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MARATÓN 7/10

TÍTULO.- ONEE-SAN

GÉNERO.- GENDERBEND (SHOTACON)

Sigfrid era una chica  tranquila y amable con todo el mundo, pero tenía una peculiaridad, ella suele tener pensamientos pervertidos.

Todo comenzó un día cuando accidentalmente junto con su padre entraron en una Sex Shop.

Todod eso le llamó la atención a la castaña Y mantenía esa faceta oculta ante todo el mundo.

Esa tarde había tenido un día agotador en la escuela después de eso decidió ir ayudar a su padre en la pizzería donde solía trabajar.

Por lo cual estaba fastidiada y caminó hasta la vecindad donde rentaba un departamento.

Allí estaba una mujerde pelo nero y estatura baja barriendo el patio era la vigilante y de vez en cuando le coquetea al padre de Sigfrid.

Dircea.- Oh señorita Sigfrid qué bueno que la veo dejaron un paquete en su puerta me tomé la molestia de llevarlo adentro.- Dijo y la castaña le agradeció por eso.

Sigfrid caminó hasta su habitación en donde abrió el paquete mostrando un conjunto de objetos que serían capaz de darle un infarto a su padre.

Un vibrador

Un Plug anal

Un lubricante sabor zarzamora

Unos chocolates con afrodiciaco.

Sigfrid sonrió y fue a darse un baño, quería estar relajada y poder disfrutar de su pedido.

Cuando terminó de ducharse fue por uno de los chocolates pero antes de poder probarlo vio que aluien la miranba.

Dircea.- Qué bonita vecindad Que bonita vecindad Es la vecindad del chavo... Cantaba hasta que escuchó que alguien gritaba.

Que salió corriendo para ver que Sigfrid estaba asustada sólo con su bata.

Dircea.- ¿Qué pasó?.- Preguntó al verla.

Sigfrid.- Había un alguien mirando por la ventana.- Dijo.

Dircea.- Niño como de 1.50 pelo blanco y una marca debajo del ojo.- Dijo.

La castaña asintió con su cabeza a lo que la mujer pelo negro sabía de quién se trataba Así que le dijo que la siguiera y fueron al patio trasero a un bote de basura.

Dircea.- ¡Max! ¡Max! ¡Sal de allí ahora!.- Dijo con firmeza.

Del bote de basura salió un chico como de 10 años con la descripción de la señora.

Dircea.- Muy bien Max qué sabes tú sobre todo esto.- Dijo molesta.

Max.- Yo Yo Nada.- Dijo con un tono burlesco...

Dircea.- ¿Entonces se explica como alguien de tu apariencia estaba espiando a la pobre chica.- Dijo molesta .

Max.- Yo no fui.- Dijo.

Dircea.- ¿Por quién me tomas? ¿Crees que soy estúpida?.- Dijo.

Max.- Sí.- Dijo.

Dirceu.-ARHH... ¡¡¡PEQUEÑO DEMONIO!!!.- Dijo mientras intetaba estrangularlo.

Por  suerte Sigfrid se metió entre ellos para evitar que la mujer de pelo negro le hiciera daño al muchacho.

Sigfrid.- Vamos no creo que sea tan malo como lo hace parecer.- Dijo.

Dirceu.- Intenta decir lo mismo de ese muchacho... simepre está causando problemas... y ya me tiene harta.- Dijo.

Max.- Por favor no dejes que esa bruja loca me toque.- Dijo.

Dircea.- ¡¡¡COMO NO TE CALLES TE VOY A  ARRANCAR LA CABEZA!!!.- Gritó.

Max se escondió detras de Sigfrid y ella logró tranquilizar a la mujer además de que ella se haría cargo del resto. 
 
Sigfrid.- Bueno Max... ¿en dónde están tus padres?.- Preguntó.

Max.- Mi mamá está trabajando.- Dijo.

Sigfrid.- ¿Y tu padre?.- Dijo.

Max.- Mamá dice que fue a comprar cigarros.- Dijo.

Eso sentir mal a la castaña se siniera un poco mal por eso, ya se hacía la idea de lo que pasaba.

Sigfrid.- Oh ya veo... no creo que sea buena idea dejarte solo y con Dircea estandode malas sería mucho peor.- Dijo.

Max.- ¿Siempre es así?.- Preguntó

Sigfrid.- No... hay veces en las que está de malas.- Dijo y llevó al chico a su apartamento.

La castaña le prestó su celular al chico y este se puso a ver distintos videos de series y caricuturas que le gustaban.

Matheo el padre de Sigfrid no llegaría su casa debido a la escasez de personal en su trabajo así que tenía que cubrir a otros dos compañeros, por lo cual tendría que dormir en el edificio.

Al cabo de un rato el pequeño sintió  hambre a lo cual la catasña fue a buscar algo que el chico pudiera comer.

Max vio la caja de chocolates que Sigfrid había comprado, así que pasó lo inevitable.

Max se comió por completo la caja de chocolates y cuando Sigfrid fue a verlo se alarmó al descubrir a Max con la cra manchada de chocolate.

Max.- Ahh Sigfrid no me siento muy bien Ahh.- Dijo mientras su cara se ponía roja y comenzaba a jadear.

Sigfrid.- Oh... déjame ver que hago.-  Dijo preocupada y notó que Max estaba intentando cubrir algo.

Max.- Ahhh Sigfrid Mi pipí se siente raro.- Dijo.

Sigfrid.- Ok... Voy a calmarlo pero pppase lo que pase no le le puedes decir a nadie... será un secreto.- Dijo y le bajó los pantalones al chico.

Para ver como su pene estaba muy duro como si se tratace de una piedra.

Ella de una manera torpe empezó a estimular el pequeño miembro del albino.

Max.- Ahhh Sigfird esto Ahhh se siente tan bien Ahhh.-  Gemía el nombrede la chica al sentir sus caricias.

Sigfrid siguió masajeando su pene lo mejor que podía.

Max.- Ahhh Sigfrid algo va Ahhh salir Ahhhh.- Dijo mientras soltaba una violenta erupción de semen.

Sigfird estaba sorprendida... cómo era posible que un niño pudiera porducir tal cantidad de semen.

Max.- Ahhh Sigfrid Ahhh eso se sintió bien.- Dijo tratando de recupear el aliento.

Sigfrid.- Oh por Dios... ese afrodisíaco si debe de ser potente.- Dijo preocupada.

Max.- Afrodi... ¿qué?.- Dijo.

Sigfrid.- Alo que tenían los chocolates... esos no son para niños pero trataré de hacer que regrese a la normalidad.- Dijo

Por su parte el afrodisíaco se estaba volviendo más potente que Max en un acto de inconsciencia besó a la castaña.

Sigfrid se soprendió de la acción del niño aunque ella comenzó a corresponderlo de una forma torpe.

Lo que sucedió es que Sigfrid empezó a sentir los efectos del afrodisíaco.

A tal punto que ella empezó a sentir calor y quitarse la blusa junto con el brasier ya que la estaban incomodando, Max al ver los redondos pechos de la castaña no se contuvo y se abalanzó sobre ellos para comenzar acariciarlos y a chuparlos.

Sigfrid empezó a gemir de placer al sentir las caricias y besos del pequeño en sus atributos.

Sigfrid.- Ahhh Max Ahhh N-No pares Ahhh.- Decía mientras ponía los ojos en blanco y sacaba la lengua.

Por su parte Max empezó a apretar y a chupar más fuerte las mamás de la castaña hasta el punto que ella solamente hecho la cabeza para atrás.

Sigfrid.- Ahhh Max Ahhh Y-Yo Ahhh Max AHHHHH.- Dijo a la vez que se corría manchando por completo sus panties y su pantalón.

Sigfrid se paró al pequeño albino de sus pechos para ponerlo frente a ella y darle otro beso de lengua a su vez iniciando una guerra para ver quién dominaba a quién.

Eventualmente el pequeño terminó por perder la guerra y la castaña aprovechó para introducir su lengua dentro de boca.

El final tuvieron que romper el beso por la falta de aire sólo siendo unidos por un delgado hilo de saliva que se iba largando hasta desaparecer por completo.

Sigfrid.- Ahh Max es el afrodiciaco... espor eso que estamos así... pero ahhh se siente tan bien.- Dijo con su rostro totalmente colorado.

Max.- Ahhh Sigfrid Ahhh.- Dijo igual con su cara totalmente sonrojada y jadeando.

La castaña le quitó la camisa al pequeño para comenzar a lamerle y besarle el cuello a lo cual el albino soltaba gemidos para deleite de Sigfrid.

Max.- Ahh Sigfrid Ahh.- Dijo entre gemidos al sentir las lamidas de la castaña.

Por su parte Sigfrid le indicó al pequeño que se acostara en la cama cosa que él hizo.

Ella retiró sus pantalones junto con sus pantis totalmente empapados de sus fluidos para tomar con cuidado el pene de Max y meterlo de una forma desesperada en su vagina.

Sigfrid.- Ahhh Así se siente tener un pene dentro Ahhh.- Dijo mientras comenzaba a mover sus caderas de arriba - abajo.

Max.- Ahhh Sigfrid Ahhh mi pipí ahhh se siente bien Ahhh cálido Ahhh y húmedo Ahhh y me encanta Ahhh.- Decía entre gemidos al sentir los movimientos de la castaña.

Sigfrid comenzó a moverse cada ves más rápido que podía, había cedido ante la locura y arrojado su cordura por la ventana se notaba en su cara de placer al tener los ojos en blanco y sacar la lengua.

Sigfrid.- Ahhh Max Ah tu pene se siente Ahhh tan bien.- Dijo sin dejar de moverse.

Max.- Ahhh Sigfrid Ahhh no pares Ahhh.- Dijo mientras ponía sus pequeñas manos en la cadera de la castaña y la apretada.

Sigfrid.- Ahhh Max Ahhh muchito pervertido Ahhh.- Dijo entre gemidos.

Al cabo de un rato el pequeño empezó a sentir como las paredes vaginales de la castaña apretaban cada vez más su miembro.

Max.- Ahhh Sigfrid E-Espera Ahhh otra vez yo Ahhh.- Dijo.

Sigfrid.- Ahhh Max Ahhh no Ahhh tu pene se siente tan bien Ahhh que no puedo vivirsin él Ahhh.- Dijo entre gemidoscon su cordura completamente perdida.

Después de 15 minutos el pequeño ya no aguanto más y eyaculó por completo inundando la vagina de la castaña.

Max.- Ahhhhh Sigfrid.- Gritó al sentir como su pene expulsaba una gran cantidad de semen.

Sigfrid.- Ahhhh Max... siento como llega hasta mi útero.- Dijo con una cara de placer.

La castaña cayó a un lado del pequeño por fin los efectos del afrodisíaco empezaba a desaparecer.

La castaña vio que el pequeño estaba empezando a llorar por lo que sintió mal había recobrado su cordura y se sentía como un monstruo horrendo.

Sigfrid.- Oh Max lo siento... no era mi intención.- Dijo.

Pero Max lo que hizo fue abrazar a la castaña y su cara quedó algo pegado en sus pechos mientras desahogaba su llanto a lo cual la castaña le acarició la cabeza.

Max.- No me dejes sólo... por favor.- Dijo  mientras lloraba.

Sigfrid.- Oh Maxy... yo nunca te dejaría sola.- Dijo mientras le daba un beso en la nariz.

Max solamente se quedó ahí abrazando a la castaña mientras está le cantaba una canción de cuna hasta que se quedó dormido.

Sigfrid.- Oh Max... Sólo necesitabas que alguien te mostrará algo de cariño... Descansa pequeño.- Dijo mientras los arropaba.
 

 

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