"Frecuencias extrañas"

POV ELLIE

— Oigo su corazón, ¿qué le hiciste? —me volteo a ver a Liam.

Me miro casi espantado.

— Estaba bien al llegar aquí. Le escribí a Scott y se encerro —me explica nervioso.

— ¿Por qué? —le pregunta Stiles.

— No sé.

— ¿Definitivamente es una quimera? —lo mira Scott dando unos pasos hacia él.

— Oyó una voz que decía: "Tu condición mejora".

— Bien, es una locura —Stiles avanza a la puerta y todos vamos detrás de él—. Hayden, soy Stiles —golpea la puerta levemente—. Tu hermana trabaja con mi papá en la estación. Solo abre la puerta ¿está bien? Confía en nosotros.

— Tenemos que decirle la verdad —dice Scott—. Y eso siempre es mejor hacerlo frente a frente —me mantengo al margen notando la reacción de Stiles—. Mira, o abres la puerta o tendré que derribarla. Está bien si no quieres hablar o si no vas a creernos pero debo... debo saber que estás bien.

Scott nos mira antes de que nosotros le demos espacio para que pueda derribar la puerta, pero cuando se prepara Hayden abre la puerta, más solo la deja entreabierta y eso me alarmo. Doy unos pasos a la puerta abriendola con precaución esperando que nada raro salga y nos ataque, pero solo vemos a Hayden con colmillos, garras y ojos brillantes a la vista llenos de terror.

— Les creo.

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(...)
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— ¿Cómo estuvo tu hora con la psicóloga? Te ves algo demacrada —me mira preocupado Scott y yo respire hondo mientras Stiles sacaba unos planos y los colocaba en la mesa.

— Nada fuera de lo normal.

Claramente había llorado, pero no deseaba comentar nada al respecto de eso. Me acerco a Stiles.

— Así que regresamos a corrientes telúricas... —bajo mi vista al plano— Si los Doctores del Terror no vienen a Casa Eichen por ellas, podríamos usarlas para proteger a Hayden.

— Además de Eichen, ¿cuál es la convergencia más fuerte? —pregunta Stiles.

— Estás parado sobre ella —señala Scott con su dedo índice la escuela.

— ¿La ocultaran en la escuela? ¿Cuánto tiempo?

— Toda la noche si debemos hacerlo —ambos miramos a Scott—. Liam convenció a Hayden de no decirle nada a su hermana. Está trabajando y piensa que Hayden está con amigos.

— Pero solo es una escuela, no es una fortaleza exactamente —menciona Stiles.

— Lydia tiene una idea. ¿Recuerdas que Valack citó a Tesla? —miro a mi amigo.

— Frecuencia y vibración —citó Stiles.

— No lo dijo solo porque sí, podría ser una pista si Lydia no se equivoca.

— ¿Para hacer qué?

— Interrumpir su frecuencia —le responde Scott y yo asiento intentando mostrarme animada—. Parrish tomó tres bloqueadores de señal de celular. Cree que puede ampliar su rango de frecuencia.

— Es muy complicado pero es lo mejor que tenemos ahora y si todo sale bien, vamos a atrapar a uno —Stiles pasea su mirada entre Scott y yo entendiendo que se venía super complicado para nosotros.

Cuando ya estaba claro lo que ibamos hacer cada uno. Scott se marcha para ver a Kira e informarle sobre el plan y yo aprovecho la instancia para poder hablar bien con Stiles.

— ¿Estás seguro de hacer vigilancia con Theo?

— Tengo que asegurarme, ya sabes —no me veía mientras guarda sus cosas—, prefiero mantenerlo vigilado por mi cuenta.

Ajam, seguro y yo llamaré a Braeden para hacer tiempo de calidad juntas y de paso ir de compras.

— Está bien, ten mucho cuidado —tomo su hombro y este hace una mueca de dolor, yo retiro mi mano luciendo apenada—. Lo siento.

— Descuida —beso mi frente y se marchó.

Respiro hondo y saco mi celular para hablar con Lydia. Al quinto tono contesta.

— ¿Qué tan raro has notado a Stiles en esta semana? Ya sabes de lo que hablo —tomo mi bolso comenzando a caminar fuera de la biblioteca—. Tiene una herida en el hombro, está más serio que de costumbre y algo parece atormentarlo.

— No tengo idea, pero sabes como es él —la oigo suspirar—, pero si lo noté y también otras ciertas cosas...

Continuamos la conversación hasta que llego a mi auto y me quedo haciendo teorías en mi cabeza mientras escucho a mi amiga pelirroja.

— Me preocupa, pero prefiero darle su espacio.

Yo también y más porque me lo pidió, pero que esté con Theo es algo que me deja inquieta.

— Lo entiendo, hablamos luego.

Nos despedimos y hago otra llamada.

— ¿Recuerdas el contacto que me mencionaste antes? Necesito que me hagas un enorme favor.

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(...)
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La noche llega y ya teníamos todo listo, incluso yo tenía todo asegurado para que nada se me escapara de las manos.

El auto de Lydia se estaciona a mi lado y la veo bajarse con Parrish del auto. Sonrió hacia ellos mientras me acerco a la parte trasera y Parrish abre el maletero.

Malia llega a mi lado y toma el aparato que tuvo que crear Parrish para el plan.

— ¿Confiamos nuestras vidas a esa cosa?

— Más bien apostamos la vida de Hayden —digo lo obvio.

— Sí, pues que bueno que traje mi arma —dice Parrish un tanto ofendido y él con Lydia toman los otros dispositivos.

Los tres se dividen y van a dejar los aparatos a cada estremo de la escuela, en puntos claves claramente. Yo mientras tanto me junto con Scott, Hayden y Liam en los vestidores de Lacrosse.

Una vez que sale Parrish con Liam bloqueamos la puerta para que no logrará entrar nadie y luego me acerco a Scott junto a Lydia.

Malia se encargará de vigilar la entrada. Parrish el estacionamiento y los demás estamos aquí adentro.

Vigilo a mi alrededor intentando no entrar en aburrimiento total. Para estar aquí adentro tenemos que estar incomunicados, es decir, sin celulares. Eso me tenía un poco a la deriva, ya que no podía comunicarme ni con Stiles ni con Lauren. Necesitaba saber que rayos había pasado entre Theo y Stiles, porque repentinamente están cerca y es por eso que necesito a Lauren. Ella se está encargando de vigilarlos discretamente y se que es malo que yo me entrometa así, pero que Stiles ande con Theo hace que tome medidas drásticas. Quisiera saber que mi amigo está bien, pero no se puede.

— Soy yo o Liam no conoce la segunda parte del plan? —escucho susurrar a Lydia y volteo mi mirada hacia el beta, parecía muy embobado por Hayden como para prestar atención a su entorno.

— No estoy seguro de que haya una segunda parte.

— ¿O de que vaya a funcionar? —pregunta entrando a angustiarse más por la situación.

— Sí.

Los miro mientras camino hacia la nueva parejita e intento ser optimista en todo esto. No podemos permitirnos perder, ellos llevan mucha ventaja. Los veo hablando y decido darles su espacio, al parecer estaban teniendo un momento, pero no pude evitar al verlos, recordar como era Allison con Scott. La manera en que Hayden miraba a Liam... era la misma que Allison.

Siento una punzada ante esos recuerdos de mi hermana y volteo mi mirada encontrando con Scott viendo la misma escena que yo estaba viendo.

La estaba recordando.

— ¿Scott? —me acerco a él cuando notó que comenzaba a caminar y bloqueo su paso—. Pensé que como no podemos usar teléfonos, no sabemos de Stiles y de tú para nada agradeble nueva amistad.

— No pensé en eso —me responde estando algo ido.

— Yo tampoco.

— Estamos en espera de unos tipos con máscaras y tubos. Pero ¿a quién o qué esperan ellos?

— Tiene razón —se acerca Lydia a nosotros—. También estaba pensando eso, pero no podemos desviarnos del plan. Hay que tener fe en que todo saldrá bien.

Asiento dándole la razón.

Los minutos corren y nada parecía suceder. Volteo a ver a Hayden y la notó angustiada.

No pude evitar recordar mis inicio y me pude meter en sus zapatos, saber como se siente ante todo esto debe tenerla mal. No puedo evitar acercarme a ella.

— Hey, ¿cómo te sientes? —le susurro mientras me pongo de cuclillas enfrente de ella.

Ambos estaban apoyados en los casilleros, sentados en el suelo juntos y la chica parecía que iba a dormirse en cualquier momento.

— Intentando no entrar en pánico —me comenta y el reflejo de la luna es lo que me permite verla bien—. Confiar claramente en que puedan ayudarme.

Si supieras...

Me imaginaba que no iba a admitirme como en realidad se sentía.

— ¿Sabes? La primera vez que entre en este mundo llore bastante y me aterraba por completo la oscuridad del bosque... bueno, de día también era aterrador —comento haciendola sonreir—. Créeme, lo estas tomando mejor que yo.

— Mil veces mejor.

Sonreí, me agradaba.

— Le diste un buen golpe a Liam, por supuesto que vas a poder con todo lo que se avecina —Liam me mira ofendido y eso hace que la chica sonreía más. Son muy tiernos—. Hayden, va a ser muy difícil al inicio porque hay cosas que aún no comprendes y que no has visto, pero vas a poder, créeme.

— Es lo que espero.

Sus ojos poco a poco se van cerrando cuando mis palabras la tranquilizan y se acurruca junto a Liam. Pude notar la expresión de Liam ante ese acto, claramente él iba a cuidar de ella, pero no hay fuegos artificiales en sus ojos, solo brillo... no es como la mirada de Hayden.

De un momento a otro Liam se levanta y veo que camina hacia el bolso que trajo Scott con bastante curiosidad. Me alarmó inmediatamente y voy hacia él captando la atención de todos.

— Liam.

No me contesta y abre el bolso sacando las cadenas. El ambiente se vuelve tenso inmediatamente y más cuando Liam se dirige hacia Scott.

— ¿Qué vas a hacer con esto?

— Lo traje por si acaso.

— ¿En caso de que? —comienza a molestarse y Hayden se coloca de pie.

— En caso de que podamos atrapar a uno de ellos —me mira como si hubieramos perdido la cabeza.

— Si la escuela no es una fortaleza, bien podría ser una trampa —se acerca Scott.

— Vienen por ella. ¿Ella es la carnada?

Scott no sabe que responder, porque bien sabía que era muy cierto que estabamos usando la situación de Hayden a nuestro favor y Liam no parecía nada contento.

— Liam, la trajimos aquí para protegerla —se nos une Lydia.

— Y ahora es la carnada.

— ¿Lo soy?

— Hey, no. Nadie es carnada —me acerco al ver que estaba entrando en pánico—. Pero no podemos protegerte cada noche.

— ¿Por qué no hablamos con el papá de Stiles? —siento la ira del beta y volteo a verlo— ¿Por qué no hacemos algo más que escondernos en la escuela?

— Porque aún no sabemos nada de ellos ni de lo que quieren.

— Ellos van ganando y no sabemos cuál es el juego —intercede Scott.

— ¿Y si ellos entran aquí y esas cosas no funcionan? —da varios pasos hasta él y por más que fuera una bomba de tiempo no iba a atacar a Scott enfrente de Hayden— ¿Y si te da un ataque de asma? ¿Qué vamos a hacer?

— Lo mejor que podemos hacer, Liam. Trabajar en equipo, ser una manada.

— Bien, perfecto. Trabajo en equipo, ¿pero como rayos aremos eso si ustedes los alfas no están en estado para ser líderes? A cualquiera de ustedes les puede ocurrir un episodio y todo esto se va a ir a la basura —me cruzo de brazos sintiendome atrapada ante sus palabras— ¿Qué vamos hacer?

— No sé —responde casi cabizbajo Scott.

— ¡Este plan apesta!

— ¿Tienes uno mejor? —me paro enfrente sintiendo mi sangre hervir. Se que está asustado, y de hecho todos lo estamos, pero su desconfianza hacen que me den ganas de mandarlo a callar con un golpe— ¡Están muriendo y ella es la siguiente! ¡Lo sabes!

— Liam —Scott se acerca y yo me relajo cuando se que va a intentar calmarnos a todos—. Alguien tiene que hacer algo, hay que salvar a todos. ¡Alguien debe ser la carnada! —estalla dejándonos a todos mudos y puedo ver el arrepentimiento de sus palabras.

Nos sumergimos en un silencio más incómodo y notó que la actitud de Liam cambia cuando se acerca a su alfa.

— Promete que harás todo lo posible por salvarla —le susurra—. Scott. Promételo.

— Haré todo lo que pueda. Lo prometo.

— ¿Chicos? —la voz agitada de Hayden nos hace a todos voltear hacia ella—. Creo que necesito un poco de ayuda ahora. Olvide mis píldoras —a la mierda, lo que faltaba—. Tengo un frasco en mi casillero. Puedo...

— Iré por ellas.

Mientras Scott sale en busca de las píldoras, Lydia se queda asegurando la puerta para cuando regrese Scott.

Nos quedamos nuevamente en silencio y yo me siento junto a mi casillero para encontrar un poco de calma en tanto caos.

A lo lejos escucho pasos y me levanto colocandome junto a Liam y Hayden.

— ¿Qué fue eso? ¿Son ellos? —nos pregunta en un susurro aterrorizado Hayden.

— Quédense detrás de mi —les pide acercandome a la puerta a pasos precavidos y salgo por la puerta del entrenador siguiendo el sonido alerta, parecía que no había nadie en el lugar— ¿Scott? ¿Lydia?

— Cariño —me detengo en seco al oír su voz y mi corazón se acelera al pensar que esa loca pudo hacerle algo al resto.

Ni Malia se ve.

Me giro lanzando una daga directo hacia su cuello, pero la alcanza a atrapar en el aire.

— Kate, cometiste un error al volver —me acerco a ella sacando otra daga sintiendo la ira y la euforia de poder matarla ahora.

— El error fue tuyo, nunca aprendes —ríe como loca mientras comenzamos una lucha cuerpo a cuerpo.

Ambas ibamos parejas, conocíamos los movimientos de la otra y era difícil poder derrumbarla. Ella intenta treparme encima para hacerme caer, pero yo la tomo haciendole una voltereta hacia atrás dejándola caer en el suelo, pero cae de pie y mueve en un agil movimiento su pierna sobre la mia haciendome caer.

Maldigo mirandola con rabia y cuando se acerca golpeo su rostro con mi pie y me lanzo sobre ella atacandola como una loca desquiciada con sed de venganza.

— ¡Maldita lunática! —me grita y yo comienzo a ahorcarla con todas mis fuerzas entando a punto de romper su cuello, pero siento como me desgarran la espalda haciendome gritar.

Suelto a Kate y ella me golpea en el rostro dejandome tirada en el suelo con el creciente charco de sangre, mi sangre.

Intento recomponerme, pero el dolor era tan grande que ni siquiera era capaz de moverme. La daga quedo incrustada en mi columna, así que impedía mi movimiento de la cintura para abajo.

— Un corte bastante certero ¿no crees? —se burla Kate y de la nada aparece mi madre con su típico uniforme de cirujana.

Me quejó intentando con todas mis fuerzas huir, pero ella me agarra del cabello y me tira hacia ella haciendo que toda mi espalda duela y me queme como fuego.

— ¿Querías suicidarte? Hazme el favor y dejame ayudarte.

Ambas ríen como locas cuando mi madre me hace tragarme un frasco entero de pastillas. Lloró desesperada sintiendo como el roce lastima mi garganta y de un momento a otro todo mi cuerpo se paraliza, pero el dolor me quemaba haciendome sufrir en silencio.

Veo hacia el techo con lágrimas en los ojos. No planeaba morir, no así y menos está noche.

Siento que nuevamente voy a decepcionar a todos y sobre todo a Derek. Le prometí que iba a mejorar y estoy aquí rompiendo mi promesa.

Un fracaso.

Siento un corte un mi mano y es como una reacción instantánea que tiene todo mi cuerpo. Podía moverme y el dolor había desaparecido al instante, no había sangre en el piso, todo parecía en orden. Me muevo acelerada buscando a esas malditas y solo me encuentro a Malia quien me agarra los hombros para dejarme quieta.

— ¿Qué rayos acaba de pasar? —cuestiono perpleja, estaba sudando a mares y siento como la herida de mi mano sana— ¿Por qué hiciste eso?

— Porque caímos en una trampa.

La miro sin entender por unos segundos, pero rápidamente reaccionó cuando me doy cuenta donde estabamos y el propósito de la misión de esta noche. Con Malia vamos hacia los vestidores topandonos con Lydia y nos encontramos con el lugar vacío y con el aparato de frecuencia de Parrish destrozado en el suelo.

— Se fueron —dice Lydia cuando justo en ese instante entra Scott con Mason atrás.

— Hayden y Liam se fueron —me volteo para ver a Scott preocupada.

Ahora venía la parte jodida, ya que si no los encontramos corremos el riesgo de perderlos a ambos. Hayden ya está fichada, pero Liam no y si lo tienen no debe ser para algo bueno.