpo le invadian, quería volver a verlo sonreir, necesitaba verlo bailar cosas sin sentido nuevamente. O cuando sólo se quedaban viendo era muy lindo, lo extrañaba .

Mantendría siempre en su mente y en su corazón, al pequeño Jung porque para Yoongi; Hoseok no fue un simple amigo.

Fin

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Gracias por leer:(